Romanos 3:1-8 (3)
Notes
Transcript
Introducción
Introducción
La semana pasada examinamos la segunda objeción de los judíos contestada por el apóstol Pablo: ¿Qué tal si no creyeron? (vv.3-4)
Allí vimos la realidad de que la gran mayoría de Israel no creyó en Jesucristo y por tanto manifestó su incredulidad en las promesas del AT. Pensaron que Dios cambiaría de opinión porque ellos eran el pueblo elegido y tenían la fidelidad de Dios asegurada. Pero, Pablo resalta que sus promesas y bendiciones tienen condiciones y ellos no las cumplieron. Y, Dios es y será justificado en el juicio cuando condene a ellos por su incredulidad.
Desarrollo
Desarrollo
Hoy vamos a continuar con la siguiente objeción que tenían los judíos.
Vv.5-8 ¿No es Dios injusto?
Vv.5-8 ¿No es Dios injusto?
Romanos 3:5–8 (RVG)
5 Y si nuestra injusticia encarece la justicia de Dios, ¿qué diremos? ¿Será injusto Dios que da castigo? (Hablo como hombre.) 6 ¡En ninguna manera! De otro modo, ¿cómo juzgaría Dios al mundo? 7 Pero si por mi mentira la verdad de Dios abundó para su gloria, ¿por qué aún soy juzgado como pecador? 8 ¿Y por qué no decir (como somos difamados, y algunos afirman que decimos): Hagamos males para que vengan bienes? La condenación de los cuales es justa.
V.5 - Y si nuestra injusticia encarece la justicia de Dios, - Se refiere a los versos 3-4 dónde insinúan que la injusticia (incredulidad de los judíos) magnifica la justicia de Dios
…¿qué diremos? ¿Será injusto Dios que da castigo? - Si es así, Dios es injusto
V.6 - ¡En ninguna manera! - Pablo nuevamente rechaza la idea (3:4) de que Dios sea culpable de injusticia
…De otro modo, ¿cómo juzgaría Dios al mundo? - Si Dios es injusto, cómo puede juzgar correctamente al mundo
V.7 - Pero si por mi mentira la verdad de Dios abundó para su gloria, - Pablo refiere al verso 5, dónde la incredulidad/injusticia de los judíos magnifica la justicia y gloria de Dios
¿por qué aún soy juzgado como pecador? - Si mi pecado manifiesta, magnifica, y da gloria a Dios ¿Por qué Dios me castiga por mi pecado?
V.8 - ¿Y por qué no decir…Hagamos males para que vengan bienes? - Tiene más sentido que peco más para que mi pecaminosidad glorifique a Dios
(como somos difamados, y algunos afirman que decimos) - Parece que algunos esparcían el rumor que Pablo enseñaba que pecamos más para que se glorifique más a Dios y Pablo lo rechazó
Aplicación doctrinal
Dios no creó al hombre para pecar
13 Cuando uno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado con el mal, ni Él tienta a nadie; 14 sino que cada uno es tentado cuando de su propia concupiscencia es atraído, y seducido.
El hombre es pecaminoso como resultado de la caída de Adán y por tanto es su naturaleza
12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
Dios es un Dios justo
14 Justicia y juicio son el fundamento de tu trono: Misericordia y verdad van delante de tu rostro.
Dios no se complace en la condenación del hombre
23 ¿Quiero yo la muerte del impío? dice Jehová el Señor. ¿No vivirá, si se apartare de sus caminos?
32 Porque yo no quiero la muerte del que muere, dice el Señor Jehová, convertíos, pues, y viviréis.
No es su voluntad
9 El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento.
Aplicación práctica
Dios será glorificado por la desobediencia del hombre porque destaca la veracidad de su Palabra
Pero, Dios prefiere recibir gloria por su obediencia
22 Y Samuel dijo: ¿Tiene Jehová tanto contentamiento con los holocaustos y víctimas, como en obedecer a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios; y el prestar atención, que la grosura de los carneros.
Manifiesta nuestro amor de Dios
2 En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios y guardamos sus mandamientos. 3 Porque éste es el amor de Dios, que guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son gravosos.
Nuestra fidelidad a Dios
3 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos. 4 El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él;
Le glorifica en el mundo
12 manteniendo vuestra honesta manera de vivir entre los gentiles; para que, en lo que ellos murmuran de vosotros como de malhechores, al ver vuestras buenas obras, glorifiquen a Dios en el día de la visitación.
Abre camino para sus bendiciones en nuestra vida
17 Si sabéis estas cosas, bienaventurados seréis si las hiciereis.
Conclusión
Conclusión
Dios no es injusto. Si perece el hombre en la incredulidad, Dios será glorificado. Si perece el hombre en la fe, Dios será glorificado. Ambas situaciones destacarán la veracidad de su palabra. El uno resaltará la justicia de Dios. El otro resaltará la misericordia de Dios.