La Vida de Oración en la Iglesia Primitiva

INTRODUCCIÓN:

Doy gracias al Señor por este día que nos permite reunirnos como iglesia para poder, no solo alabarle y tomar el tiempo para celebrar la Santa Cena, si no a demás, con el fin de poder ser expuestos a Su Palabra Santa, por medio de la cual, si somos solícitos y prontos para escuchar, vamos a ser animados, confrontados, instruidos y corregidos para que cada uno siga siendo perfeccionado a la imagen de nuestro Señor Jesús.

Hoy, quiero compartir otro tema muy importante sobre la oración. Como ustedes saben, las últimas enseñanzas que he compartido en este púlpito han estado enfocadas sobre la oración. Si ustedes recuerdan, el primer tema que hable fue sobre “NUESTRA FALTA DE ORACIÓN” donde las comentaba sobre algunas consecuencias nefastas que vienen por dejar de lado esta disciplina espiritual tan importante en la vida del creyente, como:

Nos alejamos de Dios

Viene juicio sobre nuestras vidas

Infidelidad a Cristo

Nos empobrecemos más espiritualmente en un sentido negativo

Tenemos una vida y un ministerio infectivo

Nos volvemos egoístas teniendo conflictos con los demás.

Luego la segunda enseñanza, hablé sobre LA NECESIDAD DE ORAR. Allí compartí que la oración:

Debe ser una forma de vida

Debe Surgir del deseo de estar con Dios

Mis necesidades solo pueden ser satisfechas por Dios

Demuestra una confianza continúa en Dios

Es necesario estar alerta

Vendrán Circunstancias difíciles a mi vida

Debo mantener un corazón recto/íntegro delante de Dios.

El tercer tema que traté fue sobre “LA VIDA DE ORACIÓN DE JESÚS”. La enseñanza se baso en:

Cuál era el trasfondo de la oración en el tiempo de Jesús.

Cuáles eran los hábitos de oración de Jesús

Y el modelo de oración que Jesús nos dejo en el Padre Nuestro.

En cada enseñanza he compartido muchos temas relevantes sobre la oración, y hoy, por la enorme misericordia de Dios, el Señor me ha guiado y permitido en preparar el cuarto tema de esta serie sobre la oración, la cual titule, para los que toman notas: “LA VIDA DE ORACIÓN DE LA IGLESIA PRIMITIVA”. Por lo general los historiadores le llaman iglesia primitiva al periodo comprendido entre Pentecostes y finales del siglo I. Otros dicen que es desde Pentecostes hasta el siglo II, donde está la primera generación de los primeros discípulos directos de los 12 apóstoles. El punto es que la enseñanza de hoy, la centraré solo en el primer siglo.

¿Por qué sigo hablando de este tema de la oración? Porque el Señor, a través de Su Espíritu, me ha confrontado y me ha hecho ver que mi vida de oración es muy pobre, es muy débil y que si no hago nada por cambiarla, vendrán fracasos, frustraciones, pecados y una ruina espiritual que afectara de manera directa todas las demás áreas de mi vida, como mi matrimonio, mi familia, mi trabajo, mi economía, mi servicio en la iglesia y demás relaciones. Así que es muy importante, es menester, que tomemos enserio la oración en nuestras vidas como creyentes, pues Dios no quiere que vivamos una vida llena de fracasos y ruina espiritual, si no una vida de abundancia en todas las riquezas espirituales que nos ha dado en Cristo, por medio de Santo Espíritu y Su Palabra revelada.

Para empezar, quiero leer esta cita, que aparecerá en pantalla:

Lo que la iglesia necesita hoy, no es más mecanismos o uno mejor, ni nuevas organizaciones, ni más y modernos métodos, sino individuos a quienes el Espíritu Santo pueda usar, personas de oración, poderosas en oración. El Espíritu Santo no fluye a través de los métodos, sino a través de las personas. Él no desciende sobre los mecanismos, sino sobre las personas. Él no unge planes, sino personas, personas de oración. - E. M. BOUNDS

Es una verdad muy profunda, y ruego al Señor que hoy la podamos entender, por medio de Su Verdad consagradas en las Escrituras, a través de las cuáles cada uno podamos, desde este mismo instante, tener un cambio radical sobre esta temática tan importante en nuestras vidas personales, como en nuestra iglesia.

El primer punto con el que voy a empezar es…

I. La Oración era el Centro de la Vida en la Iglesia Primitiva:

A. Oraban Cuando Estaban Reunidos:

La oración ocurrió en función del Espíritu Santo: antes de su venida en el día de Pentecostés

(Hch 1:14

Hechos de los Apóstoles 1:14 (NBLA)

14 Todos estos estaban unánimes, entregados de continuo a la oración junto con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con Sus hermanos.

También podemos leer en:

Hechos de los Apóstoles 2:42 (NBLA)

42 Y se dedicaban continuamente a las enseñanzas de los apóstoles, a la comunión, al partimiento del pan y a la oración.

Antes que la iglesia de Jerusalén fuera llena “del Espíritu Santo”

Hechos de los Apóstoles 4:31 (NBLA)

31 Después que oraron, el lugar donde estaban reunidos tembló, y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban la palabra de Dios con valor.

Y por la recepción del Espíritu Santo por los samaritanos:

Hechos de los Apóstoles 8:15 (NBLA)

15 quienes descendieron y oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo.

B. Oraban por la Selección y Encomendación de Líderes en la Iglesia:

Antes de la selección de Matías para reemplazar a Judas entre los doce:

Hechos de los Apóstoles 1:24–25 (NBLA)

24 Después de orar, dijeron: «Tú, Señor, que conoces el corazón de todos, muéstranos a cuál de estos dos has escogido 25 para ocupar este ministerio y apostolado, del cual Judas se desvió para irse al lugar que le correspondía»

También cuando eligieron a los 7 diáconos:

Hechos de los Apóstoles 6:6 NBLA

6 A estos los presentaron ante los apóstoles, y después de orar, pusieron sus manos sobre ellos.

Por la iglesia de Antioquía de Siria antes de comisionar a Bernabé y Saulo:

Hechos de los Apóstoles 13:2–3 (NBLA)

2 Mientras ministraban al Señor y ayunaban, el Espíritu Santo dijo: «Aparten a Bernabé y a Saulo para la obra a la que los he llamado»

3 Entonces, después de ayunar, orar y haber impuesto las manos sobre ellos, los enviaron.

Y por Pablo y Bernabé al constituir ancianos en Antioquía de Pisidia:

Hechos de los Apóstoles 14:23 NBLA

23 Después que les designaron ancianos en cada iglesia, habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.

C. Oraban Durante Persecución:

La iglesia oraba durante el encarcelamiento de Pedro:

Hechos de los Apóstoles 12:5 NBLA

5 Así pues, Pedro era custodiado en la cárcel, pero la iglesia hacía oración ferviente a Dios por él.

Vemos también a Esteban orando durante su martirio poco antes de morir:

Hechos de los Apóstoles 7:59–60 (NBLA)

59 Y mientras lo apedreaban, Esteban invocaba al Señor y decía: «Señor Jesús, recibe mi espíritu» 60 Cayendo de rodillas, clamó en alta voz: «Señor, no les tomes en cuenta este pecado». Habiendo dicho esto, durmió.

Y también vemos a Pablo y Silas orando, luego de haber sido desnudados para que los azotaran con varas fuertemente para ser puestos en una cloaca de calabozo:

Hechos de los Apóstoles 16:22–25 (NBLA)

22 La multitud se levantó a una contra ellos, y los magistrados superiores, rasgándoles sus ropas, ordenaron que los azotaran con varas. 23 Después de darles muchos azotes, los echaron en la cárcel, ordenando al carcelero que los guardara con seguridad;

24 el cual, habiendo recibido esa orden, los echó en el calabozo interior y les aseguró los pies en el cepo. 25 Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban.

D. Oraban por Sanidad:

La resurrección de Tabita por parte del apóstol Pedro:

Hechos de los Apóstoles 9:40 NBLA

40 Pero Pedro, haciendo salir a todos, se arrodilló y oró, y volviéndose al cadáver, dijo: «Tabita, levántate». Ella abrió los ojos, y al ver a Pedro, se incorporó.

La sanidad que dio el apóstol Pablo a Publio:

Hechos de los Apóstoles 28:7–8 (NBLA)

7 Cerca de allí había unas tierras que pertenecían al hombre principal de la isla, que se llamaba Publio, el cual nos recibió y nos hospedó con toda amabilidad por tres días. 8 Como el padre de Publio estaba en cama, enfermo con fiebre y disentería, Pablo entró a verlo, y después de orar puso las manos sobre él, y lo sanó.

E. Diversos tipos de oraciones:

Lucas informó de la oración habitual de Cornelio:

Hechos de los Apóstoles 10:2 NBLA

2 piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, que daba muchas limosnas al pueblo judío y oraba a Dios continuamente.

De las mujeres reunidas junto al río en Filipos:

Hechos de los Apóstoles 16:13 (NBLA)

13 El día de reposo salimos fuera de la puerta, a la orilla de un río, donde pensábamos que habría un lugar de oración. Nos sentamos y comenzamos a hablar a las mujeres que se habían reunido. 16 Mientras íbamos al lugar de oración, nos salió al encuentro una muchacha esclava que tenía espíritu de adivinación, la cual daba grandes ganancias a sus amos, adivinando.

Asimismo se hace mención de las oraciones de Pablo con los ancianos en Efeso

Hechos de los Apóstoles 20:36 NBLA

36 Cuando Pablo terminó de hablar, se arrodilló y oró con todos ellos.

Y la de los marineros para salvar la nave hasta el amanecer

Hechos de los Apóstoles 27:29 NBLA

29 Temiendo que en algún lugar fuéramos a dar contra los escollos, echaron cuatro anclas por la popa y ansiaban que amaneciera.

Como se podrán dar cuentas mis amados hermanos, hemos visto la dinámica de la vida de oración de los hermanos de la iglesia en Hechos en diferentes momentos, necesidades e incluso al momento de encarar la muerte. Debemos recordar que si bien, veíamos a la iglesia unida orando, es decir, un grupo de decenas, cientos y hasta miles de individuos reunidos llevando a cabo esta práctica, debemos tener en cuenta también que cada persona que conformaba estos grupos descritos en los pasajes anteriores, muy seguramente en lo personal, cada uno de ellos eran hombres y mujeres de oración ferviente.

En otras palabras, lo que quiero decir es que para que haya una iglesia volcada a la oración, debe haber primero personas, individualmente hablando, fervientes en su vida de oración. De lo contrario, habrá una iglesia sin poder, sin influencia, sin luz, sin salanidad, sin fuerza, sin impacto en la vida de quienes nos rodean, tanto a nivel familiar, como en esta comunidad circundante a la nuestra.

Y aquí quiero hacer esta pregunta de reflexión para cada uno de nosotros:

¿Somos hombres y mujeres fervientes en oración, que llevamos a cabo esta práctica en todo momento y circunstancia como la iglesia en Hechos?

Vamos ahora a ver un segundo punto en nuestra predica de hoy…

II. La enseñanza de los apóstoles sobre la oración en la vida de la iglesia:

Aquí me voy a expandir a mirar las cartas paulinas y epístolas generales donde vamos a aprender cómo la iglesia debe arraigar más esta práctica en nuestro tiempo de reunión, así como las distintas motivaciones que debemos tener en cuenta:

A. La práctica de los apóstoles:

La oración era esencial en la práctica de su ministerio:

Hechos de los Apóstoles 6:3–4 (NBLA)

3 »Por tanto, hermanos, escojan de entre ustedes siete hombres de buena reputación, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes podamos encargar esta tarea. 4 »Y nosotros nos entregaremos a la oración y al ministerio de la palabra»

Pablo prestó atención a la manera en que se ora. En el contexto de los dones espirituales declara que hay que orar con la mente (to noi) tanto como con el espíritu (to pneumati)

1 Corintios 14:15 NBLA

15 Entonces ¿qué? Oraré con el espíritu, pero también oraré con el entendimiento. Cantaré con el espíritu, pero también cantaré con el entendimiento.

B. Los apóstoles oraban por las iglesias:

Colosenses 1:9–10 (NBLA)

9 Por esta razón, también nosotros, desde el día que lo supimos, no hemos cesado de orar por ustedes, pidiendo que sean llenos del conocimiento de Su voluntad en toda sabiduría y comprensión espiritual, 10 para que anden como es digno del Señor, haciendo en todo, lo que le agrada, dando fruto en toda buena obra y creciendo en el conocimiento de Dios.

Ver también:

Filipenses 1:9–11 (NBLA)

9 Y esto pido en oración: que el amor de ustedes abunde aún más y más en conocimiento verdadero y en todo discernimiento, 10 a fin de que escojan lo mejor, para que sean puros e irreprensibles para el día de Cristo; 11 llenos del fruto de justicia que es por medio de Jesucristo, para la gloria y alabanza de Dios.

C. La Importación de la Oración:

Colosenses 4:2 NBLA

2 Perseveren en la oración, velando en ella con acción de gracias.

En el contexto de equipar a los cristianos para la lucha con los poderes malignos, amonestó a los cristianos de Efeso a orar “en todo tiempo (en panti kairo) en el Espíritu con toda oración y ruego”

Efesios 6:18 NBLA

18 Con toda oración y súplica oren en todo tiempo en el Espíritu, y así, velen con toda perseverancia y súplica por todos los santos.

D. Oración por la difusión del evangelio:

Colosenses 4:3–4 (NBLA)

3 Oren al mismo tiempo también por nosotros, para que Dios nos abra una puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también he sido encarcelado, 4 para manifestarlo como debo hacerlo.

2 Tesalonicenses 3:1 NBLA

1 Finalmente, hermanos, oren por nosotros, para que la palabra del Señor se extienda rápidamente y sea glorificada, así como sucedió también con ustedes.

E. Oración por los enfermos:

Santiago 5:14 NBLA

14 ¿Está alguien entre ustedes enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia y que ellos oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor.

F. Oración por los pecadores:

1 Juan 5:16–17 (NBLA)

16 Si alguien ve a su hermano cometiendo un pecado que no lleva a la muerte, pedirá, y por él Dios dará vida a los que cometen pecado que no lleva a la muerte. Hay un pecado que lleva a la muerte; yo no digo que se deba pedir por ese. 17 Toda injusticia es pecado, pero hay pecado que no lleva a la muerte.

Ver también Stg 5:16

Santiago 5:16 NBLA

16 Por tanto, confiésense sus pecados unos a otros, y oren unos por otros para que sean sanados. La oración eficaz del justo puede lograr mucho.

G. Oración por los siervos de Dios:

Romanos 15:30 NBLA

30 Les ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que se esfuercen juntamente conmigo en sus oraciones a Dios por mí,

Ver también 2 Co 1:11

2 Corintios 1:11 NBLA

11 Ustedes también cooperaron con nosotros con la oración, para que por muchas personas sean dadas gracias a favor nuestro por el don que nos ha sido impartido por medio de las oraciones de muchos.

H. Oración por la conversión de nuestras familias de sangre:

Romanos 9:1–3 (NBLA)

1 Digo la verdad en Cristo, no miento, dándome testimonio mi conciencia en el Espíritu Santo, 2 de que tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón. 3 Porque desearía yo mismo ser anatema, separado de Cristo por amor a mis hermanos, mis parientes según la carne.

Y también:

Romanos 10:1 NBLA

1 Hermanos, el deseo de mi corazón y mi oración a Dios por ellos es para su salvación.

¿Cómo vamos hasta aquí? Muchos versículos, ¿verdad?

Habría que decir muchísimo más acerca de la oración en la iglesia primitiva, en todo el Antiguo y Nuevo Testamento. Pero solo traje algunos pasajes relevantes.

En cuanto este segundo punto, quiero hacer una pregunta de reflexión para cada uno de nosotros.

¿Estamos aplicando todos éstos diversos tipos de oración que la Biblia nos enseña en nuestro día a día?

¿Cómo es tu vida de oración actual: a hoy, de esta mañana, de la última semana, del mes de enero que paso, del año 2023 que transcurrió, de los últimos cinco años?

CONCLUSIONES: