EL FIN DE LAS AFLICCIONES
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· 6 viewsEl fin de las aflicciones no consiste en la ausencia de estas, sino en que Dios las usa para despojarnos de toda seguridad y confianza personal para confiar en el.
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2 Corintios 1:8–11 (NVI)
8 Hermanos, no queremos que desconozcan las aflicciones que sufrimos en la provincia de Asia. Estábamos tan agobiados bajo tanta presión, que hasta perdimos la esperanza de salir con vida: 9 nos sentíamos como sentenciados a muerte. Pero eso sucedió para que no confiáramos en nosotros mismos sino en Dios, que resucita a los muertos. 10 Él nos libró y nos librará de tal peligro de muerte. En él tenemos puesta nuestra esperanza, y él seguirá librándonos. 11 Mientras tanto, ustedes nos ayudan orando por nosotros. Así muchos darán gracias a Dios por nosotros a causa del don que se nos ha concedido en respuesta a tantas oraciones.
INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
Los problemas y las aflicciones en la vida son inevitables, forman parte intrínseca de la misma. Estos se terminarán para cada uno de nosotros tan prono y dejemos este mundo.
Job 5:7 (RVR60)
Pero como las chispas se levantan para volar por el aire, Así el hombre nace para la aflicción.
En la Biblia encontramos gran cantidad de ejemplos de hombres y mujeres que fueron azotados por las aflicciones diarias de la vida, siendo Job quizá uno de los que más lo experimento.
Job 14:1 (NTV)
»¡Qué frágil es el ser humano! ¡Qué breve es la vida, tan llena de dificultades!
A lo largo de las páginas de las Escrituras nos encontramos ilustraciones vivas de personas (creyentes o no creyentes) que atravesaron en sus vidas toda clase de dificultades, penas, dolores, desilusiones, desencantos, y en algunos casos incluso la más profunda desesperación. Y al ver estos casos podríamos preguntarnos:
¿PORQUE UN DIOS BUENO, MISERICORDIOSO, COMPASIVO Y TAN LLENO DE AMOR, PERMITE QUE SUCEDAN TODAS ESTAS COSAS?
Porque, en un principio podemos llegar a pensar: - Bueno esto malo o tan situación difícil o aquel problema le esta pasado a tal persona, porque no conoce a Dios o porque esta lejos de él-. Y de cierta manera esto es verdad, pues algunas de estas aflicciones resultan más gravosas, por la ausencia de Dios en las vidas de quienes las padecen.
PERO ENTONCES ¿PORQUE PERMITE QUE TAMBIEN LOS CRISTIANOS PADEZCAN AFLICCIONES?
Y es que en ocasiones para los cristianos, las aflicciones no son menos dolorosas que para los no creyentes, y en algunos casos incluso parecerían más dificiles de llevar, porque en medio de las mismas surgen preguntas y parecería que Dios esta distante y despreocupado de nuestra condición.
Job 13:24 (NTV)
¿Por qué te alejas de mí? ¿Por qué me tratas como a tu enemigo?
Aún y cuando Job era un hombre temeroso de Dios y apartado del mal, en medio de la terrible aflicción que estaba viviendo; al no tener una comprensión clara de lo que estaba pasando, sintió que Dios lo estuviera abandonado en medio de la aflicción que estaba pasando.
Y es que, aún hombres de Dios como David (un Hombre conforme al corazón de Dios, quien es el autor de más de la mitad de los salmos) que se enfrentaron a momentos de aflicción, llegaron a albergar dudas del cuidado de Dios para con ellos.
Salmo 13:1 (NBLA)
¿Hasta cuándo, oh Señor? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás de mí Tu rostro?
La situación de David era desesperada, sus enemigos lo estaba persiguiendo para acabar con su vida, y la ayuda de Dios no llegaba de la forma que el quería y en el momento que el lo pedía.
Y es que dígame algo ¿a quien le gusta atravesar por dificultades en la vida? Por supuesto que a nadie.
Es es la razón por la que cuando hay una promesa de terminar con las dificultades, librarse de las aflicciones a cambio de alguna dádiva, resulta muy atractivo y tentador dejarse llevar por algo así (Pare de Sufrir).
Todos quisiéramos que nuestras aflicciones llegaran a su fin y tener una vida libre de ellas, pero el pensamiento y la voluntad de Dios, las aflicciones tienen un fin en nosotros que cumplir.
Deuteronomio 8:2 (NVI)
Recuerda que durante cuarenta años el Señor tu Dios te llevó por todo el camino del desierto, y te humilló y te puso a prueba para conocer lo que había en tu corazón y ver si cumplirías o no sus mandamientos.
En el plan de Dios, las aflicciones y las dificultades forman parte de su programa de capacitación integral para su pueblo.
Y Pablo entendía muy bien este principio, porque su conocimiento de Dios, no estaba separado de su experiencia de vida con él.
Por lo que el quiere que los corintios, una iglesia prolífica en muchos aspectos (la manifestación de Dios entre ellos por medio de los dones), pero carente en otros aspectos (Carácter cristiano, amor, lealtad compañerismo, etc) aprendan esto también.
2 Corintios 1:8 (NVI)
Hermanos, no queremos que desconozcan las aflicciones que sufrimos en la provincia de Asia. Estábamos tan agobiados bajo tanta presión, que hasta perdimos la esperanza de salir con vida:
Los sufrimientos que Pablo menciona aquí por alguna razón no aparecen descritos en las escrituras, asi que nosotros no sabemos muy bien de que se trataban, pero las palabra de Pablo no queremos que desconozcan,las aflicciones que sufrimos, realmente reflejan que la comunidad de la iglesia en Corinto si sabía lo que Pablo había pasado.
Sin lugar a dudas el apóstol Pablo era un hombre que constantemente padecía cualquier cantidad y variedad de aflicciones y dificultades por su trabajo misionero llevando el Evangelio.
Pudo haber sido atormentado por alguna enfermedad, (algunos erudito concuerdan que Pablo tenía un problema en los ojos), entonces es posible que quizá Pablo pudiera sufrir porque no podía ir con libertad a predicar a otras regiones a causa de sus males físicos.
Nosotros sufrimos también a causa a veces de distintos tipos de enfermedad, algunas de ellas causadas por nuestras negligencias, otras por producto de la edad, pero en la mayoría de las veces estas no estan relacionadas con la obra de Cristo. Aplicación: Cuando estamos enfermos, encontramos la oportunidad perfecta para no asistir a la reunión, o no orar o no leer, pero no dejamos de ir a Trabajar o de comer verdad?
Quizá es posible que Pablo pudiera estar sufriendo por alguna persecución a causa de llevar el mensaje a lugares hostiles. O quizá algun accidente o alguna presión.
Aflicciones = thiliosis = tribulación, aflicción, angustia. Estado de adversidad física, mental, social o económica. Presión.
Pero independientemente de lo que fuera, la intención de Pablo no era simplemente dar un reporte informativo de su situación a los corintios; sino que lo quiere enseñarles (y a nosotros de paso) cual el es fin que las aflicciones tienen en nuestras vidas.
Los corintios consideraban que para alguien como Pablo que decía ser un apóstol, era una persona que padecía tantas dificultades y aflicciones que eso le restaba autoridad y legitimidad a su ministerio.
Si el evangelio que Pablo predicada era libertad de la esclavitud, una promesa de una nueva vida y venir a formar parte de un nuevo reino (el de Cristo), debía llevarlo a una esfera superior libre de toda clase de peligros.
Aplicación: Y así muchos hoy, piensan que venir a Cristo es el fin de los problemas, las aflicciones y las dificultades de la vida. SI son hijos del rey y forman parte de un nuevo reino, No estan llamados a sufrir padecer o tener dificultades de ninguna clase o tipo.
Definitivamente no sabemos con exactitud cuales eran los sufrimientos de Pablo, pero si podemos ver que no era asuntos menores, sino bastante graves.
2 Corintios 1:8 (NVI)
Hermanos, no queremos que desconozcan las aflicciones que sufrimos en la provincia de Asia. Estábamos tan agobiados (NBLA fuimos abrumados(* cargados, oprimidos, atribular, estar rendido) sobremanera (* En exceso, mucho mas de las fuerzas),bajo tanta presión, que hasta perdimos la esperanza de salir con vida:
¿Alguna vez alguna dificultad lo la abrumado, a tal grado de presión que siente que ya no tiene las fuerzas suficientes para seguir adelante?
¿Alguna vez a perdido la esperanza de salir de aquella situación?
Mire Pablo no era un superhombre, el hecho de ser un apóstol de Jesús no lo hacía inmune a la adversidad. Realmente este problema en Asia era tan intenso que su propia vida esta pendiendo en un hilo.
Ser Cristianos e Hijos de Dios, no nos exenta de padecer o sufrir con adversidad, tampoco no libra de ella y mucho menos nos hacer super Hombre o mujeres.
Pablo era cociente de sus defectos y debilidades, e incluso en esos momentos de dificultad, experimento una profunda desesperación, de la forma que mire;
2 Corintios 1:9 (NVI)
nos sentíamos como sentenciados a muerte. Pero eso sucedió para que no confiáramos en nosotros mismos sino en Dios, que resucita a los muertos.
Las dificultades por las que Pablo paso en Asia, lo llevaron a pensar que ya no había más para donde continuar, incluso el mismo sentía que sus días habían llegado a su fin.
No es que Pablo tuviera temor a la muerte, “Pues para el vivir era Cristo y morir era una ganancia”, sino que es posible que estuviera experimentando el dolor de la aflicción tan punzante que sentía es que quizá ya no iba a seguir llevando a otros el evangelio, no iría a otros lugares, a predicar.
La Intención de Pablo no era hacer una apología (defensa) del sufrimiento como medio de alcanzar el favor de Dios, ni tampoco una defensa de la victimización ante las circunstancias adversas de la vida que todos enfrentamos, el Punto de Pablo era enseñar que las aflicciones que nos suceden tienen un fin de parte de Dios para nosotros.
2 Corintios 1:9 (NVI)
nos sentíamos como sentenciados a muerte. Pero eso sucedió para que no confiáramos en nosotros mismos sino en Dios, que resucita a los muertos.
El énfasis de Pablo no esta en sus circunstancias, no esta en sus aflicciones, no esta en la magnitud de ellas; sino esta en Fin con el que Dios permite que estas sucedan.
Es decir todas estas situaciones dificiles que Pablo vivió en Asia eran para entender dos 2 cosas importantes;
1) No confiáramos en nosotros mismos.
Las raíces del orgullo, la autosuficiencia, y la seguridad personal cavan muy profundamente en nuestros corazones y no son fáciles de quitar.
Cuando confiamos demasiado en nosotros mismos para obtener fuerza, justicia, y sabiduría, no estamos confiando totalmente en Dios y la consecuencias de esto es simplemente una ruta rápida hacia el fracaso.
La seguridad, la comodidad e incluso de cierta manera la prosperidad (en cualquier ambito de la vida), produce en el hombre la creencia de que puede manejar por si solo su vida.
La razón de las terribles dificultades que Pablo enfrento en Asia tuvieron que ver para que no confiara en si mismo, en su capacidad, en su habilidad, o en sus propias fuerzas.
Uno de los fines de Dios para las aflicciones en nuestras vidas es desarticular toda la auto confianza, desarraigar las raíces del orgullo que aún estan en nosotros, sacando a la luz nuestras propias y débiles fuerzas.
2) Para no confiar en nosotros mismos sino en Dios.
Dios permite las aflicciones en nosotros para que aprendamos a confiar mas en el.
La situación que el apóstol vivió hasta el punto de quedarse sin fuerzas e incluso perdiendo la esperanza de la vida, era parte del plan terapéutico de Dios con Pablo, para erradicar de el la auto confianza y enseñarle de nuevo que todos lo que tiene (tenemos) viene de Dios.
Es cuando las cosas se ponen peor frente a nosotros y cuando se atraviesan los peores momentos, donde vemos que se agotan todos los recursos humanos disponibles para salir adelante, cuando somos más receptivos a conocer el poder de Dios en nosotros.
Confiar en Dios en todo momento, incluso aquellos que son de mayor aflicción puede parecer a los ojos de los orgullosos un signo de debilidad e incluso de fracaso; pero es en esos momentos donde Dios nunca deja a los suyos para librarlos.
Son las aflicciones las que nos arrojan a los brazos dulces y tiernos de Cristo y lo que nos muestran cuan dependientes somos de Él.
Pablo aprendió una vez más y eso es lo que quiere que los corintios aprendan: Aún y cuando sus penas en Asia fueron terribles, superiores a todas sus fuerzas, aún cuando ya no había más recursos propios para salir adelante, Dios fue mayor porque aún en medio de eso el lo rescató.
2 Corintios 12:7–10 (LBE:DHH)
7 Por eso, para que yo no me creyese más de lo que soy por haber recibido revelaciones tan maravillosas, se me ha dado un sufrimiento, una especie de espina clavada en el cuerpo, que como un instrumento de Satanás ha venido a maltratarme. 8 Tres veces le he pedido al Señor que me quite este sufrimiento, 9 pero el Señor me ha dicho: “Mi amor es todo lo que necesitas, pues mi poder se muestra plenamente en los débiles.” Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que venga a residir en mí el poder de Cristo. 10 Y me alegro también de las debilidades, los insultos, las necesidades, las persecuciones y las dificultades que sufro por Cristo, porque cuanto más débil me siento, tanto más fuerte soy.
Los falsos maestros que acusaban a Pablo presumían de sus logros, sus virtudes y se sentían bastante seguros de si mismos. Pero Pablo no; el era el primero en reconocer su propia insuficiencia, su debilidad, el reconocía que su suficiencia venía directamente de Dios y no de el mismo.
2 Corintios 1:9 (NBLA)
De hecho, dentro de nosotros mismos ya teníamos la sentencia de muerte, a fin de que no confiáramos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos,
La convicción de Pablo era tal que si Cristo quito la muerte y saco a la luz la vida y la inmortalidad por el evangelio y si Dios levantado a Cristo crucificado de entre los muertos, El tienen el poder para guardar, sostener y levantar a cualquiera en medio de la peor y más dura de todas las aflicciones posibles.
Mire no es una confianza vacía o sin fundamente, no era confiar en cualquier dios, sino en el único Dios que tienen el poder para levantar a los muertos de sus sepulcros.
No todos los cristianos de Corintio habían captado la verdad que solo se puede experimentar el poder de Dios cuando uno se ha vuelto totalmente débil y carece de cualquier solución humana.
Dios resucita a los que están muertos, no a los que ya están exaltados
El poder de Dios se perfecciona en la debilidad de la cruz de Jesucristo, y ese patrón divino de actuación en el mundo continua hasta nuestros días.
Por medio de las aflicciones suyas Pablo quería enseñar a los corintios la seguridad de que Dios esta con ellos en medio de las aficiones por lo que escribe.
2 Corintios 1:10 (NVI)
Él nos libró y nos librará de tal peligro de muerte. En él tenemos puesta nuestra esperanza, y él seguirá librándonos.
Las dificultades en Asia fueron para Pablo una lección de la gramática del cielo.
El resultado de estas aflicciones llevaron a Pablo a adquirir una confianza inalterable en Dios. Sus aflicciones lo llevaron a la convicción de que sin ninguna clase de duda, Dios podía hacer algo por el.
Pablo entendió esto: No es la primera vez que estoy en apuros, ni tampoco será la última. Pero ahora entiendo que Dios me rescato de aquel terrible peligro, por lo que lo mas seguro para mi es seguir confiado en el, pues el puede rescatarme de nuevo y estoy seguro de que el lo hará de nuevo.
Aplicación: Ese mismo principio aplica para nosotros. Dios nos ha rescatado una y otra vez de las dificultades y aflicciones que han llegado a nuestra vida, no hay motivos entonces para no confiar en que Dios puede volver a rescatarnos y libramos de nueva cuenta de la aflicción.
Salmo 116:8 (TLA)
Me libraste de la muerte, me secaste las lágrimas, y no me dejaste caer.
La confianza de Pablo y del salmista en Dios no era teoría y especulación; sino de hecho y de experiencia. Sabían lo que Dios hace, por eso no tenía miedo.
La confianza del Cristiano es igual ahora, Si Dios nos ha librado tantas veces, porque dudar que él lo seguirá haciendo con nosotros.
Dios siempre esta listo para liberar y consolar en las aflicciones a sus hijos porque el es un Padre amoroso, un Dios fiel.
Lamentaciones 3:21–23 (NVI)
21 Pero algo más me viene a la memoria, lo cual me llena de esperanza:
22 El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota.
23 Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad!
El fin de las aflicciones es mostrarnos el gran amor de Dios por los suyo y su incomparable compasión y eso nos lleva a crecer en esperanza en ÉL.
2 Corintios 1:11 (NVI)
Mientras tanto, ustedes nos ayudan orando por nosotros. Así muchos darán gracias a Dios por nosotros a causa del don que se nos ha concedido en respuesta a tantas oraciones.
Las aflicciones también tienen como fin que los creyentes oremos unos por otros.
Aún cuando Pablo era un hombre de Dios, eso no lo hacía autosuficiente, sino mas bien tan humilde de pedirle a otros hermanos que lo llevaran en sus oraciones.
Pablo, pedía a los corintios que oraran por el, para que fuera librado de ellas, porque estaba convencido que poder de la oración, porque sabía que Dios la escucha, el la responde y el actúa.
Cuando las aflicciones tocan a la puerta de nuestra vida o la puerta de alguien que conocemos y amamos, es nuestro deber el llevar su aflicción su carga delante del trono de Dios. es ahi en el trono donde se encuentra el oportuno socorro.
En ocasiones por mas que lo queramos, no podremos hacer mucho o casi nada por aquellos que son nuestros amigos, que amamos, pero lo que si podemos hacer es ponerlos en nuestras oraciones para que Dios los libre de la aflicción.
El propósito de la oración en la aflicciones no solo es pedir por la ayuda de Dios, tambien va acompañada de una abundante dosis de adoración. Porque la oración es adoración misma.
Pablo quería que los corintios cuando oraran por el, diera gracias a Dios por la consolación que él da en las aflicciones.
CONCLUSIÓN.
CONCLUSIÓN.
Hasta que nuestros cuerpos vayan al sepulcros las aflicciones en la vida no tendrán fin, pero mientras por abrumadoras que nos parezcan tienen como fin librarnos de la auto confianza, el orgullo y la autosuficiencia, y llevarnos a poner nuestra confianza en Dios, ya que si hasta el día de hoy el nos ha librado, podemos estar seguros de que así como levanto a Cristo de los muertos vendrá en el futuro para seguirnos librando. Por lo tanto no dejemos de orara por otros que se encuentra en diversas aflicciones confiando en que el Señor los puede librar y el mismo llevarse toda la adoración por ello.