ESCUCHEMOS Y OBREMOS SEGUN LA ESTRATEGIA DE DIOS

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INTRODUCCIÓN

Pretender usar una estrategia fija y universal para los diferentes pueblos que se desean evangelizar es un error. Este enfoque da por sentado que la misma estrategia que se usa con buenos resultados en un lugar se podrá usar acertad amente donde sea.
Por eso es importante conocer la realidad cultural e ideológica aquí en la llagosta. Es importante hacer un estudio de la zona en cuanto a que grupos étnicos la componen, que piensa acerca de Dios, cual es el nivel económico, que partido político (PSOE) gobierna, que preocupaciones tienen los jóvenes y los ancianos, saber si hay lugares donde se practica ciencias ocultas, conocer si hay otros grupos cristianos, incluso el nivel de paro(10,30), el número de habitantes(13111), que hace la gente en su tiempo libre..etc.
Esto se hace mediante encuestas.
Una vez que conocemos la realidad del municipio, pidamos a Dios que nos de su estrategia para ganar almas, porque el objetivo prioritario es ese. Evidentemente los que estamos aquí que ya somos iglesia, al mismo tiempo debemos ser cada vez más como Jesús, esa es nuestra otra gran meta.
Pero para no ir dando palos de ciego, para no hacer las cosas con nuestra humana sabiduría, aunque muchas son buenas e incluso pueden dar resultados, Dios tiene preparadas estrategias para que actuemos y el fruto sea el que el quiere, como el quiere y cuando el quiera.
Y pensé en dos ocasiones en las que Dios da instrucciones al pueblo de Israel en el antiguo testamento para derrotar a sus enemigos.

GEDEON

Nueva Traducción Viviente (Capítulo 7)
7 Entonces el SEÑOR le dijo a Gedeón: «Con estos trescientos hombres, rescataré a Israel y te daré la victoria sobre los madianitas
Nueva Traducción Viviente (Capítulo 7)
Esa noche el SEÑOR le dijo: «¡Levántate! ¡Desciende al campamento madianita, porque te he dado la victoria sobre ellos! 10 Pero si tienes miedo de atacar, desciende al campamento con tu siervo Fura. 11 Escucha lo que dicen los madianitas, y cobrarás mucho ánimo. Entonces estarás ansioso por atacar».

13 Entonces Gedeón se acercó sigilosamente, precisamente cuando un hombre le contaba un sueño a su compañero.

—Tuve un sueño —decía el hombre— en el cual un pan de cebada venía rodando cuesta abajo hacia el campamento madianita; ¡entonces cuando golpeaba una carpa, la volteaba y la aplastaba!

14 Su compañero le respondió:

—Tu sueño sólo puede significar una cosa: ¡Dios le ha dado a Gedeón, hijo de Joás, el israelita, la victoria sobre Madián y todos sus aliados!

15 Cuando Gedeón oyó el sueño y la interpretación, se inclinó en adoración ante el SEÑOR. Luego regresó al campamento israelita y gritó: «¡Levántense, porque el SEÑOR les ha dado la victoria sobre las multitudes madianitas!». 16 Así que dividió a los trescientos hombres en tres grupos y le dio a cada hombre un cuerno de carnero y una vasija de barro con una antorcha adentro.

17 Después les dijo: «Fíjense en mí. Cuando yo llegue al límite del campamento, hagan lo mismo que yo. 18 En cuanto yo y los que están conmigo toquemos los cuernos de carnero, ustedes también toquen sus cuernos alrededor de todo el campamento y griten: “¡Por el SEÑOR y por Gedeón!”».

19 Fue apenas pasada la medianoche, después del cambio de guardia, cuando Gedeón y los cien hombres que iban con él llegaron al límite del campamento madianita. Entonces de un momento al otro, tocaron los cuernos de carnero y rompieron las vasijas de barro. 20 Enseguida los tres grupos tocaron juntos los cuernos y rompieron las vasijas. Con la mano izquierda sostenían la antorcha ardiente, y en la mano derecha llevaban el cuerno, y todos gritaban: «¡Una espada por el SEÑOR y también por Gedeón!».

21 Cada hombre permaneció en su puesto alrededor del campamento, y observaron cómo los madianitas corrían de un lado a otro, llenos de pánico y gritando mientras se daban a la fuga. 22 Cuando los trescientos israelitas tocaron los cuernos de carnero, el SEÑOR hizo que los guerreros del campamento pelearan entre sí con sus espadas.

Dios le rebeló a Gedeón, en este caso el líder de como derrotar a los enemigos, con el mínimo de hombres posibles, para que vieran que la victoria venía de Dios.
Dios confundió a los enemigos de Israel, Dios le dió la estrategia a Gedeón que acompañado de 300 hombres hicieron lo que tenían que hacer y Dios le dió la victoria. Dios dio la estrategia y el pueblo la puso por obra.
Esto me hablaba de que Dios quiere que le escuchemos, además el no necesita demasiadas cosas o gente para hacer su voluntad. En este caso fueron 300 y en el Nuevo testamento fueron 12 los apóstoles +Pablo.
Muchas veces pensamos que somos pocos, pero poco en manos de Dios y con la estrategia de Dios puede hacer mucho. Además sabemos que no somos nosotros sino que es el poder de Dios actuando, es el Espíritu Santo obrando en las vidas y trayendo convicción de pecado,justicia y juicio.

JOSUE 6

Nueva Traducción Viviente (Capítulo 6)
La caída de Jericó
1 Ahora bien, las puertas de Jericó estaban bien cerradas, porque la gente tenía miedo de los israelitas. A nadie se le permitía entrar ni salir. 2 Pero el SEÑOR le dijo a Josué: «Te he entregado Jericó, a su rey y a todos sus guerreros fuertes. 3 Tú y tus hombres de guerra marcharán alrededor de la ciudad una vez al día durante seis días. 4 Siete sacerdotes caminarán delante del arca; cada uno llevará un cuerno de carnero. El séptimo día, marcharán alrededor de la ciudad siete veces mientras los sacerdotes tocan los cuernos. 5 Cuando oigas a los sacerdotes dar un toque prolongado con los cuernos de carnero, haz que todo el pueblo grite lo más fuerte que pueda. Entonces los muros de la ciudad se derrumbarán, y el pueblo irá directo a atacar la ciudad».

De repente, los muros de Jericó se derrumbaron, y los israelitas fueron directo al ataque de la ciudad y la tomaron.

Una vez más Dios le dijo a Josué como llegar a conquistar Jericó
Le especificó como debían marchar y cuantas veces, finalmente se derrumbaron los muros.
Me llama la atención cuando dice que las puertas de Jericó estaban bien cerradas, nadie podía entrar ni salir.
A veces vemos que no se convierte la gente, aunque salimos a evangelizar, aunque oramos,e incluso ayunamos.
Parece que los corazones están tan cerrados como las puertas de Jericó, pero si Dios nos da la estrategia para que los corazones sean abiertos al evangelio todo cambia. Ya sé que hay cosas generales reveladas en su palabra que nos guían, pero cada ciudad es diferente, cada ciudad tiene fortalezas específicas, poderes que atan las vidas, que las ciegan para no ver su realidad espiritual, su condición delante de Dios. No ven su necesidad de Dios.
En esta tarde clamemos que Dios abra nuestros ojos y oídos , nos de sus estrategias para poder hacer las acciones que el sabe nos darán la victoria, aunque parezcan ridículas. Pidamos a Dios que haga su obra en este pueblo y sus alrededores y que use nuestras vidas.
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