LA GENERACIÓN DANIEL

INTRODUCCIÓN

Daniel 1:1–8 RVR60

En el año tercero del reinado de Joacim rey de Judá, vino Nabucodonosor rey de Babilonia a Jerusalén, y la sitió.Y el Señor entregó en sus manos a Joacim rey de Judá, y parte de los utensilios de la casa de Dios; y los trajo a tierra de Sinar, a la casa de su dios, y colocó los utensilios en la casa del tesoro de su dios. Y dijo el rey a Aspenaz, jefe de sus eunucos, que trajese de los hijos de Israel, del linaje real de los príncipes, muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, de buen parecer, enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los caldeos. Y les señaló el rey ración para cada día, de la provisión de la comida del rey, y del vino que él bebía; y que los criase tres años, para que al fin de ellos se presentasen delante del rey. Entre éstos estaban Daniel, Ananías, Misael y Azarías, de los hijos de Judá. A éstos el jefe de los eunucos puso nombres: puso a Daniel, Beltsasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac; y a Azarías, Abed-nego. Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse.

Los jóvenes cristianos de hoy enfrentan decisiones y situaciones complejas con las cuales los adultos y líderes de las iglesias no estamos familiarizados y que a veces nos pasan desapercibidos. Como resultado, muchas organizaciones, escuelas y ministerios están entrenando líderes jóvenes para un mundo que ya no existe. Les pedimos que “cumplan sus obligaciones” mientras estamos fallando en equiparlos con las habilidades que necesitan desesperadamente para conseguirlo.

La tendencia cultural de estos días se opone abiertamente a todo lo que se llama Dios. Nuestros niños y adolescentes se enfrentan a un bombardeo continuo de mensajes sobre identidad de género y sexualidad, y endiosamiento de la ciencia y la tecnología. Esta última semana se ha celebrado mundialmente el Día Internacional del Orgullo LGBT. El pecado de Sodoma empieza con la aceptación social de prácticas inmorales como algo común y corriente. Entonces el clamor ha de llegar hasta la presencia de Dios. “El pecado del amorreo ha llegado al colmo” (Génesis 15:16)

El proceso creciente de depravación moral en una sociedad desarrollada y consumista empieza en la soberbia y autosuficiencia. Las gentes empiezan a sentirse muy cómodas y llegan a la convicción de que pueden actuar sin tener en cuenta la Ley de Dios, y en vez de someterse a Su Palabra, deciden someterla y cuestionarla a sus opiniones humanas.

Todos los imperios humanos cuando llegaron a la cúspide, donde las élites se dedicaban al ocio y libertinaje, y los esclavos les proveían lo que necesitaban, ha sido siempre el inicio de su caída. Las pinturas de la ciudad de Pompeya nos muestran la depravación del imperio romano. Esa ciudad fue sepultada con la ceniza ardiente del volcán Vesubio, el 24 de Agosto del año 79. Unos años antes el Apóstol Pablo había escribió sobre el proceso de degeneración moral en el libro de Romanos 1:18-27.

Entonces, ¿Como poder comunicar la verdad de la palabra de Dios a personas que creen que los cristianos son retrogradas detestables y de mente estrecha? Peor aún, incluso hay intelectuales liberales que defienden el aborto, y tildan como supersticiosos a los que basamos nuestros principios de la defensa de la vida en la Palabra de Dios.

Estamos viviendo en aquel periodo de la historia en que vivió Daniel. Hasta ahora los pastores y lideres hemos estado en nuestro propio Juda, nuestra Iglesia, como una burbuja protectora, y ahora sin darnos cuenta estamos enviando a nuestros jóvenes a Babilonia.

Si ellos no están preparados como Daniel, pueden sucumbir ante el discurso liberal y abiertamente ateo que enfrentarán en la Universidad. Y si son fieles a Dios, en sentido moral y espiritual tendrán que enfrentarse al horno de fuego y al foso de los leones. Si están bien equipados espiritualmente, podrán vencer y aún levantarse como Daniel para gobernar.

LA EDUCACIÓN DE DANIEL

Daniel creció en Judá bajo el reinado del rey Josías, quien gobernó 31 años en Jerusalén en el año 638 a.C. hasta el año 608 a.C.

En el año decimoctavo de su reinado, en el curso de las obras para restaurar y embellecer el Templo, el sumo sacerdote Hilcías encontró en el santuario el libro perdido de la Ley, y lo entregó a Safán, el escriba, que lo leyó ante Josías.

2º Reyes 23:1–3 RVR60

Entonces el rey mandó reunir con él a todos los ancianos de Judá y de Jerusalén. Y subió el rey a la casa de Jehová con todos los varones de Judá, y con todos los moradores de Jerusalén, con los sacerdotes y profetas y con todo el pueblo, desde el más chico hasta el más grande; y leyó, oyéndolo ellos, todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová. Y poniéndose el rey en pie junto a la columna, hizo pacto delante de Jehová, de que irían en pos de Jehová, y guardarían sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo el corazón y con toda el alma, y que cumplirían las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro. Y todo el pueblo confirmó el pacto.

Josías entonces llevó adelante una reforma que fue la más grande de la historia de Judá. Dio continuidad a la reforma iniciada por el rey Ezequías. Hizo de Jerusalén el centro político-religioso del reino. Destruyó el santuario de Betel y los lugares de culto cananeos. Tales cultos incluían ritos de prostitución idolátrica hasta la inmolación de sus niños a dioses paganos. Josías hizo que se le enseñara a todo el pueblo la Ley.

Deuteronomio 14:3–8 RVR60

Nada abominable comerás. Estos son los animales que podréis comer: el buey, la oveja, la cabra, el ciervo, la gacela, el corzo, la cabra montés, el íbice, el antílope y el carnero montés. Y todo animal de pezuñas, que tiene hendidura de dos uñas, y que rumiare entre los animales, ese podréis comer. Pero estos no comeréis, entre los que rumian o entre los que tienen pezuña hendida: camello, liebre y conejo; porque rumian, mas no tienen pezuña hendida, serán inmundos; ni cerdo, porque tiene pezuña hendida, mas no rumia; os será inmundo. De la carne de éstos no comeréis, ni tocaréis sus cuerpos muertos.

El rey Josías había buscado hacer volver al pueblo de Judá a Dios, pero después de su muerte, la nación continuó en su idolatría. A pesar de las muchas advertencias de los profetas de Dios, el pueblo se rehusó a cambiar. Como resultado, Dios envió a Nabucodonosor a invadir y conquistar Judá.

Daniel era un probable descendiente de la familia real de David, fue llevado cautivo a Babilonia cuando era jovencito, en el año tercero del reinado de Joacim de Judá (605 a.C.).

Daniel 1:8–9 RVR60

Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse. Y puso Dios a Daniel en gracia y en buena voluntad con el jefe de los eunucos;

Las decisiones que tomaron Daniel y sus tres compañeros revelan que ellos habían sido enseñados bien en los mandamientos, testimonios y estatutos de la Palabra de Dios. Posiblemente tendría 17 años, y se habría beneficiado de las reformas de Josías desde su niñez.

Dios le concedió su favor a Daniel, y con el tiempo obtuvo una posición alta. Al hacerlo, sin embargo, tuvo que aprender a ser un líder piadoso en el contexto de la Babilonia de Nabucodonosor, un lugar muy diferente a Judá.

CAMINANDO SOBRE TERRENO FANGOSO

La Revolución Industrial del siglo 17 con sus inventos, innovaciones y mejoras, hizo que los hombres y mujeres vean el progreso como fruto de su ingenio en esfuerzo. Dejaron de buscar a Dios como fuente de esperanza y orientación. Esto marcó el comienzo de la Era Moderna, un período en la historia conocido por su confianza en la ciencia y la razón.

La Posmodernidad de este Siglo 21 dice que no hay una base universal para la verdad o la moralidad. Todos los valores, creencias y sistemas previamente abrazados son dudosos y deben cuestionarse. La nueva base para la verdad está en la tecnología, en la ciencia y no en Dios.

1 Timoteo 6:20–21 RVR60

Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, evitando las profanas pláticas sobre cosas vanas, y los argumentos de la falsamente llamada ciencia,la cual profesando algunos, se desviaron de la fe. La gracia sea contigo. Amén.

Es una de las grandes ironías de la historia científica de que la primera edición de Charles Darwin El origen de las especies fue publicado exactamente dos años antes de que los famosos experimentos de Louis Pasteur en 1861 demostraran que la vida no puede surgir espontáneamente de la materia no viva.

Sin embargo, ese libro de Darwin ha sido tomado por los escépticos y ateos como la base para teoría de la evolución, la cual dice que, bajo las circunstancias adecuadas, la vida puede surgir por sí sola de la materia no viviente. En si misma se ha convertido en una religión, pues muchos descubrimientos recientes traen abajo esa teoría. Para el hombre natural le resulta conveniente, porque al no haber Dios, no hay nadie a quien dar cuenta, por tanto, pueden vivir como bien les parezca, y esa es la causa por toda la desigualdad, injusticia, egoísmo, xenofobia e intolerancia que vemos hoy.

Daniel 12:3–4 RVR60

Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad. Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará.

En lo personal soy testigo de ese incremento vertiginoso de la ciencia desde la década del 1960 con las primeras computadoras, calculadoras de mano, teléfono celular, televisión a color, los cohetes espaciales que han colocado satélites artificiales de comunicaciones, y por consiguiente la Internet.

EL EJEMPLO DE DANIEL

En los días de Daniel, vemos tres reacciones en la corte de Jerusalén por lo que iba a suceder en Judá, por la invasión de Jerusalén por Nabucodonosor.

Los judíos negacionistas, que se rehusaron a aceptar lo que estaba sucediendo. No hicieron caso a los que les había anunciado el profeta Jeremías en el capítulo 27 y fueron destruidos junto con la ciudad.

Los judíos resentidos a quienes les enfadaba el hecho de estar en exilio. En lugar de invertir su tiempo y energía en sacar lo mejor de su vida en una tierra extranjera, simplemente querían volver a casa a su vida cómoda y familiar en Judá.

Daniel y sus amigos pertenecían al tercer grupo, los fieles. Este grupo representa a aquellos que entendieron los tiempos en que vivieron. Estaban dispuestos a cumplir el propósito y las intenciones de Dios, incluso si eso significaba renunciar a sus propios derechos y comodidades.

Daniel fue llevado a Babilonia para ser preparado como funcionario de gobierno. La deslumbrante riqueza y poder de Babilonia no fueron los únicos cambios que enfrentó Daniel. También se encontró con una cultura radicalmente diferente a la de su familia en Judá. Con seguridad se enfrentó a una presión tremenda por encajar en la nueva cultura, aprender las nuevas costumbres, seguir la corriente de la multitud, y encontrar formas de pertenecer a ese lugar.

En la corte del rey de Babilonia había abundancia de comida, vino y manjares, es decir, era un centro de placer físico. El historiador griego Heródoto describe las costumbres inmorales de la prostitución sagrada realizada en Babilonia en honor de su diosa Ishtar, que es equivalente a Afrodita o Venus de los griegos. Los dioses babilonios fueron imaginados a semejanza del hombre: comían, dormían, amaban, se casaban y se peleaban como humanos, solo se distinguían de estos por su superior inteligencia y su vida inmortal.

Es probable que todo eso tuvieron que ver Daniel y los jóvenes judíos al llegar a la corte babilónica. Por tanto, una forma sabia de librarse de eso fue evitar participar en la comida, bebida y excesos de la corte.

Pero a la vez Daniel tuvo que discernir y reconocer que aquellas tradiciones tenían prácticas impías, dioses falsos y búsqueda egoísta del placer y el poder, como fue el caso en Babilonia.

Daniel 1:8–15 NTV

Sin embargo, Daniel estaba decidido a no contaminarse con la comida y el vino dados por el rey. Le pidió permiso al jefe del Estado Mayor para no comer esos alimentos inaceptables. Ahora bien, Dios había hecho que el jefe del Estado Mayor le tuviera respeto y afecto a Daniel, pero le respondió: «Tengo miedo de mi señor el rey quien ordenó que ustedes comieran estos alimentos y bebieran este vino. Si se vuelven pálidos y delgados en comparación con otros jóvenes de su edad, temo que el rey mandará a decapitarme». Entonces Daniel habló con el asistente que había sido designado por el jefe del Estado Mayor para cuidar a Daniel, Ananías, Misael y Azarías, y le dijo: «Por favor, pruébanos durante diez días con una dieta de vegetales y agua. Al cumplirse los diez días, compara nuestro aspecto con el de los otros jóvenes que comen de la comida del rey. Luego decide de acuerdo con lo que veas». El asistente aceptó la sugerencia de Daniel y los puso a prueba por diez días. Al cumplirse los diez días, Daniel y sus tres amigos se veían más saludables y mejor nutridos que los jóvenes alimentados con la comida asignada por el rey.

El desafío que enfrentó Daniel requería un increíble sacrificio de su parte. En Babilonia, fue despojado de su hogar, su familia, su nombre, su cultura y su idioma. Daniel forjó su identidad como joven en medio de muchas presiones externas que luchaban por influir en él. Entonces tuvo que recordar lo que había aprendido en su niñez.

Proverbios 1:8–16 NTV

Hijo mío, presta atención cuando tu padre te corrige; no descuides la instrucción de tu madre. Lo que aprendas de ellos te coronará de gracia y será como un collar de honor alrededor de tu cuello. Hijo mío, si los pecadores quieren engatusarte, ¡dales la espalda! Quizás te digan: «Ven con nosotros. ¡Escondámonos y matemos a alguien! ¡Vamos a emboscar a los inocentes, sólo para divertirnos! Vamos a tragarlos vivos, como lo hace la tumba; vamos a tragarlos enteros, como a quienes descienden a la fosa de la muerte. ¡Piensa en todas las grandes cosas que conseguiremos! Llenaremos nuestras casas con todo lo robado. Ven, únete a nosotros; entre todos compartiremos el botín». ¡Hijo mío, no vayas con ellos! Mantente alejado de sus caminos. Ellos corren a cometer malas acciones; van de prisa a matar.

Daniel fue sometido a un poderoso programa de reeducación diseñado para influir en sus lealtades y su atención. Completó el entrenamiento, pero logró controlar su poder para influenciarlo.

EL DESAFÍO PARA HOY

Los jóvenes de hoy en día enfrentan un desafío muy parecido al que enfrentó Daniel. La cultura que era familiar a las generaciones antiguas está desapareciendo. Los jóvenes de ahora están contagiándose de los valores de una cultura emergente que es muy diferente a la que existió hace solo unas décadas atrás.

La tolerancia es la nueva palabra de moda y la nueva ley suprema, y tiene una definición diferente a la que tenía hace algunos años. Tolerancia hoy significa que se deben aceptar los sistemas de creencias y los estilos de vida claramente impíos, como la identidad de género.

Internet es una red integrada por cientos de miles de ordenadores, que pueden ser de dos tipos: servidores o clientes y se conoce como World Wide Web (o La Web). Esta tiene sus ventajas y desventajas.

Entre sus ventajas están el correo instantáneo, el chat, información, lo cual facilita enormemente el comercio y hasta la educación. Sin embargo, la tendencia del ser humano es de “continuo hacia el mal”. Las desventajas son abrumadoras: información falsa, inadecuada, desagradable, pornográfica. La Internet crea dependencia, hace que los estudiantes se esfuercen menos en hacer su tarea, el plagio es una plaga difícil de controlar; induce al aislamiento, pues un adicto a Internet se encierra en una habitación y no se relaciona con la comunidad.

La mayoría de los estudios muestran que el adolescente promedio pasa de 8 a 12 horas diarias en sus dispositivos electrónicos. La ciencia médica ha identificado que cada estimulo gratificante hace que se libere dopamina, que es el neurotransmisor para sentirse bien siendo también el elemento más crítico en el proceso de adicción. Cuando una persona realiza una acción que satisface una necesidad o un deseo, se libera dopamina en un grupo de células nerviosas asociadas con placer y recompensa también conocidas como el centro del placer del cerebro. Esto activa una señal para repetir la actividad una y otra vez.

Lo peor de todo es que los más afectados son nuestros niños y adolescentes, por los mensajes de estafadores, psicópatas y pervertidos.

A nosotros padres muy claramente nos ha hablado el Señor Jesucristo, sobre que bases fundamentar nuestro hogar.

Lucas 6:46–49 RVR60

¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo? Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace, os indicaré a quién es semejante. Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca. Mas el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin fundamento; contra la cual el río dio con ímpetu, y luego cayó, y fue grande la ruina de aquella casa.

NUESTRA ESPERANZA ESTA EN DIOS

Los padres de familia, pastores y mentores de jóvenes nos enfrentamos a un gran reto de este tiempo. Estadísticamente, las iglesias están fracasando con conectarse con los adultos jóvenes.

Entonces, ¿cómo preparar a nuestros Danieles y Danielas antes que entren a la Babilonia moderna?

El ejemplo del rey Josías debe guiarnos. Él supo del trabajo piadoso de su bisabuelo Ezequías, a pesar del desastroso ejemplo de su abuelo Manasés, quien destruyó la obra reformadora de su padre Ezequías, erigiendo santuarios paganos sobre los lugares altos para honrar a Baal y alzando en el Templo de Jerusalén altares dedicados al culto de los astros. Manasés fue el peor rey de Juda, y le sucedió su hijo Amón, también un rey impío, pero solo por dos años pues sus siervos conspiraron contra él, matándolo en su propia casa. Le sucedió su hijo Josías.

A pesar de tan mal precedente, el rey Josías fue el último rey bueno de Juda, y tuvo como consejero al sumo sacerdote Hilcías. Él fue quien encontró en las paredes del Templo el libro de la Ley. Josías fue fiel al mensaje de Dios.

2º Reyes 23:24–26 RVR60

Asimismo barrió Josías a los encantadores, adivinos y terafines, y todas las abominaciones que se veían en la tierra de Judá y en Jerusalén, para cumplir las palabras de la ley que estaban escritas en el libro que el sacerdote Hilcías había hallado en la casa de Jehová.No hubo otro rey antes de él, que se convirtiese a Jehová de todo su corazón, de toda su alma y de todas sus fuerzas, conforme a toda la ley de Moisés; ni después de él nació otro igual.Con todo eso, Jehová no desistió del ardor con que su gran ira se había encendido contra Judá, por todas las provocaciones con que Manasés le había irritado.

Las reformas que efectuó Josías influyeron decisivamente en aquellos jóvenes fieles como Daniel, Ananías, Misael y Azarías, de los hijos de Juda.

Nuestra oración es por cada niño, niña, adolescente de nuestra Iglesia, es para que vivan como lo hizo Daniel: en el favor y la bendición de Dios; con fe, sabiduría y valor en medio de tiempos tumultuosos.

OREMOS.