Enseñanos a orar
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Padre nuestro que estás en los cielos,
"Cuando oréis, decid: "Padre nuestro"". Eleva a los esclavos a la dignidad de la libertad. Corona la condición humana con un honor que supera el poder de la naturaleza.Nos rescata de la medida de la esclavitud, dándonos por su gracia lo que no poseíamos por naturaleza, y nos permite llamar a Dios "Padre", como admitidos al rango de hijos. Esto, junto con todos los demás privilegios, lo recibimos de Él. Uno de estos privilegios es la dignidad de la libertad, don propio de quienes han sido llamados a ser hijos.
Ser hijo a veces lo asociamos con una cualidad pero también debemos recordar que es un estado (rango)
Nos manda, por tanto, que nos atrevamos a decir en nuestras oraciones: "Padre nuestro". Nosotros, que somos hijos de la tierra y esclavos y sujetos por ley de naturaleza al que nos creó, llamamos "Padre" al que está en los cielos. Lo más apropiado es que Él permita a los que rezan entender esto también. Puesto que llamamos "Padre" a Dios y hemos sido considerados dignos de tan distinguido honor, debemos llevar una vida santa y completamente irreprochable. Debemos comportarnos como agrada a nuestro Padre y no pensar ni decir nada indigno o impropio de la libertad que se nos ha concedido....
Relación de embajador y hijo
El Salvador de todos nos concede muy sabiamente llamar a Dios "Padre", para que, sabiendo bien que somos hijos de Dios, nos comportemos de manera digna de quien nos ha honrado. Él recibirá entonces las súplicas que ofrezcamos en Cristo.
santificado sea tu nombre.
confesamos su gloria y suprema majestad. Entonces recibimos su temor en nuestra mente y llevamos una vida recta e intachable. De este modo nos hacemos santos y podemos acercarnos al Dios santo.... La oración es, por tanto, "Que tu nombre sea santificado en nosotros, en nuestras mentes y voluntades". Este es el significado de la palabra santificado. Si una persona dice: "Padre nuestro, santificado sea tu nombre", no está pidiendo que se añada nada a la santidad de Dios. Más bien pide poseer una mente y una fe tales que sientan que su nombre es honorable y santo. El acto es fuente de vida y causa de toda bendicion
Venga tu reino.
Padre, toma posesión del reino preparado para ti desde la fundación del mundo". Ves, ése es el reino del que hablamos cuando decimos: "Venga a nosotros tu reino". Que ese reino venga a nosotros y que nos encontremos dentro de ese reino
SÓLO LOS SANTOS PUEDEN orar "VENGA A NOSOTROS TU REINO". CIRILO DE ALEJANDRÍA: Dios es nuestro Rey ante los mundos. Puesto que Dios reina siempre y es omnipotente, ¿con qué vista le ofrecen sus peticiones los que llaman a Dios "Padre" y le dicen: "Venga a nosotros tu reino"?
Parecen desear contemplar a Cristo, el Salvador de todos, alzándose de nuevo sobre el mundo. Él vendrá. Vendrá y descenderá como juez, ya no en una condición humilde como nosotros o en la humildad de la naturaleza humana. Vendrá con la gloria propia de Dios, habitando en la luz inaccesible y con los ángeles como guardianes. En alguna parte dijo: "El Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre, con sus santos ángeles". ...Matthew 16:27
Ese tribunal es aterrador. El Juez es imparcial. Es un tiempo de súplica, o más bien de juicio y de retribución. El fuego, el castigo duradero y los tormentos eternos están preparados para los malvados. ¿Cómo pueden los hombres rogar para contemplar ese tiempo?... Los malvados e impuros llevan vidas bajas y lascivas y son culpables de todo vicio. En modo alguno les conviene decir en sus oraciones: "Venga a nosotros tu reino". ...
Los santos piden que llegue el tiempo del reinado perfecto del Salvador, porque han trabajado obedientemente, tienen una conciencia pura y esperan la recompensa de lo que ya han hecho. Al igual que los que, esperando una fiesta y algarabía a punto de llegar y de aparecer en breve, están sedientos de su llegada, así también ellos. Confían en que estarán gloriosos en presencia del Juez y le oirán decir: mateo 25:34"Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde los cimientos del mundo." ... Creían plenamente lo que decía sobre la consumación del mundo.
Cuando se les aparezca de nuevo desde el cielo, brillarán como el sol en el reino de su Padre. Dicen correctamente en sus oraciones: "Venga a nosotros tu reino". Porque se sienten seguros de que recibirán una recompensa por su valentía y alcanzarán la consumación de la esperanza que se les ha propuesto. COMENTARIO A LUCAS, HOMILÍA 73
Hágase tu voluntad,como en el cielo, así también en la tierra.
Pedimos que se dé poder a los que están en la tierra para hacer la voluntad de Dios e imitar la conducta practicada arriba en el cielo por los santos ángeles.... Los santos piden que tanto Israel como los gentiles sean tenidos por dignos de la paz de lo alto y sean consolados, ya que estaban en la miseria y atrapados en la red del pecado sin posibilidad de escapar. Habiendo recibido por la fe la justicia que es en Cristo, puedan llegar a ser puros y hábiles para toda buena obra. Rezan: "Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra". Como he dicho, la voluntad de Dios sobre todo es que los que están en la tierra vivan en santidad, piadosamente, sin culpa, lavados de toda impureza y diligentes en imitar la belleza espiritual de los espíritus de arriba, en el cielo. La Iglesia en la tierra, puesto que era la semejanza visible y la imagen de la Iglesia del primogénito que está arriba, puede agradar a Cristo.
3 El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy
EL PAN DEL DÍA ES EL PAN DE LA NECESIDAD. EPHREM EL SIRIO: "Danos nuestro pan constante del día". Mira, ha dicho: "Buscad el reino de Dios, y estas cosas de más se os darán también a vosotros". Ha dicho "del día" para enseñarnos la pobreza en relación con las cosas del mundo. Es suficiente sólo para nuestra necesidad, de lo contrario, cuando estemos ansiosos por un tiempo, podríamos alejarnos de la intimidad con Dios. Este pan del día indica necesidad. No nos da sólo el pan, sino también el vestido y otras cosas, como dijo: "Vuestro Padre sabe cuáles son vuestras necesidades antes de que se las pidáis." COMENTARIO SOBRE EL DIATESSARON 6.16A DE TATIANO.
Con "cada día" el evangelista muestra que sin este pan no podemos vivir una vida espiritual ni siquiera durante un día. Cuando dice "hoy", muestra que el pan debe comerse cada día. No bastará con haber comido ayer, si no comemos hoy de modo semejante. Que nuestra pobreza cotidiana nos anime a derramar esta oración en todo momento, pues no hay día en que no sea necesario que comamos este pan para fortalecer el corazón de la persona que llevamos dentro.
"Diariamente" puede entenderse también referido a nuestra vida presente. Es decir, "danos este pan mientras permanezcamos en este mundo presente".
Debemos entender más bien "danos hoy nuestro pan de cada día" en sentido espiritual. Porque Cristo es "nuestro pan", porque Cristo es vida, y la vida es pan. "Yo soy", dijo, "el pan de vida". Poco antes dijo: "El pan es la palabra del Dios vivo que ha bajado del cielo". Luego, como se considera que su cuerpo está en el pan, dijo: "Esto es mi cuerpo". Cuando pedimos el pan de cada día, estamos pidiendo vivir para siempre en Cristo y estar inseparablemente unidos a su cuerpo
Y perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todos los que nos deben. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal.
"Perdónanos nuestros pecados", ya que los pecados están asociados a nuestras deudas si no las hemos pagado. Dice lo mismo que Mateo, pero no parece dejar espacio para la persona que desea perdonar a los deudores sólo si se arrepienten. Dice que nuestro Salvador ha dado la ley que debemos añadir a nuestra oración: "Porque nosotros mismos perdonamos a todo el que nos debe". Sin duda, todos tenemos autoridad para perdonar los pecados contra nosotros mismos. Esto queda claro de "como nosotros perdonamos a nuestros deudores" y de "porque nosotros mismos perdonamos a todo el que nos debe." La persona inspirada por Jesús y conocida por sus frutos,
Cuando personamos a otros hacemos un bien primera mente a nosotros y por consiguiente a otros
El Salvador de todos y Señor con razón no concluyó esta cláusula de la oración en este punto, sino que nos ordenó añadir: "Porque también nosotros mismos hemos perdonado a todo el que nos es deudor." Esto sólo conviene decirlo a quienes han elegido una vida virtuosa y practican sin descuido "la voluntad de Dios" que, como dice la Escritura, "es buena, agradable y perfecta." ...
Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal.
Cuando estamos atentos en la oración, nos manda decir: "No nos dejes caer en la tentación". Lucas concluye la oración con estas palabras, pero Mateo añade: "mas líbranos del maligno." Hay una cierta conexión estrecha en las cláusulas, porque cuando las personas no son conducidas a la tentación, también son libradas del maligno. Si alguien dijera tal vez que no ser llevado a la tentación es lo mismo que ser librado de ella, no faltaría a la verdad.