AFORTUNADOS LOS QUE MUEREN EN EL SEÑOR - APOC. 14:13
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- INTRODUCCIÓN:
- INTRODUCCIÓN:
- Hoy debemos hablar de la muerte.
- No nos atrae hablar de la muerte. Huimos del tema. Preferimos cualquier otra cosa.
- A pesar que la muerte es segura, rechazamos meditar en ella. Pero es tan segura que cada pueblo tiene un cementerio…
- La Biblia habla de la muerte en muchas ocasiones. En varias de ellas se presenta en un sentido general como la consecuencia del pecado del hombre; en otras como consecuencias inmediatas de algunas maldades; en ocasiones es el rechazo o castigo de Dios y pareciera que lo mejor que la Biblia dice de la muerte es que en algunos no es una maldición pero nada más.
- PROPOSICIÓN:
- PROPOSICIÓN:
Este texto nos recuerda la bendición que es morir en el Señor.
- “BIENAVENTURADOS LOS MUERTOS QUE MUEREN EN EL SEÑOR”
- “BIENAVENTURADOS LOS MUERTOS QUE MUEREN EN EL SEÑOR”
- El pasaje habla de una bienaventuranza para algunos hombres y mujeres. Y puede parecer contradictorio que como vemos, este grupo de hombres y mujeres son personas fallecidas.
- BIENAVENTURADOS: “Makarios” benditos, bienaventurados. Afortunados.
-
- La idea de morir en el Señor aparece más de una vez en el Nuevo Testamento. Pablo habla de los muertos en Cristo (1 Tesalonicenses 4:16).
Pues el Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con la trompeta de Dios, y los muertos en Cristo se levantarán primero.
y de los que han dormido en Cristo (1 Corintios 15:18
El sentido de todas estas frases es: los que llegan al final todavía unidos a Cristo[1].
Morir en el Señor nos indica aquí a llegar al final de tus días en plena certidumbre de fe en la persona y obra de Jesucristo.
Es que llegue el último latido de tu corazón y la convicción de que “justificados pues por la fe tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo...” sea una realidad inamovible en tu corazón.
- Todo se confabulaba para apartarlos de Él; pero la felicidad suprema está reservada para los que llegan al final todavía inseparablemente unidos al Maestro Que los amó y Se entregó por ellos.[2]
- PARA QUE DESCANSEN DE SUS TRABAJOS”
- PARA QUE DESCANSEN DE SUS TRABAJOS”
- Lo que se promete es el descanso: Descansarán de sus labores. El descanso es tanto más suave cuando sigue al esfuerzo más agotador.[3]
- Toma la idea de un labrador que llega agotado de su jornada; ahora finalmente descansará.
- Descansarán de sus trabajos:
- “TRABAJOS” : kopos: fatigas, cansancio, agotamiento, amenazas, hostigamiento.
- Este mundo está lleno de fatigas. De dolor. De sufrimiento; de ansiedades.
- Pero que afortunados los que mueren en el Señor; pues ellos descansan. Descansan de sus labores, descansan del dolor, descansan de sus fatigas y sus cargas, de la enfermedad, descansan de las injusticias. Sus cuerpos finalmente reposan. No hay más alarmas que les despierten, no hay tareas para mañana, no hay nada pendiente; ellos reposan de sus obras.
- Bienaventurados aquellos que mueren en Cristo. Porque su descanso traspasa la barrera de lo físico. Aquí tenemos frente a nosotros a alguien que murió en Cristo… ¡Que afortunado!
- Porque finalmente descansa de su batalla contra el pecado, contra la tentación, ya no peleará con su carácter, ya no sentirá temor a causa de sus flaquezas, ya no hay ataque espiritual que pueda serle afrenta; cuan bendecido es él que ahora descansa, descansa, descansa no solo su cuerpo sino su alma reposa en los verdes pastos de la ciudad celestial, descansa remojando sus pies en el río de Dios; descansa en los brazos de su Padre celestial.
- Bienaventurados los que mueren en el Señor; porque la muerte no tiene poder sobre ellos; en el momento en que la muerte cree apagarlos para siempre, es el poder que levantó a Cristo al tercer día, el mismo poder con que sus almas son llevadas a la patria celestial. Bienaventurados los que mueren en el Señor porque Satanás no tiene dominio de sus almas. Bienaventurados los que mueren en el Señor, porque su último día es el mejor día de sus vidas...
- Y sí, nos duele la separación, está bien que duela. Pero nuestro sentir no cambia la realidad de que aquellos que mueren en el Señor son REALMENTE BENDECIDOS, AFORTUNADOS!
- “PORQUE SUS OBRAS LES SEGUIRÁN”
- “PORQUE SUS OBRAS LES SEGUIRÁN”
- La segunda razón por la que los que mueren en el Señor son bendecidos, es porque. Tal como dice el texto… llevan un equipaje maravilloso.
- Sus obras les siguen.
o Nota que el texto NO dice que sus obras son la razón por la que ellos están en el cielo.
o El texto no dice que sus obras van delante de ellos.
o El texto incluso no dice que sus obras van junto con ellos.
o El texto dice que sus obras van después de ellos. No son el motivo de su aceptación delante de Dios. Pero sí son recordadas por Dios.
o Es aquí donde hemos de afirmar que todo cuando hagamos para la gloria de Dios, será recompensado en el siglo venidero.
- Cuan bendecidos son aquellos que mueren en el Señor. Porque el amoroso y justo Dios recordará su servicio en esta vida.
APLICACIONES
APLICACIONES
- Este pasaje nos es dado para que tengamos un consuelo genuino; familiares, amigos, hermanos en la fe. Todos. Mi abuelo ha fallecido este día; pero murió en el SEÑOR. Él es un bienaventurado. El texto no le dice nada a mi abuelo, pero a nosotros nos dice mucho acerca de él.
- Pero también este texto debe ser un indicativo, un espejo para tu vida. Porque, mi apreciado amigo si tú estás aquí esta noche y no te has puesto a cuentas con Dios… esta promesa NO ES PARA TI.
- Si permaneces en esa condición, tú morirás en tus pecados. Te irás de este mundo teniendo cuentas pendientes con Dios. Y créeme esa es la mayor tragedia que te puede ocurrir.
- Todos tememos morir, el temor de un accidente, una enfermedad repentina, un virus, una injusticia nos hace temblar. Pero nada de eso se compara a terminar tus días en deuda con el Dios SANTO, SANTO, SANTO.
- No importa si tienes el mejor velorio; seguirá siendo el velorio de un hombre no inocente delante de Dios.