Un Dios no conocido

Ubicación y características de Atenas

Estaba ubicada al sur de Berea.

Se enardeció

*Enardecía: En el NT el verbo figura en Hechos 17:16, donde el significado no es que Pablo sea estimulado a predicar, sino que se siente francamente enojado por la idolatría.

ser provocado — ser o llegar a ser incitado o fomentado (en las emociones, sentimientos o reacciones de uno); puede ser positivo o negativo.

Hechos de los Apóstoles 17:16 NTV

16 Mientras Pablo los esperaba en Atenas, se indignó profundamente al ver la gran cantidad de ídolos que había por toda la ciudad.

1 Corintios 13:5 RVR60

5 no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;

Observo:

Léxico Lexham del Nuevo Testamento Griego θεωρέω

entender ⇔ ver — entender, concebido como ver.

percibir

¿Cómo era la sinagoga en Atenas?

Característica de la plaza en Atenas

Descripción del Areópago

AREóPAGO (griego, «Colina de Ares»). Una de las colinas más bajas en la parte occidental de la Acrópolis de Atenas, consagrada a Ares, el dios de la guerra. || La suprema corte de Atenas que se reunía en la colina llamada Areópago para dictar sus fallos. Todavía se pueden ver, labrados en la roca, los asientos de los jueces y de otros funcionarios. Según la opinión de algunos eruditos, Pablo defendió su causa y la del Cristianismo ante el Areópago, pero lo más probable es que haya dirigido su mensaje a algún grupo de filósofos en el mismo sitio en que la suprema corte dictaba sus fallos (Hch. 17:16ss). Uno de los miembros de esta asamblea—Dionisio, llamado el Areopagita—se convirtió como resultado de la predicación de Pablo, si bien los demás se burlaron de él.

Los filósofos quieren saber más, por lo que acompañan a Pablo para que hable en el Areópago, donde los atenienses y los extranjeros escuchan y comparten filosofías nuevas y extranjeras (17:19–21).

¿Cómo eran los santuarios de Atenas?

¿Quienes son los filósofos epicúreos?

Epicúreos. El propósito principal del hombre es lograr la felicidad. Tiene libre albedrío para planear y vivir una vida de placer. Epicuro le dio el más amplio alcance al asunto del placer, interpretándolo como la evasión del dolor, así que el mero hecho de disfrutar de buena salud sería un placer.

Su teoría era que el objetivo de la vida humana debía ser el de experimentar emociones placenteras, y que el epítome de la felicidad era la tranquilidad apacible de la mente. Su clave era la experiencia, no la verdad. Pablo intentó hacer volver el pensamiento de los atenienses de sus filosofías inventadas, y de sus ídolos hechos de manos, al Dios único y verdadero (Hch. 17:18).

Estoicos. El nombre de la escuela de pensamiento viene del gr. Stoa Poikilē, «pórtico pintado» o estructura con columnata de Atenas, donde Zeno enseñaba.

El estoicismo ofrecía a sus seguidores una comunidad de intelectualismo, libertad del miedo a la muerte, una perspectiva filosófica que involucraba más que la salvación personal, un mundo en el que el orden material estaba empapado de Dios, una plataforma ética consistente y respetable y una filosofía con una animada mezcla de religión y moral.

Los estoicos buscaban la felicidad a través de la sabiduría y el reconocimiento de la Razón detrás del universo, que proveía vida con un propósito moral y hacía que el mundo fuera comprensible

Anunció

El Ágora de Atenas era famosa. Situada a los pies del Areópago y próxima a la Acrópolis, era el lugar en donde se discutía por cualquier asunto, contrastando las opiniones y orientándolas filosóficamente según la condición del que dialogaba. En ella estaba el pórtico de Estoa, lugar utilizado por un grupo filosófico que recibía el nombre de estoicos. En el mismo lugar razonaban también los epicúreos, el oponente de los estoicos. Estos profesaban un panteísmo materialista, con un alto concepto del deber y que aspiraban a vivir de acuerdo con la razón, sin importarles el dolor. Los otros, esto es, los epicúreos, eran menos especulativos, buscando el placer en forma prudente como objetivo de vida. Estos y otros grupos de filósofos acudían al ágora para contrastar opiniones. Allí concurrían también muchas personas que les agradaba oír las discusiones de los filósofos y podían participar ordenadamente si lo deseaban. Con estos visitantes ocasionales hablaba Pablo en conversaciones privadas o en algún círculo más amplio, anunciándoles el evangelio; hablándoles de la obra y muerte de Jesús.

Reacciones

Rechazo

Reflexión

Creyeron