Juan Calvino en el Pulpito

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Transcript
Introducción (5 minutos)
Pablo:
Soy Pablo Landazuly (Presentación corta)……… Bienvenidos a este conservatorio especial en conmemoración del aniversario de Juan Calvino, organizado por la Asociación de Seminarios Presbiterianos Reformados de América Latina (ASPRAL). Hoy vamos a explorar una faceta fundamental de Calvino: su rol en el púlpito y cómo su enfoque en la predicación bíblica transformó no solo a su congregación en Ginebra, sino también a la iglesia en general. Para esta discusión, contamos con Rodrigo Andrés Espinoza, quien es director del Seminario Presbiteriano Hispano en Colombia
Rodrigo:
Gracias, Pablo. Es un honor estar aquí para hablar sobre un tema tan relevante y significativo para nuestras iglesias en el 515 aniversario del nacimiento de Juan Calvino. En nuestro contexto latinoamericano, es muy difícil encontrar iglesias donde se predique fielmente la Palabra de Dios. Lastimosamente, lo que predomina son lugares de culto con un rótulo de cristianos, donde se enfatiza el espectáculo, los dramas y una adoración centrada en el hombre y no en la gloria de Dios.
Hoy, más que nunca, necesitamos púlpitos anclados en la Sola Escritura y solo en Cristo, si es que queremos ver una transformación real en nuestras familias y en nuestros países, como ocurrió en los días de Calvino.
JAMES MONTGOMERY BOICE dijo> Calvino no tenía más armas que la Biblia… Calvino predicaba de la Biblia todos los días, y fue bajo el poder de esa predicación que la ciudad comenzó a ser transformada. A medida que los ciudadanos de Ginebra iban conociendo la Palabra de Dios y eran transformados por ella, la ciudad se convirtió, como luego dijo John Knox, en una Nueva Jerusalén desde donde el evangelio se esparcía al resto de Europa, a Inglaterra y al Nuevo Mundo.
Dios usó a Calvino en su tiempo porque se tomó en serio la Palabra de Dios, la proclamó con fidelidad y sin temor a su generación. Como resultado, la iglesia fue fortalecida y tuvo un impacto profundo en la sociedad. Espero que al recordar el legado de Calvino, nos motivemos como iglesia a procurar seguir su ejemplo. Desde que conocí el trabajo de Calvino hace unos 15 años, su ejemplo me animó a predicar la Escritura expositivamente y consecutivamente en nuestra iglesia, y esto ha tenido un impacto profundo en mi propia vida y en la iglesia que presido.
Es nuestra oración y nuestra intención con este conversatorio que el Señor levante más predicadores que emulen el ejemplo de Calvino, que busquen la gloria de Dios y confíen en el poder de Su Palabra. Como nos dice Isaías 55:11: "Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié." Que esta verdad nos impulse a ser fieles heraldos del Evangelio en nuestros días.
La Centralidad de la Biblia en el Ministerio de Calvino (10 minutos)
Pablo:
Rodrigo, para comenzar, hablemos un poco sobre la centralidad de la Biblia en el ministerio de Juan Calvino y cómo esto se reflejaba en su predicación.
Rodrigo:
Claro, Pablo. Calvino fue pastor de la iglesia de San Pedro en Ginebra, Suiza, durante veinticinco años, y su compromiso con la Palabra de Dios fue absoluto. Este compromiso se reflejaba en cada servicio de adoración, un servicio que reflejaba lo que llamamos el Principio Regulador del Culto Cristiano. Esto significa que la adoración a Dios se realizaba según Su Palabra, incluyendo el canto, la predicación fiel y la administración de los sacramentos.
Para Calvino, el púlpito fue el corazón de su ministerio. La predicación de la Biblia era su tarea más importante, y se dedicó a enseñarla y proclamarla con fidelidad y reverencia todos los días. Su enfoque en la exposición bíblica y su insistencia en la claridad doctrinal transformaron no solo a su congregación, sino también a la ciudad de Ginebra y más allá. La centralidad de la Escritura en su predicación no solo edificaba a los creyentes, sino que también actuaba como un faro de verdad en medio de la confusión doctrinal de su tiempo.
En su lecho de muerte, Calvino consideraba sus sermones como su mayor logro, incluso por encima de sus numerosos escritos teológicos. Esta dedicación a la predicación bíblica lo llevó a convertirse en uno de los más grandes comentaristas bíblicos de la historia.
Este fue un hombre que se tomó en serio la orden de Dios para sus ministros 2 Timoteo 4:2: "Predica la palabra; insiste a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina."
La Autoridad Bíblica (10 minutos)
Pablo:
Juan Calvino es conocido por su firme creencia en la autoridad de la Biblia. ¿Cómo se reflejaba esta creencia en su predicación y en la vida de la iglesia?
Rodrigo:
Para el tiempo de Juan Calvino, la tradición eclesiástica y los edictos papales prevalecían en la iglesia, pero Calvino defendía la supremacía de la Escritura. Insistía en que la Biblia, es la Palabra inspirada, inerrante e infalible de Dios, y que esta debía regular la vida de la iglesia. Para él, el deber principal del ministro era predicar la Palabra de Dios con precisión y claridad. En sus propias palabras, Calvino decía: "La Escritura es la fuente de toda sabiduría y el medio por el cual Dios habla a su pueblo."
Dice un historiador que: “Desde la perspectiva de Calvino, todo lo que no estuviera basado en la Palabra de Dios era inútil y efímero; y el hombre que no se basara en la Escritura debía ser despojado de su título de honor”
Calvino afirmo: “Cuando subimos al púlpito, no podemos llevar con nosotros nuestros sueños y fantasías…. “tan pronto un hombre se apartara, incluso en el menor de los grados, de la Palabra de Dios, no podía predicar nada sino falsedades, vanidades, errores y engaños”. Para Calvino el trabajo de un pastor era ser portador de la autoridad suprema de la Palabra de Dios para aplicarla al pueblo de Dios. El estaba seguro de que no tenía ninguna autoridad sobre los demás más allá de lo que enseñan las Escrituras.
De acuerdo a las Ordenanzas de Ginebra de 1542, que Calvino mismo escribió, la principal tarea del pastor y los ancianos era anunciar la Palabra de Dios para instruir, amonestar, exhortar y reprender a todo hombre. Para Calvino, cualquier predicador que decidiera mezclar sus propios inventos con la Palabra de Dios, o le añadiera cualquier cosa que no le perteneciera, debería ser rechazado, sin importar cuán honorable fuese su rango”.
Él creía firmemente que cuando la Biblia hablaba, Dios hablaba. Por eso su compromiso con la autoridad de las escrituras lo llevo a predicar libros completos de la Biblia. Los libros de la Biblia que sabemos que predicó fueron: Génesis, Deuteronomio, Job, Jueces, I y II Samuel, I y II Reyes, los profetas mayores y menores, los Evangelios, Hechos, I y II Corintios, Gálatas, Efesios, I y II Tesalonicenses, I y II Timoteo, Tito y Hebreos. Sus últimos sermones fueron sobre el libro de Reyes, y sobre los Evangelios, el 6 de febrero de 1564.
Hughes Oliphant Old: “Los sermones de Calvino… [revelan] un profundo entendimiento de la autoridad de la Escritura. El predicador mismo creía que estaba predicando la Palabra de Dios. Se consideraba a sí mismo como siervo de la Palabra”
La Presencia Divina en la Predicación (10 minutos)
Pablo:
Rodrigo, háblanos sobre la visión de Calvino acerca de la presencia de Dios en la predicación. ¿Cómo veía él el papel del Espíritu Santo durante la predicación?
Rodrigo:
Calvino creía que la predicación de la Palabra de Dios no solo comunicaba un mensaje, sino que también era la manifestación de la presencia de Dios en la congregación. Según Calvino, cuando la Palabra era predicada fielmente, el Espíritu Santo actuaba poderosamente en los oyentes, permitiéndoles recibir y ser transformados por el mensaje.
Esta convicción lo llevó a ver la predicación como una actividad en la que Dios mismo estaba presente, hablando a través del predicador. Calvino afirmo: “Dondequiera que se predique el evangelio, es como si Dios mismo descendiera en ese lugar…. Es cierto que si venimos a la iglesia no solo escucharemos a un mero hombre mortal, sino que sentiremos que Dios está hablando a nuestras almas, que Él es el maestro. Él nos toca de tal manera que la voz humana entra en nosotros y nos permite ser refrescados y nutridos por ella. Dios nos llama hacia Él, y es como si Él mismo estuviera hablando y le viéramos ahí en persona... cuando el ministro ejerce su comisión fielmente al hablar solo lo que Dios pone en su boca, el poder interno del Espíritu Santo se une a su voz audible….. Añade en otro lugar: En toda predicación fiel a la palabra hay una eficacia interna del Espíritu Santo cuando Él derrama Su poder sobre los oyentes, para que puedan abrazar el mensaje de Dios por medio de la fe.
Calvino además hablaba fuerte en contra de la ortodoxia muerta, decía que el poder del Espíritu, es “extinguido cuando los doctores en teología hacen sonar sus flautas… para desplegar su elocuencia sin la asistencia del Espíritu Santo para obrar junto con la palabra en la vida de los que escuchan”
La Prioridad del Púlpito (10 minutos)
Pablo:
Otro aspecto crucial en la obra de Calvino fue la prioridad que daba al púlpito. ¿Por qué consideraba tan importante la predicación bíblica en la vida de la iglesia?
Rodrigo:
Para Calvino, la predicación bíblica ocupaba el lugar más importante en el servicio de adoración pública. Creía que la exposición de las Escrituras debía ser el centro de la vida de la iglesia. Sostenía que sin una predicación sólida, no podía haber verdadera piedad. La única forma en que la iglesia podía ser edificada era mediante la proclamación del evangelio, lo que consideraba una función esencial del ministro. Calvino decía: "El púlpito es el trono de Dios en la iglesia y debe ser el lugar donde Su Palabra es proclamada con autoridad y claridad."
La Exposición Secuencial (10 minutos)
Pablo:
Calvino es conocido por su método de exposición secuencial. ¿En qué consistía este método y qué ventajas ofrecía para la congregación?
Rodrigo:
Calvino predicaba regularmente, a menudo varias veces por semana. El predicaba sistemáticamente a través de libros enteros de la Biblia, versículo por versículo. Este método, conocido como lectio continua, garantizaba que no se omitieran pasajes difíciles ni doctrinas complicadas, garantizaba además que su congregación tuviera una comprensión profunda de todo consejo de Dios.
“predicaba sobre un libro del Nuevo Testamento los domingos por la mañana y por la tarde (aunque durante un tiempo predicaba de los Salmos por las tardes), y sobre un libro del Antiguo Testamento entre semana”. De esta forma cubrió gran parte de las Escrituras.
Fueron raras las excepciones a este patrón. “Casi todos los sermones registrados de Calvino son series de libros de la Biblia”
Hay una anécdota muy conocida, cuando Calvino regreso a Gienbra luego de tres años de exilio, él subió al púlpito, abrió su biblia en el versículo donde había dejado su exposición en Isaias 37 y continuo exponiendo consecutivamente el pasaje.
Predicó durante 5 años el libro de Hechos, hizo una serie más corta sobre las cartas paulinas que duro cuatro años, predico una armonía de los Evangelios en un lapso de cinco años. Durante este mismo periodo, entre semana, predicó series de sermones sobre Jeremías y Lamentaciones durante un año, sobre los profetas menores y Daniel por dos años, 174 sermones sobre el libro de Ezequiel en dos años, 159 sermones sobre Job en un año, 200 sermones sobre Deuteronomio en un año, 353 sermones sobre Isaías en tres años, 123 sermones sobre Génesis en dos años, una serie corta sobre Jueces en menos de un año, 107 sermones sobre 1 Samuel y 87 sermones sobre 2 Samuel en dos años, y una serie sobre 1 Reyes durante un año.
Y a veces se sentía mal e inútil por sentía que trabajaba poco. De hecho Calvino fue un hombre muy enfermo, al final de su vida no podía caminar, pero pedía que lo llevaran en camilla a la iglesia para poder predicar. Nada lo alejo del púlpito.
El gasto su vida haciendo esto, porque estaba convencido de que las personas nacen de nuevo y son edificadas en la iglesia por el poder de la palabra de Dios.
Los Distintivos de la Predicación de Calvino (25 minutos)
Pablo:
Rodrigo, sé que hay muchos aspectos distintivos en la predicación de Calvino que lo hacen destacar. ¿Podrías hablarnos sobre estos distintivos y su relevancia?
Rodrigo:
Por supuesto, Pablo. Hay un libro muy bueno sobre este tema de los distintivos en la predicación de Calvino que escribió Steve Lowson, vale la pena leerlo y mas si usted que nos esta escuchando hoy es un pastor. Me voy a permitir resaltar algunos de estos distintivos:
Educación continua: Calvino se preparaba constantemente, estudiando y aprendiendo. Mantenía altos estándares de precisión doctrinal. Su estudio le permitía subir al pulpito si notas y como resultado sus sermones resultaban muy pastorales, doctrinales y precisos / Dice Lawson: “Descansando en el Espíritu Santo, se paraba frente a las personas solo con una Biblia abierta…. Agrega: Calvino buscaba dejar la metodología que era común en su tiempo, en la que el predicador simplemente leía sus notas del sermón en el púlpito de forma fría y aburrida. El reformador dijo: “Me parece que existe muy poca predicación vivificante en el Reino, ya que la mayoría consiste de la lectura de un discurso escrito”.13 Por tanto, Calvino creía que la predicación espontánea ayudaba a producir una exposición “vivificante”, una que estuviera caracterizada por energía y pasión.
De hecho el no hacia citas en su sermón de comentaristas que leía para llegar a una comprensión más amplia del texto, el interiorizaba las doctrinas y las hacia suyas y las predicaba con autoridad y pasión.
El dijo: Si subiera al púlpito sin dignarme a ver un libro y pensara frívolamente: “Cuando predique, Dios me dará las palabras”, y viniera aquí sin siquiera molestarme en leer o pensar lo que he de declarar, sin considerar cómo debo aplicar las Sagradas Escrituras para la edificación de las personas, entonces sería arrogante y presuntuoso
Fidelidad a la Palabra: Se adhería estrictamente al texto bíblico, aunque en sus introducciones hablaba del contexto del pasaje, se centraba siempre en sacar todo el jugo al texto que estaba enseñando, era un hombre muy preciso en sus exegesis. Era fie a los términos que la biblia usa y los explicaba con detalle para que todo el mundo lo entendiera. No citaba palabras griegas y hebreas aunque manejaba los idiomas originales, su deseo no era hacer alarde de cuanto sabia, sino que la palabra del Señor fuera expuesta y aplicada a sus oyentes.
Cristocéntrica: Siempre dirigía a Cristo como el centro del mensaje. Subrayaba la importancia de la gracia de Dios para vivir la vida cristiana. Y lo hacía siendo muy serio en su interpretación gramático histórica. Y por su puesto, su habilidad para ver la biblia como un todo orgánico, su comprensión del desarrollo del pacto de gracia, hacia que todos sus sermones fueran evangélicos pues la necesidad de Cristo y la revelación de Cristo siempre ha sido .
Sus sermones eran enfocados: Calvino siempre procuraba descubrir “un pensamiento específico” detrás de lo que el autor bíblico escribió, creyendo que esta era su principal tarea. Según sus propias palabras, "Desenvolver la mente del escritor que se propone exponer es prácticamente su única tarea; [la predicación] perderá su rumbo en la medida en que guíe a sus oyentes fuera del significado que el autor le asignó al texto… Es presuntuoso y casi blasfemo tergiversar el significado de la Escritura sin cuidado alguno, como si fuera un juego. Y, sin embargo, muchos eruditos han hecho esto alguna vez."‌
Al profundizar en la intención original del autor, Calvino insistía en sensus literalis, el sentido literal del texto bíblico. Rechazaba la quadriga medieval, el antiguo esquema de interpretación que permitía significados literales, morales, alegóricos y analógicos del texto
“El verdadero significado de la Escritura es el significado natural y obvio”
Calvino creía que sin una hermenéutica literal se pierde toda objetividad y certeza. En una ocasión escribió: “El uso legítimo de la Escritura es pervertido cuando es enunciado en una forma oscura que nadie puede comprender”.14 En este sentido, el reformador declaró: “Lo importante es que la Escritura sea comprendida y explicada; cómo es explicada es secundario”
Cuando Calvino protestaba en contra de alegorizar, no protestaba en contra de hallar un significado espiritual en el pasaje, sino en contra de hallar un significado que no estuviera ahí.
Él declaró: “He mantenido… un estilo sencillo en la predicación… Creo que nada es de mayor importancia que la interpretación literal del texto bíblico”
Integridad personal: Vivía conforme a lo que predicaba. Él escribió: “Todos debemos ser discipulos de las Sagradas Escrituras, incluso hasta el final; sobre todo aquellos que han sido llamados a proclamar la Palabra. Si subimos al púlpito debe ser bajo esta condición, que aprendamos al enseñar a otros. No estoy hablando simplemente de que otros me escuchen; sino que yo también debo ser un discipulo de Dios, y la palabra que sale de mi boca debe serme provechosa; de otra manera, ¡ay de mí! Los más adoctrinados en las Escrituras son necios a menos que reconozcan que necesitan que Dios les enseñe todos los días de su vida…. En otro lugar aseguró: “la doctrina sin santidad es como una espada en manos de un loco, o… sirve solo para la jactancia vana y perversa”
Pero cuidado, Calvino no era un legalista que se pensara mas santo que los demás>— T. H. L. PARKER
Él no se impacientaba ni se frustraba, no reprendía a las personas alegando ser más santo que ellas, no les rogaba que le dieran alguna muestra física de aceptación del mensaje. Se trataba solo de un hombre que era consciente de sus pecados, de que su progreso era lento y de que es difícil ser un hacedor de la Palabra, por lo que era compasivo al transmitirle a su gente (quienes sabe tienen los mismos tipos de problemas que él) lo que Dios ha dicho.
Integración de la doctrina y la vida: Mostraba cómo la teología afecta la vida cotidiana. Ajustaba su mensaje según las necesidades de su audiencia. Motivaba a la conversión y a la fe. Utilizaba ejemplos para aclarar puntos difíciles. Llamaba a su audiencia a una vida piadosa. “el llamado de Dios va acompañado de un llamado a la santidad”
Con frecuencia pronunciaba advertencias contra la corrupción romana, la religión infernal del papa y otros peligros de su tiempo. El antinomianismo, el semipelagianismo y el fanatismo de los anabaptistas solían ser objetos de su reprensión. Su objetivo era predicar un evangelio puro para que los incrédulos pudieran ser regenerados. Por ello, Calvino se propuso defender a la verdad de todos los ataques.
Sus sermones eran preparados y sostenidos por la Oración> Él confesó: “Dos cosas están unidas: la enseñanza y la oración; Dios quiere que aquel a quien Él ha enviado a enseñar a su iglesia esté dedicado a la oración”. Leer sus oraciones al final de los sermones es en verdad una gran bendición, he usado sus oraciones para orar al Seños por nuestra iglesia.
Glorificación de Dios: Todo su ministerio de predicación tenía como fin último glorificar a Dios.
Pablo:
Gracias, Rodrigo. Estos distintivos no solo muestran la profundidad y la amplitud del ministerio de Calvino, sino también la forma en que su predicación continúa impactando a la iglesia hoy en día.
Impacto y Legado de la Predicación de Calvino (10 minutos)
Pablo:
Finalmente, Rodrigo, ¿puedes hablarnos sobre el impacto y legado de la predicación de Calvino tanto en su tiempo como en la actualidad?
Rodrigo:
La predicación de Calvino tuvo un impacto profundo y duradero no solo en su congregación en Ginebra, sino también en la iglesia reformada a nivel global. Su enfoque en la exposición bíblica estableció un estándar para la predicación reformada que continúa influyendo a los predicadores hasta el día de hoy. Su insistencia en la autoridad de la Escritura y la presencia divina en la predicación ayudaron a revitalizar la vida espiritual de la iglesia y a promover un entendimiento más profundo de la fe cristiana. Calvino dejó un legado que sigue siendo relevante y vital para la iglesia contemporánea.
Preguntas y Respuestas (5 minutos)
Pablo:
Ahora, tomaremos un breve tiempo para responder algunas preguntas del público sobre la predicación de Calvino. Si tienen alguna pregunta, pueden escribir en el chat de Facebok o Youtube. Mientras recibimos las preguntas quisiera hablar un poco de ASPRAL…..
Conclusión (5 minutos)
Pablo:
En resumen, hemos explorado cómo la predicación de Juan Calvino se caracterizó por su fidelidad a la autoridad bíblica, la creencia en la presencia divina durante la proclamación, la prioridad de la predicación en la vida de la iglesia y su método de exposición secuencial. Su compromiso con estos principios no solo transformó a su congregación en Ginebra, sino que también dejó un legado duradero en la historia de la iglesia.
Rodrigo:
Gracias por acompañarnos en este conservatorio sobre "Calvino en el Púlpito". Esperamos que esta discusión haya enriquecido su comprensión de la centralidad de la predicación en la obra de Calvino y cómo sus principios siguen siendo relevantes hoy. ¡Hasta la próxima!
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