El Anhelo de Dios

La mayoría de quienes buscan a Dios es por alguna situación difícil, una crisis o quieren saber cuál es la voluntad de Dios, ¿cuál es el Camino que Dios quiere que siga? Es una forma de preguntar ¿de qué se trata mi vida?

De adolescente esta fue una oración constante, le decía a Dios: “Quiero tener gracia ante tus ojos y los ojos de las personas” y la otra oración era ¡Señor, muéstrame tu voluntad para mi vida! Para ser honestos algunas etapas de mi adolescencia no hacía esa pregunta porque ¡ya sabía lo que Dios respondería! Y no quería escucharlo.

Esas veces que no quieres orar o preguntar ¿qué quiere Dios? porque ¡ya sabes qué te va a decir! Pero en general, esas eran mis oraciones: ¿qué estudiar y dónde estudiar? ¿con quién me he de casar? ¿habrá alguien para mí? Y ¿Dios, cuál es tu voluntad para mi vida?

De alguna forma quizá hasta intuitiva, sabemos o creemos que Dios tiene un propósito para nuestras vidas. Lees la Biblia y es verdad que algunas cosas no las entendemos y otras hasta nos espantan por las formas como Dios habla.

La semana pasada vimos que el pueblo de Israel está cerca de la montaña y “escucha” la voz de Dios por medio de truenos, relámpagos, fuego. A Moisés le habló por medio de una planta que ardía pero no se consumía, a Jonás le habló adentro de un gran pez, a Saulo después de tirarlo al suelo y dejarlo ciego. Pero tú, sigue pidiendo que Dios te hable.

Si estás en una búsqueda de Dios, esta es una pregunta importante, porque también tú quieres saber el propósito de tu vida, porque saberlo te da sentido, dirección. Y nunca es tarde para hacer sea pregunta ¿Dios, cuál es tu plan para mi vida? Es importante hacerla porque tu vida es la suma de las decisiones que has hecho y/o alguien más ha hecho por ti y tú reaccionaste a esas decisiones. La vida es la suma de las decisiones.

Esto es algo que ya sabes porque hay decisiones que tomaste y no fueron las mejores y te gustaría regresar el tiempo 5 años y des decir lo que dijiste, o decir que no a ese negocio o regresar 20 años y cambiar lo que estudiaste o regresar 10 años y cambiar algo.

Por eso es importante preguntar ¿Dios, cuál es tu voluntad para mi vida? ¿Para mis hijos? ¡enséñame tu voluntad!

Dios está interesado en ti, te ha dicho que le puedes llamar: Padre y es el Creador de la comunicación. Tenemos un Padre que te ama, es el mejor comunicador y además sabe lo que es mejor para ti.

Si buscas en la Biblia las frases que se refieren a la voluntad, designios, dirección, mandatos de Dios, encontraras muchos registros. Si lees esos versos te darás cuenta que caen en 3 categorías, no están así textualmente en la Biblia, pero son aceptados de manera general.

i. La Voluntad Providencial de Dios

ii. La Voluntad Moral de Dios

iii. La Voluntad Personal de Dios.

La mayoría está interesad en la Voluntad Personal, lo que Dios tiene para mi vida, eso es lo que me importa. No me interesan lo demás, porque quiero saber lo que Dios quiere de mí, lo que haré de mi vida, qué estudio, con quién me caso, dónde trabajar, etc.

La voluntad moral de Dios, la mayoría tenemos una idea de esa voluntad, pero no nos interesa mucho.

La Voluntad Providencial es ¿qué hará Dios en general?

Pero nos interesa la voluntad personal, de esa queremos toda la información posible. Estudiaremos la voluntad providencial y la moral y, si lo gramos tener claro estas 2, será más fácil descubrir la voluntad personal.

La Voluntad Providencial de Dios, es lo que ÉL hará sin importan si alguien quiere o no. Es cuando Dios dice ¡es tiempo de hacer esto! Y si alguien no quiere, Dios de todos modos lo hará. Es como cuando papá llega a casa, agarra el control remoto, los niños se quejan ¡papá estamos viendo una película! y papá dice: ah, que bueno, pero ahora vamos a ver las noticias ¡yo tengo el control!

Algunas veces Dios hace esto: Soy Dios, no quiero que me entiendas, quiero que obedezcas. En la Biblia encontramos referencias a esta forma de actuar de Dios.

Dios llamó a Abraham para ser el padre de Su pueblo Israel y nadie pudo hacer nada al respecto. ¿Por qué Abraham? En su voluntad providencial, ÉL lo decidió así.

Dios decidió que Israel fuera Su pueblo y nadie pudo hacer nada. Dios decidió que el Mesías llegara por medio de Israel y nadie pudo hacer nada ¡ÉL lo decidió así!

Jesús vino, muere en la cruz, resucita al 3er día y dijo: les diré lo que Dios hará, ÉL creará la Iglesia. Como 100 personas lo escucharon, tienen a los romanos de enemigos, son un grupo pequeño, no tienen recursos, en el Monte de los Olivos les dice:

“… edificaré mi iglesia, y el poder de la muerte no la conquistará.” (Mateo 16:18, NTV)

Quizá algunos aplauden, se emocionan y se sorprenden ¿en serio? somos unos 100 y no sabemos ¡qué sigue! nos dices que te irás y lo que vas a edificar.

Les dijo: quiero que vayan por todo el mundo y anuncien este mensaje de buenas nuevas, que digan todo lo que les he dicho. Ellos dicen, pero Señor, aún no hay Instagram, además, no nos dejan salir de la ciudad, estamos en peligro, te quieren matar y también a nosotros y quieres que vayamos a ¿dónde?

Pero en la voluntad providencial de Dios, la iglesia empezó y nadie pudo hacer algo para evitarlo, a pesar de que muchos lo intentaron y de muchas maneras. Muchos quisieron evitar que la Biblia se distribuyera, otros quisieron prohibir a las iglesias y Dios sigue diciendo: ¡Con permiso! Y la iglesia sigue caminando.

Faraón intento detener a Su pueblo, Moisés dijo: ¡Deja ir a mi pueblo! Faraón dice ¿quién eres tú? ¡nadie sale de este lugar! Dios dice: eso lo veremos y unos meses después Faraón le dice a Moisés: ¡váyanse y llévense algo de dinero! Porque nadie se puede interponer en lo que es la Voluntad Providencial de Dios. ÉL levantó una nación de esclavos y los hizo una nación próspera.

El primer rey de Israel: Saúl, tiene a su hijo Jonatán quién sería el siguiente rey, pero Dios le dijo: Ah, hice unos pequeños cambios y David será el siguiente rey. Saúl quiere matar a David, lo intenta, pero Dios ya había decidido que sería David el siguiente rey ¡y así fue! El Mesías vendría del linaje de David.

Saulo persiguió a la iglesia, intentó acabarlos, se reúne con unos cuantos poderosos y les dice: si me dan algo de dinero, unos cuantos soldados, un permiso, puedo acabar con esos revoltosos que quieren pervertir el judaísmo. Dios lo ve y dice ¡este me gusta pa mi equipo! Saulo se dispone a arrestar a unos y llevarlos a la cárcel; Dios derriba a Saulo al suelo, lo deja ciego y le dice: Saulo, vamos a platicar ¿qué haces pateando la pared? No me vas a ganar, es más, usaré tu vida para expandir el mensaje que quieres eliminar, y Saulo se convierte en Pablo quién escribe la mayor parte del NT, empezó iglesias en muchas partes. Porque no te puedes interponer a la Voluntad Providencial de Dios.

Alguien más culpó a los cristianos de incendiar Roma, los quieren matar y Dios no lo permitió. Nerón no tendrás éxito, porque he decidido que estos judíos lleven mi mensaje a todo el mundo, no pueden ser exterminados.

Stalin quiso sacar a Dios ¡somos ateos! Pero cuando los muros cayeron, la iglesia entró y ahora hay iglesias en muchas ciudad en que antes eran imposibles. Incluso ahora, en ciudades dónde los cristianos son perseguidos hay grupos de creyentes.

Nadie se puede interponer en la Voluntad providencial de Dios ¡ÉL es Dios! ÉL tiene el control remoto, lo interesante es que Dios te ha invitado a ser parte de SU Voluntad Providencial, esto ¡es verdad! Dios te ha invitado a ser parte de SU Plan.

Al ser parte de la iglesia, te involucras, sirves, invitas, trabajas, das, de esa forma ya estás participando, porque Su voluntad es que todos lo escuchen y conozcan a Jesús. Su Voluntad es que la iglesia se multiplique y nadie hasta ahora, lo ha podido parar, ni Hitler, Stalin, Lenin y ningún movimiento puede detener este movimiento y cuando tú eres parte de la iglesia, estás siendo parte de la voluntad providencial de Dios y en lo que ÉL hará en el mundo. Te involucras o te quedas fuera.

Lo que hoy sucede en la iglesia es tan importante cómo lo que pasó con Abraham, Pablo; por eso es importante que te involucres y no que sólo te sientes. Dios nos ha dado la estafeta para que la demos a la siguiente generación. Nos dice. no la tires, si lo haces alguien más la recogerá. Te doy a ti la oportunidad que seas parte de lo que YO haré. La iglesia continuará, por eso Casa de Fe, quiero que sean parte de lo que estoy haciendo.

Se que tienes muchas obligaciones, trabajo, pero lo más significativo que puedes hacer es proteger la integridad de la iglesia y pasar la estafeta a la siguiente generación.

La Voluntad Moral de Dios es más fácil entender. Es todo lo que la Biblia dice que puedes hacer y lo que no, de eso estuvimos hablando en las semanas pasadas. La Voluntad Moral de Dios es que honres a tus padres, que cuides tus pensamientos, que protejas la dignidad humana, que perdones, que no robes.

Esta es la parte con que peleamos, porque ¡no es fácil! Duele, es la parte que quieres quitar de la Biblia, pero cuando lo cumples, tienes la conciencia tranquila, tienes paz, la vida es mejor.

Es someterse al esposo aunque a veces se equivoca, es amar a la esposa como Jesús amó a la iglesia, honrar a los padres y obedecerlos, aunque se quedaron atorados en los 90’s. Cuando lo entendemos y lo hacemos es cuando la vida cambia. Es cuando le dices a Dios: Diré que sí a todo lo que digas, aunque no lo tenga claro, aunque la cultura me diga tonto.

Ahora, la Voluntad Personal de Dios la vas a encontrar en el contexto de las 2 anteriores. Por eso, mientras más claro los tengas, mientras más familiarizado con la Voluntad Providencial y moral será más fácil ver, discernir la voluntad personal de Dios.

Por esto padres, es importante que traigas a tus hijos a la iglesia, a Alpha, niños en acción, teens, a dónde se enseña lo que Dios hará, la Voluntad Providencial, lo que Dios desea para ellos en general, con su Voluntad Moral, porque cuando empiecen a tomar decisiones, ahí entenderán la Voluntad personal para sus vidas.

Mientras más conozcas lo que Dios hace en el mundo y lo que debes y no hacer, es más fácil entender qué quiere Dios para tu vida, con quién te casarás, dónde trabajar, qué estudiar, porque serán en el contexto de la Voluntad Providencial y la Voluntad Moral.

Este tema resalta la importancia de congregarse, porque aquí es dónde aprendemos sobre la Voluntad providencial y la moral. De modo que cuando tengas que tomar una decisión puedas decir: Ah, claro, eso sí es pecado, eso no es pecado, pero no es lo más sabio en mi vida. Ahí verás que muchas cosas no se tratan de saber cuál es la voluntad personal, porque ya te la ha dicho desde hace 2 mil años. Muchos no leen la Biblia por eso tienen dudas al no saber la voluntad providencial y Moral. Es así, porque al saber ambos de forma automática puedas eliminar algunas alternativas.

¿Qué quiere Dios de mí? el apóstol Pedro escribe sobre el tema. Fue discípulo de Jesús, pasó más de 3 años escuchándolo y aprendiendo, algunas veces también la regó, se equivocó. Cuando Jesús va al Padre, Pedro ocupó un lugar especial en la iglesia.

Pedro ayudó a Pablo a empezar iglesias en otros lugares, entre judíos y no judíos. Empieza a enviar cartas para aclarar algunos asuntos. Sobreviven 2 cartas. En una de ellas, trata una pregunta que la iglesia había hecho: ¿cómo es eso de que Jesús volverá una vez más? Sabemos que murió, resucitó y después desapareció en los cielos; por la evidencia que tenemos no lo podemos negar. Pero eso de que va a regresar otra vez ¡nos cuesta creerlo! ¡ya pasó mucho tiempo! Vemos pasar el tiempo y nos damos cuenta que muchas cosas ¡no han cambiado! Vemos hacia atrás, la historia y la vida siempre ha sido así, tal parece que ¡así seguiremos! No creemos que Dios se meta en la historia para hacer algo ¡eso no es fácil de creer! Pedro dice: es una pregunta válida y vale la pena responder:

“Dirán: «¿Qué pasó con la promesa de que Jesús iba a volver?...».” (2 Pedro 3:4, NTV)

Jesús dijo que vendría, ya pasaron varios años. Pon atención a lo que dicen después:

“… Desde tiempos antes de nuestros antepasados, el mundo sigue igual que al principio de la creación».” (2 Pedro 3:4, NTV)

En otras palabras ¡nada ha cambiado! La vida sigue igual.

“Deliberadamente olvidan que Dios hizo los cielos al ordenarlo con una sola palabra y sacó la tierra de las aguas y la rodeó con agua.” (2 Pedro 3:5, NTV)

Lo que dice y ahora tenemos más evidencia es: sé que han creído que el tiempo siempre ha sido y siempre será, pero recuerden que hubo un principio, el tiempo como lo conocemos tuvo un principio. Antes, no había nada y de la nada ¡algo surgió! Hubo un momento de creación. Ahora nosotros tenemos más evidencia de esto, los científicos coinciden que la tierra ¡tiene un principio!

Pedro dice: aunque no parece real que Dios interviene en el mundo, la verdad es que ¡ya lo ha hecho! Dios habló y las cosas fueron creadas.

“Luego usó el agua para destruir el mundo antiguo con un potente diluvio.” (2 Pedro 3:6, NTV)

Les dice ¿recuerdan cuando Dios aniquiló a todo el mundo, excepto a una familia, por medio del agua en un diluvio? Es el caso de Noé quien se salvó y preservó una familia de justos. Dios juzgó al mundo con ese diluvio y como un testimonio de no hacerlo nunca más, puso el arcoiris.

¡Dios ya ha intervenido en la historia del mundo! El tiempo no ha sido desde siempre, ha tenido un principio; pero entonces ¿por qué Jesús no regresa? Y Pedro responde. En la Voluntad providencial de Dios, EL regresará, llegará al mundo e intervendrá y el tiempo como lo conocemos terminará.

“Por esa misma palabra, los cielos y la tierra que ahora existen han sido reservados para el fuego. Están guardados para el día del juicio, cuando será destruida la gente que vive sin Dios.” (2 Pedro 3:7, NTV)

La primera vez fue destruida por agua, la siguiente será por fuego. Y aquí se pone inquietante el tema, porque no nos gusta ¡habrá un juicio! Esas palabras asustan, son duras. Y habrá destrucción ¡No sigas! Destrucción de los impíos ¿seré yo?

Esto no nos gusta, Pedro dice: no se acomoden a este mundo, porque el mundo no era y ¡Dios lo creó! Después el mundo estaba muy cómodo y llega Jesús. El hecho que Jesús no ha regresado no quiere decir que no regresará. ÉL regresará y cuando lo haga será el día del juicio, pero hay más.

“Sin embargo, queridos amigos, hay algo que no deben olvidar: para el Señor, un día es como mil años y mil años son como un día.” (2 Pedro 3:8, NTV)

No vean el reloj, Dios no mide así el tiempo. Y ahora se pone personal.

“En realidad, no es que el Señor sea lento para cumplir su promesa...” (2 Pedro 3:9, NTV)

Esto lo creemos porque la historia lo revela. Dios ha hecho una promesa, no se si sea “justa”, esa promesa es que todos, un día, daremos cuenta de nuestra vida. La tierra y el cielo como los conocemos tendrán un fin y después es esto: el juicio.

“En realidad, no es que el Señor sea lento para cumplir su promesa, como algunos piensan. Al contrario, es paciente por amor a ustedes...” (2 Pedro 3:9, NTV)

No es lento ¡es paciente! No tarda, lo que pasa es que es paciente. Y eso nos lleva a preguntar ¿paciente con qué? ¡paciente contigo y conmigo!

“...No quiere que nadie sea destruido, quiere que todos se arrepientan.” (2 Pedro 3:9, NTV)

Que nadie muera espiritualmente, que nadie muera sin la certeza de la Vida Eterna. ¿Quieres saber cuál es la voluntad personal para tu vida? ¡aquí está! Tú quieres saber con quién te casarás, qué estudiar. Esto lo veremos después, pero lo principal es esto:

“...No quiere que nadie sea destruido, quiere que todos se arrepientan.” (2 Pedro 3:9, NTV)

Que todos se arrepientan. Cambiar tu pensamiento sobre quién es Dios. Cambiar la dirección de tu vida. Quieres saber ¿cuál es la voluntad personal de Dios? para empezar, que tengas un momento de arrepentimiento, en Su providencia, su decisión es que todo el mundo un día tenga un juicio y todos sean juzgados. ¿Es justo? ¡no lo sé! ÉL es Dios. ¿Cuándo lo hará? No lo sé, pero no se ha olvidado y no está tardando, sino que está siendo paciente. Es paciente porque te ama, me ama, nos ama.

“»Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.” (Juan 3:16, NTV)

La voluntad personal de Dios para ti es que no mueras espiritualmente, sino que tengas Vida Eterna, que no perezcas, que reconozcas que Jesús es el Único Hijo de Dios, que vino a este mundo a morir por tus pecados. Mientras eso sucede ¡ÉL ha puesto pausa al juicio! Porque te ama, pero sigue teniendo el control en SU Mano.

Si dices: parte de mi tiene dudas, otra parte de mí, sabe que esto es verdad. Quiero más detalles, más información. Y otra parte está convencida y lo creo.

Si no has hecho una decisión de manera clara, razonada de aceptar a Jesús como Salvador, o quieres tener una fecha que puedas recordar, es hoy. 11 de agosto de 2024, el día que puse mi fe en Jesús como mi Salvador.

Quizá no sepas con quién ta vas a casar o qué vas a estudiar, pero sabes que la voluntad de Dios para tu vida es que te arrepientas, que aceptes a Jesús como tu Salvador. SU voluntad es que no mueras, sino que tengas vida eterna. Esto es importante, porque en SU providencia, así lo ha decidido; así como decidió tomar a Abraham para ser el padre de una nación, así decidió que un día, todo esto termine.

Esta es tu oportunidad de expresar tu fe en Dios, en gratitud, por lo que ha hecho. Una declaración de fe de que aceptas a Jesús como tu Salvador.

Pon tu confianza, tus cargas en esa cruz, como precio por tus pecados, eso es lo que la Biblia enseña. Eso es pasar del reino de la muerte y oscuridad, al reino de vida y luz.

Palabra de Dios

Oremos