Indentificando lo más importante para mí

Mark 10:17–22 RVR60

Al salir él para seguir su camino, vino uno corriendo, e hincando la rodilla delante de él, le preguntó: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios. Los mandamientos sabes: No adulteres. No mates. No hurtes. No digas falso testimonio. No defraudes. Honra a tu padre y a tu madre. El entonces, respondiendo, le dijo: Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud. Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz. Pero él, afligido por esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

En el pasaje que acabamos de leer Jesús se encuentra a solo días de ir a Jerusalem para ser crucificado. Cuando en su recorrido se le aparece un hombre que se postro a los pies del Maestro.

Era evidente que este hombre había identificado a Jesús como un Maestro diferente a los de aquel tiempo. Lk. 18.18 Este hombre era un dirigente de los judíos en alguna sinagoga.

Es tal la deferencia que le dice a Jesús Maestro bueno. A lo que Jesús siendo completamente humano y completamente Dios le dice contesta:

¿Por qué me llamas bueno? Solo Dios es bueno. Con esto Jesús estaba procurando apuntar a Dios como el dador e Todo bueno y el único capaz de proveer

La intención de aquel joven

Este joven tenía la intención de poder saber que era lo necesario para poder tener vida eterna

Obtener la vida eterna se refiere a vivir el reino de Dios a través de abrazar Jesús como el Mesías . En los tiempos de Jesús muchos judíos negaban la posibilidad de la resurrección de los muertos y la vida eterna, otros creían que serían resucitados y aseguraban la entrada al reino de Dios .

Daniel 12:2 “y del polvo de la tierra se levantarán las multitudes de los que duermen, algunos de ellos para vivir por siempre, pero otros para quedar en la vergüenza y en la confusión perpetuas.”

Este joven interesaba saber que obras tenía que realizar para obtener su salvación.

Todavía estando bajo la ley de Moisés le pregunta al Maestro v.17 ¿Qué debo hacer para heredar la vida eterna?

El entendía que por las obras podía alcanzar la salvación

v.19 Ya sabes los mandamientos" No mates. no cometas aldulterio, no robes, No presentes falso testimonio, no defraudes, honra a tu padre y a tu madre"

Jesús se estaba refiendo a la segunda parte del decálogo (de los diez mandamientos) Ex.20.12-17 donde habla de las relaciones con nuestro prójimo

El hombre muy confiado en su respuesta : Le indico a Jesús:

Todo eso lo he cumplido desde que era joven.

Era evidente que este jóven se preocupaba por realizar aquellos actos que el hombre podía identificar, por mantener una apariencia de piedad, consolaba su conciencia

La Condicion de aquel joven

Su condición moral , de una apariencia inpecable lo había estancado en un desconocimiento de lo que en realidad albergaba su corazón

La ceguera espiritual es un problema más comun de lo que pudieramos imaginar

Jeremiah 17:9 “Nada hay tan engañoso como el corazón. No tiene remedio. ¿Quién puede comprenderlo?”

Pero el Señor Jesús lo lleva a que mire con detenimiento dentro de su corazón:

El remedio para su condición

Mark 10:21“Jesús lo miró con amor y añadió: —Una sola cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme.”

Cuando Jesus vio la condicion de aquel hombre, de estacamiento espiritual y desconocimiento de lo que albergaba su corazón

John 2:25 “no necesitaba que nadie le informara nada acerca de los demás, pues él conocía el interior del ser humano.”

Jesús lo amo: El Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido

Romans 5:8 “Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.”

Cuando el amor de Jesús fluyo hacia el corazón de aquel joven le dijo: vende todo lo que tienes y daselo a los pobres y tendrás tesoro en el cielo, luego ven y sígueme .

Jesús lo enfrentó con la realidad de que aquel joven No estaba tan bien con Dios como el pensaba.

Lo llevo a que enfrentara la raíz de su problema

La primera parte de los Diez mandamientos dice en: Exodus 20:3 “»No tengas otros dioses además de mí.”

Todo lo que el hombre ama, piensa y obedece es su dios. Jesús lo llevó a que viera que el reconociera que habían cosas en su vida que el había permitido que ocuparan el lugar en su corazón que solamente lo puede ocupar Dios.

Esto es lo que te mantiene fuera del reino de Dios y tienes que arreglarlo. Mientras ames tus pertenencias más que a Dios No podrás entrar en su reino.

La respuesta de aquel joven

Mark 10:22 “Al oír esto, el hombre se desanimó y se fue triste porque tenía muchas riquezas.”

Aquel joven se entristeció porque considero que el precio a pagar era demasiado alto para el.

Se marchó y perdió el interes en el premio que le esperaba en el reino de Dios

Valoró mas las cosas de este mundo que el precio de amar a Dios y tener una relación profunda con él.

Este joven se sientió triste porque descubrió que lo más importante en su corazón era sus pertenencias y su status inmediato.

Nosotros hoy

Muchos hemos sido segados por nuestra falsa justicia al igual que aquel joven

Decimos yo acepte a Jesucristo

Asisto al templo y cuando espero irme con Cristo

Pero lamentablemente No valoramos ni procuramos una relación profunda con Dios

Hemos adoptado una actitud negligente e indiferente.

Al igual que aquel joven, hemos sido engañados por nuestro corazón

Nos hemos llegado a sentir bien con nuestro status actual y tenemos falsas expectativas de lo que vamos a lograr

Revelation 3:17 “Dices:(LAODICEA) “Soy rico; me he enriquecido y no me hace falta nada”; pero no te das cuenta de cuán infeliz y miserable, pobre, ciego y desnudo eres tú.”

El problema de vivir satisfechos consigo mismo es morir satisfechos , a veces tenemos un falso y erroneo entendimiento de nuestra salvación.

El requerimiento del Jesús

Mark 8:34–35 “Entonces llamó a la multitud y a sus discípulos. —Si alguien quiere ser mi discípulo—les dijo—, que se niegue a sí mismo, lleve su cruz y me siga. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa y por el evangelio, la salvará.

Mark 8:36–37 “¿De qué sirve ganar el mundo entero si se pierde la vida? ¿O qué se puede dar a cambio de la vida?”

¿Qué es lo más importante en tu vida?

El Señor en esta hora Nos mira con amor, de la misma manera que miró a aquel muchacho .

Permitamos que su amor fluya para que su Santo Espíritu nos convensa de pecado

El nos quiere llevar a ver lo que está en realidad gobernando nuestro corazón.

Tal vez sea:

El trabajo

Los estudios

Una relación

El status social

las pertenencias

Los afanes, los compromisos , los negocios

la familia

el ministerio

Luke 14:26 “«Si alguno viene a mí y no sacrifica el amor a su padre y a su madre, a su esposa y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, y aun a su propia vida, no puede ser mi discípulo.”

Que está ocupando el corazón que Jesucristo compró a precio de Sangre preciosa en la cruz para darnos salvación.

Porque no hemos sido salvados por las obras que hemos hecho sino por el derramamiento de su Sangre y la regeneracion por medio de su Espíritu Santo.

Matthew 6:24“»Nadie puede servir a dos señores, pues menospreciará a uno y amará al otro, o querrá mucho a uno y despreciará al otro. ...

Responderás como el joven que se fue muy triste ( No sabemos si regreso donde Jesús)

Al marcharse triste a quel joven tomó la triste desicion de darle la espalda a Dios

John 3:19 “Ésta es la causa de la condenación: que la luz vino al mundo, pero la humanidad prefirió las tinieblas a la luz, porque sus hechos eran perversos.”

La respuesta que Dios espera!!!

Psalm 139:23–24“Examíname, oh Dios, y sondea mi corazón; ponme a prueba y sondea mis pensamientos. Fíjate si voy por mal camino, y guíame por el camino eterno.”

23 Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;

Pruébame y conoce mis pensamientos;

24 Y ve si hay en mí camino de perversidad,

Y guíame en el camino eterno.