2 Co. 5:21 | Sus tunicas por las mías
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Contexto
En 2 Co. 5: 18-21 encontramos:
4 declaraciones del ministerio de Reconciliación que nos animan a predicar de Cristo.
El fuente de toda reconciliación es Dios (v. 18)
La reconciliación es suficiente para toda salvar la humanidad (v. 19)
La reconciliación demanda una aceptación voluntaria (v. 20)
La reconciliación revela la justicia de Dios (v. 21)
Job se preguntaba, ¿como se justificará el hombre?
2 Ciertamente yo sé que es así; ¿Y cómo se justificará el hombre con Dios?
4 ¿Cómo, pues, se justificará el hombre para con Dios? ¿Y cómo será limpio el que nace de mujer?
4 ¿Quién hará limpio a lo inmundo? Nadie.
El jovén Rico
16 Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna?
Naturalmente el ofendido va y busca el perdón, pero en el caso de Dios es al contrario… Él es el ofendido y Él mismo busca la reconciliación. Eso también lo enseñó Jesús en Mateo 18:15
15 Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano.
La reconciliación es un regalo de Dios, pero se quiere una respuesta en FE a esa oferta de parte de Dios(v. 20)
“os rogamos” - 2 veces a aparece este termino. Habla de una suplica a los hombres, no ordenar sino rogar amorosamente. No hay cuadro más hermoso que el Dios Creador este rogando por medio de sus siervos que el hombre se reconcilie con ÉL. ¡Amor sublime, amor maravilloso!
Sus tunicas por las mías
Sus tunicas por las mías
21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
- La reconciliación revela la justicia de Dios (v. 21)
¿Cómo es que un Dios Justo y Santo puede relacionarse con pecadores como nosotros sin comprometer su Santidad? El v. 21 es la respuesta...
Hay una sola manera de como poder estar en paz con Dios, este versiculo resume el evangelio, la esencia de la expiación. Esta hermosa transacción que ocurrió en la cruz
¿Cómo se puede explicar el cambio de ese veredicto? De culpables a inocentes. Es ahí donde entra la doctrina de la Justificación. La Biblia enseña que la justificación es el puente entre el pecado y la salvación (Ro. 3). Y es por ese acto misericordioso y salvífico de justificación que podemos estar delante de Dios ya no avergonzados por el pecado, sino con plena confianza de poder acercarnos a Él (He. 4:16). No por merito humano, sino que Cristo ha hecho posible con su vida perfecta y obra de sacrificio en la cruz que algunos pecadores sean aceptados y amados por el Padre; los escogidos (Ef. 1:5).
Dios toma lo peor de nosotros (pecado) y no da lo mejor de Jesús (Su Justicia).
El toma algo que nos pertenece y nos dá algo que le pertenece a su Hijo.
Increible intercambio en la cruz de Cristo.
13 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados,
13 En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, 14 que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.
Bosquejo:
Este texto nos muestra 3 involucrados en la Justificación
El autor de la justificación: Dios el Padre.
El sustituto de la justificación: Jesús el Hijo.
Los beneficiarios de la justificación: Nosotros sus escogidos.
1. El autor de la justificación: Dios el Padre
1. El autor de la justificación: Dios el Padre
La biblia mencioná que fue Dios quien decreto todo plan Divino para redimirnos.
16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
23 a éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole;
11 En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad,
Dios no pasó por alto los pecados, sino que trató a su hijo como el pecador y recibió toda la ira del Padre (2 Co. 5:21), clavándolo en la cruz y dándole muerte (Hch. 2:23), esa muerte es la ofrenda perfecta y definitiva que exigía el Dios justo y eterno (He. 10:12, 14). Por eso Cristo es el justo y justificador que el pecador necesita y ahora puede tener una estrecha relación con Él gracias a Cristo.
2. El sustituto de la justificación: Jesús el Hijo
2. El sustituto de la justificación: Jesús el Hijo
El ser humano, por sus esfuerzos y méritos no puede agradar en nada a Dios, incluso el profeta Isaías mencionó que aún lo bueno que el ser humano pueda hacer esta corrompido delante de la perfección absoluta de Dios (Is. 64:6). Es por esa razón que era necesario un sustituto en semejanza al hombre (He. 2:17), pero sin pecado para que pueda ser una ofrenda perfecta a Dios (2 Co. 5:21). Los sacrificios ordenados por Dios en el AT no cubrían definitivamente la culpa de los pecados (He. 10:4, 11), solamente funcionaban como una sombra de lo que vendría en el cumplimiento de la promesa (Col. 2:17).
El Señor Jesucristo es el único instrumento o medio de justificación (Ro. 5:1, Jn. 1: 12), porque solo Él fue quien cumplió de manera perfecta la ley de Dios (Mt. 5:17-18). Cristo, por su obediencia y muerte, pagó totalmente la deuda que estaba en contra de los escogidos (Col. 2:14).
46 ¿Quién de vosotros me redarguye de pecado? Pues si digo la verdad, ¿por qué vosotros no me creéis?
15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.
5 Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él.
3. Los beneficiarios de la justificación: Sus escogidos
3. Los beneficiarios de la justificación: Sus escogidos
18 Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu;
1 Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. 2 Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño.
1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
7 para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna.
Necesitabamos de la expiación:
10 Porque convenía a aquel por cuya causa son todas las cosas, y por quien todas las cosas subsisten, que habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionase por aflicciones al autor de la salvación de ellos.
La naturaleza de la expiación:
SACRIFICIO: SUSTITUTIVO
PROPICIACIÓN: OFRENDA PERFECTA QUE CALMÓ LA IRA DE DIOS
RECONCILIACIÓN: QUITÓ LA ENEMISTAD Y AHORA HAY PAZ
REDENCIÓN: COMPRADOS, RESCATADOS DEL PECADO
CONQUISTA: DERROTO EL PECADO, LA MUERTE Y A SATANAS.
1 ¿Quién ha creído a nuestro anuncio? ¿y sobre quién se ha manifestado el brazo de Jehová? 2 Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos. 3 Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos. 4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.