Salmos 42

Título: “La oración de uno que conoce a su Dios"

Propósito: Animar al cristiano a retomar la comunión con Dios y hacer de ella algo constante en su vida.

Pasajes bíblicos principales: Salmos 42.

Versículo de tarea: Salmos 42:1.

Repaso de la lección anterior:

¡Qué bueno es saber que Dios piensa en nosotros! Su bondad y misericordia nos alcanzan todos los días. Gracias al Señor que dispone Sus infinitos recursos para nuestro beneficio. ¡Bendito sea Su Nombre!

Oración Pidiendo sabiduría al Señor para saber asimilar el contenido de esta lección de la Palabra de Dios.

Introducción:

La oración contenida en el salmo que estudiaremos hoy nos conducirá al tema de la comunión con Dios. La comunión con Dios es algo muy valioso que sólo el cristiano verdadero puede tener. Desde su conversión hasta su muerte, el creyente podrá disfrutar de esa bendición, sin embargo, es algo que podemos perder si no tenemos cuidado.

Aquel cristiano que ya ha gozado de la comunión con Dios la extrañará cuando la haya perdido y procurará restablecerla, pero aquel que nunca le ha tomado aprecio, no la echará de menos ni podrá decir lo que dice el salmo que hoy estudiaremos.

La oración de uno que conoce a su Dios. Sal. 42

1. La oración inicia con una figura. Sal. 42:1 -3

1.1 Para expresar el anhelo por la comunión con Dios. Sal. 42:1, 2

■ Un Dios Vivo a diferencia de los ídolos.

1.2 Para expresar su condición de exiliado. Sal. 42:3

1.3 Para expresar el peso de las críticas.

2. La oración prosigue con una memoria. Sal. 42:4, 5.

2.1 De la hermosa comunión que tenía con Dios.

2.2 De la maravillosa bendición de trabajar para Dios.

2.3 De la preciosa esperanza que tenemos en Dios.

3. La oración continúa con una decisión. Sal. 42:6-8

3.1 Dios será su constante meditación. Sal. 42:6

■ Jordán es el río que nace en las faldas del monte Hermón y el monte Mizar es uno desde el cual se puede contemplar toda esa extensión.

3.2 Las pruebas por las que está pasando se suceden una tras otra. Sal. 42:7

3.3 El seguirá confiando y esperando en Dios. Sal. 42:8

4. La oración termina con una petición. Sal. 42:9-11

4.1 Expresando el profundo dolor de su alma. Sal. 42:10

4.2 Expresando la acusación de la que es objeto. Sal. 42:10

4.3 Refiriéndose a Dios como su Roca. Sal. 42:9

4.4 Exhortando a su alma a confiar en Dios. Sal. 42:11

Conclusión:

La oración es clave para la comunión con Dios, para eso nos fue dada, si vamos a orar no será sólo para pedir y pedir sino para tener comunión con Aquel que todo lo hizo por nosotros.