LA CARGA MÁS PESADA DEL MUNDO

Hoy damos gracias a Dios por todos los hombres que estamos aquí reunidos.

Quiero hacerle unas preguntas y me gustaría que responda a ellas con un AMEN si es así en su vida.

¿Cuántos de los que estamos ya somos de Cristo?

¿Cuántos un día despues de escuchar el evangelio creímos y arrepentiéndonos de nuestros pecados nos entregamos a vivir una vida para Cristo?

¿Cuántos fuimos rescatados de nuestra vana manera de vivir y fuimos facultados para vivir una vida santa y agradable a Dios?

¿Cuántos fuiemos puestos por el Señor como luz a un mundo en tinieblas, siendo traídos de las tinieblas a su luz admirable?

¿Cuántos rompieron por el poder de Cristo la esclavitud del pecado en sus corazones para vivir una vida nueva como siervos de la justicia?

¿PERO CUANTOS DE LOS QUE ESTAMOS AQUÍ están viviendo vidas internas, ocultas, privadas o secretamente derrotadas porque no logran vencer las tentaciones de la PORNOGRAFÍA?

¿Cuántos de de los que estamos aquí estamos batallando cada día contra la pornografía?

¿Cuántos historiales han sido borrados para aocultar la verguenza de lo que esta viendo?

¿Cuántos momentos solos han sido ensuciados con imágenes y videos de la más grande perverción que el ser humano ha comercializado?

¿Cuántas mentiras y disimulos ha tenido que montar para lograr evadir a los que se acercaron cuando usted estaba corropiendo su mente en la pornografía?

¿Cuántas navegaciones se han dado en privado o en oculto para no ser descubierto por sus hijos, hermanos, papás, o esposa?

Pero quiero decirle algo… NO importa cuanto haya intentado esconder su pecado de los demás, DIOS ES EL DIOS QUE ME VE.

Por favor tome su Biblia y vaya conmigo a

Génesis 3:6–9 “6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella. 7 Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales. 8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto. 9 Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo: ¿Dónde estás tú?”

Caballero y hermano que está hoy aquí vivimos en una sociedad altamente sexualizada, la pornografía está en casi todo lugar al que volteemos la vista, está a un solo toque en cualquiera de nuestros dispositivos.

Y según la estadísticas es altísimo el procentaje de hombres, incluso cristianos, caídos en el pecado de la lujuria, codicia, lascivia, mentira e inmoralidad a través de la pornografía.

Esto es preocupante, pero la verdad hermanos es más aun preocupante el guardar y ocultar un pecado que carcome al hombre hasta lo más profundo.

Porque no me sorprende cuando algun hombre se ha acercado con humildad y me ha dicho pastor tengo problemas con la pornografía. Sabe ¿por qué? porque ante tal bombardeo y estrategia satánica y conociendo las debilidades del ser humano y las atracciones del sexo masculino podría entender que alguien esté tendiendo ese tipo de problemas y queriendo honrar a Dios esté buscando ayuda a pesar de la verguenza que pueda sentir, y eso trae esperanza.

Pero OCULTAR. En Génesis 3:6-9 vemos al inicio de todas las cosas la común respuesta del hombre al pecado propio, y lamentablemente eso no ha cambiado mucho en los ultimos milenios. EL HOMBRE TIENE LA TENDENCIA A ESCONDER (ingenuamente) sus pecados de delante de Dios, y tiene la tendencia a esconderse de Dios. Por supuesto imagine esta escena.

El hombre peca, y quien tiene el poder de perdonar, limpiar y trasnformar es aquel de quien el hombre se aleja, de tal manera que conforme el tiempo pasa el hombre está cada vez más lejos de la solución a sus problemas, el perdón de su pecado y la restauración de su vida espiritual. Ya sea por verguenza, temor o dureza de corazón.

Pero todo aquel que está pecando contra Dios debe arrepentirse y volverse a Dios. No tratar de esconderse de Dios porque eso no es posible. DIOS ES OMNIPRESENTE Y OMNISCIENTE. Y que usted rompa su comunión con Dios no cambairá el hecho de que DIos conoce su pecado y que usted pagará las consecuencias por no arrepentirse y buscar al Señor.

Salmo 139:1–3 “1 Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. 2 Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde lejos mis pensamientos. 3 Has escudriñado mi andar y mi reposo, Y todos mis caminos te son conocidos.”

Salmo 139:7–8 “7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? 8 Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás.”

Vamos hermanos, esconder el pecado le conducirá más y más a la derrota y traerá consecuencias devastadoras a su vida.

Cuando David se hundió en el pecados sexuales, llenos de engaño y mentiras escribió:

Salmo 32:3–4 “3 Mientras callé, se envejecieron mis huesos En mi gemir todo el día. 4 Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; Se volvió mi verdor en sequedades de verano. Selah”

Este pecado tiene consecuencias graves, mientras usted esté consumiendo ponografía perderá.

El gozo de su salvación.

La comunión con Dios.

La confianza en Dios.

La sensibilidad espiritual.

La paz y la tranquiliad de consciencia.

El poder espritual.

Todo esto dañará su autoestima.

Traerá culpabilidad cual no podrá soportar.

Le llenará de verguenza y le conducirá a la hipocresía.

No será el esposo y padre que Dios quiere que sea.

Se sentirá sucio constantemente e indigno de todo.

Su mente estará cargada de inmoralidad que le incitarán a practicarla aún más.

La conciencia carcomerá su mente y esto endurecerá su corazón tarde o temprano.

La verdad es que con un hombre en pecado sufre no solo él, sino su familia, su esposa, sus hijos, sus padres, sufre su iglesia. Aquellos hombres que están en la pornografía y no logran salir de ella debilitan las iglesias, robando bendición y no siendo los hombres que deberían ser.

Salmo 32:9 “9 No seáis como el caballo, o como el mulo, sin entendimiento, Que han de ser sujetados con cabestro y con freno, Porque si no, no se acercan a ti.”

Dios sabe que usted está ya sea derrotado, batallando, intentándolo quizá, es feo, es vergonzoso y casi nunca queremos hablar de eso porque es inmoral y no nos enorgullece. Pero escuche lo que dijo un hombre que cayó profundo:

Salmo 32:1–2 “1 Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. 2 Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño.”

Salmo 32:5 “5 Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah”

Yo no sé a que nivel esto puede afectando su vida, no lo sé y a menos que sea para ayuda espiritual, no me interesa. Me interesa que hoy venga al Señor y trate con Él. Cualquiera que sea su situcación. No estamos para señarle o avergonzarle, hoy estamos extendiendo una mano de ayuda, de apoyo, de entendimiento, de comprensión, hoy le estamos invitando a buscar al Señor, hoy le estamos invitando a venir al Padre y tratar con él este tema en su vida.

Hebreos 12:1–2 “...despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante”

Venga aquí y oremos juntos al Señor que este sea el inicio de un crecimiento, un cambio en su vida o de la renovación de su fidelidad y santidad a Dios.

INVITACIÓN