Jesús sana a un hombre de la mano seca en día de reposo
El Señor Jesús confronta a los fariseos de 2 maneras en cuanto al día de reposo. Al comer espigas sus discípulos y al sanar a un hombre de la mano seca. Jesús demuestra que Él es Señor del día de reposo.
Jesús sana a un hombre de la mano seca en día de reposo
Lectura Bíblica
I. La Controversia
II. El Ataque
III. Jesús defiende lo correcto.
El comentarista William Hendriksen dice: “Tal vez sea seguro deducir que la pregunta hecha por Jesús al momento nos indica que había una legislación particular que permitía esto”. En cualquier caso, la pregunta de Jesús fue retórica y la respuesta era obvia y sobreentendida: Cualquier judío, incluso un fariseo, encontraría alguna manera de rescatar a su oveja en tal situación. Si había una regulación que le permitía hacer eso, esta persona sin duda la aprovecharía. De no haberla, encontraría alguna forma de eludir o torcer la ley a fin de salvar a su oveja. Sea dentro de la tradición o a pesar de ella, el sujeto hallaría un modo de echarle mano a la oveja y levantarla. Los fariseos no argumentaron el punto con Jesús, demostrando así que la respuesta sobreentendida era correcta.
La conducta ética es siempre mucho más importante que la obediencia ceremonial.