EL CHISME
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Los chismes. Una verdad mal usada puede acarrear problemas y resultados catastróficos. A la verdad dicha con mala intención, fuera de lugar y tiempo, y sin razón, se la conoce como chisme. El chismoso por lo general no es mentiroso, pero peca de mentiroso cuando no investiga la procedencia de las palabras y las suelta de manera irresponsable, sin medir las consecuencias. Por ello, en primer lugar, al chismoso no se le debe confiar ningún secreto, por la simple razón de que todo lo cuenta (Proverbios 11:13), se le hace imposible guardar el secreto. Es muy importante no juntarse con esa clase de gente (Proverbios 20:19).
Don Chismoso. Es elque investiga todos los chismes, y habla de todos los chismes que investiga. Esta persona es un peligro contra la unidad del cuerpo de Cristo. Elmejor remedio para esta persona lo tiene Salomón, en Prov. 16:28: “El hombre perverso levanta contienda, y el chismoso aparta a los mejores amigos”.
chismoso destruye la unidad dentro del liderazgo y dentro de la congregación. ¡Que nadie vote por él o por ella!
El chisme es propiedad de los necios (Proverbios 10:18b). Además, por la falta de sensatez, elnecio destruye las amistades (Proverbios 16:28b). Ante circunstancias como estas, es muy importante que la persona sabia no se deje enredar en los lazos del chisme. El chisme es muy sutil, pues viene disfrazado con máscara de noticia informadora y con aparente buena intención: “Te digo esto de Fulanito, pero no se lo digas a nadie; es para que lo ayudes, si puedes”:
Los chismes son deliciosos manjares; penetran hasta lo más íntimo del ser (Proverbios 18:8; ver Proverbios 26:22). Por ello, no hay mejor manera de frenar el chisme que parar en seco al que lo trae y confrontarlo amablemente: Sin leña se apaga el fuego; sin chismesse acaba el pleito (Proverbios 26:20).
La mentira difiere del chisme desde su raíz. Todo su recorrido, desde quien lo dice hasta quien lo recibe, está señalado por la falsedad y con ello se muestra el propósito claro de herir o de sacar provecho de algo, o de encubrir un hecho real. Por seo está entre las siete cosas que aborrece el Señor (Proverbios 6:16–19). Proverbios dice que la mentira está en boca de los perversos (Proverbios 16:27), malvados, bribones, sinvergüenzas (Proverbios 6:12–14) y, obviamente, los mentirosos (Proverbios 12:22): “El testigo falso se burla de la justicia; el malvado lanza maldad por la boca” (Proverbios 19:28 dhh). “El malvado es un horno de maldad; ¡aun sus palabras parecen llamas de fuego!” (Proverbios 16:27 dhh). Y, como pasa con los chismes, la mentira siembra discordias y divide amistades y produce sufrimiento:
“Hay gente mala y sinvergüenza
que anda contando mentiras;
Esa gente sólo piensa hacer lo malo,
y siempre anda provocando pleitos” (Pr 6:12–14 tla).
Lo mejor que se puede hacer es apartar de uno la
lengua y los labios tramposos y mentirosos (Pr. 4:24).
Existe otro tipo de palabras que no son del todo chisme, pero tampoco mentira; son una mezcla de ambos; lo que el cantautor argentino, Alberto Cortez, llama “mezcla de avispa con alacrán”. Al que generalmente las dice no se le puede tildar de chismoso o mentiroso; es más bien el charlatán, elque juega con los sentimientos del otro, elque no sabe hasta dónde llegan los límites, es falto de tacto y sus palabras pueden ser ocasionadas por diversas circunstancias. En elcalor de una disputa profiere palabras que enardecen más al otro (Pr. 15:1b); habla más de la cuenta (Pr. 12:18a), o para lograr un provecho personal y egoísta usa la adulación (Pr. 26:23; 29:5).
Las palabras que construyen
La palabra que se ajusta a la verdad y se dice con la mejor intención produce resultados positivos y beneficiosos. He aquí un florilegio de proverbios que destilan un excelente aroma:
El testigo verdadero declara lo que es justo (Pr. 12:17a)
La lengua de los sabios destila conocimiento (Pr.15:2a)
Los labios de los sabios esparcen conocimiento (Pr.15:7a)
Los labios del justo orientan a muchos (Pr.10:21a)
Hay gozo para los que promueven la paz (Pr.12:20b)
La lengua del sabio brinda alivio (Pr 12:18b)
Fuente de vida es la boca del justo (Pr.10:11a).
La palabra no solo debe ser verdadera y decirse con buena intención: también debe decirla con tacto y precaución. Quien es sabio y sensato sabe qué decir y cuándo decirlo. Quien puede manejar bien su sentido común y un poco de sensibilidad hacia el prójimo también tiene tacto y es comedido. Para esta cualidad Proverbios ha escogido una de las máximas más bellas que se puedan escuchar: Como naranjas de oro con incrustaciones de plata son las palabras dichas a tiempo (Pr. 25:11). La buena palabra es sagrada y de gran precio; sus efectos y beneficios siempre buscan el mejor momento y apuntan al resultado positivo. El proverbista aprecia al que habla con sensatez y tacto: Es muy grato dar la respuesta adecuada, y más grato aún cuando es oportuna (Pr.15:23). Saber responder y hablar en el momento oportuno no solo causa alegría al que lo hace, sino que también produce la mejor sensación y emoción en quien la recibe: Una respuesta sincera es como un beso en los labios (Pr.24:26). Esa palabra buena, dicha en el momento oportuno, también debe ser suave y amable y buscar el bien (Pr.15:1, 4): Panal de miel son las palabras amables; endulzan la vida y dan salud al cuerpo (Pr.16:24; ver Pr.12:25; 25:15). En relación con esto es importante indicar que el libro provee una buena cantidad de imágenes para describir la palabra buena: