Sermón Funebre Socorro Calvo

Funerals  •  Sermon  •  Submitted   •  Presented
0 ratings
· 80 views
Notes
Transcript
Oh Señor, tú que eres el Padre de las misericordias y el Dios de toda consolación; Mira con compasión, te rogamos, por todos los aquí reunidos ahora, que nuestras mentes y corazones estén a tus órdenes. Concédenos que este servicio de consuelo, que ahora tenemos en tu nombre, traiga a todos un sentido de cercanía celestial y una gran confianza en ti. Y que la paz de Cristo, la paz que sobrepasa todo entendimiento, permanezca con nosotros y descanse sobre todos estos seres queridos. Oramos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Introducción
1. La familia quiere que les dé las gracias a todos por las atenciones de los últimos días. ‌
2. Propósito del funeral:
I.Estamos acá para rendir tributo a la vida de doña Socorro
A. En realidad, nadie puede predicar nuestro funeral; Predicamos nuestros propios funerales mientras vivimos.
Hebrews 11:4 NVI
Por la fe Abel ofreció a Dios un sacrificio más aceptable que el de Caín, por lo cual recibió testimonio de ser justo, pues Dios aceptó su ofrenda. Y por la fe Abel, a pesar de estar muerto, habla todavía.
B. Doña Socorro siempre será parte de las vidas, que él tocó. - Yo se que será así por Wendy y mi. (Nos sentimos agradecidos por la amistad que tenemos con Don José y doña Socorro. Nos respetaban como sus ministros, pero nos cuidaban como si fuéramos sus hijos… por eso cariños me faltarían palabras para expresar nuestra gratitud.
Romans 14:7 NVI
Porque ninguno de nosotros vive para sí mismo, ni tampoco muere para sí.
1. Todos los presentes somos diferentes por haber conocido doña Socorro.
2. Su vida continuará hablando cosas significativas a todos nosotros. ‌
Ella era la persona más dulce que jamás hayas conocido, pero de carácter… no crías 8 hijos a ser personas de bien sin carácter.
3. Ella era tan orgullosa de sus hijos y nietos, eran sur corona de gloria… cada visita comenzaba con los updates de la familia, íbamos al cuarto de atrás donde nos mostraron las photos de las ocho familias y nos contaban de todo lo que estaba pasando con cada quien. Así nos sentimos contactados aun con las familias que nunca habíamos conocido.
C. Ahora nos toca a nosotros contar con cariño la historia de la vida de doña Socorro.
II. CONSOLAR LA FAMILIA.
2 Corinthians 1:3–4 NVI
Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación, quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones para que con el mismo consuelo que de Dios hemos recibido, también nosotros podamos consolar a todos los que sufren.
A. Independientemente de cuán profunda sea nuestra fe personal en Dios y en Su providencia, la muerte de un ser querido hace que cada uno de nosotros sienta profundamente la pérdida personal. ‌ Hay una sensación de un vacío doloroso cuando pensamos en alguien que amamos y que se ha ido. Echamos de menos la compañía de nuestros seres queridos y nuestro dolor es profundamente personal. ‌
Como petición muy personal, les encomiendo a Don José. Ellos caminaron 68 años juntos y él va a necesitar de cada uno de nosotros. Los hombres muchas veces necesitamos ser salvados de nosotros mismos, y yo fui testigo de como ella Socorro pudo ayudar a José con una sonrisa oportuna o con una palabra de amor en el momento preciso. Nosotros jamás podríamos reemplazar su presencia, pero debemos servir de compañía.
B. El consuelo de amigos y seres queridos.
1. En momentos de soledad y tristeza, la presencia de amigos y seres queridos puede ser muy significativa. Cierta fuerza viene de la presencia cercana y personal de aquellos que nos son queridos. ‌
2. El apoyo y la simpatía de los amigos son una maravillosa fuente de fortaleza. Debido a que todos pertenecemos a la gran hermandad de Jesucristo, podemos animarnos y fortalecernos unos a otros.
3. Hay algo muy hermoso en el momento de nuestro dolor personal acerca de las muchas expresiones de simpatía y los muchos pequeños actos de bondad que aquellos que son amigos, parientes y hermanos en Cristo hacen por nosotros y así muestran que se preocupan. ‌
4. Hoy en día, esta familia puede sentir en las muchas expresiones de bondad y consideración que se muestra tanto cuidado y simpatía, y están agradecidos.
C. El tiempo es un gran consolador.
1. Dios ha dispuesto misericordiosamente que la profunda herida que sentimos inicialmente cuando nuestros seres queridos nos dejan pueda sanarse de alguna manera con el paso de los días, los meses y los años. Esto no quiere decir que nuestro dolor no sea genuino y profundo. ‌
2. El tiempo puede ayudarnos a recuperarnos de la conmoción y a tratar de enfrentar nuestra propia tarea en la vida con el espíritu y la devoción que Dios aprobaría. ‌
3. En lugar de llenar nuestro hoy con miradas anhelantes hacia el ayer, Dios quiere que avancemos con entusiasmo hacia nuevos mañanas. ‌ 4. El tiempo puede sanar un corazón roto
D. Dios nuestro Consolador Supremo.
1. Independientemente de lo que hagan los amigos y seres queridos o de lo que el tiempo nos depare, Dios es nuestra fuente suprema de consuelo. A los que están abatidos, Él viene a levantar nuestros espíritus decaídos. Él nos llama a encontrar refugio en Él.
Psalm 55:2 (NVI)
¡Óyeme y respóndeme,
porque mis angustias me perturban!
Me aterran
2. Por medio de Jesucristo, Dios nos ha dado el mayor ayuda disponible.
Hebrews 4:16 NVI
Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos.
Dios también nos da una vía de consuelo al permitirnos acercarnos confiadamente al trono de Su gracia para recibir misericordia y gracia para sostenernos en nuestra necesidad presente.
1. La oración es una puerta abierta a la presencia del Todopoderoso. ‌
2. A menudo nos vemos atraídos allí cuando tenemos necesidades que expresar a un Padre que se preocupa por nosotros y que ha demostrado cuánto se preocupa por Él.
III. LA MUERTE ES UN RECORDATORIO.
A. Valor del duelo. La Biblia enseña que debemos tener pensamientos sobrios acerca de la vida y la muerte.
Ecclesiastes 7:1 (NVI)
Vale más el buen nombre
que el buen perfume.
Vale más el día en que se muere
que el día en que se nace.
Ecclesiastes 7:2 (NVI)
Vale más ir a un funeral
que a un festival.
Pues la muerte es el fin de todo hombre, y los que viven debieran tenerlo presente.
Ecclesiastes 7:3 (NVI)
Vale más llorar que reír;
pues entristece el rostro,
pero le hace bien al corazón.
Ecclesiastes 7:4 (NVI)
El sabio tiene presente la muerte;
el necio sólo piensa en la diversión.
Ecclesiastes 7:5 (ESV)
It is better for a man to hear the rebuke of the wise than to hear the song of fools.
B. Los funerales nos recuerdan que la muerte está muy cerca de todos nosotros. David dijo hace mucho tiempo:
1 Samuel 20:3 (NVI)
Pero David juró y perjuró:
—Tu padre sabe muy bien que tú me estimas, así que seguramente habrá pensado: “Jonatán no debe enterarse, para que no se disguste.” Pero tan cierto como que el Señor y tú viven, te aseguro que estoy a un paso de la muerte.
Es un paso que todos debemos dar.
C. Los funerales nos obligan a reflexionar sobre el verdadero valor de la vida.
Job 14:1 (NVI)
»Pocos son los días, y muchos los problemas,
que vive el hombre nacido de mujer.
D.Cuatro hechos que tenemos que enfrentar: ‌
1. Estamos envejeciendo
2. Cosechamos lo que sembramos
3. Debemos morir
4. Hay un juicio
Hebrews 9:27 NVI
Y así como está establecido que los seres humanos mueran una sola vez, y después venga el juicio,
1 Corinthians 4:3–4 NVI
Por mi parte, muy poco me preocupa que me juzguen ustedes o cualquier tribunal humano; es más, ni siquiera me juzgo a mí mismo. Porque aunque la conciencia no me remuerde, no por eso quedo absuelto; el que me juzga es el Señor.
E. La muerte física debe impresionarnos con la finalidad de la muerte eterna.
1. La muerte será destruida un día.
Revelation 21:4 NVI
Él les enjugará toda lágrima de los ojos. Ya no habrá muerte, ni llanto, ni lamento ni dolor, porque las primeras cosas han dejado de existir.»
1 Corinthians 15:26 NVI
El último enemigo que será destruido es la muerte,
Romans 6:9 NVI
Pues sabemos que Cristo, por haber sido levantado de entre los muertos, ya no puede volver a morir; la muerte ya no tiene dominio sobre él.
John Milton: "La muerte es la llave de oro que abre el palacio de la eternidad.
1 Corinthians 15:21–22 NVI
De hecho, ya que la muerte vino por medio de un hombre, también por medio de un hombre viene la resurrección de los muertos. Pues así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos volverán a vivir,
Conclusión:
Querido Dios, te pedimos que sanes a los quebrantados de corazón y vendes sus heridas; Mira misericordiosamente a los que están afligidos en este momento. Estad cerca de ellos en su dolor, y dejad que su dolor los acerque más a vosotros. Ahora que las alegrías y el consuelo terrenales fallan, que las cosas invisibles y eternas se vuelvan más reales, más presentes, más llenas de significado y poder. Deja que tu fuerza sostenga su debilidad; y tu paz llena sus mentes de perfecta confianza en ti; por Jesucristo nuestro Salvador. Amén.
Al lado de la tumba
Psalm 23 (NVI)
Salmo de David.
El Señor es mi pastor, nada me falta;
en verdes pastos me hace descansar.
Junto a tranquilas aguas me conduce;
me infunde nuevas fuerzas.
Me guía por sendas de justicia
por amor a su nombre.
Aun si voy por valles tenebrosos,
no temo peligro alguno
porque tú estás a mi lado;
tu vara de pastor me reconforta.
Dispones ante mí un banquete
en presencia de mis enemigos.
Has ungido con perfume mi cabeza;
has llenado mi copa a rebosar.
La bondad y el amor me seguirán
todos los días de mi vida;
y en la casa del Señor
habitaré para siempre.
Psalm 46:1–3 (NVI)
Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza,
nuestra ayuda segura en momentos de angustia.
Por eso, no temeremos
aunque se desmorone la tierra
y las montañas se hundan en el fondo del mar;
aunque rujan y se encrespen sus aguas,
y ante su furia retiemblen los montes. Selah
John 5:28–29 NVI
»No se asombren de esto, porque viene la hora en que todos los que están en los sepulcros oirán su voz, y saldrán de allí. Los que han hecho el bien resucitarán para tener vida, pero los que han practicado el mal resucitarán para ser juzgados.
Amado Dios, mientras estamos junto a esta tumba abierta, en esta silenciosa ciudad de los muertos, entregamos este cuerpo a la tierra, y encomendamos el espíritu, junto con todos los sagrados intereses de nuestros corazones, a tu cuidado, orando para que trates con gracia y misericordia a cada uno de nosotros, hasta que nosotros también lleguemos a nuestro lugar de descanso final. por las riquezas de la gracia en Jesús nuestro Señor. Amén
Related Media
See more
Related Sermons
See more