El Salvador Que Busca a los Perdidos
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Luke 19:1-10
Luke 19:1-10
La idea principal:
La renuncia a la riqueza,
La caridad para con los pobres
La reforma de la vida de uno en respuesta a la gracia abren el camino hacia la salvación.
Observación:
El encuentro de Zaqueo es un complemento del encuentro con el dirigente rico (Luke:18:18–30).
A ambos hombres se les describe como ricos y con puestos importantes .
Jesús le pide sólo al dirigente rico que distribuya sus riquezas a los pobres (Luke 18:22). No hace exigencias directas a Zaqueo.
Zaqueo se compromete a dar la mitad de sus bienes a los pobres y a restituir lo conseguido de forma deshonesta.
El hombre rico, por el contrario, se negó a distribuir sus riquezas entre los pobres y se aleja de Jesús profundamente entristecido (Luke 18:23).
Explicación del Texto
Cristo vino a buscar lo que se había perdido
El nombre “Zaqueo” quiere decir justo
Los publicanos eran notorios por cobrar más impuestos de los requeridos; mientras más dinero cobraran más les quedaba (Luke 3:12–13).
Zaqueo era despreciado los judíos, pero para Jesús era un pecador perdido.
Un hombre se porta como niño (Luke 19:2–4).
Juan Calvino escribió: “La curiosidad y la sencillez son una especie de preparación para la fe”.
Zaqueo corrió por la calle como si fuera un niño. ¡Y hasta se subió a un árbol!
La curiosidad es por cierto característica de la mayoría de los niños.
Jesús dijo: “De cierto os digo, que el que no recibe el reino de Dios como un niño, no entrará en él” (Luke 18:17).
Como jefe de recaudadores y hombre rico representa al “pecador supremo.”
A pesar de sus riquezas, es odiado, como un personaje despreciable y avaricioso.
Un hombre buscador es hallado (Luke 19:5).
Zaqueo pensó que estaba buscando a Jesús (Luke 19:3), ¡pero Jesús lo estaba buscando a él! (Luke 19:10).
Por naturaleza el pecador no busca al Salvador (Rom 3:11).
Adan & Eva se escondieron de Dios, pero Dios fue y los buscó (Genesis 3:1–10).
Jesús, esta buscando a los perdidos, estamos viviendo tiempos de gracia
Un hombre pequeño se hace grande (Luke 19:7–8).
Hizo lo que pudo para superar su limitación dejando a un lado su dignidad y subiéndose a un árbol.
En un sentido espiritual, todos somos pequeños (Rom 3:23).
Tristemente muchos pecadores piensan que son grandes.
Se miden por las normas humanas: dinero, cargos, autoridad, popularidad, lo que “delante de Dios es abominación” (Luke 16:15).
Piensan que lo tienen todo (Apoc 3:17).
Zaqueo confió en Jesucristo y se convirtió en un hijo de fe (Romans 4:12; Ga 3:7).
Un hombre pobre se hace rico (Luke 19:9–10).
La gente pensaba que Zaqueo era rico, un pecador en bancarrota, necesitaba recibir el don de Dios de la vida eterna.
La única ocasión en los cuatro evangelios en que Jesús se invitó a sí mismo a la casa de alguien, e ilustra las palabras de Apoc 3:20.
Zaqueo no se salvó porque prometió hacer buenas obras, sino porque respondió por fe a la palabra de la gracia de Cristo.
Confio en el Salvador, dio evidencia de su fe, prometio hacer restitución a los que había hecho daño.
La fe que salva es más que palabras piadosas y sentimientos de devoción.
Conclusion
El hijo de Dios nace rico, porque tiene “toda bendición espiritual” en Jesucristo (Eph 1:3).
Tenemos las riquezas de la misericordia y gracia de Dios (Eph 1:7; 2:4)
Las riquezas de su gloria (Phil 4:19)
Sabiduría (Rom 11:33).
“Inescrutables Riquezas” que jamás se agotan. (Eph 3:8).
La salvacion produce gozo en el corazón del creyente
Zaqueo estaba listo para obedecer al Señor, para establecer un testimonio genuino ante la gente
