Manteniendo El Impetu

Sermon  •  Submitted   •  Presented
0 ratings
· 30 views
Notes
Transcript
Reina Valera Revisada (1960) (Capítulo 4)
Cuando oyó Sanbalat que nosotros edificábamos el muro, se enojó y se enfureció en gran manera, e hizo escarnio de los judíos. 2Y habló delante de sus hermanos y del ejército de Samaria, y dijo: ¿Qué hacen estos débiles judíos? ¿Se les permitirá volver a ofrecer sus sacrificios? ¿Acabarán en un día? ¿Resucitarán de los montones del polvo las piedras que fueron quemadas? 3Y estaba junto a él Tobías amonita, el cual dijo: Lo que ellos edifican del muro de piedra, si subiere una zorra lo derribará. 4Oye, oh Dios nuestro, que somos objeto de su menosprecio, y vuelve el baldón de ellos sobre su cabeza, y entrégalos por despojo en la tierra de su cautiverio. 5No cubras su iniquidad, ni su pecado sea borrado delante de ti, porque se airaron contra los que edificaban. 6Edificamos, pues, el muro, y toda la muralla fue terminada hasta la mitad de su altura, porque el pueblo tuvo ánimo para trabajar.
7Pero aconteció que oyendo Sanbalat y Tobías, y los árabes, los amonitas y los de Asdod, que los muros de Jerusalén eran reparados, porque ya los portillos comenzaban a ser cerrados, se encolerizaron mucho; 8y conspiraron todos a una para venir a atacar a Jerusalén y hacerle daño. 9Entonces oramos a nuestro Dios, y por causa de ellos pusimos guarda contra ellos de día y de noche.

Introducción

‌Varios años atrás se escribió un articulo sobre algunos prominentes ejecutivos a los cuales se le hizo la pregunta, “¿Que cualidades ustedes buscan en los gerentes principales que ustedes están contratando?” No fue sorpresa que varios de los ejecutivos respondieron diciendo, “busco personas que sean orientados hacia metas, alguien que tenga una mentalidad positiva, alguien que demuestre iniciativa personal, y alguien que sea honesto y leal.”
Pero un ejecutivo menciono una cualidad que yo nunca había escuchado antes. El lo puso de esta manera, “yo quiero encontrar a una persona que entiende el poder del ímpetu. Yo quiero contratar a alguien que conozca como hacer que algo se mueva, y alguien que puede identificar cuando algo no esta funcionando mas. Yo busco a personas que pueda reaccionar a la perdida del ímpetu y empezar a mover las cosas nuevamente.”
Por años yo he estudiado lo que es el ímpetu y como esto se relaciona a la iglesia. A la verdad casi toda tarea que se relaciona a la iglesia envuelve ímpetu. Pero la verdad es que prácticamente todo envuelve movimiento: sea movimiento de productos, o movimiento de personas a través de la influencia, información, o servicios personales.
Las leyes de física nos dicen claramente que mover algo requiere cierta cantidad de energía. Se toma una vasta cantidad de energía para hacer que algo se mueva que no se estaba moviendo. Se toma menos energía mantener algo moviéndose que ya estaba en ímpetu. Y se toma bien poca energía mover algo que ya estaba en una inclinación hacia abajo.
Nehemías era una persona que entendía lo que es el ímpetu. El estaba comprometido a hacer que el pueblo se moviera. El estaba bien en serio en ver que las murallas alrededor de Jerusalén fuesen edificadas, y que la seguridad del pueblo fuese realizada.
El también sabia que el ímpetu podía cambiar en cualquier momento y el trabajo podía paralizarse si el no tenia cuidado. Nehemías aprendió que habían varias cosas que podían convertirse en asesinos del ímpetu, y el estaba comprometido en descubrir formas para mantener el proyecto moviéndose hacia adelante aunque la resistencia era inevitable.

Trasfondo historico

Esdras 1:1-3“En el primer año de Ciro rey de Persia, para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de Jeremías, despertó Jehová el espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo pregonar de palabra y también por escrito por todo su reino, …”
Esdras 1:2 RVR60
Así ha dicho Ciro rey de Persia: Jehová el Dios de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá.
Esdras 1:3 RVR60
Quien haya entre vosotros de su pueblo, sea Dios con él, y suba a Jerusalén que está en Judá, y edifique la casa a Jehová Dios de Israel (él es el Dios), la cual está en Jerusalén.
Jeremías 25:11 RVR60
Toda esta tierra será puesta en ruinas y en espanto; y servirán estas naciones al rey de Babilonia setenta años.
Jeremías 29:10 RVR60
Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar.
Isaias 44: 28 “que dice de Ciro: Es mi pastor, y cumplirá todo lo que yo quiero, al decir a Jerusalén: Serás edificada; y al templo: Serás fundado”, unos 300 yrs antes. Ciro fue Rey durante el tiempo de Daniel.
Tras el Edicto de Ciro los judíos que regresaron a Jerusalén comenzaron las tareas de reconstrucción nacional bajo el liderato del gobernador Zorobabel, que descendía de la familia real de Judá. Durante ese período posexílico, y como por cien años, Jerusalén formó parte de la provincia de Samaria, que a su vez pertenecía a la satrapía transeufratina (Mas alla del Eufrates). Esos años fueron testigos de la implantación continua de las políticas persas, que se manifestaban no solo en la administración pública de la ciudad y la región, sino en la vida diaria de los ciudadanos.
Esas dinámicas sociales y administrativas cambiaron considerablemente, con la llegada de Nehemías al escenario político de Judea (445 o 385 a.C.). Una vez que Nehemías llegó a la gobernación de Jerusalén, la región se convirtió en una provincia autónoma del imperio persa, pues las estructuras políticas confiaron en su visión y proyecto político. Esa autonomía de Judea, identificada en ese período como Yehúd, en el idioma arameo, se pone de relieve pues el imperio les permitió acuñar su propia moneda, con la identificación del gobernador o la provincia.
De singular importancia en estas decisiones administrativas, es que las monedas estaban impresas en hebreo con caracteres antiguos, que era una manera comercial de unir la población del momento con las raíces históricas del pueblo de Israel. Y aunque la extensión territorial de Judea no era extensa (Esdras 2:21–35; Neh 3:2–22; 7:25–38; 12:28), las autoridades locales en Jerusalén, con el aval del imperio persa, deseaban relacionar a sus ciudadanos con el período monárquico. Para el pueblo, la antigua monarquía del reino del Sur representaba un período ideal, después de las experiencias traumáticas de la destrucción del templo, símbolo de la presencia divina, y la deportación a Babilonia, que no solo implicaba una derrota militar con repercusiones políticas y administrativas, sino era signo de dependencia con muy serias implicaciones teológicas.

Enemigos de Nehemías

SANBALAT, HORONITA (סנבלט, snblt). Horonita gobernador de Samaria. Se opuso a que Nehemías reconstruyera los muros de Jerusalén a fines del siglo quinto a.C..
Referencias bíblicas
El libro de Nehemías describe a Sanbalat como enemigo de Israel y lo llama “el horonita” (Neh 2:10, 19; 13:28). Con frecuencia se lo asocia con Tobías o con Gesem, los otros enemigos de Nehemías.
• Sanbalat y su cohorte extranjera intentaron impedir que Nehemías reconstruyera los muros de Jerusalén.
• Sanbalat y los demás enemigos de Nehemías conspiraron contra Nehemías (Neh 4:7–8).
• Sanbalat y su séquito trataron de engañar a Nehemías para hacerlo caer en una emboscada (Neh 6:1–9).
• Sanbalat y otros contrataron a Semaías, hijo de Delaía, para que incitara a Nehemías a que entre en forma ilícita en el templo para lograr que Dios mismo le diera muerte (Neh 6:10–14).
Controversias
En los materiales extra bíblicos, Sanbalat aparece como gobernador de Samaria, aunque Nehemías nunca lo menciona como gobernador. Los documentos hallados en Elefantina mencionan a “Delaía y Selemías, hijos de Sanbalat, gobernador de Samaria” (Cowley, Aramaic Papyri, 108–19, texto 30, línea 29). También se menciona a “Sanbalat, gobernador de Samaria” en uno de los documentos encontrados en el Wadi ed-Daliyeh (Cross, “Discovery of Samaria Papyri”, 111). En el libro de Nehemías, se relaciona a Sanbalat solo una vez con Samaria; en Neh 4:1–3, Sanbalat se burla de los esfuerzos de reconstrucción frente al ejército de Samaria.
Aunque Nehemías lo trató como extranjero, es posible que Sanbalat perteneciera a la tribu de Efraín de Israel del norte. Knopper presenta varios argumentos en apoyo de la probabilidad de que Sanbalat fuera israelita:
• Es probable que la descripción de Sanbalat como horonita indique que Sanbalat era de una de las pequeñas ciudades del noroeste de Jerusalén: Horón la cual pertenecía a Efraín (Jos 16:3, 5; 1 Crón 7:24; Knoppers, “Nehemiah and Sanballat”, 326).
• Tanto Nehemías como Sanbalat se consideraban israelitas; ninguno se refiere a sí mismo como parte de “las naciones”, (גוים, gwym, Neh 6:6; Knoppers, “Nehemiah and Sanballat”, 328).
• Los dos hijos de Sanbalat tienen nombres yavistas: Delaía y Selemías.
• Las cartas que Sanbalat y Nehemías se escribieron entre ellos están en hebreo (Neh 6; Knoppers, “Nehemiah and Sanballat”, 328). Que Sanbalat haya usado el hebreo en lugar del arameo—el idioma oficial—podría indicar que era israelita.
TOBÍAS, AMONITA (טוביה, twbyh). Un gobernador rico de Amón con fuertes contactos judíos. Se opuso a la reconstrucción de los muros de Jerusalén que Nehemías realizó durante el siglo V a.C..
Relevancia bíblica
Tobías se opuso al proyecto de reconstrucción desarrollado a lo largo del libro de Nehemías (Neh 2:10, 19; 3:15; 4:1; 6:1, 12, 14, 17, 19; 7:62; 13:4, 7, 8). Además, aparece una vez en Esdras (Esd 2:60; ver también 1 Esdr 5:37) y dos veces en Zacarías (Zac 6:10, 14). En el libro de Nehemías, Tobías es uno de sus peores enemigos: “Tobías el siervo amonita”. El término “siervo” (עבד, ‘bd) es objeto de debate:
• Mazar afirma que “siervo” funciona como una forma abreviada de “siervo del rey”, un funcionario persa de alto rango (Mazar, “Tobiads”, 236).
GESEM (גַּשְׁמוּ, gashmu; גֶּשֶׁם, geshem). Un árabe que formaba parte del grupo que se opuso a la reconstrucción de Jerusalén.
Gesem probablemente fue jefe de una tribu árabe que, o bien se había instalado en el sur de Palestina durante el exilio en Babilonia, o bien se había instalado en o cerca de la Samaria de Sargón (Neh 2:19; 6:1–2, 6). Fue cómplice de Sanbalat y de Tobías, y se opuso a la reconstrucción del muro bajo el mando de Nehemías. Él y los otros se burlaron de los esfuerzos para construir el muro. Más tarde, cuando el muro había sido construido, trató de hacerlo salir a Nehemías hacia las llanuras de Ono con el fin de tenderle una emboscada. Es posible también ver el nombre como Gasmu, en su forma asiria (Neh 6:6).

Asesinos del impetu: La Burla

Según el cap. 3 la construcción de toda la muralla se completó (3:1, 32), hasta los acabados (3:3; cf. 6:1; 7:1). Ahora los caps. 4–6 vuelven a contar la historia para resaltar los obstáculos que se superaron.
Este es el capítulo que relata la oposición al avance de la obra. Aquí se describen más de las tretas enemigas para detener la obra y las medidas valientes y exóticas que los judíos tuvieron que tomar. El capítulo tiene una estructura repetitiva, mayormente continuada y en aumento de amenaza-reacción, y así resalta los obstáculos de la obra y la tenacidad de los constructores.
Pareciera que cuando Sanbalat oyó que Nehemías realmente estaba construyendo el muro, llevó todo un ejército (2) de samaritanos a Jerusalén para participar en las burlas. Tal vez la autorización del emperador le había hecho ser cauteloso en cuanto a un ataque militar, y que este empleo de su ejército fuera lo más audaz que se atrevió a intentar. Una muestra la tenemos en este sarcasmo:
“¿Qué hacen estos decrépitos judíos? ¿Esperan construir esto por sí mismos? … ¿Piensan que es trabajo de un día? ¿Esperan volver a usar las piedras de los montones de escombros que fueron quemados?”
Sanbalat estaba furioso. Aunque probablemente no creía que los judíos pudieran terminar su plan, al ver tanto progreso, empezó a tener sus dudas y no quería arriesgarse. Por eso, hizo burla de ellos en público con el fin de hacerlos flaquear (4:1–2). Sus palabras indican que no temía a Dios ni lo tomaba en serio. Convocó una asamblea con el exclusivo fin de hacer mofa de los esforzados judíos, probablemente de una manera sarcástica para poner de manifiesto su desprecio. Quería desanimarlos.
El escarnio consistió en cinco preguntas retóricas (4:2). Según las primeras dos, los judíos eran incapaces de hacer cosa alguna, mucho menos restaurar su propia muralla. En el hebreo la tercera pregunta no tiene la palabra volver, y de hecho los judíos ya tenían 90 años de ofrecer sacrificios sin impedimento (ver Esd. 3:1–6). La pregunta es sencillamente: “¿Ofrecerán sacrificios?”. Quizá signifique: “¿Creen que sólo con ofrecer sacrificios lograrán edificar la muralla?”. O tal vez alude al sacrificio de alabanza al finalizar la empresa (ver 12:43). La cuarta pregunta sugiere que los judíos no se dan cuenta de la magnitud de la tarea, y la quinta se burla de sus recursos. La piedra caliza quemada era demasiado débil para servir otra vez en una muralla. Tobías, por su parte, se mofó de la fuerza de la muralla (4:3). Irónicamente, para nosotros lo irrisorio no es el trabajo judío, sino la ignorancia de Sanbalat y Tobías. Habiendo leído ya el capítulo 3, sabemos que la muralla sí se levantará.
​A las palabras de Sanbalat, Tobías añadió que cuando terminaran el muro, éste sería tan débil que cualquier ataque, por pequeño que fuera, lo haría caer; no serviría para frenar el avance de los enemigos (4:3). Añadió que hasta una zorra podría derrumbarlo.

burlas n. f. pl. Bromas o mentiras por diversión:

Al repasar este texto, concluimos que la única razón lógica que tenían para hablarles así era que les tenían miedo, al ver la posibilidad de que tal vez lograran su propósito. Sin embargo, los enemigos cometieron un error grave; pensaban que el muro pertenecía al pueblo de Israel y no se daban cuenta de que no era así, sino que era del Señor.
La respuesta: La oración
​Nehemías no contestó a los necios conforme a su necedad; antes bien recurrió a Dios en oración. Nehemías no respondió al ataque con violencia; hacerlo hubiera sido rebajarse. En lugar de dar una contestación en público, se apartó a solas. En el pasaje se registra la oración quieta del siervo de Dios.
Tal como Pablo aconseja en Filipenses 4:6–7 (“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 7Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”), no se sentía ansioso; mediante la oración y súplica, con acción de gracias, dio a conocer sus peticiones delante del Señor y su corazón fue consolado con la paz del Padre celestial que sobrepasa todo entendimiento.
Abruptamente una oración imprecatoria interrumpe el relato (4:4, 5). Ni siquiera se dice quién oró, ni cuándo. Sin embargo, el contenido indica que el clamor provino de Nehemías, y que él la pronunció al oír el escarnio.
Pidió un castigo equitativo (4:4a),
y luego una cautividad, para que Sanbalat y Tobías tuvieran que pasar por lo mismo que los judíos de quienes se burlaban.
Por último Nehemías suplicó que Dios no los perdonara (4:5).
Esta petición sería contestada si no se arrepentían y temían a Jehovah
Salmo 32:1 RVR60
Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado.
Salmo 32:2 RVR60
Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño.
Salmo 32:5 RVR60
Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah
Salmo 103:3 RVR60
El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias;
Salmo 103:7–14 RVR60
Sus caminos notificó a Moisés, Y a los hijos de Israel sus obras. Misericordioso y clemente es Jehová; Lento para la ira, y grande en misericordia. No contenderá para siempre, Ni para siempre guardará el enojo. No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, Ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados. Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, Engrandeció su misericordia sobre los que le temen. Cuanto está lejos el oriente del occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones. Como el padre se compadece de los hijos, Se compadece Jehová de los que le temen. Porque él conoce nuestra condición; Se acuerda de que somos polvo.
Romanos 4:5–7 RVR60
mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al impío, su fe le es contada por justicia. Como también David habla de la bienaventuranza del hombre a quien Dios atribuye justicia sin obras, diciendo: Bienaventurados aquellos cuyas iniquidades son perdonadas, Y cuyos pecados son cubiertos.
Ni su pecado sea borrado implica que Dios, figuradamente por lo menos, mantiene un registro escrito de los pecados
Apocalipsis 20:12–13 RVR60
Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.
Nehemías 13:14 RVR60
Acuérdate de mí, oh Dios, en orden a esto, y no borres mis misericordias que hice en la casa de mi Dios, y en su servicio.
Malaquías 3:16 RVR60
Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre.
La petición de Nehemías contrasta con las de Jesús y Esteban
Lucas 23:34 RVR60
Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes.
Hechos de los Apóstoles 7:60 RVR60
Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.
y con enseñanzas como las de Lucas 6:27-28
Lucas 6:27–28 RVR60
Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian.
Lucas 6:32–36 RVR60
Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman. Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo. Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto. Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.
Sin embargo, concuerda con otras del Antiguo Testamento
Jeremías 18:23 RVR60
Pero tú, oh Jehová, conoces todo su consejo contra mí para muerte; no perdones su maldad, ni borres su pecado de delante de tu rostro; y tropiecen delante de ti; haz así con ellos en el tiempo de tu enojo.
Todavía hacían falta ciertas bases para perdonar al enemigo
Éxodo 23:4–5 RVR60
Si encontrares el buey de tu enemigo o su asno extraviado, vuelve a llevárselo. Si vieres el asno del que te aborrece caído debajo de su carga, ¿le dejarás sin ayuda? Antes bien le ayudarás a levantarlo.
Levítico 19:17–18 RVR60
No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; razonarás con tu prójimo, para que no participes de su pecado. No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová.
Proverbios 24:17 RVR60
Cuando cayere tu enemigo, no te regocijes, Y cuando tropezare, no se alegre tu corazón;
Proverbios 25:21–22 RVR60
Si el que te aborrece tuviere hambre, dale de comer pan, Y si tuviere sed, dale de beber agua; Porque ascuas amontonarás sobre su cabeza, Y Jehová te lo pagará.
No había revelación clara acerca del juicio más allá de la muerte. Cristo todavía no había muerto por los pecados de todos. El Espíritu Santo no convertía a los enemigos de Dios como lo hace desde el día de Pentecostés. No existía un cuerpo de Cristo compuesto de judíos y gentiles.
La oración agresiva de Nehemías animó a los judíos frente a la intimidación samaritana y pronto habían completado la mitad del proyecto (4:6). Levantaban todos los tramos simultáneamente, porque muchos judíos colaboraban. El plural reedificamos y la última oración del v. 6 reconocen que la construcción no dependía solamente del gran líder, sino del concurso del pueblo dispuesto.
¿Cómo puede un cristiano interpretar esta clase de oración, en especial a la luz de lo que Jesucristo dijo acerca de orar por los enemigos? (
Mateo 5:44 RVR60
Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
Romanos 12:14–20 RVR60
Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis. Gozaos con los que se gozan; llorad con los que lloran. Unánimes entre vosotros; no altivos, sino asociándoos con los humildes. No seáis sabios en vuestra propia opinión. No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza.
Debemos tomar en cuenta varios hechos. Primero, al oponerse a los judíos, Sanbalat y sus secuaces en realidad se estaban oponiendo a Dios.
En segundo lugar, Dios ya había emitido un juicio contra los enemigos de Israel. Nehemías estaba pidiendo conforme a la voluntad de Dios—que el Señor librara a Jerusalén de sus enemigos
Josué 1:5 RVR60
Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.
En tercer lugar, Nehemías pidió que Dios cumpliera lo que había prometido a Abraham en relación con aquellos que maldijeren a su pueblo
Génesis 12:3 RVR60
Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
En cuarto lugar, la venganza es del Señor, no de Nehemías ni de los creyentes
Deuteronomio 32:35 RVR60
Mía es la venganza y la retribución; A su tiempo su pie resbalará, Porque el día de su aflicción está cercano, Y lo que les está preparado se apresura.
;Ro. 12:19
Romanos 12:19 RVR60
No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.
Proverbios 15:28–29 nos recuerda este mismo principio: El corazón del justo piensa para responder; Mas la boca de los impíos derrama malas cosas. Jehová está lejos de los impíos; Pero él oye la oración de los justos.
Sin duda, una de las reacciones más inútiles que podemos tener cuando nos encontramos bajo el ataque de nuestros enemigos es tratar de pelear o vengarnos. Nehemías no malgastó su tiempo en esas trivialidades sino que las puso en las manos de Dios para que él las manejara.
Dios es dueño de su obra; él puede arreglar los problemas con sus opositores. La oración del líder no era en el sentido de pedir un castigo fulminante contra ellos; más bien pedía que todo se hiciera de acuerdo a la voluntad divina.
De este ejemplo podemos aprender que nuestro deber es hacer lo que Dios nos indica sin importar cómo responden los demás. Nehemías sabía que tenía que motivar a la gente a continuar el proyecto y se dedicó a ello enteramente. Los enemigos intentaban desmoralizar al pueblo para que se concentraran en la imposibilidad de completar la tarea, pero el líder los animó a seguir trabajando y dejar en manos del Señor los resultados.
Los creyentes estaban dispuestos a trabajar y él muy motivado por la esperanza de cumplir la visión que Dios le había encomendado. Gracias a esta actitud, todos se dedicaron a la obra con más ahínco y no dejaron que la oposición les desanimara. Dice el pasaje que trabajaron sin interrupción hasta que alcanzaron la mitad de la altura requerida. La respuesta entusiasta del pueblo también animó a Nehemías para seguir adelante. El intento de sus adversarios falló por la intervención divina y les dio nuevas fuerzas para trabajar y terminar el proyecto porque sabían que era para la gloria de Dios.
Lo que más me atrae en Nehemías es que era un individuo tan práctico. No era una de esas personas de quienes a veces se dice que viven demasiado en el cielo para ser útiles en la tierra. Mantenía los pies sobre el suelo. Sabía cómo organizar y sabía cómo agonizar. Pero determinó que mientras oraba y trabajaba, cuidaría también de que hubiera un centinela de guardia día y noche, y que cada sección del muro debía ser guardada por un hombre despierto que vigilara por cualquier ȧtaque inesperado del enemigo.

Asesinos del impetu: Amenazas y problemas

El rápido avance de los trabajadores judíos naturalmente aumentó la hostilidad de sus enemigos, quienes se encolerizaron mucho (cf. v. 1). Así que decidieron tomar acción más abierta y corporativa. Sanbalat y Tobías, los samaritanos del norte, Gesem (cf. 2:19), los árabes del sur, los amonitas del oriente, y los de Asdod, ciudad filistea que estaba al occidente, se unieron y conspiraron todos a una para … atacar a Jerusalén, probablemente en un ataque que se verificaría simultáneamente por todos lados.
La respuesta: La oración
Los judíos respondieron a la conspiración de 4:8 orando y poniendo guardia (4:9). La oración de fe combinada con medidas prácticas caracterizaba todo el proceder de Nehemías.
Esa estrategia unida de los enemigos de Judá fue enfrentada por una respuesta también corporativa de los judíos. De nuevo el pueblo y Nehemías oraron (oramos) a … Dios pidiendo ayuda y añadieron la acción a sus oraciones y por causa de ellos pusieron guarda contra ellos de día y de noche para que vigilara sus avances.
“Antes de conseguir algo grande, frecuentemente nos asalta algo de depresión … Tal fue mi experiencia al llegar a ser pastor de la iglesia en Londres … Fue precisamente en aquellos días que Dios levantaba el telón para revelarme el que sería el ministerio principal de mi vida … Parece que este tipo de depresión llega a molestarme siempre que él prepara una mayor bendición para mi ministerio”.
Related Media
See more
Related Sermons
See more
Earn an accredited degree from Redemption Seminary with Logos.