NUEVA CRIATURA EN CRISTO

2 Corintios 5:17

Introducción

Como fundamento para el tema, nos centraremos en que sólo Dios, a través de Escritura, es la base del cambio.

2 Timoteo 3:16 RVR60

Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,

Filipenses 2:13 RVR60

porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.

Además de ello, debemos entender que si hemos decidido seguir a Cristo, y el Señor es mi señor, entonces no puedo mirar a otro lado para encontrar sabiduría, corrección, aliento, santificación.

Mateo 6:24 (RVR60)

Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.

" enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, " Tito 2:11-12

Tito 2:11–12 RVR60

Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,

Colosenses 2:6 RVR60

Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él;

¿Cómo andar en Él?, ¿cómo vivir justamente?, ¿cómo agradarle?

7 Principios bíblicos que llevan al cambio verdadero

1. El evangelio de Jesucristo (2 Co 5:17; Ro 5:1; 6:16–18; 8:13).

2 Corintios 5:17 RVR60

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

Estar en Cristo es una realidad, una condición y una naturaleza.

Sólo en cristo somos revestidos y hechos nueva criatura.

Hace un parteaguas, un antes y un después.

Lo viejo queda atrás, lo nuevo es lo actual.

Romanos 5:1 (RVR60)

Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;

La justificación que es en Cristo nos lleva a una nueva relación de paz, en donde antes había ira.

Romanos 8:13 (RVR60)

porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.

Si vivimos bajo las obras de la carne, muestra nuestra condicion de esclavitud a la carne.

Por tanto, aún no somos libertados del yugo del pecado.

Las obras hacen vidente nuestra condición.

La pregunta sería, ¿a quién sirvo? ¿quién es mi señor?

Por el Espíritu podemos hacer morir las obras de la carne, es decir, si somos siervos de Dios, si verdaderamente Él nos ha libertado del pecado.

Colosenses 2:6 (RVR60)

Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él;

Efesios 4:1 (RVR60)

Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados,

La nueva criatura viene a través del Evangelio por el poder el Espíritu, quien nos capacita para poder vivir en Él.

Andad, hace referencia a un esfuerzo, a una acción constante, a una diligencia en proseguir.

2. El cambio sólo es posible en Jesucristo (Fil 1:6; Ro 6:17–18).

" estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo; " Filipenses 1:6

Filipenses 1:6 RVR60

estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;

Filipenses 1:6 (RVR60)

estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;

Yo no tuve iniciativa en hacer la buena obra, yo no comencé, yo no hice el cambio, yo no procedo a lo bueno.

Esto es bueno, trae esperanza, trae ánimo y fortalece nuestra fe.

Pues Dios, que no falla, es quien inició la obra, la sustenta y la perfecionará.

Estos nos hace mantener la mira en Él.

Romanos 6:16–18 (RVR60)

¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia?

Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados;

y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia.

La palabra que se traduce como “esclavos” y “siervos” provienen de la misma raíz de la palabra en griego 1401. δοῦλος doúlos; de 1210; esclavo.

Dios es quien nos ha dado la libertad y nos ha capacitado para poder ser esclavos (siervos) de la justicia.

Atributo Omnipotente (Todopoderoso): Nunca debemos olvida que el cambio no está en mis manos, el despojarme del viejo hombre es equiparable al nuevo naciemiento (del nuevo hombre), recordando que sólo Dios es quien produce vida, quien la da.

Dios es poderoso para cumplir Su palabra. Esto fortalece nuestra fe y nos anima a esforzarnos en Su voluntad, como buenos esclavos.

Génesis 2:7 (RVR60)

Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.

Diccionario Strong de Palabras Originales del Antiguo y Nuevo Testamento (5397. נְשָׁמָה neshamá)

5397. נְשָׁמָה neshamá; de 5395; resoplido, i.e. viento, furia o aliento vital, inspiración divina, intelecto, o (concr.) aliento animal:—aliento, alma, espíritu, hálito, que respira, respirar, soplo, vida, viviente.

3. La herramienta del cambio es La Palabra de Dios (Jn 17:17; 2 Ti 3:16–17; Sal 119:1, 24, 133).

Juan 17:17 RVR60

Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.

La herramienta viva y eficaz es la Palabra de Dios.

La santificación es a través de la Escritura.

La Palabra de Dios es verdadera, carece de error.

2 Timoteo 3:16–17 (RVR60)

Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,

a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.

Toda (absoluto) la Biblia es comunicada por Dios.

Todo cuanto Dios hace tiene un propósito, aquí Pablo comunica a Timoteo la utilidad de la Escritura para el creyente,.

Tiene la finalidad de perfeccionar - al hombre de Dios- el alcance es limitado, sólo los hombres de Dios pueden alcanzar este fin, como lo vimos anteriormente.

Perfeccionarlo para toda buena obra, no es que el hombre ya no peque, sino que está capacitado, entrenado o adiestrado para llevar a obras la voluntad del Padre.

Salmo 119:1 (RVR60)

Bienaventurados los perfectos de camino, Los que andan en la ley de Jehová.

Salmo 119:133 (RVR60)

Ordena mis pasos con tu palabra, Y ninguna iniquidad se enseñoree de mí.

- Ordena mis pasos con Tu Palabra, el verdadero poder está en la Palabra de Dios.

Hebreos 4:12 (RVR60)

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

4. El sujeto de cambio es el corazón (Ro 12:2; 2 Co 10:5; Pr 4:23; Mr 7:21–23; Mt 12:34).

Romanos 12:2 (RVR60)

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

2 Corintios 10:5 (RVR60)

derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,

Es una guerra de conocimiento y actitud contra el perfecto conocimiento de Dios.

Llevar cautivo, preso y sometido todo pensamiento (que conlleva conocimiento y actitud) a la obediencia a Cristo.

No es, solamente, un contraste entre nuestro conocimiento y la verdad de Dios, sino que, el resultado debe ser el sometimiento a la obediencia a Cristo.

Proverbios 4:23 (RVR60)

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.

De todas las cosas que hay, no existe cosa de mayor valor en la vida de las personas que su propio corazón.

¿Cómo lo guardas?

Marcos 7:21–23 (RVR60)

Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios,

los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez.

Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.

Todo mal tiene su origen en el corazón del hombre.

Necesitamos, urgentemente cambiarlo.

Mateo 12:34 (RVR60)

¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.

Que abunde la Palabra de Dios en nuestros corazones es parte fundamental del cambio (revestimiento)

“Una de las cosas que descubrirá pronto es que cuando la mayoría de las personas buscan cambiar, rara vez tienen el corazón en la mira. Quieren cambio en sus circunstancias, cambio en la otra persona, o cambio en sus emociones… Pero cuando el enfoque es puesto sólo en las circunstancias externas, las soluciones son raramente más que temporales y superficiales.” - Paul Tripp

5. El cambio de corazón lleva un cambio de vida. Despojar [“despojaos”] /renovar [“renovaos”] /vestir [“vestíos”] (Ef 4:22–24; Col 3:8–14)

Efesios 4:22–24 (RVR60)

En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,

y renovaos en el espíritu de vuestra mente,

y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.

Para vivir como nueva criatura es necesario dejar, abandonar y crucificar al hombre viejo.

Desechar todo deseo, el cual nos engaña a nosotros mismos, justificando con falsa piedad los deseos pecaminosos del corazón.

Jeremías 17:9 “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?”

1 Corintios 10:12 “Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga.”

Colosenses 3:8–14 (RVR60)

Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.

No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,

y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,

donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos.

Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;

soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.

Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.

Debemos dejar la forma de vivir del viejo hombre, dejando atrás las prácticas, pensamientos, costumbres, actitudes y todo aquello que tiene que ver con la carne y este mundo, y revestirnos del nuevo hombre en Cristo (nuevo nacimiento, nuevo corazón, nueva vida).

Quitar y poner, despojar y vestir; ese es el cambio bíblico.

Esto es una acción constante, es un diario vivir. Cada dia despojarnos un poco más de ese viejo hombre.

Salmo 19:9–11 RVR60

El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; Los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; Y dulces más que miel, y que la que destila del panal. Tu siervo es además amonestado con ellos; En guardarlos hay grande galardón.

Esto conduce a guardar Su Palabra.

Salmo 119:9 RVR60

¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.

Limpiar, es quitar todo estorbo, poder andar en el camino recto, angosto y justo.

1 Juan 1:9 (RVR60)

Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

El cambio no es algo externo, sino que, inicia en el corazón y a su tiempo da fruto (externo).

Confesar presupone un entendimiento de lo que hemos hecho mal y qué es lo bueno ante los ojos de Dios.

Sólo Dios puede limpiarnos de nuestra maldad.

Santiago 2:18 (RVR60)

Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.

La fe es evidente a todos los que le rodean, pues el árbol se conoce por su fruto.

Salmo 119:10–12 (RVR60)

Con todo mi corazón te he buscado; No me dejes desviarme de tus mandamientos.

En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti.

Bendito tú, oh Jehová; Enséñame tus estatutos.

Cuando el corazón se alinea a la voluntad de Dios, nuestros deseos, pensamientos y acciones persiguen ferozmente la santidad.

Es por la gracia de Dios que el hombre deja su pecado, no por la fuerza o conocimiento del hombre, sino por y en Dios.

¿Cómo hacer morir al viejo hombre (pecado)?

Romanos 8:13 (RVR60)

porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.

Si vives entonces morirás, si haces morir (acción directa) vivirás.

Conforme: De acuerdo a la carne, según los deseos de la carne, los pensamientos de la carne, la sabiduría de la carne.

El poder está en el Espíritu de Dios, quien nos capacita para toda buena obra.

Nosotros hacemos morir las obras de la carne por el Espíritu, dejando de lado y descalificada la obra de nuestras manos como el origen, sino que es algo que proviene (se origina) en Dios y se extiende hacia nosotros, haciéndonos partícipes de Su obra.

Debemos ordenar nuestra vida para no caer en el mismo pecado, en ese sentido, debemos hacer nuestra parte e el ejercicio de la santificación. Uir de la tentación.

Debemos organizar nuestra manera de vivir (día a día) de aceurdo a los prinipios, estatutos y directrices bíblicas, a fin de acercarnos a la santificación que es en Cristo.

Romanos 13:14 (RVR60)

sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.

Vestíos es una acción continua, en la que debemos continuar permanentemente.

No proporcionar lo que necesitan los deseos de la carne, a fin de no concretar o materializar esos deseos.

P. ej. ¿Qué debería hacer una persona que lucha contra el alcohol para no proveer para sus deseos de la carne? - No comprar alcohol o no meterse en una situación en la que esté expuesta su carne a complacer ese deseo.

Romanos 12:1–2 (RVR60)

Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

¿Cómo puedo hacerlo? -Estudiando Su Palabra.

Romanos 12:21 (RVR60)

No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.

Efesios 4:22–25 (RVR60)

En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,

y renovaos en el espíritu de vuestra mente,

y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.

Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros.

Colosenses 3:9–10 (RVR60)

No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,

y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno,

6. La santificación (perseverancia humana / providencia Divina) (Fil 2:12–13; 1 Co 15:10).

Filipenses 2:12–13 (RVR60)

Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor,

porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.

- La salvación es una obra de Dios, por completo, pero en el ejercicio de la santificación, Dios es quien la inicia, la sostiene y la culmina, pero en el camino, Dios nos exhorta a “ocuparnos” esforzarnos, luchar, perseverar en el camino de Su Palabra.

- Dios nos hace partícipes de la santificación, pero totalmente dependientes de Él.

1 Corintios 15:10 (RVR60)

Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.

- El trabajo es Divino y humano en conjunto, haciendo el cambio, la obra de Dios en mi.

- La regenreación, justificación, conversión y glorificación son obras de Dios por completo, la santificación es un esfuerzo conjunto empoderado por Dios.

- La consejería bíblica, si estamos bien fundados, evita los extremos de una pasividad mística (Dios hazlo en mi y yo me quedo quieto y callado) y por otro lado una autoconfianza legalista (yo puedo hacerlo todo, guardando las leyes y alcanzando las cosas {santificación} por mis fuerzas, como fariseo).

7. Un cuerpo en Cristo (Ro 15:14; Gal 6:1; Ef 4:15–16; Heb 10:24–25; Pr 12:15).

“Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado. ” -Gálatas 6:1

“sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor. ” - Efesios 4:15-16, RVR 1960

“Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. ” -Hebreos 10:24-25, RVR 1960

“El camino del necio es derecho en su opinión; Mas el que obedece al consejo es sabio.” -Proverbios 12:15, RVR 1960

Preguntas de reflexión:

¿Qué tanto medito en mis propios pensamientos?

¿Cuántas de mis desiciones son tomadas a la luz de la Palabra?

¿Cómo es mi actitud antes situaciones difíciles o personas específicas?

¿Soy nueva criatura?

¿Vivo conforme al Espíritu, la voluntad de Dios?

¿Qué puedo hacer hoy para cambiar eso?

¿Qué debo hacer para luchar y despojarme del viejo hombre que aún queda en mi?

¿Cuál es mi esperanza?

¿Dónde están puestos mis ojos?

¿Luchas contra el pecado?

¿Reconoces tu incapacidad?

Ejemplo: Naturaleza de cerdos.

Colosenses 3:12–14 (RVR60)

12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;

13 soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.

14 Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.