Cree nada más
Notes
Transcript
Dos historias de dolor
Dos historias de dolor
Hay 2 actores en esta historia, por una parte tenemos a un funcionario de la sinagoga cuyo nombre es Jairo y por otro lado tenemos a una mujer de quien no se nos dice nada excepto que tenia una enfermedad de 12 años de evolucion. Ambos personajes se encuentran desesperados, Jairo ha perdido su dignidad tirandose al suelo y de la mujer el vv 26 nos confirma “habia sufrido mucho, ha gastado todo lo que tenia, nada le ha servido y va de mal en peor”.
Si miramos con atención la historia, Jairo tiene una actitud similar al endemoniado, al ver a Jesús se arroja a sus pies y le suplica de manera insistente, sin embargo, al igual que el endemoniado Jairo le da instrucciones a Jesús sobre como debe solucionar su problema “ven, pon tus manos sobre ella”, asumiendo de esta manera que Jesús tiene poder para sanar a su hija.
Por otro lado, de la mujer se nos dice que había oido hablar de Jesús y quizá dentro de estas historias se encuentre la de Jesús tocando al leproso y dandole sanidad o la de los enfermos que venian a ser tocados por Él y eran sanos, esta mujer está convencida de que el toque de Jesús puede sanarla por lo que se decide a tocar “siquiera su ropa para quedar sana”.
Control y fe
Control y fe
Una de las actitudes mas distintivas del ser humano es la de querer controlar su entorno para su beneficio personal, tenemos por ejemplo la historia de Saúl quien ofreció sacrificios en vista de que Samuel no venía pensando que asi tambien podría agradar a Dios, de esta manera ambos personajes de nuestra histoira han decidido que podrían hacer lo mismo, tomar el control de su situación y hacer que Jesús hiciera exactamente lo que ellos deseaban.
La historia de la mujer nos muestra que era alguien con recursos economicos suficientes como para que de manera independiente buscara alivio en los médicos, se dice que visitó a varios médicos pero se había gastado todo y sin que esto sirviera de nada, entendemos que ella era una mujer que tomaba la iniciativa para resolver sus problemas sin embargo al igual que muchos de nosotros en este momento se encuentra realmente atrapada puesto que se ha terminado la fuente que le permitia libremente buscar una solución a su problema, de hecho el texto agrega “en vez de mejorar, iba de mal en peor”, es quizá esta situación tan desesperada lo que la lleva a cambiar su objetivo y poner su fe en Jesús.
En este acto de fe ella se acerca al Señor y efectivamente al tocarlo ella se da cuenta que su cuerpo ha quedado libre de aflicción, Jesús aún no ha hablado con ella pero el milagro ya se llevó a cabo, el Señor se detiene y pregunta ¿Quién me ha tocado la ropa? de manera ironica sus discipulos le responden que es imposible saberlo puesto que hay una multitud empujandolos sin embargo la mujer parece comprender a Jesús y el Señor a ella, el Señor parece ignorar la respuesta de sus incredulos discipulos y sigue mirando para ver quien lo habia hecho y ella sabe lo que sucede por lo que se apresura a contarle toda la verdad, la mujer al igual que los discipulos y los gadarenos tambien tuvo miedo cuando Jesús trajo calma a su vida, pero ella no cuestiona la situación como los discipulos y la tormenta y tampoco le pide a Jesús que se aparte, al contrario, se arroja a sus pies y le cuenta la verdad, algo totalmente distinto a las anteriores escenas en donde quienes se arrojan a los pies del Señor lo hacen de una manera poco genuina.
En Marcos hemos visto que la fe sana pero tambien salva, Jesús ha visto la fe de los amigos del paralitico pero también vemos al Señor reprochando a sus discipulos su falta de fe en el episodio de la tormenta, además resalta que para Marcos la fe está relacionada con el oir, Jesús reconoce que la fe de esta mujer la sanado, y lo hace en publico, para confirmar que el milagro ha sido real le confirma “vete en paz y queda sana de tu aflicción”, la verdadera libertad es confirmada siempre por el Señor, nos permite vivir en paz y libres.
Cree nada más
Cree nada más
Jairo tenía prisa y el Señor ha perdido tiempo con esta mujer por eso parece sumamente dramatico que unas personas se le acerquen y digan “ya no molestes mas al maestro, tu hija ha muerto”, podemos imaginar la cara de Jairo ¡Que frustración! si tan solo esta mujer no se hubiera interpuesto, sin tan solo Jesús le hubiera dado un poco de rapidez al milagro de su curación, pero Jesús, nuevamente muestra una calma inusual frente a la tormenta, parece no creer lo que la gente ha dado por muerto, parece estar pensando con una logica distinta y le dice a Jairo “no tengas miedo, cree nada mas”.
Al llegar a casa la escena es lo que mas temía Jairo, su hija ha muerto y su entorno da testimonio puesto que el vv 38 nos dice “Jesús notó el alboroto y los alaridos y llantos de la gente”, por lo tanto Jesús tiene que poner orden y decir “la situación no está perdida, la niña no está muerta, si no está viva”.
Jairo está a punto de realizar el mayor acto de fe, todo a su alrededor le confirma que ha sido en vano, que ha llegado demasiado tarde ante aquel que podía traer vida a su amada hijita, pero ahora él tiene que creer al igual que la mujer con hemorragia, tiene que creer con el corazón, Jesús se para frente a la niña y le dice ¡Levantate! para que no quede duda el narrador nos dice que ella se levanto en seguida.
Cuando Jesús trae vida y sanidad a nuestras vidas todo ocurre de manera inmediata y milagrosa, la mujer sintió que en ese momento quedó sanada y la hija de Jairo se levantó enseguida que Jesús le habló, no hubo necesidad de procesos, nadie se acordó de lo que Jairo le pidió a Jesús “pon tus manos en ella” ni tampoco lo que la mujer presupuestaba “solo tocaré su ropa”, en ambos casos Jesús actuó a pesar de sus expectativas.
No podemos controlar al Señor pero si podemos actuar con fe.