Hay un Tiempo para Todo

Introducción

Muy buenos días, me da mucho gusto estar con ustedes en esta mañana, en una reunión que es muy especial porque estamos de celebración.

Quiero que algún niño me diga ¿qué celebramos el día de hoy?

Muy bien… Hoy celebramos el día del niño. Y para ello, quiero ver cuántos niños tenemos hoy aquí en la iglesia.

¡Excelente! Hoy queremos festejarlos y tengo un mensaje para ustedes, y para sus papás.

(Ver si pueden pasar al frente y me puedo sentar con ellos). Preguntarles como se llaman.

Bueno el mensaje se puede aplicar a todos, pero quiero dedicarlo a ustedes, los chavos.

Hoy vamos a hablar un poco acerca de un rey que vivió hace muchos años y que se llamó Salomón. Este rey era hijo de otro rey también muy famoso, que era el rey David.

¿Quien me puede decir algo del rey Salomón?

Muy bien, el rey Salomón construyó el templo de Jerusalén, que fue el lugar donde por muchos muchos años los israelitas, adoraron a Dios. Cuando los israelitas iban al templo, era como para nosotros hoy, venir a la casa de Dios.

Además Salomón escribió varios libros o parte de varios libros.

Por ejemplo escribió en libro que se llama Cantar de los Cantares. Escribió una gran parte de otro libro que se Proverbios, y también otro libro que se llama Eclesiastés, que significa El Predicador.

Todos estos libros forman parte de un grupo de libros de la Biblia que se les llama libros de sabiduría, porque en ellos encontramos conocimiento, y sobre todo la manera de usarlos para que nos ayuden a llevar una mejor vida.

Y miren, déjenme les cuento que muchos consideran a Salomón como la persona más sabia, más inteligente, que haya pisado esta Tierra.

Una de las mejores enseñanzas que nos regala la Biblia en el libro de Eclesiastés (¿qué dijimos que significa Eclesiastés? Muy bien, significa Predicador); repito, una de las mejores enseñanzas que nos regala la Biblia en el libro de Eclesiastés, que escribió Salomón, es que en la vida hay un tiempo para todo.

Porque miren, entender que hay un tiempo para todo, y sobre todo, ponerlo en práctica, traerá muchas bendiciones para nosotros y para la gente que nos rodea.

Hoy vamos a estar estudiando varios versículos del capítulo 3 del Eclesiastés, pero antes de dar inicio, les pido por favor que hagamos oración.

ORACIÓN

Les voy a pedir que abran sus Biblias en el libro de Eclesiastés ya que ahí estaremos leyendo varios versículos, y el primero que vamos a leer es precisamente el primero. Eclesiastés 3:1 y lo voy a leer en la Traducción en Lenguaje Actual, y dice así:

“En esta vida todo tiene su momento; hay un tiempo para todo”

Eclesiastés 3:1 TLA

Y el primer punto en el que quiero que meditemos hoy es que:

1. Entender este principio me ayudará a enfocarme mejor en todas mis actividades

“… hay un tiempo para plantar, y un tiempo para cosechar…” v.2b

“… hay un tiempo para guardar silencio, y un tiempo para hablar…” v.7b

¿Quiero preguntarle a los chavos? Díganme un lugar donde deben guardar silencio (la iglesia, el salón de clase); ahora díganme un lugar donde pueden hablar sin restricciones (el recreo, el parque).

Como ven hay momentos y lugares donde debemos estar callados y en otros donde podemos hablar.

Quiero hacerle una pregunta a los niños. ¿Qué actividades les gusta hacer?

Jugar Play Station, ir al cine, jugar futbol. Muy bien.

Ahora a los papás, cuéntenme ¿Qué les gusta hacer?

Estar con la familia, salir a comer, ver la televisión, el futbol.

Chavos:

Ahora, aquí entre nos, papás tápense los oídos y cierren los ojos. ¿Qué cosas no les gusta hacer pero deben hacerlas?

No me vayan a decir venir a la iglesia, jaja. Ir a la escuela, levantar su cuarto, ayudar a sus papás en los quehaceres del hogar.

Papás:

Y ¿qué no les gusta hacer?

No me vayan a decir trabajar, jaja. Estar a dieta, hacer ejercicio, hacer reportes de gastos.

En la vida hay ciertas actividades que nos gusta hacer, y hay otras que debemos hacerlas porque son tal vez nuestra obligación, o son para ser más saludables, o más inteligentes, etc.

Así que en ocasiones hacemos cosas que nos gustan, y en otras ocasiones tenemos que hacer cosas que (tal vez no nos gusten) pero son nuestra obligación, o bien las debemos hacer porque nos dan algún beneficio.

Y aquí la primera enseñanza es que siempre hay un tiempo para todo, y cuando hagamos algo, nos guste o no nos guste, enfoquémonos en aquello que estoy haciendo.

Chavos: Cuando estamos en la escuela, olvídate de otras cosas y dedícate totalmente a la escuela. Si estás en la tarde haciendo la tarea, o estudiando, enfócate totalmente en ello. No estés pensando que estás perdiendo tu programa de televisión.

Pero cuando estés jugando en la calle al futbol o cuando juegues al Play Station o XBox, enfócate en eso. Disfruta ese tiempo.

Y pasa lo mismo con los papás, si estás en la oficina, olvídate de las redes sociales, a menos que sea LinkedIn.

Y si estás en casa, enfócate en tu esposa, en tus hijos, olvídate del trabajo, y también olvídate de las redes sociales.

Y todos, papás, chavos, si están en la iglesia, olvídense del Instagram, X, Reddit, Facebook, WhatsApp.

Porque si nos enfocamos en lo que estamos haciendo le sacaremos un mejor provecho.

Creo que yo tengo una cosa que se llama déficit de atención, que dicho en términos más sencillos es que me distraigo muy fácilmente. Digamos que pasa la mosca y me distraigo.

Y bueno, si tu eres de los míos, déjame darte varios consejos para que te puedas enfocar mejor; toma nota porque éstos puntos no están en el bosquejo:

a) Establece objetivos claros sobre lo que quieres lograr. Tengo que hacer una maqueta de un volcán.

b) Divide las tareas grandes en otras más pequeñas y manejables. Puedo comenzar formando la planicie, después el volcán, más tarde la lava, tal vez unos cuantos árboles, etc.

c) Crea un horario y cúmplelo lo mejor que puedas. Me voy a dedicar de las 4 a las 6 de la tarde.

d) Busca un lugar tranquilo para trabajar donde no te interrumpan. Voy a estar en mi cuarto donde no hay TV para no distraerme.

e) Avísale a los demás que necesitas tiempo para concentrarte. Le voy a decir a mis papás que por favor me ayuden no pidiéndome que les haga algo en ese lapso.

f) Toma descansos cuando los necesites, pero evita desviarte. Cuando descanses, no te pongas a hacer algo que interrumpa lo que estás haciendo.

¿Te digo un secreto? si logras enfocarte con estos seis pasos para, por ejemplo hacer tus tareas, vas a poder terminar de una manera más rápida y te permitirá salir a jugar más pronto.

Regresemos al pasaje que estamos estudiando:

(“En esta vida todo tiene su momento;) hay un tiempo para todo”

Eclesiastés 3:1 TLA

Esto me lleva al segundo punto:

2. Entender este principio me ayudará a comprender mejor cada etapa de mi vida

“… hay un tiempo para esparcir piedras, y un tiempo para juntar piedras, hay un tiempo para abrazarse, y hay un tiempo para dejar de abrazarse (hay un tiempo para las bienvenidas, y hay un tiempo para las despedidas)…” v.5

Esta chistoso lo que dice Salomón de que hay un tiempo para esparcir piedras y otro para juntar piedras. Y alguno pensará, pobrecito de Salomón, vivió hace tres mil años, pues no había Wii, Disney+, ni XBox, ni Play Station, el pobre seguramente se entretenía juntando y esparciendo piedras.

Pero lo que el sabio rey quiere decir con esta frase es que en la vida hay diferentes etapas.

Déjenme les cuento. Nosotros somos cuatro hermanos. Yo soy el mayor, después de mi vienen unos gemelos, y después mi hermano menor.

(comentar foto)

Quiero que imaginen mi casa cuando estábamos pequeños.

Pobre de mi madre antes no acabó loca. Porque lo que no se le ocurría a uno, se le ocurría al otro.

Y cuando uno no estaba haciendo alguna travesura (chavos no sean traviesos), alguno ya se andaba peleando con un vecino (chavos no se peleen con los vecinos) o peleando entre nosotros (chavos no se peleen con sus hermanos), o había algún descalabrado, o alguno que se había cortado la rodilla.

Pobrecita de mi mamá.

Y mi mamá le decía a su Pastor: “ya quiero que estos chamacos crezcan”; y el pastor pacientemente le respondía: “Ay hija, hijos chicos, problemas chicos, hijos grandes problemas grandes”.

Ahora, chavos, no quiero decir que cuando crezcan van a tener más problemas. No va por ahí. Lo que quiero decir es que cada etapa de la vida es diferente. Y lo importante es vivir cada etapa y disfrutar cada etapa, sin querer brincarnos a otra, ni tampoco querer quedarnos estancada en alguna.

¿A ti qué te gustaría ser o estudiar cuando seas grande?

Miren, cuando yo estaba estudiando ingeniería en la universidad, yo pensaba: ojalá pronto pueda acabar la carrera para ya trabajar de ingeniero, ¿y qué creen que pasó? que cuando acabé la carrera y empecé a trabajar de ingeniero, quería que aun estuviera estudiando.

En el pasaje que leímos dice que “hay un tiempo para abrazar, y hay un tiempo para dejar de abrazarse”, lo que nos indica que hay momentos en los que podemos estar juntos y otros en los que no.

Hay un estudio que dice que el 75% del tiempo que los hijos pasan con sus padres es hasta antes de los 12 años, porque ya de los 13 en adelante se vuelven más independientes.

Yo creo que si ustedes son papás de jóvenes recordarán que de niños los chiquitines se dejaban abrazar, besuquear, pero llega la adolescencia (niños no oigan) y parece que les damos alergia, roña, urticaria. Ya no quieren abrazarnos, o que estemos con ellos. Los abrazos se van perdiendo.

O no se diga de cuando los hijos se van del hogar.

Déjenme les cuento que hace tres años nuestro hijo menor se fue a vivir a Monterrey porque allá está la carrera que está estudiando y mi otra hija que está allá, la tenemos ahora de visita porque ella vive fuera de México. Así que por ahora a mi hijo no lo puedo abrazar, y posiblemente en unas semanas a mi hija tampoco, pero entiendo que son etapas de la vida.

Así que chavos, aprovechen cada etapa de la vida. Ahora que están con sus papás disfrútenlos. Pasen tiempo con ellos.

Y también, para los chavos, déjenme les digo que en ocasiones queremos crecer muy rápido, hacer cosas de grandes, para sentirnos grandes. No lo hagan, no es necesario, disfruten cada etapa de su vida; disfruten su niñez, su adolescencia, su juventud, su vida profesional, y las diferentes etapas que siguen después.

Y papás, si tus hijos son pequeños, aprovecha esta etapa para abrazarlos, besarlos, sacarte fotos con ellos, salir con ellos, tagearlos en tus redes sociales, porque después crecen y en ocasiones hasta te borran de sus redes sociales, jaja.

Y así como le digo a los chavos que no se apresuren en crecer, también les digo a ustedes, no se apresuren en hacerlos crecer, porque en ocasiones, en nuestro deseo de hacerlos madurar, los estiramos y les exigimos de más, o los exponemos o ponemos frente a cosas o situaciones que no corresponden a su edad, y eso a la larga afecta.

Y como papás tenemos dos peligros:

a) A un niño tratarlo como adulto, o

b) A un adulto tratarlo como un niño.

Regresemos al pasaje que estamos estudiando:

(“En esta vida todo tiene su momento;) hay un tiempo para todo”

Eclesiastés 3:1 TLA

Esto me lleva al tercer punto:

3. Entender este principio me ayudará a vivir una vida plena en este mundo.

“… Dios lo hizo todo hermoso para el momento apropiado...” v.11a

Dios lo hizo todo hermoso para cada etapa de la vida. Para la niñez. Para la juventud. Para la edad adulta. Para la vejez. Cada etapa del ser humano debe ser vivida adecuadamente, y con pleno agradecimiento a Dios por ella.

El salmo 90:12 dice: Enséñanos a entender la brevedad de la vida, para que crezcamos en sabiduría.

¿Qué significa esta preciosa oración de Moisés? Significa que necesitamos sabiduría para entender y vivir cada etapa de nuestra vida.

¿Cuántos años tienes? ¿Cuál es tu etapa de vida? Creo firmemente que una vida plena es aquella que es vivida entendiendo su particular etapa.

- Si eres niño, ¡disfruta ser niño! ¡Se pasa rapidísimo! Juega, ríe, aprende, estudia.

- Si eres joven, ¡disfruta ser joven! ¡Es increíble la juventud! Ten muchos amigos.

- Si eres adulto, ¡disfruta ser adulto! ¡Compórtate como tal! No añores el tiempo que ya pasó, disfruta esta etapa de tu vida.

- Si eres anciano, ¡disfruta ser anciano! ¡Lleno de experiencia y sabiduría! Comparte tu conocimiento con otros.

Porque miren, enfocarnos nos permite tener una atención plena en el momento y eso nos permite disfrutar mejor. Y obviamente honrar a Dios con nuestra vida y disfrutar de Él y de lo que nos rodea.

Finalmente, regresando al pasaje que estamos estudiando:

(“En esta vida todo tiene su momento;) hay un tiempo para todo”

Eclesiastés 3:1 TLA

Y concluyo con el 4o punto:

4. Entender este principio me ayudará a honrar a Dios en cada área de mi vida, y disfrutar de Él por la eternidad

“…Él sembró la eternidad en el corazón humano…” v.11b

Es interesante que en los versículos que hemos estado leyendo, el rey Salomón, esta refiriéndose a lo que hay que hacer en momentos presentes, en tu etapa de vida, en la edad que tengas, en el momento que tengas que hacer algo. Y de repente da un brinco hacia lo eterno.

El Espíritu Santo, inspirando a Salomón nos quiere recordar que hay una vida más allá de ésta y además, mucho mejor que esta. Y Dios ha sembrado esa idea en el corazón del ser humano. La idea de la eternidad.

Y creo que lo importante que Salomón quiere resaltar es que, como hijos de Dios fuimos llamados a ser sabios y aprovechar a plenitud la vida que el Señor nos regala aquí y ahora, a disfrutarla; pero sin olvidar que nuestro verdadero hogar es la eternidad.

¡Que Dios nos permita vivir así! ¡Que Dios nos permita vivir sabiamente cada tiempo y lugar en esta vida, mientras esperamos con paciencia la eternidad que Jesús ha ganado para nosotros!

Y cierro diciéndoles esto: el versículo 11, del capítulo 3 del Eclesiastés captura la complejidad de la vida y todas sus etapas. Dios está obrando en todo y en cada etapa de tu vida para Su propósito específico en nuestras vidas.

Dios nos ha dado el deseo de querer comprenderlo todo, pero, si seguimos leyendo el v. 11 del capítulo 3, dice “aun así el ser humano no puede comprender todo el alcance de lo que Dios ha hecho desde el principio hasta el fin” (NTV).

Este es un recordatorio de Salomón de que no somos Dios, y es algo que nos motiva a confiarle todo lo que no sabemos de nuestras etapas de vida.

No sabemos qué nos depare el futuro, pero si sabemos Quien controla el futuro, y ese es nuestro Padre Celestial.

ORACIÓN HIJOS CON PAPÁS