Un mensaje para los débiles

Introducción.

Algunos desean saber sólo por saber, eso es vulgar curiosidad. Otros lo desean para darse a conocer, eso es tonta vanidad.… Y otros desean saber para vender su ciencia, por ejemplo, para enriquecerse o recibir honores, eso es un negocio vergonzoso. Pero otros desean saber para edificar a los demás: eso es amor. Finalmente, otros desean saber para su edificación, y eso es prudencia. De todos estos grupos sólo los dos últimos son los que no son culpables de abusar de la sabiduría, pues sólo la desean para hacer el bien. Bernardo de Claraval

De la sabiduría se ha dicho mucho a lo largo de la Biblia, el libro de proverbios es una invitación constante a buscarla, de Salomón se dice que era un hombre muy sabio y que no hubo otro en la tierra como él, nosotros tenemos ejemplos de personas sumamente brillantes como Winston Churchill, Albert Einstein, Nicolas Tesla entre otros.

Quien no tiene sabiduria queda excluido de un grupo selecto, las personas que se asumen sabias o inteligentes son las que toman decisiones importantes y son tambien el objeto de la atención, ser sabio entonces es sinonimo de ser famoso o relevante.

Sin embargo, estos grupos de élite por lo regular menosprecian (no en todos los casos) a las personas menos preparadas, sus palabras parecen ser la última palabra y la opinión de quien no pertenezca a ese circulo parece ser silenciada rápida y violentamente.

Desarrollo

Tenemos ante nosotros un texto en donde el apostol Pablo procede a explicarnos lo que ha querido decir en los versos 10 al 17, en esa porción el apostol aborda el tema de las divisiones. La iglesia de Corinto estaba con rivalidades sobre quien los había bautizado, algunos por Cefas, otros por Pablo, otros por Apolos y otros (quizá los mas espirituales) decían que eran de Cristo pero actuban de una manera extraña por decir lo menos.

El apostol Pablo parece aliviado al decir que “él no bautizó a nadie” pero concluye que Cristo no lo envió a bautizar si no a predicar el evangelio, y la manera en la que él lo hace es sin discursos de sabiduria humana ya que el proposito era que la cruz de Cristo no perdiera su eficacia, no es que Pablo desprecie el bautismo o la sabiduría mas bien nos está diciendo que no ha puesto su confianza en lo que sabe sino en el mensaje de Cristo.

Una vez más tenemos que recordar que significa el evangelio, no se trata de una serie de normas sino se trata de Cristo y su cruz y como hemos visto anteriormente, la cruz no necesariamente tiene que hablar del sufrimiento y dolor (aunque si lo abarca) mas bien se trata del hecho de que el hijo de Dios, el Dios del universo haya decidido despojarse de su divinidad lo cual cualquier grecoromano entendería como el mayor acto de humillación.

Desde este punto es que parte el apostol Pablo en su explicación, la cruz es una locura y una insensatez; sin embargo este argumento para el apostol Pablo no es algo nuevo ya que él está haciendo referencias al antiguo testamento particularmente en el libro de Isaias.

De acuerdo a Simon Kistemaker en su comentario a la carta de corintios de las 17 citas al antiguo testamento que se hacen en esta carta, al menos 6 son del libro de Isaias, asi que el apostol Pablo sabe perfectamente que ya se habia profetizado por parte de Dios que la forma de conocerle no sería a través de la mucha sabiduria.

En este pasaje veremos a 2 tipos de escenarios:

Los que se salvan

Los que se pierden

Cada uno de estos grupos juega un papel directo con el mensaje de Cristo y con la Sabiduría de Dios, en primer lugar tenemos a los que se pierden, para ellos el mensaje es una locura. En este grupo podemos ver algunas caracteristicas sorprendentes, entre ellos están ¡los sabios, eruditos, filosofos e inteligentes!

¿Acaso no son ellos los que deberian dar crédito al mensaje de la Cruz? ¿o es que acaso en verdad el evangelio es para personas ignorantes y fáciles de engañar?

El apostol Pablo para nada está planteando que Dios desprecia al inteligente y exalta al inculto, de hecho muchos grandes hombres de fe han sido sumamente inteligentes, por ejemplo: R.C Sproul, C.S Lewis, J.R Tolkien, entre otros; sin embargo como ya vimos, el apostol tiene en mente a Isaias, y en especial al capitulo 19. En dicho cap. el Señor lanza una profecia de destrucción contra Egipto, están pronto a ser destruidos por un rey sin piedad pero la dura critica de Dios viene contra los sabios de ese pueblo y les dice Isaias 19:11-12

Isaiah 19:11–12 NVI

Los jefes de Zoán no son más que unos necios; los consejeros más sabios le dan a Faraón consejos insensatos. ¿Cómo se les ocurre decirle: «Yo soy uno de los sabios, discípulo de los antiguos reyes»? ¿Dónde quedaron tus sabios? Que te muestren y te hagan saber lo que el Señor Todopoderoso ha planeado contra Egipto.

Es decir, Pablo tiene en mente a aquellas personas que se hacen pasar por sabias en esta vida, pero que su sabiduría no es la que viene de lo alto. Para el apostol Pablo aquellos que no han tomado en cuenta a Dios han sido entregados a una mente reprobada, y esta mente no se trata de alguien que actua como un loco o un necio si no alguien que teniendo a la fuente misma de sabiduria frente a él, decide no creer.

Finalmente, tenemos al grupo que nos interesa, el grupo que se salva. Me gusta ver al Apostol Pablo metido en este grupo, él no deja pasar la ocasión. En el verso 18 dice: Para los que se salvan, es decir, nosotros”. Para el apostol Pablo la salvación no es algo que ocurre una vez y ya, si no es algo que se mantiene durante toda la vida, podriamos revisar Rom. 8:24 donde el apostol dice “porque fuimos salvados...” o tambien podemos ver en Rom. 5:9 cuando dice “Cuánto mas seremos salvos” y por último el texto actual, es decir la salvación ocurre en las 3 formas del tiempo. Pablo no deja pasar esta información porque su antitesis es que, quien no cree al mensaje de la cruz, ya se está perdiendo, no empezará a perderse cuando acabe esta vida, desde ahora, ha comenzado a perderse.

Para Pablo, la sabiduría humana solamente es agradable delante de Dios cuando se encuentra alineada con el mensaje de la cruz, fuera de eso, se trata unicamente de cosas sin valor o sin sentido, es más, esto ni siquiera es un capricho de Pablo, mas bien él nos dice que fue el mismo Dios quien dispuso que el ser humano no lo conocería por medio de su ciencia sino a través de lo que el mundo ha catalogado como una locura.

La sabiduria carnal ha puesto trampas a la fe, le ha puesto restricciones, Pablo menciona 2, dice que los judios piden señales y los gentiles sabiduria, sin embargo ni una ni otra van a encontrar en el evangelio puesto que Pablo y los demás predican a Cristo y a este crucificado (ya mencionamos a que se refiere con crucificado).

Conclusión.

Tengamos en cuenta el ejemplo de Egipto, no nos creamos mas sabios que Dios; para poder participar de la salvación y del nuevo pacto es necesario creer el mensaje de Cristo crucificado.

Podremos sentirnos como personas tontas o personas no aptas para ser llamadas “sabias”, pero Pablo nos deja una hermosa promesa, nos dice “consideren su propio llamamiento”, no muchos de ustedes son sabios, ni muchos son poderosos y menos de noble cuna pero (y aqui viene la gran noticia) pero Dios los escogió y lo ha hecho para avergonzar al mundo y a los que lo gobiernan, el proposito de esto es para que en su presencia nadie pueda jactarse de estar ahi por meritos propios.

Hoy nosotros no estamos excluidos del nuevo pacto, hoy nosotros, aunque algunos no sepan ni leer ni escribir o talvez se puedan considerar a si mismos como insignificantes, hoy podemos decir todos: Dios nos ha escogido.

No anhelemos la sabiduria del mundo porque de poco nos aprovechará, mejor decidamos negarnos a nosotros mismos, tomar nuestra cruz y seguir a Cristo.