LA LEY Y EL EVANGELIO

Carta a los Gálatas   •  Sermon  •  Submitted   •  Presented
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Gálatas 3:10–14 RVR60
10 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas. 11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá; 12 y la ley no es de fe, sino que dice: El que hiciere estas cosas vivirá por ellas. 13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), 14 para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.
PUNTOS:
1.El ser humano queda condenado por la ley, porque no puede cumplirla en forma perfecta.
2.El ser humano puede llegar a ser justo solamente por medio de la fe en la obra redentora de Cristo.
3.Cristo hace posible la liberación porque se hizo maldición por nosotros.
4.Por medio de la fe en Cristo todos, judíos y gentiles, podemos recibir la bendición del Espíritu Santo.
INTRODUCCIÓN:

1.El ser humano queda condenado por la ley, porque no puede cumplirla en forma perfecta.

Gálatas 3:10 RVR60
10 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas.
Porque todos los que dependen de las obras de la ley estan bajo maldición y debemos poner atención ya desde el principio, el texto empieza con la palabras todos, hay que entender que la ley no fue dada a todo el mundo si no que solo le fue dada al pueblo de Israel dentro del pacto con el pueblo de Israel.
Esta ley que va incluida en el pacto sináptico o mosaico es de obediencia para así poder tener una relación santa con Jehová, ahora bien este pueblo debía ser luz del mundo pero que paso, que el mundo entraba en este pacto obedeciendo la ley empezando por la circuncisión es la obediencia o obras de la ley que incluye obediencia a las leyes sanitarias, alimenticias, judiciales y ceremoniales y hasta de limpieza.
Cuando Pablo menciona la palabra ley, se está refiriendo al cuerpo de códigos que Dios dio a Moisés, dentro de esta ley al no poder ser obedecida y poder ser purificados de estos pecados de desobediencia hay sacrificios de animales, hay derramamiento de sangre para perdón de pecados.
Recordemos que antes que Dios les diera la ley, Israel era un pueblo que estaba en esclavitud y que fue primeramente redimido por Dios por medio de la sangre de un cordero. El pueblo creyó a Dios por medio de su siervo Moisés, al poner la sangre de un cordero en los postes de la entrada de la casa para que fuesen salvos de la muerte.
Y si vais un poco mas atrás en Abraham también hay derramamiento de sangre en un sacrificio y en este caso es sustitutorio mas que para perdón de pecado, recordemos que Abraham creyó y luego hay un sacrifico sustitutorio entre el hijo de la promesa por un cordero.
¿Cuál es el propósito de la ley?
La ley de Dios fue dada al pueblo de Israel para mostrar la santidad de Dios, Dios es Dios Santo y para poder relacionarse con el exige santidad de su pueblo.
La ley también fue dada para exponer el pecado del hombre, esta santidad que exige Dios por medio de la obediencia de la ley conlleva a una santidad pero también expone que al no poder obedecerla eres un transgresor y desobediente de la ley y esto no te santifica.
La ley es que es nuestro tutor para llevarnos a Cristo, recuerdan la palabra Hayo, nuestro tutor que nos enseña obediencia, respeto, disciplina y en este caso obedecer toda la ley.
La ley también fue dada a Israel para proveer una provisión temporal para el perdón de sus pecados, por medio de los sacrificios de animales.
La ley fue dada para proveer a la nación redimida de Israel el camino de aprender cómo alabar a Dios. Esto se hacía por medio de los días festivos, donde la nación se unía para recordar a Dios y sus grandes eventos
Ahora bien si llegan judaizantes y te dicen que si iremos en la justificación del Señor Jesucristo pero también hay que cumplir todas estas obras de la ley para llegar a ser justificados, mira todo lo que implica si ellos te dicen que debes circuncidarte pero para empezar luego todo este conglomerado de leyes y tradiciones deben ser cumplidas hasta las mas mínima.
Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, debemos preguntar ¿quienes dependen de la ley? La respuesta es los judíos y los prosélitos aquellos gentiles que se han vuelto judíos.
Los gálatas son gentiles no judíos y no estan sujetos a la ley y así maldición a pesar que los judaizantes quieren hacerles creer que estan sujetos a la ley y esto incluiría su maldición.
Cuando digo maldición es porque Pablo esta tomando estos textos del AT, y antes que vallamos a estos textos hay que recordad que la ley es buena mi amado hermano, la ley es santa y buena pero la maldición fue incluida por Dios por causa de su desobediencia, Dios exige obediencia a su ley y si no la cumples hay una pena con una maldición como lo es en este caso.
¿Qué texto esta usando Pablo para probar que todos aquellos que dependen de las obras de la ley estan bajo maldición?
El estar en la ley trae maldición,
Deuteronomio 27:26 RVR60
26 Maldito el que no confirmare las palabras de esta ley para hacerlas. Y dirá todo el pueblo: Amén.
Maldito el que no cumple toda la ley, entonces Pablo esta demostrando que la ley no justifica si no que maldice al que no la cumple.
Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas.
¿Acaso podemos cumplir toda la ley sin excepción?
Y podríamos decir que es casi imposible cumplir toda la ley a pesar de que si hay registros de gente que ha cumplido la ley y puede decir que es irreprensible como en el caso de Pablo
Filipenses 3:6 RVR60
6 en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible.
Lucas 18:18–30 RVR60
18 Un hombre principal le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 19 Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo Dios. 20 Los mandamientos sabes: No adulterarás; no matarás; no hurtarás; no dirás falso testimonio; honra a tu padre y a tu madre. 21 Él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. 22 Jesús, oyendo esto, le dijo: Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme. 23 Entonces él, oyendo esto, se puso muy triste, porque era muy rico. 24 Al ver Jesús que se había entristecido mucho, dijo: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! 25 Porque es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. 26 Y los que oyeron esto dijeron: ¿Quién, pues, podrá ser salvo? 27 Él les dijo: Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios. 28 Entonces Pedro dijo: He aquí, nosotros hemos dejado nuestras posesiones y te hemos seguido. 29 Y él les dijo: De cierto os digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o padres, o hermanos, o mujer, o hijos, por el reino de Dios, 30 que no haya de recibir mucho más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.
AquÍ vemos una diferencia entre Pablo que dice ser irreprensible ante la ley y otro que se creía bueno y con ese cumplimiento de la ley alcanzar la vida eterna la cual es corregida por Jesus al decirle que porque le llama bueno si solo Dios es bueno, esto mismo nos enseña Jesus a lo largo de las escrituras.
Primero que basta solo con desobedecer una parte de la ley es desobedecerla todas
Santiago 2:10 RVR60
10 Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos.
Y segundo que no es tanto el cumplir la ley externamente como enseñaban los fariseos y judaizantes, si no la obediencia a la ley desde el interior al exterior.
Romanos 7:14–25 RVR60
14 Porque sabemos que la ley es espiritual; mas yo soy carnal, vendido al pecado. 15 Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago. 16 Y si lo que no quiero, esto hago, apruebo que la ley es buena. 17 De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que mora en mí. 18 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo. 19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. 20 Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí. 21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. 22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios; 23 pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. 24 ¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? 25 Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
Jesús se dirigió a aquellos que decían que no adulteraban (externamente) y les dijo: Pero yo os digo que todo el que mira a una mujer para codiciarla ya adulteró con ella en su corazón Mateo 5.28.
¿Acaso podemos cumplir toda la ley sin excepción?
No, primero porque no podemos cumplirla ni interior, ni exteriormente ¿porque?
Porque no es cuestión de obedecer la ley o no, es porque nosotros ya nacemos con la culpa y condena de la maldición al sernos imputados la transgresión de Adán, es por ello que nacemos con esa naturaleza inclinada sin pie al mal y no solo eso que todo ser humano nace como enemigo de Dios y la ira y justicia de Dios sobre todos aquellos el cual pecado te indica con el dedo del gran acusador tu eres culpable.
Es por ello amados hermanos que necesitamos de un mejor, único mediador entre Dios y el hombre, el mediador de un mejor pacto de gracia y redención.
Este mediador que hace posible quitar el pecado del mundo y especialmente de ti es Jesucristo Dios y Hombre que se entrego por ti dando su vida y rescatarte de la culpa y condenación del Pecado ancestral del origen de la tierra y de la humanidad que es Adán es por ello que Jesús viene a ser nuestro segundo y mejor Adán, este Jesucristo nació sin pecado y se hizo pecado por ti, porque no podías, no podías, cada ley que se te ponga delante la rompes primero en el interior, con solo pensarlo y antes de abrir y cerrar tus ojos ya es pecado y eso entendió Pablo que no era cuestión. De ser irreprensible exteriormente en Romanos 7 que acabamos de leer: 21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. 22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios; 23 pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.
Cual ley esta en su interior y el cual quebranta la ley moral escrita en nuestros corazones la cual quebrantó Adán y se nos inculpa y somos condenados a muerte si física y espiritual.
Necesitados del dador de nueva vida que es Cristo y eso me lleva de humildad y gratitud, gozo y esperanza y sobre todo el deseo de gritarlo a viva voz y que toda Alcantarilla escuche que hay esperanza en este mundo caído.
Amados hermanos les repito lo que ya Pablo a dicho que todo aquel que busca ser justificado por las obras de la ley no lo hallará, lo dice el verso 11 que sigue

2.El ser humano puede llegar a ser justo solamente por medio de la fe en la obra redentora de Cristo.

Gálatas 3:11 RVR60
11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá;
Así es amado hermano, nadie puede llegar a ser justificado por la ley pero el simple hecho de que con solo desobedecer una ley has quebrantado toda, segundo porque eres culpable de la ley de Adán la cual te es imputada y para poder ser redimido necesitas de un mediador el cual no tenga ese pecado. No puedes salvarte por tu mismo, es mas da igual que busques tu salvación en la religión.
Que la busques en sectas espirituales, meditaciones ancestrales, o como que le pibes la barriga la Buda, tampoco te servirá rezarle a la virgen de tantas que hay en el panteón a pesar que en la historia hay una solo María madre de Dios Jesucristo hecho hombre que murió y seguro espera su glorificación como todos lo santos antes y después de ella.
Da igual que seas un reformado legalista que cumple toda la ley no podrás salvarte por que el pecado de adán te acusa.
Y este argumento lo toma Pablo, es evidente y lógico que por cumplir la ley no te justifica y eso debían saberlo ya los judaizantes ya que este argumento no se lo saco Pablo de la manga si no que esta tomándolo del AT específicamente de
Habacuc 2:4 RVR60
4 He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo por su fe vivirá.
El justo por la fe vivirá, no por cumplir la ley, Abraham el justo, el justificado por creer, el creyente recuerdan, pero también nos lo dice el profeta Habacuc octavo de los 12 profetas menores del AT.
Y si los judaizantes eran buenos judíos y tan buenos que van obligando a judaizar deberían conocer este texto de memoria, pero Pablo previniendo que solo quieren aprender lo que les gusta y lo demás taparlo con el dedo se los recuerda y les refresca la memoria: He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo por su fe vivirá.
Ahora ya vemos un poco mas de lógica en el argumento de Pablo al diferenciar entre la lay y la sola fe, una que te maldice por no cumplirla y otra que justifica por solo creerla y depositar tu confianza en el mediador, y los méritos del quien consiguió pagar esa condenación en la cruz del calvario que es Cristo Jesús, pero no Pablo no se queda ahí porque tal vez alguno de entre sus oyentes esta distraído y pone atención a la carta de Pablo y le dirá.
VS.12
Gálatas 3:12 RVA
12 Ahora bien, la ley no se basa en la fe; al contrario, el que hace estas cosas vivirá por ellas.
A ver que quiere decir Pablo, explícamelo mejor, hay dos caminos irreconciliables, una la obediencia estricta y completa a la ley en la cual hay vida eso se le ofreció a Adán vida eterna si cumplía lo que se le ordeno no hacer, ahora bien tendrías que vivir toda tu vida pendiente de no desobedecerla, dedicar toda vida a cumplir la ley, pero valla no puedes porque la culpa, delito y condenación de Adán te inculpa, o el otro camino que es la fe salvífica, la fe justificadora, la fe salvadora en Cristo Jesús.
Y este argumento Pablo también lo coge del AT, amados hermanos valla paliza de amor que les esta dando a los judaizantes y que herramientas estan adquiriéndoos los creyentes tanto gentiles como judíos.
Levítico 18:5 RVR60
5 Por tanto, guardaréis mis estatutos y mis ordenanzas, los cuales haciendo el hombre, vivirá en ellos. Yo Jehová.
¿Puedes cumplir la ley a raja tabla sin fracasar en una sola, estas dispuesto a coger ese camino?
Inténtalo a ver cuanto duras, a ver si tu mama te manda hacer una tarea que detestas y solo con pensar y se te cruce por la mente ya has pecado, al igual que al esposo cuando tu mujer te dice: saca la basura y frunces el ceño y viceversa.
Volviendo a nuestra esperanza que el justo por la fe vivirá, Pablo nos lo repite en diferentes textos como
Romanos 1:17 RVR60
17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Hebreos 10:38 RVR60
38 Mas el justo vivirá por fe; Y si retrocediere, no agradará a mi alma.
El hombre responde a la gracia por medio de la fe, tu respondes a esa gracia hallada a favor de ti con fe y no te vanaglories si te digo esto por que aún la fe se te es dada desde lo alto como un donde de Dios.
Amado hermano eres bienaventurado y da gloria a Dios por ello ¿por que?.

3.Cristo hace posible la liberación porque se hizo maldición por nosotros.

Gálatas 3:13 RVR60
13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero),
Después de argumentar el propósito de la ley y lo imposible que es el obtener justificación por medio de la ley, Pablo escribe el lado positivo de la maldición en que el hombre cae bajo la ley. La condición del hombre bajo la ley es una sin esperanza; pero en Cristo hay redención.
Para poder llegar a tener esa redención en Cristo alguien tuvo que cumplir las exigencias de la ley y la condenación.
No podemos obtener la salvación por medio de nuestras “acciones”; nuestra desobediencia, nuestro incumplimiento, no le deja a la Ley otra alternativa que condenarnos y ponernos bajo su maldición. Pero, gracias a Dios que hay un escape de su castigo justo. “Cristo nos redimió de la maldición de la Ley, haciéndose maldición por nosotros (pues está escrito: ‘Maldito todo el que es colgado en un madero’)”
Nuevamente Pablo utilizara los textos del AT para exponer sus argumentos y defensa del evangelio solo por fe y no por obras de la ley.
En este caso el cumplimiento del AT en Cristo y nuevamente utiliza el libro de Deuteronomio
Deuteronomio 21:22–23 RVR60
22 Si alguno hubiere cometido algún crimen digno de muerte, y lo hiciereis morir, y lo colgareis en un madero, 23 no dejaréis que su cuerpo pase la noche sobre el madero; sin falta lo enterrarás el mismo día, porque maldito por Dios es el colgado; y no contaminarás tu tierra que Jehová tu Dios te da por heredad.
Amados hermanos Pablo al utilizar este texto establece que Cristo en su crucifixión realmente se convirtió en maldito, porque “maldito por Dios es el colgado” Pero la gran verdad que Pablo desea enfatizar aquí es por qué Jesús se convirtió en maldito: lo hizo por nosotros, para redimirnos de la maldición de la Ley.
Jesucristo nos redimió, nos compro, pago el precio que pesa sobre nosotros, entregándose el mismo por nosotros y muriendo en la cruz por nosotros, llevando tu pecado hermano y amigo por ti.
Hechos de los Apóstoles 5:30 RVR60
30 El Dios de nuestros padres levantó a Jesús, a quien vosotros matasteis colgándole en un madero.
Hay algo más que entender, Cristo Jesús fue hecho maldito no que fuera maldito, a Él se le imputo este delito, esta condena, el nació sin mancha, sin pecado, pero que por nosotros se hizo pecado.
La mentalidad de los judíos no podía entender cómo el Mesías era maldito por Dios. Lo que los judíos no entendían es que Jesús murió no porque él era maldito, sino porque él tomó nuestra maldición del pecado. La maldición que la ley trae (porque no se puede cumplir en su totalidad) la tomó Cristo. Nuestra maldición fue tomada por Cristo en el madero.
Amados hermanos y amigos “Glorioso Intercambio”.

4.Por medio de la fe en Cristo todos, judíos y gentiles, podemos recibir la bendición del Espíritu Santo.

Gálatas 3:14 RVR60
14 para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.
¿Cual es el propósito de la redención?
Primero es que podemos ser bendecidos como lo fue Abraham, podamos experimentar esa misma bendición como dice los primeros textos Gálatas 3.6-9 6 Así Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia. 7 Sabed, por tanto, que los que son de fe, estos son hijos de Abraham. 8 Y la Escritura, previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio de antemano la buena nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones. 9 De modo que los de la fe son bendecidos con el creyente Abraham.
Ahora Pablo les dice a los gálatas y a nosotros que estamos en el preciso y precioso momento de experimentar en nuestras vidas la misma bendición que le fue concedido al padre Abraham.
La bendición de Abraham
1.El origen de la bendición está en la promesa que Dios dio a Abraham en Génesis 12:1-2 12 Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición.
2.El mediador de la bendición es Cristo Jesús.
3.La bendición está destinada a toda la humanidad, gentiles y judíos.
4.El fin de la bendición es recibir el Espíritu Santo.
El segundo propósito es el recibir el Espíritu Santo por medio de la fe. Los judíos y gentiles reciben la bendición del Espíritu Santo, no por la ley, sino por lo que Jesús hizo en la cruz. Lo que Pablo dice es que la salvación y la santificación por medio del Espíritu viene no por las obras externas de la ley sino por medio de la fe.
Si amados hermanos como ya hemos dicho antes la Trinidad trabajando conjuntamente en la obra redentora y se nos es otorgado la experiencia del ES.
Es el ES quien nos aplicara la regeneración, la nueva vida, nos aplica los méritos de Cristo conseguidos en la cruz del calvario, es quien nos resucitara el los días postreros para la glorificación de nuestros cuerpos mortales, pero sobre todo es quien te da la convicción de pecado, la necesidad de tu salvador, el arrepentimiento y la respuesta al acercarte a Cristo depositando tu fe, tu esperanza, tu certeza que Jesucristo es tu Señor y salvador.
La Ley exige acción, y nosotros no podemos cumplir con esa exigencia; por consiguiente, este camino lleva a una maldición. La única alternativa es no esperar en nuestras propias obras y volvernos con fe a los méritos de Cristo. En eso reside la paz, la seguridad y la salvación.
Un rio de gracia que continuaría su curso sin fin, bendiciendo primeramente a los judíos, pero después también a hombres de toda raza, tanto gentiles como judíos. Sí, el río de gracia fluiría lleno, abundante, refrescante, fructificante y libre para todos. Y para recibir la bendición, a saber, la realización de la promesa, “Yo seré tu Dios” (Génesis 17.7 : 7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.), lo único que se necesita es la fe, la confianza en el Cristo crucificado, porque fue en el Calvario que las llamas de la ira de Dios han descargado toda su furia, y ¡los creyentes de toda tribu, lengua y nación son salvos por siempre!
A Dios sea la Gloria que Cristo regrese pronto, que la bendición del ES este en cada uno de ustedes, amén.
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