La Rebelión de Adonías
Enseñanza • Sermon • Submitted • Presented
0 ratings
· 6 viewsLos hijos de David habían demostrado ser muy arrogantes y rebeldes, por tal razón Dios escoge al único hijo que mostró temor y humildad.
Notes
Transcript
La Rebelión de Adonías
La Rebelión de Adonías
1º Reyes 1:5–8
5Entonces Adonías hijo de Haguit se rebeló, diciendo: Yo reinaré. Y se hizo de carros y de gente de a caballo, y de cincuenta hombres que corriesen delante de él. 6Y su padre nunca le había entristecido en todos sus días con decirle: ¿Por qué haces así? Además, éste era de muy hermoso parecer; y había nacido después de Absalón. 7Y se había puesto de acuerdo con Joab hijo de Sarvia y con el sacerdote Abiatar, los cuales ayudaban a Adonías. 8Pero el sacerdote Sadoc, y Benaía hijo de Joiada, el profeta Natán, Simei, Rei y todos los grandes de David, no seguían a Adonías.
Introducción
Introducción
David era ahora anciano (1 Samuel 1:1), Tenía aproximadamente 70 años.
Quizá por las duras dificultades que enfrentó en su vida, su salud, fuerza y vigor se había deteriorado, de tal manera que Abisag una joven sunamita muy hermosa cuidaba de él.
Cuando David preparaba los materiales para la construcción del templo y la organización para el servicio, Dios le declaró a David que había escogido a su hijo Salomón como sucesor del trono: 1º Crónicas 28:5 “Y de entre todos mis hijos (porque Jehová me ha dado muchos hijos), eligió a mi hijo Salomón para que se siente en el trono del reino de Jehová sobre Israel.”
Sin embargo, su hijo , que ahora era el mayor después de la muerte de sus hermanos mayores (Amnón, Quileab y Absalón), se siente con el derecho a heredar el trono.
Esta es una nueva dificultad que David debe enfrentar en su vejez.
Aunque su fuerza había menguado, mantenía la lucidez mental.
La arrogancia de Adonías
La arrogancia de Adonías
1º Reyes 1:5 “Entonces Adonías hijo de Haguit se rebeló, diciendo: Yo reinaré. Y se hizo de carros y de gente de a caballo, y de cincuenta hombres que corriesen delante de él.”
Adonías fue el cuarto hijo de David, hijo de Haguit (no se sabe nada de su madre). Su nombre significa: “Mi Señor es Jehová”
Una de las características comunes de los hijos de David era su arrogancia y niños consentidos:
por arrogancia Amnón violó a su hermana Tamar…
Por arrogancia Absalón mató a Amnón y quizo usurpar el trono de su padre.
La fuente de su arrogancia consistía en que habían sido criados mimados, David no corregía a sus hijos:
1º Reyes 1:6 “Y su padre nunca le había entristecido en todos sus días con decirle: ¿Por qué haces así? Además, éste era de muy hermoso parecer; y había nacido después de Absalón.”
También eran hombres de buen parecer y hermosura. La atracción física puede hacer caer en el engaño al hacerles creer que merecen más, o tienen más derechos que los demás. Para Dios esto no vale de nada. Proverbios 31:30 “Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada.”
Esta es una de las razones por la que los hijos mayores de David fueron desechados, le daban lugar a la rebeldía, arrogancia, egoísmo y vanidad, antes de humillarse, sujetarse y obedecer.
Dios no tolera a los arrogantes: Salmo 138:6 “Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.”
Ellos se creen con derechos que Dios no les ha dado, se sienten superiores por sus dones, características físicas, posición social o económica. El fin de los que son así es la humillación. Mateo 23:12 “Porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.”
La traición
La traición
1º Reyes 1:7 “Y se había puesto de acuerdo con Joab hijo de Sarvia y con el sacerdote Abiatar, los cuales ayudaban a Adonías.”
David había anunciado públicamente que su hijo Salomón reinaría en su lugar, sus funcionarios cercanos lo sabían mejor que nadie.
Pero dos de los hombres de confianza de David lo traicionaron: Joab y Abiatar.
Joab se había unido a David desde que huía de Saúl, se convirtió en su comandante.
Joab en varias ocaciones actuó a espaldas de David, asesinó al comandante Abner, a Absalón y al comandante Amasa. Algunas de sus acciones beneficiaron a Israel, pero el problema fue que lo hizo por propia conveniencia, más que por amor a Israel.
Teniendo el poder militar decide unirse a Adonías en la sublevación contra David y el mandato de Dios.
Abiatar hijo de Ahimelec, sacerdote en tiempo de Saúl. Saúl ordenó a Doeg asesinar a todos los sacerdotes y sus familias porque ayudaron a David. Solo escapó Abiatar. David lo protegió y estuvo con él hasta ahora.
La naturaleza imperfecta del ser humano nos hace propensos a traicionar y ser traicionados. Si tenemos presente esta verdad, no permitiremos que la traición destruya nuestra vida. Debemos depositar toda nuestra confianza en Dios quien nunca nos traicionará.
David ya tenía mucha experiencia en este campo, por lo tanto no le afectó.
Jesús sabía que Judas lo traicionaría, aun así le sirvió y le lavó los pies. (Juan 13)
A Adonías lo seguían personas insatisfechas, hambrientas de poder, envidiosos que estaban dispuestos a seguir a un hombre pero no una visión.
La acción de David
La acción de David
El profeta Natán habló a Betsabé (madre de Salomón) para advertir a David de los planes de Adonías, ella acude a David para recordarle su promesa.
Seguido entra el profeta Natán para advertir al rey de la rebelión.
De manera que David proclama a Salomón rey inmediatamente.
1º Reyes 1:33–34 “Y el rey les dijo: Tomad con vosotros los siervos de vuestro señor, y montad a Salomón mi hijo en mi mula, y llevadlo a Gihón; y allí lo ungirán el sacerdote Sadoc y el profeta Natán como rey sobre Israel, y tocaréis trompeta, diciendo: ¡Viva el rey Salomón!”
Joab el comandante no estaba presente, pero estaba Benaía, uno de los valientes de David, jefe de la guardia personal de David y comandante de una parte del ejército.
También estaba con David y Salomón el sacerdote Sadoc y el profeta Natán.
Sadoc había permanecido con David desde que fue proclamado rey en Hebrón, antes de reinar sobre todo Israel. (Is-Boset era rey sucesor de Saúl).
Natán había sido el profeta que descubrió el pecado de David.
Estos dos hombres de Dios ungieron a Salomón como rey.
La palabra de Dios se cumplió y nadie pudo evitarlo. Números 23:19 “Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?”
Está profetizado que Cristo reine sobre toda la tierra, y pesar de que muchos anticristos quieran ocupar su lugar, Él será proclamado Rey de reyes y Señor de señores. Romanos 14:11 “Porque escrito está: Vivo yo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda lengua confesará a Dios.”
Conclusión
Conclusión
Aquel Adonías que se proclamó con arrogancia como rey, al ser informado de la coronación de su hermano Salomón se quedó solo.
1º Reyes 1:49 “Ellos entonces se estremecieron, y se levantaron todos los convidados que estaban con Adonías, y se fue cada uno por su camino.”
Las amistades por conveniencia nos abandonaran cuando las cosas no van bien. Esta experiencia la tuvo el hijo pródigo. (Lucas 15).
Ahora Adonías tiene que humillarse para salvar su vida. 1º Reyes 1:50–53 “50Mas Adonías, temiendo de la presencia de Salomón, se levantó y se fue, y se asió de los cuernos del altar. 51Y se lo hicieron saber a Salomón, diciendo: He aquí que Adonías tiene miedo del rey Salomón, pues se ha asido de los cuernos del altar, diciendo: Júreme hoy el rey Salomón que no matará a espada a su siervo. 52Y Salomón dijo: Si él fuere hombre de bien, ni uno de sus cabellos caerá en tierra; mas si se hallare mal en él, morirá. 53Y envió el rey Salomón, y lo trajeron del altar; y él vino, y se inclinó ante el rey Salomón. Y Salomón le dijo: Vete a tu casa.”
No te afanes por alcanzar lugares de importantes, si Dios te desea ahí Él te pondrá y si lo tomas a la fuerza, Él te quitará.
Lucas 14:8–9 “Cuando fueres convidado por alguno a bodas, no te sientes en el primer lugar, no sea que otro más distinguido que tú esté convidado por él,y viniendo el que te convidó a ti y a él, te diga: Da lugar a éste; y entonces comiences con vergüenza a ocupar el último lugar.”
Es mejor humillarnos ante Dios y Él nos exaltará a su tiempo. 1 Pedro 5:6 “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo;”