La meditación en la vida del creyente

Bosquejo

I) El mandato de la meditación y su bendición

A) La bienaventuranza del que medita (Salmo 1, Salmo 4, Josué 1:8-10)

A.1. La serie de contrastes con el impío. (V. 1,2,3; V.4,5)

A.1.2.- El piadoso medita ( v.2)

A.1.3.- Dios conoce a los suyos: los que meditan en su ley. (V.6)

A.2.- Cristo meditaba ( Marcos 1:35-38)

A.2.1.- El ejemplo del varón más bienaventurado. Él es el varón del salmo 1 en su máximo esplendor.

II) ¿Qué es meditar, y por qué meditar en la palabra y en Dios?

A) Definición técnica

A.1 Definición puritana.

B) Porque no es lo mismo tragar que digerir.

III) ¿Cómo y cuándo meditar?

A) Preparación

A.1 Limpieza y preparación

A.2 Memorización y reflexión

B) Principios puritanos del cuándo.

Introducción:

Muchas veces algunos hermanos de diferentes edades me han dicho que el cristianismo puede llegar a ser sinónimo de cansancio, pesadez y difícil. Y aunque en cierta manera puedo llegar a entender lo que me están diciendo, porque puede resultar difícil vivir una vida piadosa y bienaventurada con las aflicciones del mundo y vivir en este cuerpo de carne que se opone constantemente a hacer la voluntad de Dios. Sin embargo, creo yo, que muchas veces puede llegar a ser pesada para muchos cristianos porque no encuentran deleite en las prácticas espirituales y la vida junto a Jesús, o simplemente porque no están haciendo lo que deben hacer para que esas verdades bajen al corazón por el poder de Dios el Espíritu Santo, comen pero no digieren lo que comen. Por lo que en esta mañana, quiero traer a tu conocimiento una práctica veterotestamentaria y que los puritanos pulieron a su punto máximo: la meditación.

I) El mandato de la meditación y su bendición

A) La bienaventuranza del que medita (Salmo 1, Salmo 4, Josué 1:8)

A.1. La serie de contrastes con el impío. (V. 1,2,3; V.4,5)

En primer lugar vamos a ver qué dice el Salmo 1 acerca de los que son bienaventurados, ¿qué hacen los bienaventurados para ser doblemente felices, tener vida en abundancia en Dios? El salmo 1 está divido en 2 partes: 1.- Del versículo 1-3 describe al bienaventurado y el fin del bienaventurado; 2.- del versículo 4-5 se describe al impío y el fin del impío; y en el versículo 6 se nos reitera de nuevo el fin del bienaventurado y el fin del impío.

A.1.2.- El piadoso medita ( v.2)

Pero ¿por qué este es bienaventurado la persona del salmo 1? Ciertamente porque no se junta ni anda en consejo de impíos, pero en lo particular, creo yo que eso no hace al bienaventurado alguien bienaventurado en primera instancia, al menos en el texto, lo que veo, es que el “sino” resalta la razón por la que esta persona es bienaventurada: Salmo 1:2 “sino que en la ley del Señor está su deleite, y en su ley medita de día y de noche!”. Esa es la clave. A lo largo de todo el AT los salmistas y los líderes de Israel solían meditar:

- Salmo 4:4 “Temblad, y no pequéis; meditad en vuestro corazón sobre vuestro lecho, y callad. (Selah)” .

- Josué 1:8 “Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás éxito.”

- Salmo 119:11 “En mi corazón he atesorado tu palabra, para no pecar contra ti.”

- Salmo 119:148 “Mis ojos se anticipan a las vigilias de la noche, para meditar en tu palabra.”

Como pueden observar hermanos, la meditación es un aspecto central para la vida del creyente. La meditación es necesaria para nuestro crecimiento espiritual y nuestro disfrute en la vida cristiana. Hermano, quiero preguntarte algo…¿Eres feliz con la vida que tienes? ¿Eres feliz con la vida que tienes en Cristo? ¿Eres feliz porque tus pecados te han sido perdonados, cuando mueras irás a la presencia del Señor y podrás disfrutar de Él para siempre? Yo hermanos, he tenido que responder a esta pregunta mientras preparaba este sermón, y llegué a la conclusión de que no hay mayor felicidad que vivir con Cristo y en obediencia y complacencia a Él. Porque si no eres bienaventurado en Él, ciertamente lo eres en otra cosa. Pero ¿qué te puede ofrecer el mundo? En verdad piénsalo, detente a pensarlo. El pecado te roba el gozo, la paz, la alegría de la vida cristiana, la persona de Salmo 1 es bienaventurada porque medita en lo que Dios hace y dice en su ley.

Dice el CMeW: P. 1. ¿Cuál es el fin principal de la existencia del hombre?

R. El fin principal de la existencia del hombre es glorificar a Dios, y gozar de él para siempre.

Hermano la vida cristiana dejará de ser difícil hasta que encuentres deleite, gozo y verdadera vida en vivir para Él.

A.2.- Cristo meditaba ( Marcos 1:35-38)

No solo los salmistas y puritanos meditaban, Dios mismo meditaba.

A.2.1.- El ejemplo del varón más bienaventurado. Él es el varón del salmo 1 en su máximo esplendor.

Cristo es el varón bienaventurado de este salmo. ¿Alguna vez pensaste en que Cristo es la persona más feliz del universo? No lo digo en un sentido humanista, sino real, Cristo es el varón más bienaventurado porque se deleita en la palabra de la trinidad. No puedes dar algo que no tienes, ¿cierto? Y Cristo dijo, yo vine a darles vida, y vida en abundancia. Cristo tiene una vida abundante hermanos. Y se hizo carne para que pudiéramos participar de ella en Él.

II) ¿Qué es meditar, y por qué meditar en la palabra y en Dios?

A) Definición técnica.

Okay hermano, me quedó en claro que la meditación es algo importante en la vida del creyente, pero ¿Qué es meditar y qué beneficios puede traer?

Bien hermanos, en primera instancia, meditar podría ser definida como: pensar, reflexionar, murmurar entre dientes , hacer sonidos con la boca. Pero ¿eso no lo hacen las religiones asiáticas hermano? Bueno ciertamente ellos meditan, pero la diferencia es que los cristianos no meditamos para intentar conectar nuestra mente con el ser supremo o el infinito para encontrarnos a nosotros mismos, sino que la meditación bíblica implica meditar en el Dios trino y su palabra para que nuestros afectos, nuestra voluntad y nuestra vida este en obediencia a su voluntad y le amemos más. Ejemplo de la vaca.

A.1 Definición puritana.

Para los puritanos la meditación es un ejercicio tanto para la mente como para el corazón. La meditación es un santo ejercicio por el que traemos a la memoria las verdades de Dios y, con seriedad, reflexionamos en esas verdades y nos las aplicamos. - Thomas Watson.

Para los puritanos la meditación era algo central en la vida cristiana, no se podía vivir una vida cristiana santa y completa sin esta práctica tan abandonada. Edward Calamy decía: La verdadera meditación es cuando un hombre medita en Cristo de tal manera que logra que su corazón se inflame de amor por Cristo, y medita en el pecado de tal manera que logra que su corazón lo aborrezca.

B) Porque no es lo mismo tragar que digerir.

1.- Para que todas nuestras actividades mundanas la hagamos con una mente celestial, y ya sea que estemos en la tienda, en el trabajo o en los estudios, aún pensemos en Cristo y en el cielo.

2.- Para que veas a Dios en todas las cosas y todas las cosas las veas en Dios. (Mateo 5:8 “Bienaventurados los de limpio corazón, pues ellos verán a Dios.” )

3.- Para que las verdades de Dios permanezcan en nosotros y no se esfumen, para que bajen al corazón y podamos aplicarlas. Sin meditación las verdades divinas no permanecerán en nosotros, el corazón es duro, la memoria olvidadiza, y sin la meditación todo esta perdido decía un puritano. Por ejemplo hermano, ¿qué viste en tu devocional? ¿Te volviste a acordar de lo que Dios habló en tu vida a lo largo del día o al día siguiente? ¿Ven? No se puede ser un cristiano sólido si solo masticas mundo y por un ratito la biblia.

Cuando no meditamos, tenemos en poco a Dios, su palabra, y revelamos que no somos piadosos o bienaventurados en Cristo y su palabra (Salmo 1:2). Por eso el bienaventurado de salmo 1 medita y no solo medita, sino que se deleita en las verdades de Dios y quién es Dios.

4.- Para ser un cristiano sólido. Salmo 119:92 “Si tu ley no hubiera sido mi deleite, entonces habría perecido en mi aflicción.”

5.- Para que nuestras oraciones sean efectivas. No podemos orar sin meditar en lo que estamos orando, porque sino serían oraciones frías, sin sentido, hablar por hablar.

III) ¿Cómo y cuándo meditar?

A) Preparación

En primer lugar, prepárate hermano, es necesario que dispongas una hora específica en la que te vayas a dedicar de manera seria a la meditación.

1.- Limpia tu corazón de las cosas de este mundo. Ruega al Señor no solo que te guarde de la compañía externa, sino de la compañía interna, es decir, que te guarde de los pensamientos vanos, y mundanos que te puedan distraer. Aléjate a alguna habitación o algún lugar fuera de casas que sea tranquilo y te permita estar solo con el Señor.

2.- Limpia tu corazón de la culpa y la contaminación del pecado. Confiesa tu pecado delante del Señor, confiesa tus pensamientos inicuos para que sean limpiados y puedas acercarte con una consciencia limpia delante de Él.

3.- Acércate a la tarea de la meditación con la mayor seriedad posible. Debemos tener cuidado de no hablar neciamente ante el sabio Dios, y que nuestros pensamientos no vayan errantes. Que tu mente no esté ocupada en otra cosa, considera que La Trinidad esta presente. Si tus pensamientos son vagos, ora al Señor en perdón y vuelve a empezar, concentrándote en ello.

4.- Después de limpiarte, ahora sí, comienza pidiéndole al Espíritu Santo que pueda asistirte en ese tiempo que vas a dedicar a la meditación, que ilumine tu entendimiento, que pueda llevarte a la verdadera y santa reflexión, que pueda guiarte en que tus afectos se vean movidos al amor a Dios y lo celestial y tus afectos se vean movidos al aborrecimiento del pecado.

5.- Selecciona una carta o un libro de la escritura para que puedas leerlo, no necesariamente completo, pero lo que leas, que en verdad lo mastiques y lo mastiques.

6.- Memoriza algún pasaje, el problema de muchas iglesias es que sus miembros ya no quieren pensar, no seamos así hermanos.

B) Principios puritanos del cuándo.

Muchos hermanos sugieren que al menos 20-30 mins al día si es posible, si nuestras ocupaciones nos lo impiden, es bueno que sean 1-2 horas a la semana.

De preferencia en la mañana

- (Salmo 63:1–3 “Oh Dios, tú eres mi Dios; te buscaré con afán. Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela cual tierra seca y árida donde no hay agua. Así te contemplaba en el santuario, para ver tu poder y tu gloria. Porque tu misericordia es mejor que la vida, mis labios te alabarán.” )

-( Salmo 119:147 “Me anticipo al alba y clamo; en tus palabras espero.” )

Algunos pueden encontrar las noches más fructíferas.

-Salmo 4:4 “Temblad, y no pequéis; meditad en vuestro corazón sobre vuestro lecho, y callad. (Selah)”

O simplemente cuando tengas libre. Camina, medita, enciérrate y medita, es a fin de gusto de cada quien como mejor se concentre.

Medita en el sermón del domingo, medita en tu devocional diario, medita en algún texto en particular, medita en los atributos de Dios, medita en la segunda venido de nuestro Dios, medita en las consecuencias del pecado, de las riquezas de la gracia, en fin hermanos, hay muchísimos temas en los que podemos verdaderamente meditar para nuestro bien espiritual. Así seremos bienaventurados y podremos decir como el salmista oh cuanto amo yo tu ley, y encontraremos la verdadera bienaventuranza del salmo 1 y la vida cristiana no será pesada ni difícil.