El Dios que escucha y responde

Nuestro Dios está atento y responde a nuestro clamor cuando somos sinceros

Hoy damos gracias al Señor por la bendición de haber tenido en nuestra vida una madre. En esta mañana les reconocemos como parte del plan y el cuidado de Dios para nuestra vida. Hoy día en el mundo roto y caído en que vivimos se nos ha querido presentar una formula diferente a lo que Dios estableció como madre. Cuando hablamos de una madre nos estamos refiriendo al ser humano que de nacimiento posee los cromosomas sexuales XX en su composición de ADN. Las Sagradas Escrituras nos dejan saber en Gen. 1.27 “que los seres humanos fueron creados a su imagen y semejanza, varón y hembra los creo Dios” . Nosotros la iglesia de Jesucristo amamos al pecador pero No patrocinamos sus conductas opuesta a lo establecido por Dios.

En esta mañana vamos a ver como Dios, en su infinito amor para con todos, interviene en la historia de DOS mujeres que tenían características en común.

Reconocían y honraban al Único y Verdadero Dios

Se acercaron al Señor con la fe incondicional

Experimentaron la gracia de Dios ( en su rol de madre)

Tenían la responsabilidad de cuidar a otros

Tenían un amor incondicional

La primera de estas mujeres se llamaba ANA .

1 Samuel 1:11 RVR60

E hizo voto, diciendo: Jehová de los ejércitos, si te dignares mirar a la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza.

El relato Sagrado nos deja saber que en uno de los momentos de mayor deterioro religioso en el Pueblo de Dios bajo el sacerdocio de los hijos de Ofni y Fines. Estos hombre tenían a cargo el servicio en la Casa de Dios y se portaban mal en todo.

De la tribu de Leví y del clan de los coatitas ( el más honorable) había un hombre que se llamaba Elcana.

Y aunque se suponía que fuera una familia piadosa, Elcana tenia dos esposas: Penina y Ana.

Esto iba en contra de lo establecido por Dios Genesis 2:24 “Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser.”

Romans 12:2 “No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.”

Romans 6:23 “Porque la paga del pecado es muerte, mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor.”

Esta condición de la poligamia estaba trayendo consigo pecado y pesares (No podemos vivir como el mundo nos dicta)

Ana era estéril y Penina tenía hijos y además era muy rencillosa y provocadora contra Ana

Penina mortificaba y afligía a Ana por no tener hijos. esta el punto que Ana perdía el apetito

Y aunque el esposo trataba de consolarle diciéndole;Tu me tienes a mí, acaso No te soy yo mejor que Diez hijos?

Esta situación provocó que en una ocasión que subió la familia a ofrecer sacrificios al Señor, después de cenar v. 10 1 Samuel 1:10 “con gran angustia comenzó a orar al Señor y a llorar desconsoladamente.”

No hay nada mejor que derramar nuestro corazones en la presencia del Señor

Psal. 138.3 El día que clamé, me respondiste; Me fortaleciste con vigor en mi alma.

¿Qué está provocando en tí el día malo?

Aquel Día aquella mujer hizo un compromiso un pacto con Dios ; v.11 y le dijo: Jehová de los ejércitos, si te dignares mirar a la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza.

Deuteronomy 23:21–23 “»Si le haces una promesa al Señor tu Dios, no tardes en cumplirla, porque sin duda él demandará que se la cumplas; si no se la cumples, habrás cometido pecado. No serás culpable si evitas hacer una promesa. Pero, si por tu propia voluntad le haces una promesa al Señor tu Dios, cumple fielmente lo que le prometiste.”

Tal fue el clamor y la aflicción de esta mujer delante del Señor que el sacerdote le llamo borracha

Ella le respondió a sacerdote Elí yo soy una mujer atribulada por su aflicción. Y el respondió ve en paz y el Dios de Israel te otorgue tu petición . v.18 La mujer se fue por su camino , comió y No estuvo más triste

Psalm 40:1–2 “Puse en el Señor toda mi esperanza; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor. Me sacó de la fosa de la muerte, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme.”

1 Samuel 1:19 “Al día siguiente madrugaron y, después de adorar al Señor, volvieron a su casa en Ramá. Luego Elcaná se unió a su esposa Ana, y el Señor se acordó de ella.”

Y Ana también se acordó del Señor

1 Samuel 1:26–28 “Dijo Ana: «Mi señor, tan cierto como que usted vive, le juro que yo soy la mujer que estuvo aquí a su lado orando al Señor. Éste es el niño que yo le pedí al Señor, y él me lo concedió. Ahora yo, por mi parte, se lo entrego al Señor. Mientras el niño viva, estará dedicado a él.

Ella no deseo vivir su sueño en su hijo

Tampoco lo hizo la fuente de su felicidad sino que todo su interés fue dedicarlo a Dios

Ella lo entregó a Dios pues Él le respondió

La mujer cananea

Matthew 15:28 RVR60

Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora.

Mat.15.21 Nos presenta a Jesús entrando a lregió de Tiro y Sidón

Allí le salió al encuentro una mujer cananea que comenzó a gritar desesperada : Señor Hijo de David, Te misericordia de mí.!! Mi hija está gravemente atormentada por un demonio

Una de las cualidades de las Madres es que hacen los problemas de sus hijos personales, su amor es incondicional

Aquella mujer estaba pidiendo para su hija

v.23 Nos deja saber que Jesus no respondió palabra. Entonces sus discípulos se acercaron y le dijeron :despídela pues viene gritando detrás de nosotros

Cuando el Señor quiere probar desarrollar nuestra fe en ocasiones No contesta nada de inmediato

Nuestra fe va hacer probada como el oro ( pasada por el fuego)

v.24 No soy enviado sino a las ovejas de perdidas de la casa de Israel . v.25 Entonces ella vino y se postró ante él diciendo: !Señor socórreme ! Deut. 4.29 29 Mas si desde allí buscares a Jehová tu Dios, lo hallarás, si lo buscares de todo tu corazón y de toda tu alma.

Una oración simple pero honesta ( Yo no puedo sin tí Señor) áyudame

Ella se humilló más aún y pidió misericordia ( Esther 4:16 ... No me importa si tengo que morir en el intento ¡Y si perezco, que perezca!»” )

v.26 Jesús respondió y le dijo No esta bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perros

v.27 Ella le respondió a Jesús; Pero aun los perros comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos

La actitud y la dependencia de Dios de esta mujer la llevaron a perseverar

Ella no dijo, ¿Y este es el Hijo de David?

Que vengo rogando tras de él y me ignora

No solo me ignora, y me llama perra( gentíl) inmerecedora

Es cierto Señor , No puedo negar que soy una perrilla y No tengo el derecho del pan que tu le das a los hijos, pero del pan que tu partes a tu pueblo, yo te ruego que tu me des de las migajas de tu compasión y de tu poder ( por favor liberta a mi hija) . Señor esto No es nada comparado con los pedazos de pan que tu le das a tus hijos. Pero tienen tanto valor para mí porque provienen de tí.

Cuando la necesidad y la condición en nuestro corazón es reconocida nos estamos dispuestos a humillarnos para alcanzar las migajas de Aquel que dijo Yo Soy el pan de Vida.

Cuando somos consientes de que No merecemos nada, aprendemos a estar agradecidos por todo lo que recibimos de nuestro Dios.

Psalm 103:13 “ Como el padre se compadece de los hijos, Se compadece Jehová de los que le temen.

El Señor Jesús no se hizo esperar más resalto y honró la fe de aquella mujer que se acercó con humildad y confianza.

Matthew 15:28 “—¡Mujer, qué grande es tu fe!—contestó Jesús—. Que se cumpla lo que quieres. Y desde ese mismo momento quedó sana su hija.”

Este es el Día que Dios nos ha dejado Saber que el es el Dios que escucha y responde

Que si reconocemos nuestra condición delante de él y esperamos el va obrar para su Gloria.

Hebrews 4:14–16 “Por lo tanto, ya que en Jesús, el Hijo de Dios, tenemos un gran sumo sacerdote que ha atravesado los cielos, aferrémonos a la fe que profesamos. Porque no tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, aunque sin pecado. Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos.”