La Muerte de un Rey

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Introducción

El 22 de Noviembre 1963, el coche presidencial estaba pasando por la calle Elm Street, en Dallas, Texas.
Era un día soleado y mucha gente se había reunido para ver al presidente John F. Kennedy y a su esposa Jackie.
Pero, a las 12:30 PM salieron tres disparos del techo del techo de uno de los edificios de gobierno.
El presidente murió al instante.
Esta noticia sacudió al mundo entero ya que nadie podía creer que este hombre tan carismático, aparentemente lleno de vida, fuera asesinado a la edad de 46 años.
La muerte de un rey, de un líder, de un empresario, de un gobernante, de un funcionario público estremece a la comunidad o al país.
Cuando las personas mueren a causa de una enfermedad prolongada es más fácil aceptar el deceso de una persona.
Pero, cuando una persona muere de manera repentina - esto tiende a inquietarnos.
¿Cómo reaccionamos cuando Dios está tras la muerte de un gran líder de gobierno?
Esto es precisamente lo que vemos en nuestro pasaje que vamos a considerar el día de hoy.
Lucas escribe:
Hechos de los Apóstoles 12:23 NBLA
23 Al instante un ángel del Señor lo hirió, por no haber dado la gloria a Dios; y Herodes murió comido de gusanos.
Dios mismo fue quien se encargó de llevar a su muerte al rey Herodes Agrippa, nieto de Herodes el Grande (quien era rey durante la época del nacimiento de Jesús).
Herodes nos enseña una lección:
Dios no puede ser burlado - nosotros somos meros mortales y daremos cuentas ante el único y verdadero Dios.
Hoy veremos:
Herodes - el hombre que se creyó Dios
El Dios que demostró ser el único y verdadero Dios

Herodes - el hombre que se creyó Dios

Acabamos de estar en Antioquía, el pueblo al norte de Jerusalén, el lugar donde por primera vez llamaron a los discípulos, “cristianos”.
Pero, ahora Lucas nos hace regresar a Jerusalén para darnos cuenta de los estragos que está haciendo el rey Herodes Agrippa en contra de los discípulos de Jesús.
Hechos de los Apóstoles 12:1–2 NBLA
1 Por aquel tiempo el rey Herodes echó mano a algunos que pertenecían a la iglesia para maltratarlos. 2 Hizo matar a espada a Jacobo, el hermano de Juan.
En primer lugar, tenemos que mencionar que este Herodes, y los demás Herodes que lo antecedieron, no eran reyes legítimos.
Solo los descendientes de David podían ser ungidos como reyes sobre Israel.
Este es un rey puesto por el imperio romano.
Así que Herodes está ocupando un lugar que no le corresponde. Es un hombre que jamás debió ser rey sobre Israel.
Lucas nos deja ver su maltrato de los discípulos de Jesús.
Arrestaba a los creyentes con el fin de maltratarlos. Esta palabra tiene la idea de hacerle daño a alguien con crueldad.
Tan cruel fue con el pueblo de Dios que mandó que Jacob fuera decapitado.
Según Lucas 5:10 sabemos que Jacobo y Juan eran socios de Pedro en su negocio de pescador.
Esta es la segunda vez que vemos que dan muerte a un seguidor de Jesús.
En Hechos 7 vimos la muerte de Esteban.
Ahora vemos la muerte de uno de los apóstoles del Señor.
¿Por qué haría esto Herodes?
Lucas responde esta pregunta:
Hechos de los Apóstoles 12:3 NBLA
3 Y viendo que esto agradaba a los judíos, hizo arrestar también a Pedro. Esto sucedió durante los días de los Panes sin Levadura.
Recordemos que era un rey ilegítimo.
No tenía ningún derecho de ser rey de Israel.
Así que para congraciarse con los judíos y mantener su control / dominio sobre ellos comenzó a perseguir a los discípulos de Jesús ya que eran tan odiados por los judíos.
De esta manera Herodes ganaría el favor de los judíos.
Así que podemos ver a un hombre:
Cruel.
Que con una orden da muerte a una persona.
Que cree tener al pueblo dominado / manipulado - a sus pies.
Seguramente este hombre se cree ser un rey todopoderoso, invencible, nadie puede ponerse en su contra.
En un cambio de escena, vemos en los vv. 20 en adelante como el orgullo y prepotencia de Herodes llegan a su máxima expresión.
Hechos de los Apóstoles 12:20–23 NBLA
20 Herodes estaba muy enojado con los de Tiro y de Sidón. Pero ellos, de común acuerdo se presentaron ante él, y habiéndose ganado a Blasto, camarero del rey, pedían paz, pues su región era abastecida por el territorio del rey. 21 El día señalado, Herodes, vestido con ropa real, se sentó en la tribuna y comenzó a hablarles. 22 Y la gente gritaba: «¡Voz de un dios y no de un hombre es esta!». 23 Al instante un ángel del Señor lo hirió, por no haber dado la gloria a Dios; y Herodes murió comido de gusanos.
Lucas menciona el caso de los habitantes de Tiro y de Sidón.
Son pueblos, de la costa cerca de Fenicia, al norte de Jerusalén.
Lucas nos dice que Herodes los abastecía, es decir dependían de Herodes para recibir grano y así poder sustentar a la comunidad.
Por alguna razón desconocida Herodes está muy molesto con ellos.
La gente teme que Herodes deje de abastecerlos y esto los lleve a pasar hambre.
El temor de la gente dice mucho acerca de Herodes.
Con mucha razón temían la reacción de Herodes si no lograban reconciliarse con él.
Parece que lograron tener una audiencia ante Herodes por medio de uno de los funcionarios de Herodes.
Por fin se ha llegado el día en que han de venir ante Herodes.
De pronto, en el día señalado, sale un hombre con ropa real, un hombre orgulloso, prepotente, esperando la adulación de la gente.
De pronto la gente comienza a gritar como si Herodes fuera Dios mismo.
Josefo, el historiador judío, registra esta escena:
Al día siguiente, a la salida del sol, se puso una túnica toda ella de plata y caminó hacia el teatro. Entonces la plata brilló con todo su esplendor causando una especie de temor y de temblor en aquellos que estaban viendo el espectáculo. De inmediato la multitud llamó desde varios lugares, con palabras que en verdad no eran para su bien, tratándole como a Dios, y gritando: “En el pasado te hemos honrado como hombre, pero ahora te honramos con una naturaleza superior a la de cualquier mortal.”
El rey no reprendió, ni se mostró en desacuerdo con las lisonjas de la multitud….Sintió un agudo dolor abdominal, comenzando con un violento ataque….De modo que fue llevado rápidamente al palacio y se extendió por todas partes la noticia de que no tardaría mucho en morir….Y cuando hubo sufrido continuamente durante cinco días, a causa del dolor en el abdomen, murió a la edad de cincuenta y cuatro años, después de haber estado gobernando durante siete años.
La narrativa de Lucas y de Josefo coinciden.
Dios mismo estrechó su manó e hirió a Herodes.
Fue Dios quien le quitó la vida a Herodes como juicio por haber recibido la adulación de la gente, por haber aceptado ser objeto de idolatría, por no haber dado la gloria a Dios.
El que se creía Dios, el que creía que solo tenía que dar una orden para quitar la vida a la gente, el que creía tener el poder de abastecer a un pueblo con comida o dejarlos morir de hambre, el que creía ser el todopoderoso, ahora Dios lo ha herido de muerte y doblegado ante su presencia.
Trae a la memoria este pasaje:
Isaías 42:8 NBLA
8 »Yo soy el Señor, ese es Mi nombre; Mi gloria a otro no daré, Ni Mi alabanza a imágenes talladas.
El pecado de los que no somos Dios se vuelve a repetir:
Lucifer perdió su lugar como ángel protector porque quiso ser más grande que Dios.
La serpiente tentó a Eva para que comiera del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal para que pudieran ser como Dios.
El anticristo pretenderá ser Dios y demandará alabanza y adoración pero será destruido por el Hijo de Dios.
El orgullo, la prepotencia, la falta de humildad, el tener un concepto demasiado alto acerca de nosotros mismos, el creernos invencibles o indispensables, nos llevará a la ruina.
Somos seres humanos y no Dios.
Somos seres débiles y dependemos de la bondad de Dios y nos necesitamos unos a otros.
Dios nos libre de creernos Dios porque es lo más irracional que podríamos creer.
Existe un solo y verdadero Dios.

El Dios que demostró ser el único y verdadero Dios

El único Dios que existe, el Dios que es, no solo existe como concepto teórico sino que ha demostrado en su palabra mediante hechos que él es el único y verdadero Dios.
Vemos a Dios actuar en el arresto de Pedro.
Hechos de los Apóstoles 12:4–6 NBLA
4 Habiéndolo arrestado, lo puso en la cárcel, entregándolo a cuatro grupos de soldados para que lo custodiaran, con la intención de llevarlo ante el pueblo después de la Pascua. 5 Así pues, Pedro era custodiado en la cárcel, pero la iglesia hacía oración ferviente a Dios por él. 6 Esa misma noche, cuando Herodes estaba a punto de venir a buscarlo, Pedro estaba durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas; y unos guardias delante de la puerta custodiaban la cárcel.
Según el v. 4 Lucas nos dice que Pedro fue arrestado y puesto en la cárcel.
En el v. 2 Jacobo fue decapitado.
Ahora, Herodes quiere llevar a Pedro ante el pueblo.
Si no fuera por la Pascua, seguramente Pedro ya hubiera sido ejecutado.
Veamos la custodia que tiene Herodes resguardando a Pedro:
Tiene un soldado a cada lado.
Son cuatro grupos de cuatro soldados (16 en total) que seguramente cuidan a Pedro durante los cuatro tiempos de la noche.
En ningún momento está Pedro solo.
Pedro no puede escaparse. Sería inútil intentarlo.
Pero Lucas nos dice que la iglesia está orando fervientemente por Pedro.
Lucas anticipa que el Dios que existe va a obrar.
El Dios al que Pedro sirve, el Dios al que la iglesia dirige su oración, va a obrar.
Así que vemos a Dios demostrar que él es el verdadero Dios:
Hechos de los Apóstoles 12:7–8 NBLA
7 De repente se le apareció un ángel del Señor, y una luz brilló en la celda; y el ángel tocó a Pedro en el costado, y lo despertó diciéndole: «Levántate pronto». Y las cadenas se cayeron de las manos de Pedro. 8 «Vístete y ponte las sandalias», le dijo* el ángel. Así lo hizo, y el ángel añadió: «Envuélvete en tu manto y sígueme».
El ángel va a Pedro y hace brillar la celda oscura.
El ángel despierta a Pedro.
Dios hace que las cadenas caigan.
Hechos de los Apóstoles 12:9–10 NBLA
9 Y saliendo, Pedro lo seguía, y no sabía que lo que hacía el ángel era de verdad, sino que creía ver una visión. 10 Cuando habían pasado la primera y la segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro que conduce a la ciudad, la cual se les abrió por sí misma. Entonces salieron y siguieron por una calle, y de repente el ángel se apartó de él.
Pedro no sabe lo que está pasando.
Él cree que todo es una visión.
Claramente Pedro no está armando una estrategia de escape.
Él depende enteramente de la dirección de Dios.
Dios mismo abre la primera, segunda, y última puerta que da a la calle.
¡Pedro está libre! El único Dios que existe lo ha libertado.
Es por eso que Pedro llega a la conclusión que ha sido Dios quien lo ha libertado.
Hechos de los Apóstoles 12:11 NBLA
11 Cuando Pedro volvió en sí, dijo: «Ahora sé en verdad que el Señor ha enviado a Su ángel, y me ha rescatado de la mano de Herodes y de todo lo que esperaba el pueblo de los judíos».
Pedro fue liberado de la muerte por la poderosa mano de Dios.
Ahora, los vv. 12-17 están llenos de sentido de humor:
Pedro llega a la casa para de la madre de Juan Marcos y una sierva sale a recibirlo pero de emoción regresa a da la noticia sin abrir la puerta.
Da la noticia y los hermanos creen que está loca.
Unos creen que ella ha visto “su ángel”
Tal vez creen que Pedro ya fue ejecutado y que se ha aparecido su espíritu.
Esto me dice que tenían mucho que aprender de la Biblia ya que conservan una superstición judía.
A final de cuentas la iglesia que estaba orando fervientemente por Pedro no puede creer que Dios realmente ha contestado.
Así que podemos ver que el Dios que verdaderamente existe ha obrado a pesar de la incredulidad de su pueblo.
Dios libero a Pedro de la cárcel no por la oración del pueblo sino a pesar de su fe débil.
Dios se glorificó e hizo conforme a su voluntad.
No era tiempo que Pedro muriera.
Dios tenía otros planes para Pedro.

Conclusión

El hombre orgulloso, vanidoso, prepotente, perdió la vida a manos del Dios Todopoderoso.
La criatura comenzó a sentirse grande y creerse Dios.
Pero Dios no puede ser burlado.
En cambio, el Dios Todopoderoso demostró ser verdaderamente Dios:
Al librar a su siervo de la cárcel.
A contestar las oraciones de su pueblo a pesar de su fe débil.
Al hacer algo que dejó a su pueblo completamente asombrado (v. 16) para hacer crecer y fortalecer su fe en Dios.
Dios es tan bueno en darnos esta historia llena de emoción y de humor…para mostrar que podemos confiar en el único Dios que existe, al Dios de bondad, al Dios de amor, al Dios que sabe dar buenas cosas a sus hijos.
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