EL CRISTIANO Y LA PERSECUCION.

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EL CRISTIANO Y LA PERSECUCIÓN.
Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros. Si fuerais del
mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo,
por eso el mundo os aborrece. Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es
mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han
guardado mi palabra, también guardarán la vuestra. Mas todo esto os harán por causa de mi
nombre, porque no conocen al que me ha enviado. Juan 15:18-21 RVR1960.
VERDAD CENTRAL:
Los verdaderos hijos de Dios sufren rechazo y persecución.
INTRODUCCIÓN
Algo que caracteriza a nuestro Señor Jesucristo es que siempre habló a sus discípulos con la
verdad.El nunca quiso que sus palabras se mal entendieran, ni quiso tampoco presentar una
imagen distorsionada de las cosas. Cuando el invitó a los hombres a seguir sus caminos no
quiso dejarles con la impresión de que el camino del evangelio era un sendero de rosas en
donde todo le sonreía. Por el contrario, él presentó la verdad de las cosas y les anunció que al
seguirle les acontecieron muchos males.Probablemente el saber que seguir los caminos de
Cristo produce muchos problemas y aflicciones, y es algo que puede desalentar a muchas
personas, pero, a pesar de ello, Cristo no quiso callar sobre el asunto.
El enseñó claramente que todos aquellos que desearan seguirle enfrentarían muchos males
por causa de la palabra.
El asunto, entonces, se resume en el hecho de que si estamos dispuestos o no a seguir a
Cristo a pesar de las aflicciones. Si de veras estamos dispuestos a ser de Dios, pase lo que
pase, entonces podemos tener la confianza de que con esfuerzo y su ayuda providencial
podremos llegar hasta la meta final.
1-) LA PERSECUCIÓN CONTRA LOS CRISTIANOS ES INEVITABLE.
● Cuando el Señor hablaba con sus discípulos sobre la persecución, lo hacía de una
manera en que él dejaba constancia de que ella era inevitable (v-18) “Si el mundo os
aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros.
● La historia de la iglesia Cristiana por más de dos mil años es una prueba de cómo los
creyentes han sido siempre perseguidos. No es bueno alimentar falsas esperanzas, la
naturaleza humana nunca cambia y la amistad con Dios seguirá siendo enemistad con
el mundo hasta el día final. En vista de esta realidad es mejor tomar fuerzas en el Señor
y afrontar las dificultades propias de la vida cristiana. Que no nos detenga de seguir a
Cristo el temor a las luchas o el temor al menosprecio; recordemos siempre que la única
manera de llegar a ser Cristianos de verdad es soportando la persecución, si nos
tenemos evadiendo las luchas o esperando un momento en que nuestra conversión no
provoque problemas, jamás llegaremos a ser de Dios.
2-) JESÚS MISMO TUVO QUE SUFRIR EL ABORRECIMIENTO.
● El Señor Jesús enseñó claramente a sus discípulos que las persecuciones que Él había
padecido era un ejemplo de las luchas que les vendrían a ellos. V-20. “Acordaos de la
palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han
perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también
guardarán la vuestra.”
● No es posible que si el mismo Señor sufrió persecución, los Cristianos se vean librados
de ella. porque aún perfecto como era el Señor nadie jamás tan aborrecido como él
desde el día de su nacimiento hasta el día en que le dieron muerte.Solamente este
pensamiento debería hacernos sentir felices de sufrir por una causa que es la misma
por la que Cristo sufrió.
● Recordemos que al ser aborrecidos por el mundo estamos participando de las mismas
experiencias que Cristo vivió. sintámonos, pues, consolados con la idea de que hoy
somos participantes de sus sufrimientos, un día lo seremos de su gloria.
3-) LAS PERSECUCIONES SON UNA SEÑAL QUE NOS ATESTIGUA QUE , EN VERDAD
SOMOS DE DIOS.
● Todos los problemas y luchas que el creyente acarrea sobre si son debidos al amor que
le profesa a su Señor. Cristo dijo: “Mas todo esto os harán por causa de mi nombre,
porque no conocen al que me ha enviado. ( V-21 )
● Si fuéramos del mundo, el mundo amaría lo suyo; por ello, al ser rechazados por el
mundo nos indica que no somos del mundo, y por lo tanto no arderemos con el. pero,
por el contrario, el no ser odiados por los incrédulos es una mala seña que nos anuncia
nuestra eterna perdición, al sufrir persecución sintámonos agradecidos, pues, es prueba
que Dios nos ha tomado por hijos y en tal caso no nos desanimemos, al contrario,
sintámonos bienaventurados de tener nuestra ciudadanía en la patria celestial.
APLICACIÓN
Ya que todo Cristiano ha de ser perseguido y aborrecido siempre, no podemos esperar a que el
mundo tome con cariño o aprobación nuestra decisión por seguir a Cristo; pero, sin importar la
reacción del mundo, decidamonos por el Señor, pase lo que pase, se moleste quien se
moleste, o nos hagan lo que nos hagan, de todas formas el creyente siempre será perseguido
de una manera u otra, con Cristo tenemos mucho que ganar, sin él todo está ya perdido.
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