FORMACION DE LA IGLESIA

EL PODER DE DIOS EN LA IGLESIA

Hechos 1:6-11

6 Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? 7 Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; 8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. 9 Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos. 10 Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, 11 los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.

HECHOS 1

1. EL ESCRITOR.

a. El libro de los Hechos comienza con un puente entre el Evangelio de Lucas y el comienzo de la Iglesia. El autor (Lucas) se dirige a Teófilo, la misma persona para quien escribió su Evangelio, y resume las instrucciones finales de Jesús a sus discípulos antes de su ascensión al cielo.

b. Notemos que el primer tratado tenía que ver con todo lo que Jesús comenzó a HACER y a ENSEÑAR.

c. El evangelio de Lucas describe el comienzo de la obra de Jesús; Hechos describe su continuación. La obra de Jesús sigue creciendo hasta el día de hoy.

2. EL PLAN.

a. Después de su resurrección física, Jesús se apareció a sus discípulos durante cuarenta días. Durante ese tiempo estuvo conversando con ellos acerca de los temas del reino de Dios. Su interés principal se centraba no en los reinos de este mundo, sino en el reino o esfera donde Él es reconocido como Rey.

b. Debían concentrarse en Él y no especular sobre los detalles de la restauración de la nación de Israel. Les dijo que esperaran en Jerusalén al Espíritu Santo; que recibirían un poder sobrenatural y que serían sus testigos.

c. El plan de Jesús para la expansión del evangelio era que se extendiera en círculos cada vez más amplios: desde Jerusalén a Judea, Samaria y, finalmente, a todas partes del mundo.

d. Jesús ya no estaría físicamente con ellos, sino que a través del Espíritu vendría y viviría en ellos para permitirles continuar la obra que había comenzado

3. EL ASCENSO.

a. Después de eso, en Betania, en el monte de los olivos, Jesús ascendió al cielo. Fue por medio de Su ascensión que el Señor Jesús pudo tomar Su lugar en el trono de Dios en las alturas, para ministrar allí como gran Sumo Sacerdote para todos los suyos.

b. Así Jesús regresó a casa, escoltado por ángeles, a través de las nubes, más allá de las estrellas, de regreso al lugar de gloria de donde vino.

c. Pero ahora Él era diferente; ahora tenía un cuerpo humano glorificado, resucitado y marcado por las cicatrices de la cruz. En ese cuerpo llegó a las puertas de la gloria, que se abrieron ante Él.

d. Con Su ascensión viene la promesa de Su regreso del cielo a la tierra en el futuro.

e. Dos ángeles aparecieron a los discípulos y les dijeron que Jesús regresará de la misma manera que lo habían visto ascender.

4. EL REEMPLAZO.

a. Después de la partida de Jesús, los apóstoles regresaron a Jerusalén, donde se reunieron y oraron con varias personas, entre ellas la madre y los hermanos de Jesús.

b. Pedro se levantó para hablar a los demás sobre la necesidad de elegir un nuevo apóstol para reemplazar a Judas Iscariote, quien había traicionado a Jesús y había muerto.

c. Se propusieron dos candidatos, José y Matías. Después de orar y pedir la guía de Dios, la suerte cayó sobre Matías, quien fue elegido como el nuevo apóstol.

d. Era necesario que hubiera doce apóstoles en el inicio de la iglesia. El significado del número doce era que así como doce tribus habían sido la base de Israel, así mismo, doce apóstoles serían la base del nuevo pueblo de Dios, la iglesia.

HECHOS 2

1 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. 2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; 3 y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. 4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.

1. EL ESPÍRITU.

a. Pentecostés, que significa “cincuenta”, era una fiesta judía de la cosecha que se celebraba el domingo, cincuenta días después de la Pascua. Se trataba de un día especial cuando los israelitas presentaban la primera porción de su cosecha a Dios.

b. Por eso mismo, era un día apropiado para conmemorar el nacimiento de la iglesia. Cristo, la verdadera Pascua, había sido sacrificado, y ahora cincuenta días después, Dios derramó su Espíritu sobre ese pequeño grupo de discípulos que iban a convertirse en los primeros miembros de la iglesia de Jesucristo.

c. Estaban todos los apóstoles reunidos y con otros discípulos sumaban 120 personas. Y de repente, un sonido como de un viento fuerte llenó la casa y apareció, algo así como lenguas de fuego que se posaron sobre cada uno de ellos.

d. Todos recibieron el bautismo del Espíritu Santo, pues cada uno habría de llevar a cabo la gran comisión.

e. Los apóstoles comenzaron a hablar en diferentes idiomas, lo que asombró a los presentes en Jerusalén, quienes visitaban la ciudad de diversas regiones y países, y entendían lo que los apóstoles decían en su propio idioma.

2. EL ARREPENTIMIENTO.

a. La gente que los rodeaba pensaba que estaban borrachos. Pedro se puso de pie y dijo que lo que les estaba sucediendo fue profetizado por Joel cuando dijo que en los últimos días habría profecías, visiones y sueños.

b. Pedro predicó sobre la vida, muerte y resurrección de Jesús, afirmando que Dios lo había hecho Señor y Cristo.

c. Los que habían tramado la muerte de Jesús y lo habían acusado ante Pilato representaban a todo Israel y actuaron en nombre de la nación.

d. Pedro llamó al pueblo al arrepentimiento; su predicación conmovió a la multitud, y aproximadamente tres mil personas recibieron el evangelio, se arrepintieron y fueron bautizadas ese día.

e. El Cuerpo de Cristo fue formado, y todos los creyentes desde entonces han entrado en el beneficio de bautismo del Espíritu Santo. Cada nuevo creyente es sumergido de forma invisible en Cristo y su iglesia. Ese es el bautismo del Espíritu Santo.

3. EL COMIENZO.

a. La iglesia dio inicio ese día y los nuevos creyentes dieron testimonio de su fe auténtica al cuidarse unos a otros, renunciando a sus propios intereses y teniendo compañerismo juntos.

b. La primera comunidad cristiana se dedicaba a la enseñanza de los apóstoles, la comunión, el partimiento del pan y la oración.

c. Los creyentes vivían en unidad y compartían sus posesiones entre ellos, y Dios agregaba a la iglesia los que debían ser salvos.

d. Este capítulo marca el nacimiento de la iglesia y destaca la importancia del Espíritu Santo en la vida y misión de los creyentes.

LECCIONES.

(Lección 1)

Hechos 1:1

En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a HACER Y A ENSEÑAR.

HACER Y ENSEÑAR. Las dos cosas van de la mano, no una, sino las dos. El orden es importante. Hacer=conducta; Enseñar=equipar.

Lucas 24:19 dice: Jesús nazareno… fue varón profeta, poderoso en OBRA y en PALABRA delante de Dios y de todo el pueblo;

No podemos enseñar, sin antes vivir y (hacer) practicar lo que creemos.

EL HACER Implica:

a. Capacitar a los creyentes, 1:8 (recibirán poder)

b. Ser testigos de Jesús en conducta 1:8

c. Extender el reino 1:8

d. Establecer la iglesia 2:41-47

EL ENSEÑAR IMPLICA:

a. Proclamar a Cristo al hablar de su,,,,

(1) Su muerte (Hechos 2:22-23)

(2) Su resurrección (Hechos 2:24)

(2) Su reino (Hechos 2:30)

(3) Arrepentimiento y perdón de pecados (Hechos 2:38)

(Lección 2)

Hechos 1:8

Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

TESTIGOS DE JESUCRISTO

La Biblia no nos manda a ser Testigos de Jehová, sino Testigos de Jesucristo.

1. La Persona a Testificar: Vamos a dar testimonio de Cristo.

a. Somos llamados a ser testigos, ,,,, no filósofos, innovadores, exploradores, héroes, espectadores, protagonistas o inventores.

b. Ni siquiera nos llamó para ser teólogos. NOS LLAMÓ PARA SER TESTIGOS.

c. Damos testimonio de ,,,,

(1) Su amor para con nosotros

(2) De su perfección/su justicia

(3) De su expiación por los pecados

(4) De su poder y su resurrección

(5) De su ascensión

(6) De su pronto regreso

d. Damos testimonio a través de ,,,,

(1) Nuestras palabras; confesión de labios

(2) Nuestras acciones; una vida entregada a Dios

(3) Nuestra literatura; la circulación de materiales de crecimiento.

1. La Esfera para Testificar: Vamos a dar testimonio en todo lugar.

Y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

En Jerusalén y en toda Judea,,,, en nuestro contexto, significa:

a. En nuestro hogar

b. Con nuestros hijos y familiares

c. Nuestro vecindario

d. Nuestros amigos

,,,,, en Samaria,,,, en nuestro contexto, significa:

a. Ciudades circunvecinas

b. Misiones a corto plazo

c. Países del mismo idioma

,,, hasta lo último de la tierra ,,,, en nuestro contexto, significa:

a. Países y continentes lejanos

b. Culturas con otros idiomas

c. Misiones a largo plazo

3. El Poder para Testificar; Con el poder del Espíritu Santo.

(1:8) Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo.

EL ESPÍRITU SANTO ES NECESARIO ,,,

a. Para darnos nueva vida (regeneración)

b. Para vivir la vida cristiana

c. Para realizar la tarea de evangelizar

d. Para hablar con firmeza y convicción

EL ESPÍRITU SANTO ES UN REGALO ,,,

a. Divino

b. Que es enviado por el Padre

c. Para cada creyente

d. Y significa la presencia constante de Cristo.

El Espíritu Santo debe ser reconocido a cada momento por cada creyente.

Sin Él no podemos vivir la vida cristiana.

El libro de los Hechos es reconocido como “Los Hechos del Espíritu Santo”, y vemos su poder movilizando a los primeros creyentes en le primer siglo.

El objetivo de esta prédica es equipar a los creyentes con la misma clase de enseñanza que recibieron los primeros discípulos.

Anunciar que el mismo poder está disponible para cada uno de nosotros.

El poder de Dios en la Iglesia es la presencia continua de nuestro Señor Jesucristo por medio de su Espíritu Santo; es Dios habitando en nuestro ser.

¿De qué forma nos llenamos continuamente de Él? A través del estudio diario de Su Palabra y nuestro acercamiento a Dios por medio de la oración.

Oremos