CÓMO ORGANIZA EL LÍDER UN PROYECTO
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SERIE: Influyendo en los demás
Nehemías el líder siervo
Libro: Rick Warren, Liderazgo con propósito: Lecciones de liderazgo basadas en Nehemías (Miami, FL: Editorial Vida, 2008)
Título: CÓMO ORGANIZA EL LÍDER UN PROYECTO
Título: CÓMO ORGANIZA EL LÍDER UN PROYECTO
INTRODUCCIÓN:
INTRODUCCIÓN:
Motivación sin organización lleva a la frustración.
¿Cómo podremos asegurar que se realice un proyectos?
CONTENIDO:
CONTENIDO:
1. UN LÍDER SIMPLIFICA
1. UN LÍDER SIMPLIFICA
Nehemías tenía un proyecto enorme, pero para organizarlo, tenía un plan sencillo. A diferencia de muchos líderes actuales, no creó de nuevo la organización ni trazó gráficos complejos; todo lo que hizo fue ver cómo la gente estaba ya agrupada y organizarla de acuerdo a esto.
Las organizaciones más sólidas son las más sencillas.
2. UN LÍDER SELECCIONA UN EQUIPO
2. UN LÍDER SELECCIONA UN EQUIPO
Muchos líderes se pasan el tiempo tratando de acorralar a los perezosos y los apáticos, en lugar de enfocarse a trabajar con los que quieren trabajar. A eso yo le llamo meter los cabritos en el corral. Aprende esto ahora, y ahórrate muchas horas de frustración: Trabaja con aquellos que quieran trabajar.
En todos los proyectos hay dos clases de personas: los que trabajan y los que esquivan el trabajo. La respuesta de Nehemías a estos que estaban esquivando el trabajo, fue ignorarlos. No perdió el tiempo con la gente que no estaba dispuesta a trabajar. En lugar de hacerlo, centró su tiempo y sus energías en los que estaban dispuestos a trabajar, y ansiosos por hacerlo. No perdió el sueño, ni se amargó la vida, ni perdió el tiempo tratando de meter en el corral a la gente que no quería trabajar. Si eres líder, no te debes preocupar por los que no quieran involucrarse. Trabaja con los que se quieran involucrar. Esos son los que funcionan en equipo.
Los líderes aman a todos, pero se mueven con los que se mueven.
Céntrate en los que te digan: «Yo quiero participar». No pierdas tu tiempo en los que se ponen a inventar excusas.
3. UN LÍDER DELEGA
3. UN LÍDER DELEGA
Cuando estés organizando, reparte tareas específicas. Divide el proyecto de acuerdo con las tareas a realizar, y después asígnalas a personas determinadas
La delegación de trabajo es otro aspecto difícil del liderazgo. Puede llegar a ser duro soltar algo y confiar en los demás. Pero si pensáramos que Dios, el Dios del universo, nos confía a nosotros su propia obra, tal vez nos parecería un poco más fácil delegar la nuestra. Esto es clave para el éxito de cualquier proyecto.
• Divide las grandes metas en tareas más pequeñas.
Los grandes trabajos pueden parecer abrumadores, pero si los divides en tareas más pequeñas, se vuelven realizables.
• Desarrolla descripciones de tareas que sean claras. Todos merecen saber qué es lo que se espera de ellos.
• Entrégale a cada persona la tarea que más se ajuste a su F.O.R.M.A.
Cuando se le asigna una labor a la persona equivocada, se suele producir un caos, y tras él, problemas de motivación. Saber delegar significa comprender las tareas, y también las capacidades de los miembros de su equipo, con el fin de poner las responsabilidades correctas en manos de los obreros que mejor las puedan desempeñar.
Lo que es responsabilidad de todos, no es responsabilidad de nadie. Alguien tiene que asumir una responsabilidad concreta para cada cosa.
4. UN LÍDER MOTIVA
4. UN LÍDER MOTIVA
Crea un sentido de pertenencia.
Cuando organices algún proyecto, permite que exista la idea de pertenencia. Ayuda a la gente a sentir que el proyecto le pertenece.
La gente trabaja con más dedicación cuando tiene un interés personal.
Estaba ahorrando tiempo, energía y costos al asignarles a las personas un trabajo cercano a sus casas, y al mismo tiempo, esas personas se sentían dueñas del proyecto.
Haz que el trabajo sea lo más conveniente posible. Tanto tú como tu equipo van a sacar provecho de esa forma de pensar.
Al permitir que cada cual trabajara cerca de su zona de interés, demostró el principio de la organización.
Las buenas organizaciones permiten que los trabajadores desarrollen sus propias áreas de trabajo.
5. UN LÍDER PROMUEVE LA UNIDAD
5. UN LÍDER PROMUEVE LA UNIDAD
El trabajo en equipo es esencial para realizar cualquier proyecto, sea cual sea su tamaño. Como líder, haz cuanto puedas para animar a trabajar bien en equipo.
B. C. Forbes, fundador de la revista Forbes, decía: «La palabra éxito se deletrea E-Q-U-I-P-O». La colaboración es un principio clave necesario para la buena organización.
Henry Ford decía: «Reunirse es un buen comienzo, mantenerse juntos es progresar, pensar juntos es tener unidad, y trabajar juntos es triunfar».
Juntos, podemos hacer cosas que no podemos hacer solos.
6. UN LÍDER ADMINISTRA
6. UN LÍDER ADMINISTRA
Además de inspeccionar las obras él mismo, Nehemías también nombró supervisores que lo ayudaran a controlar, dirigir y administrar el proyecto. He aquí dos principios que debemos comprender a partir del ejemplo de Nehemías.
Las buenas organizaciones establecen líneas de autoridad claras. Además de unas descripciones de responsabilidades claras, también tienen unas líneas de autoridad claras. No hay confusión en cuanto a quién debe informar a quién.
La gente hace lo que uno inspecciona; no lo que uno espera. ¿Has notado lo cierto que es esto? Si tus trabajadores saben que no los estás vigilando, no van a estar trabajando.
7. UN LÍDER AGRADECE
7. UN LÍDER AGRADECE
Las buenas organizaciones reconocen el esfuerzo. El reconocimiento a lo que hacen los demás para lograr que sus proyectos se conviertan en realidad es tal vez el principal propósito del tercer capítulo de Nehemías.
Nehemías los conocía por sus nombres. Esa es una de las señales del buen líder. Nehemías menciona treinta y ocho nombres, y les atribuye el mérito de haber hecho un buen trabajo en el muro.
Después de él Baruc hijo de Zabai con todo fervor restauró otro tramo, desde la esquina hasta la puerta de la casa de Eliasib sumo sacerdote.
Si quieres que te reconozcan en tu trabajo, hazlo con entusiasmo. Dios se da cuenta del entusiasmo.
CONCLUSIÓN:
CONCLUSIÓN:
Es interesante el hecho de que mientras Nehemías está honrando a tantos por la labor que han hecho, ahora recuerda a estos supuestos «notables» por lo que no hicieron. ¡Vaya epitafio! Gracias a Nehemías son miles de millones las personas que han leído desde aquellos tiempos acerca de los esfuerzos de los que construyeron el muro, y también acerca de los que no se molestaron en levantar un solo ladrillo.
Las buenas organizaciones reconocen y recompensan los esfuerzos.
En cambio, Nehemías no se enojó por aquellas personas. El hecho de que no participaran no le molestó. Prefirió centrarse en los que sí estaban trabajando, y olvidarse de los que no querían trabajar. «No tengo el deber», dijo, «de dejarme molestar por el hecho de que haya mucha gente que nunca va a hacer nada por servir. Tal vez vengan durante semanas, meses o años, y nunca participarán en nada. Dios lo sabe, y un día, es él quien recompensará».