¿Qué tienes en tu plato?
Introducción
I. Deja la pereza (v. 11)
II. Deja la ignorancia (v. 12b)
Los redactores de catecismos en la epoca de la Reforma incorporaron tres documentos cristianos en sus enseñanzas: el Credo Apostólico, los Diez Mandamientos, y el Padre nuestro.
Matthew Henry: “Es un pecado, y una vergüenza, para las personas que son adultas según los años que han vivido, ser criaturas en su entendimiento.”
III. Deja la inmadurez (v. 12c-13)
Los cristianos perezosos permanecerán siempre inmaduros porque no se dedican a un estudio diligente de la Palabra de Dios.
Un creyente inmaduro considera que las demandas de la Biblia son una carga.
Los niños se dejan llevar por sus sentimientos, pero los adultos actúan de acuerdo con la voluntad. Estos actúan porque es lo correcto, sin importarles cómo se sientan. Esta es la razón por la que los creyentes inmaduros caen fácilmente en la tentación: porque se dejan llevar por sus sentimientos al hacer sus decisiones.