Padeció Bajo el Poder de Poncio Pilato
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Introducción
Introducción
Muchos escépticos han afirmado que el cristianismo está equivocado en cuanto al concepto que tenemos acerca de Jesús.
Dicen que realmente existen dos Jesús - el Jesús de la fe cristiana y el Jesús histórico.
Según ellos, el Jesús histórico no fue más que un maestro de la región de Galilea que intentó predicar un mensaje de bondad; pero que finalmente murió en su intento.
Ellos afirman que los primeros cristianos comenzaron a atribuir a Jesús ciertas características como divinidad, el poder de hacer milagros, la resurrección, etc., que Jesús mismo nunca se atribuyó.
Afirman sobre todo que los autores de los evangelios están narrando la vida de Jesús pero han introducido toda clase de leyendas (como los milagros) que se desarrollaron mucho tiempo después.
A final de cuentas, el escéptico dice - el Jesús que creen en muchas iglesias cristianas conservadoras es un Jesús que nunca existió, no es el mismo Jesús que vivió en Israel hace 2,000 años.
Ellos afirman que nosotros creemos en un Jesús inventado.
Pero, nos damos cuenta que los autores de los evangelios sitúan la vida y ministerio de Jesús en el primer siglo, en el norte de Israel (la región de Galilea), y dentro de un contexto histórico.
¿Si los evangelios están contaminados con leyenda, fabulas, o mitos acerca de Jesús porque se empeñaron los evangelistas a mencionar ciertos detalles del primer siglo?
Hoy, Marcos nos transporta al primer siglo, a la fortaleza de Antonia, en Jerusalén, para conocer al procurador romano - Poncio Pilato.
Si este evangelio es solo una leyenda, no hay razón para incluir este detalle.
La gente podría haber investigado este detalle y confirmar que esto nunca sucedió.
De la misma manera podrían haber investigado todos los demás detalles (los milagros, las sanidades, la expulsión de demonios), y darse cuenta que todo fue leyenda.
Pero, no fue sí. Marcos introduce este detalle, nos da a conocer el juicio de Jesús ante Poncio Pilato para demostrar que este y todos lo demás que ha escrito acerca de Jesús fueron hechos reales que ocurrieron en la vida terrenal de Jesús de Nazaret.
Hoy veremos:
Poncio Pilato - el hombre
Poncio Pilato - el investigador
Poncio Pilato - el político
Poncio Pilato - el hombre
Poncio Pilato - el hombre
Marcos introduce esta sección:
1 Muy de mañana, los principales sacerdotes prepararon enseguida una reunión con los ancianos, los escribas y todo el Concilio; y atando a Jesús, lo llevaron y lo entregaron a Pilato.
Jesús ha sido arrestado en el Getsemaní por las autoridades judías lideradas por Judas.
Fue enjuiciado por el consejo judío durante la madrugada del viernes. Ellos acusan a Jesús de blasfemia.
64 »Han oído la blasfemia; ¿qué les parece?». Y todos lo condenaron, diciendo que era digno de muerte.
Jesús, el versículo 62 dice ser el Yo soy, el Hijo del hombre, y el que vendrá en las nubes del cielo.
Jesús acaba de afirmar que él no es un mero ser humano - es Dios mismo.
Por tanto, el fallo de esta corte es que Jesús sea ejecutado.
No olvidemos que Israel vivía bajo la ocupación romana.
Los judíos no podían ejercer la pena de muerte sin el permiso de los romanos. Tienen que llevarlo ante las autoridades romanas y llevar a cabo un juicio.
Esto iba a ser un juicio complicado porque los judíos están condenado a Jesús por cuestiones religiosas.
Los romanos tenían leyes que prohibían hablar mal de los dioses. Pero, en este caso, Jesús no ha hablado mal en contra de los dioses romanos.
Así que llegan los líderes religiosos judíos para que Jesús sea juzgado por Poncio Pilato.
Jesús está atado de manos y golpeado (a causa de los golpes de los judíos).
Comparece ante el procurador de Samaria y Judea. Poncio Pilato habría sido instalado por el emperador romano - Tiberio.
Tenemos algunos informes acerca de Poncio Pilato.
Sabemos que era un hombre “inflexible, falto de misericordia, y obstinado”.
Tenía el reto de controlar la región de Samaria y Judea.
No sería una tarea fácil ya que los habitantes eran judíos y el era un hombre pagano / idolatra.
Poncio Pilato se había hecho odiar por los judíos ya que usó el tesoro del templo para construir un acueducto que trajera agua a Jerusalén.
También insultó a los judíos al introducir escudos romanos (con insignias de ídolos romanos) en el templo de Jerusalén.
Así que Jesús está cara a cara con un hombre odiado por los judíos, pero a la misma vez es el que tendrá que autorizar que Jesús sea ejecutado.
Poncio Pilato - el investigador
Poncio Pilato - el investigador
Así que Poncio Pilato ha de tener que hacer su propia investigación de los hechos y ver si Jesús de Nazaret ha hecho algo digno de muerte.
2 «¿Eres Tú el Rey de los judíos?», le preguntó Pilato. «Tú lo dices», respondió* Jesús.
Marcos no lo menciona, pero los líderes judíos tuvieron que haber dicho a Pilato cual era el crimen que, según ellos, Jesús ha cometido.
En este caso, no sale el cargo del juicio religioso - ellos lo acusaron de blasfemo, de hacerse igual a Dios, de destruir el templo y que en tres días lo volvería a construir.
Estos cargos no serían imputables en una corte romana.
Ahora entendemos porque acusan a Jesús de decir que él es el rey de los judíos.
Esta declaración era un crimen grave ante las autoridades romanas.
Decir que uno es el rey de los judíos era sinónimo de decir que el emperador Tiberio no era la máxima autoridad de los judíos.
Esto sería declarar al imperio romano como una autoridad ilegítima en Israel.
De hecho, se saben de varias rebeliones contra el imperio romano.
Así que el crimen del que se le acusa a Jesús es decir que él es el rey de los judíos - un crimen contra la autoridad y gobierno romano.
Pilato interroga a Jesús para investigar si en verdad esto es cierto. Jesús responde:
2 «¿Eres Tú el Rey de los judíos?», le preguntó Pilato. «Tú lo dices», respondió* Jesús.
Jesús con dos palabras sencillas en griego - responde “Tú dices”.
Algunos creen que Jesús trata de evadir la pregunta y responde - Tú eres el que dices que yo soy el rey de los judíos.
Pero, creo que es preferible tomar esta respuesta como:
Pilato pregunta si Jesús es el rey de los judíos, pero en la mente de Pilato un rey es alguien como el emperador Tiberio, alguién como Herodes, alguién como él mismo.
Un rey es una persona que con fuerza militar logra controlar una región.
Un rey es una persona que vive entre lujos a costas del pueblo.
Un rey es una persona que vive en un palacio rodeado por comodidades.
Un rey es una persona que pretende imponer su voluntad a la fuerza.
En cambio, el auto concepto de Jesús como rey, como el elegido, como el enviado de Dios no tiene nada que ver con estos conceptos. Por eso, Juan registra a Jesús decir:
Jn 18.36
36 Jesús le respondió: «Mi reino no es de este mundo. Si Mi reino fuera de este mundo, entonces Mis servidores pelearían para que Yo no fuera entregado a los judíos. Pero ahora Mi reino no es de aquí».
El reinado de Jesús no es según el concepto humano de un reino.
El reino de Jesús no se alinea a los valores terrenales / humanos.
El reino de Jesús es un reino espiritual que trae vida, libertad, paz, perdón de pecados, y la vida eterna.
Así que intervienen los judíos y dan una lista de acusaciones contra él.
3 Y los principales sacerdotes lo acusaban de muchas cosas.
No sabemos exactamente cuales fueron las “muchas cosas” de las que acusan a Jesús.
Lo que Marcos registra es lo que hace Pilato para corroborar las acusaciones.
4 De nuevo Pilato le preguntó: «¿No respondes nada? Mira de cuántas cosas te acusan»
5 Pero Jesús no respondió nada más; de modo que Pilato estaba asombrado.
Pilato espera que Jesús se defienda.
Lo peor que podría hacer una persona en una corte romana es mantener silencio.
El que se mantiene callado y no se defiende entonces se asume que es culpable de las acusaciones.
Debe responder, por lo menos debería responder que no es culpable.
Y esto asombra a Pilato.
Pilato se asombra porque si en verdad Jesús es un rey, debería mostrar una actitud de rebelión, presentar una defensa, o por lo menos rechazar las acusaciones para salir libre y mantener vivo su movimiento / su causa.
A final de cuentas, Pilato ha exhaustado su investigación.
14 Y Pilato les decía: «¿Por qué? ¿Qué mal ha hecho?». Y ellos gritaban aún más: «¡Crucifícalo!»
Pilato determina que Jesús no ha hecho nada digno de muerte.
Jesús podría ser culpable de asuntos religiosos, entre los judíos, pero la corte romana no puede ni debe condenar a un hombre que no ha hecho algo digno de ser condenado a morir.
Poncio Pilato - el político
Poncio Pilato - el político
Los romanos creían en la diosa Justicia.
De hecho, la imagen de esta diosa se conoce en muchos lugares.
Es una mujer con un antifaz en los ojos, una bascula en la mano derecha, y una espada en la mano izquierda.
La idea es que la justicia es ciega.
El deber de la justicia es hacer justicia evaluando de manera correcta la parte acusadora y defensora; sin permitir el soborno o mostrar parcialidad hacía una u otra parte - y así impartir justicia.
Pero, en Marcos 15 nos damos cuenta que Pilato falla en su deber.
No práctica la justicia ciega; más bien, muestra su habilidad política y lleva a cabo un juicio injusto; toma una determinación movido por su deseo de mantener su propio poder.
En primer lugar, vemos que Pilato no está convencido del cargo contra Jesús.
Los judíos dicen que Jesús dice ser que es el rey de los judíos.
Pero Pilato solo ve a un hombre atado, golpeado, ante él.
Es más, es un hombre que ni siquiera ha abierto la boca para defenderse de todas las demás acusaciones contra él.
Así que Pilato ve una salida a esto:
6 Ahora bien, en cada fiesta Pilato acostumbraba soltarles un preso, el que ellos pidieran.
7 Y uno llamado Barrabás había sido encarcelado con los rebeldes que habían cometido homicidio en la insurrección.
8 Cuando la multitud subió, comenzó a pedirle a Pilato que hiciera como siempre les había hecho.
9 Entonces Pilato les preguntó: «¿Quieren que les suelte al Rey de los judíos?»
10 Porque sabía que los principales sacerdotes lo habían entregado por envidia.
En cada fiesta Pilato concedía amnistía a un preso.
Así que esta era la oportunidad de liberar a Jesús - sobre todo a uno que no hecho algo digno de muerte.
La multitud exige que en esta fiesta, la Pascua, se haga lo mismo.
Pilato podría aprovechar este momento para convencer a la multitud de que Jesús sea liberado.
Esto sería fácil ya que los que odian a Jesús son los principales sacerdotes - ellos le tienen envidia.
Ellos tienen envidia porque la multitud cada día sigue más y más a Jesús.
Ellos tienen envidia porque Jesús ha cautivado la atención y los corazones de la gente.
Así que Pilato hace la pregunta - quizá esperando que respondan que debe liberar a Jesús.
Pero los sacerdotes no pierden el tiempo:
11 Pero los principales sacerdotes provocaron a la multitud para que le pidiera que en vez de Jesús les soltara a Barrabás.
Los sacerdotes ejercen su propia influencia sobre la multitud y los convencen para que exijan la liberación de Barrabás.
Barrabás el que había participado en una rebelión donde hubieron muertos.
Este hombre si era culpable de muerte y seguramente sería ejecutado.
12 Pilato les preguntó: «¿Qué haré, entonces, con el que ustedes llaman el Rey de los judíos?»
13 Ellos le respondieron a gritos: «¡Crucifícalo!»
14 Y Pilato les decía: «¿Por qué? ¿Qué mal ha hecho?». Y ellos gritaban aún más: «¡Crucifícalo!»
15 Pilato, queriendo complacer a la multitud, les soltó a Barrabás; y después de hacer azotar a Jesús, lo entregó para que fuera crucificado.
Así que la multitud exije la liberación de Barrabás y demandan que Jesús sea ejecutado.
Pero, veamos el versículo 15:
Pilato suelta a Barrabás, azota a Jesús, lo condena a morir, y lo entrega a los judíos para que sea crucificado.
Al principio los judíos entregan a Jesús a Pilato (15:1) y ahora Pilato entrega a Jesús a los judíos para ser crucificado (15:15).
Todo esto lo hace Pilato para complacer a la multitud.
Su única motivación es congraciarse con los judíos.
Es un mero ejercicio político para mantener su poder sobre los judíos.
Todo esto ha sido una farsa, ha sido un acto de corrupción, una injusticia del más alto nivel.
La justicia no fue ciega, la justicia ha alzado la espada contra un inocente y ha dejado libre a un asesino rebelde que podría volver a cometer el mismo crimen.
En cambio, el justo, el inocente, el bondadoso, es azotado y condenado a morir.
Conclusión
Conclusión
Muchas personas dicen que ellos creerían en Jesús:
Si tan solo se les apareciera cara a cara
Creerían en Jesús si no tuvieran frente a ellos.
Dicen, ¿Cómo puedo creer en alguien a quien nunca he mirado con mis propios ojos?
Pero, este fue el caso de Pilato.
Tuvo a Jesús frente a él.
Lo vio cara a cara.
Lo interrogó.
Le exigió que se defendiera.
Es más, llegó a la conclusión de que Jesús no había hecho nada digno de muerte.
Pilato tuvo a Jesús frente a él, y a la conclusión que llegó fue:
Debo preservar mi poder.
Debo condenar al inocente a muerte.
Debo azotar al que no ha cometido ningún mal.
Y en Pilato vemos la corrupción del corazón del ser humano.
El hombre no cree en Jesús porque no tenga suficientes pruebas o evidencias de la existencia de Dios.
El hombre no cree en Jesús porque ama su poder, ama su pecado, ama su propia voluntad.
El hombre no cree en Jesús porque es esclavo de sí mismo.
Se requiere el milagro del nuevo nacimiento para que el hombre reconozca su pecado y confiese fe en el inocente que fue condenado - en Jesús de Nazaret.
Pero veamos algo también - los judíos entregaron a Jesús a Pilato y luego Pilato entrega a Jesús para ser ejecutado.
Parece que Jesús es la víctima indefensa y los que realmente tienen el poder son los judíos y los romanos.
Pero, no olvidemos que es el Padre quien entregó a su Hijo para morir por nosotros.
10 Pero quiso el Señor Quebrantarlo, sometiéndolo a padecimiento. Cuando Él se entregue a Sí mismo como ofrenda de expiación, Verá a Su descendencia, Prolongará Sus días, Y la voluntad del Señor en Su mano prosperará.
En otras palabras, todo esto está ocurriendo para que el inocente muera por el pecado de los que lo condenaron, para que muera por aquellos ciegos que aman más su pecado que al inocente.
El Padre entregó a su Hijo inocente para redimir a un pueblo rebelde y perdido.
Pilato muestra su falta de fe, su amor a sí mismo, aunque el autor de la vida estaba frente a él.
Al final de su vida, Pilato intentó detener a unos samaritanos liderados por un falso profeta. Su caballería mató a varios.
Así que presentaron una queja ante el emperador. Pilato fue despuesto de su cargo.
Pilato tuvo que ir a Roma para responder ante los cargos que se presentaron.
Eusebio, uno de los padres de la iglesia, nos dice que Pilato murio por suicidio, mientras iba a Roma - avergonzado de haber sido depuesto de su cargo.
Si esto fue así, nos damos cuenta como Pilato fue un hombre vacío cuyo única motivación principal en su vida era su poder y al final muere un hombre solo, derrotado, sin propósito.
…a pesar de haber tenido ante él - al que podría haber rescatado su vida y darle la esperanza de la vida eterna.