Grandes Doctrinas Bíblicas.
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La Doctrina de la Salvación.
La Doctrina de la Salvación.
El Pacto de Obras.
Según las escrituras el único Dios verdadero se ha relacionado con el hombre a través de Pactos.
Génesis 9; Génesis 17; Éxodo 19; Éxodo 24, 2 Samuel 7; Jeremías 31; Lucas 22; Hechos 8.
El arca de Noé que fue el medio por el cual Dios obró salvación. Luego de ello el Señor hizo un pacto con Noé. Génesis 9:8 El Pacto con Noéico. / La circuncisión / Dios, Noé y su descendencia.
Génesis 17 El Pacto con Abraham.
Éxodo 19 y Éxodo 24 Pacto Mosaico.
2 Samuel 7 Pacto Davidico
Un pacto es un compromiso formal hecho entre Dios y el hombre.
Dios es quien establece en todos los casos los términos del pacto.
Dios establece en todos los casos la señal del pacto.
El pacto esta compuesto por:
Las partes involucradas.
Los requerimientos.
Las promesas (Bendiciones y sanciones)
Una Señal externa (El arco-iris, la circuncisión, )
Dos tipos de pactos:
El Pacto de obras: Condicionado a la obediencia.
El Pacto de Gracia: El Pacto Noéico, es un pacto de gracia común porque no estaba condicionado a la obediencia sino a la gracia que el Señor concedió a su creación.
Una cabeza federal: aquella persona con quien Dios hace el pacto y es el representante de las personas con quien Dios hace el pacto.
Los Bautistas reformados entendemos que en el huerto del Edén hubo un pacto entre Dios y Adán .
Requerimientos del Pacto entre Dios y Adán:
Génesis 2:15–17 “.. mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; ...”
Romanos 5:12–14 “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.Pues antes de la ley, había pecado en el mundo; pero donde no hay ley, no se inculpa de pecado.No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es figura del que había de venir.”
Que papel cumplía entonces Adán: él era la cabeza federal, el representante de la humanidad. Romanos 5:18 “Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación de vida.”
PROMESAS
Génesis 2:17 “mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.”
Dios restringe a Adán que coma del árbol de la ciencia del bien y del mal, le esta demandando obediencia.
Si Adán no obedecía moriría, si hubiese obedecido tendría vida eterna.
SEÑAL EXTERNA
El árbol de la vida.
Fue un pacto de Obras porque Dios lo condicionó a la obediencia de la cabeza federal representante de la humanidad “Adán”.
CONCLUSIONES
Es Dios quien establece los términos del Pacto con el hombre no el hombre con Dios como erróneamente lo creen en la corriente del evangelio de la prosperidad.
2. Todos los pactos sea de obra o de gracia contiene gracia porque Dios no está obligado a celebrar pactos con el hombre. Él no tiene necesidad de la amistad con nosotros. Dios condesciende con el hombre para hacer pacto con él.
¿Cómo podemos ver a Cristo en esta lección?
Romanos 5:14–16 “No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es figura del que había de venir. Pero el don no fue como la transgresión; porque si por la transgresión de aquel uno murieron los muchos, abundaron mucho más para los muchos la gracia y el don de Dios por la gracia de un hombre, Jesucristo. Y con el don no sucede como en el caso de aquel uno que pecó; porque ciertamente el juicio vino a causa de un solo pecado para condenación, pero el don vino a causa de muchas transgresiones para justificación.”
APLICACIONES
1. No debemos pensar en ninguna manera que podremos establecer algún tipo de pacto con el Señor buscando obtener de Él algo entregándole por ello otro algo (bendición a cambio de obras).
2. Como Cristianos, no debemos pensar en ninguna manera que las obras buenas que el Señor nos permite por gracia hacer, son en alguna medida un medio para demandarle al Señor un trato especial hacia nosotros, nuestro servicio no compra prosperidad ni mucho menos su buena voluntad en una situación particular.