El mejor regalo que podemos dar a nuestros hijos

Introduccion:

2 Timoteo 1:3–6 “3 Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día;4 deseando verte, al acordarme de tus lágrimas, para llenarme de gozo;5 trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.6 Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.”

Hoy es un día verdaderamente especial, ya que nos hemos reunido para celebrar y anticipar la llegada del bebé de Brenda, quien pronto dará a luz a Pablo Moisés. Este momento está lleno de alegría, amor y esperanza. En un baby shower, las tiendas están llenas de regalos, y las familias y amigos se unen para compartir momentos inolvidables. Pero más allá de los obsequios materiales, hay algo mucho más valioso que una madre puede dejar a su hijo: un legado espiritual.

La verdad , Cuando hablamos de legado, muchas veces pensamos en dejar a nuestros hijos casas, propiedades, dinero y otras cosas materiales, o estudios , o darle la mejor ropa etx . Pero la Palabra de Dios nos enseña que estos bienes no duran para siempre. Jesús mismo dijo que las riquezas materiales (Mateo 6:19-20 En cambio, un legado espiritual, como una fe genuina, tiene un valor eterno.

Mateo 6:19–20 (RVR60)

19 No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; 20 sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.

Hoy, queremos reflexionar sobre el tipo de herencia que Brenda puede dejar a su hijo, Pablo Moisés. bla bla…. mama de una niña etc. no es algo nuevo…

En la Biblia, encontramos el ejemplo de mujeres como Loida y Eunice, que dejaron una huella imborrable en la vida de Timoteo al transmitirle una fe sincera y profunda.

Este es el tipo de legado que Dios desea que dejemos a nuestros hijos: una fe genuina y viva.

ORACION

Contexto Bíblico

2 Timoteo 1:1-2: "Pablo, apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, según la promesa de la vida que es en Cristo Jesús, a Timoteo, amado hijo: Gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y de Jesucristo nuestro Señor."

Pablo escribe esta carta a Timoteo, su amado hijo en la fe. Timoteo es considerado el principal discípulo de Pablo. Cuando Pablo escribió esta carta, estaba preso en Roma y su ejecución estaba cercana. A pesar de estar en una situación difícil, su mayor preocupación era Timoteo y el éxito del ministerio del evangelio.

2 Timoteo 1:3-4: "Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día; deseando verte, al acordarme de tus lágrimas, para llenarme de gozo."

Pablo no solo amaba a Timoteo, sino que oraba constantemente por él. Recordaba las lágrimas de Timoteo y deseaba verlo para llenarse de gozo. Pablo quería animar a Timoteo a seguir adelante en la obra del Señor, recordándole el gran amor y misericordia de Cristo.

2 Timoteo 1:5: "Trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también."

Que importante fue, el camino fue el camino fue el camino que preparo EUNICE Para que Pablo trabajara como un hombre como timoteo.

La respuesta a la pregunta de qué tenía de especial Timoteo se encuentra en este versículo: tenía una fe no fingida, una fe genuina que habitó primero en su abuela Loida y luego en su madre Eunice. Este es el legado más grande que puedes dejar a tus hijos, Es el mayor legado Brenda que puedes dar a Pablo Moises: una fe genuina.

LO MAS GRANDE QUE PODEMOS DEJAR A NUESTROS HIJOS ES ESA FE.

ENTONCES HERMANAS COMO DEJAR ESA FE GENUINA A NUESTROS HIJOS?

1) SER DE TESTIMONIO

2 Timoteo 1:5: "Trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también."

El testimonio de los padres es esencial para guiar a sus hijos en los caminos del Señor. Eunice dejaron una fe genuina en Timoteo.

La fe no fingida de Eunice fue un ejemplo claro para su hijo, llevándolo a seguir los pasos de Cristo con sinceridad y devoción.

Como madres, nuestro testimonio puede tener un impacto profundo en la vida de vuestros hijos.

La primera vez que se habla de Eunice es en:

Hechos 16:1-3: “1Después llegó a Derbe y a Listra; y he aquí, había allí cierto discípulo llamado Timoteo, hijo de una mujer judía creyente, pero de padre griego; 2y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio.

El apóstol Pablo RECONOCIO que en Timoteo había un tipo especial de fe que se había transmitido de generación en generación, LOIDA Y EUNICE

Era tan evidente que pudo ver reflejado en el carácter del joven a dos personas, a su abuela Loida, y a su madre Eunice.

En la formación de Timoteo, ambas influyeron; pero sin duda el papel de la madre fue vital.

Loida había preparado eficazmente a su hija Eunice para los caminos del Señor, y partió al cielo con la tarea cumplida.

Y por el resultado, observamos que Eunice se preocupó diligentemente de transmitir a su hijo los valores y principios que harían de él un muy buen cristiano. El testimonio de los padres es esencial para encaminar a vuestros hijos e hijas en los caminos del Señor.

“la fe no fingida que hay en ti”, en otras palabras, la fe no hipócrita. Eunice, como madre, puso todos sus esfuerzos para que la fe de su hijo Timoteo fuera honesta, y deducimos que la mayor motivación que tuvo el muchacho para creer en Cristo Jesús con sinceridad, fue ver a su madre seguir los pasos del Maestro con fidelidad y devoción.

Eunice como madre es un ejemplo a seguir en cualquier época.

Su fe no fingida llevó a su hijo Timoteo a que le sea un hombre fiel y grande para Cristo. Que bendicion tener un hijo asi.

Desde pequeñito fue testigo de la manera en que su madre practicaba la fe, era la misma en todo lugar, sin dobleces, sin agua dulce ni amarga saliendo juntas, y quiso ser como ella.

La fe que estas mujeres primero “habitó” en ellas. Para que la fe viva en nuestros hijos, la tienen que ver primero reflejada en nosotros. Queridos hermanas, y Mamitas , tu vida refleja a Cristo?…

El ejemplo de estas mujeres es algo muy bello, porque impactaron la vida de Timoteo. Como llevas tu vida ? Como es tu fe?

Es sincera, es real, es honesta,Porque la verdad no hay nada mejor que enseñar esa fe a sus hijos. En un mundo donde muchos se pasan por cristianos sin serlo, la fe genuina brilla como una antorcha en la noche oscura.

2. Enseñarles la Palabra de Dios

2 Timoteo 3:14-15: "Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.

Eunice enseñaba las Escrituras a Timoteo desde su niñez .

Veamos la importancia de la enseñanza de la Palabra de Dios a los niños.

No se deja esta enseñanza a los maestros o maestras de la escuela dominical, sino que es responsabilidad y obligación de los padres .

Eunice enseñó las Escrituras a Timoteo desde su niñez. La enseñanza de la Palabra de Dios es fundamental y es responsabilidad de los padres. Deuteronomio 6:4-9

Deuteronomio 6:4–9 (RVR60)

4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. 5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; 9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.

Dios nos llama a enseñar las palabras de Dios a nuestros hijos en todo momento. Esta responsabilidad es vital en un mundo que cada vez más niega a Cristo.

Y es un llamado para ti brenda, que si bien es cierto como madres, nos preocupamos por cada detalles, cuidado, proteccion , estamos llamadas a Enseñar la palabra de Dios.

2 Timoteo 1:6-7: "Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio."

Pablo anima a Timoteo a avivar el fuego del don de Dios que está en él. Como madres, podemos inspirar a vuestros hijos a usar sus dones para la gloria de Dios, recordándoles que Dios les ha dado un espíritu de poder, amor y dominio propio.

Aplicación

Queridas madres, Brendita mientras esperas la llegada de Pablo Moises reflexionemos sobre estas verdades.

Dejemos un legado de fe genuina en el corazón de vuestros hijos.

Seamos un testimonio vivo de una fe sincera, enseñemoesle la Palabra de Dios y anímenlos a avivar los dones que Dios ha puesto en ellos.

Oremos por ellos, pidiendo a Dios que los guíe y los proteja, y fortalezcan su fe al saber que Dios tiene todo bajo control.

El mejor legado que puedes dejar a tus hijos es que conozcan a Cristo. Si nunca has enseñado a tus hijos la Palabra de Dios, empieza hoy mismo. Necesitamos muchas Loidas y Eunices en nuestras la iglesia, en nuestros hogares. Empieza con tu vida, con la ayuda del Señor.

Oremos