El sometimiento Mutuo

Introducción:

“Someteos unos a otros en el temor de Dios. (Efesios 5.21–22, RVR60)

Dice Calvino y con razón: “…Debido a la falsa opinión que cada persona alberga acerca de su propia excelencia, no existe nadie que tolere pacientemente que otros lo gobiernen. Aquellos que no pueden evitarlo por necesidad, ciertamente obedecen con renuencia a sus superiores; pero internamente se molestan y enfurecen, porque creen estar sufriendo injustamente. El apóstol Pablo acaba toda disputa de este tipo cuando afirma que todos los que viven “bajo yugo” deben someterse voluntariamente. Lo que quiere decir, es que las personas no deben preguntarse si merecen su suerte o no, porque basta el que estén atados a esa condición…” Juan Calvino

Calvino nos recuerda aquello que consideramos con el pastor Douglas el domingo anterior, "nos cuesta ser siervos, nos cuesta estar bajo autoridad, por naturaleza no nos gusta ocupar un papel donde tengamos que estar bajo el gobierno, o las ordenes de alguien más".

Sometimiento es una palabra repugnante para nuestro corazón caído. Esta palabra en nuestra cultura es sinónimo de personas débiles, de gente sin liderazgo, sin determinación, hoy veremos que es lo contrario según Dios.

La Palabra Griega: "Hypotasssò - Sometimiento" que usa Pablo aquí, es un termino militar que indica el estado de un soldado en el ejercito "Subordinado". Los que han prestado servicio militar saben muy bien lo que esto implica, estar bajo las ordenes de alguien y revelarse en un ejercito es grave. Es claro que un ejercito no puede funcionar si cada soldado hace lo que quiere, debe someterse, a pesar de que su comandante no tenga su mismo coeficiente intelectual, o no venga de mejor familia.

Esta es la figura que necesitamos tener en mente al estudiar el tema de la sumisión mutua. Esta palabra entonces puede definirse como: Ponerse bajo las ordenes de otro, obedecer, sujetarse, estar bajo la autoridad de, ser sumiso.

La idea de Pablo aquí, es que aquello que el soldado hace por la fuerza, el creyente lleno del Espíritu lo hace de manera libre y voluntaria "es un verbo pasivo", no es alguien que esta sometido, es alguien que se somete, se hace voluntariamente un siervo.

La orden de Pablo es imposible de cumplir para un hombre natural, ninguno elige por si mismo ponerse a disposición de otros, ninguno elige ser servidor, lo somos porque toca, se nos obliga, el papel de esclavo y siervo no es algo que queremos tomar voluntariamente.

Aun en la Iglesia, es mas fácil conseguir maestros que diáconos, algunos ven la diaconía como una posición desventajosa y poco útil. Y por si acaso alguien quiere ser maestro, la iglesia debería evaluar no solo su enseña, sino cuanto sirve, si esta lavando los pies de los santos y vamos a ver porque esto debe ser así.

Aprendemos de nuestro texto tres cosas importantes: la primera es el poder para vivir en sometimiento, lo implica vivir en sometimiento y la manera de vivir en sometimiento.

1. El Poder para vivir en sometimiento

Nuestro texto es como una bisagra que cierra un tema y da paso a otro. El sometimiento mutuo es un resultado de vivir una vida llena del E.S. y es además un principio de vida clave para todas nuestra relaciones como Esposos, Padres, Hijos, Siervos y Amos.

Así que no es posible vivir nuestras relaciones si no aplicamos el principio del sometimiento, toda relación será caótica si vivimos como ebrios bajo el control de nuestro ego.

Pablo ya nos ha dicho que debemos vivir vidas distintas al mundo, tenemos una lucha contra la corriente de este mundo y su remedio fue que en lugar de ser participes del reino de las tinieblas, debemos andar como hijos de luz, siendo reflexivos en la manera en que vivimos, haciendo todo según la luz de la verdad que hemos recibido por medio de la palabra. Luego Pablo nos hablara de como lidiar con otro enemigo y este es satanas, esto lo estudiaremos mas adelante en el capitulo 6.

En esta poción que hemos estado estudiando, se nos está enseñando como lidiar con nuestro corazón egocéntrico y el remedio es mortificarlo, el corazón anhela saciarse de las cosas de este mundo, busca satisfacción paz y seguridad en la creación, Pablo nos llama renunciar a los dictados de nuestro corazón, nos llama a renunciar a nuestras ideas y a someternos por completo al control del E.S. y esto se vera reflejado en nuestras relaciones ¿como? viviremos con una actitud sumisa de siervos.

En la medida que perdamos nuestra vida, la encontraremos, pero si buscamos seguir la creación, nuestros impulsos, deseos y creencias naturales nos llevara a vivir una vida disoluta, libertina y caótica, la vida se pierde. Dios desea darnos una vida bienaventurada y esta vida solo se puede conseguir en la muerte de nuestra vida y vivir una vida rendida a Cristo. Esta vida es provista por el E.S. quien nos dota y nos capacita para la vida y la piedad, en la medida que cedamos al control del E.S. seremos mas y mas bienaventurados.

Así que solo una persona llena del Espíritu puede ser sumisa. Para decirlo de otra manera, ser sumiso es un indicador de que una persona está llena del E.S. - No tiene que ver con lagrimas, temblores, como vimos la vez pasada, la llenura se manifiesta en una vida que habla con el propósito de edificar a otros, que canta desde su corazón al Señor y celebra, que agradece y que se sujeta-

El sometimiento es pues un indicador de una vida que esta progresando en madurez espiritual. Por ejemplo, cuando una iglesia busca ancianos o diaconos, debe asegurarse de que la persona que van a elegir tenga no solamente los dones para la tarea, si no tambien que sea llena del E.S. veamos:

“Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo.... y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a Nicolás prosélito de Antioquía;” (Hechos de los Apóstoles 6.3–5, RVR60)

“Bernabé.... era varón bueno, y lleno del Espíritu Santo y de fe. Y una gran multitud fue agregada al Señor.” (Hechos de los Apóstoles 11.22–24, RVR60)

La llenura del espíritu se nota. No solo por el gozo de la persona, por su animo para servir al Señor y edificar a sus hermanos, sino por su animo para ponerse a si mismo a disposición de otros.

En resumen: Los creyentes se someterán unos a otros en la medida que individualmente se sometan al E.S. y maduren en su vida Cristina.

Aplicación:

Somos individuos responsables ante Dios, pero todo lo que hagamos como individuos repercute en la comunidad. Nuestra madurez en la vida Cristiana, va a repercutir en la familia, en la comunidad.

Noten también hermanos, que Pablo al terminar su carta nos invita a hacer frente al sistema del mundo, a mortificar nuestro corazón y resistir a satanas. Nuestra guerra no es contra las personas, no es contra nuestro jefe o cónyuge o hermano o padres, la gente es nuestro ministerio. La obra del E.S. nos conecta con la gente, nos hace siervos, nos hace humildes, nos hace vivir en mutua sujeción.

Y no podremos cumplir con nuestro ministerio llenos de egocentrismo, sino llenos, controlados por el E.S. Ya vimos de donde obtenemos el poder para sujetarnos, veamos ahora:

2. Lo que implica vivir e sometimiento

La sumisión implica ponerse bajo la autoridad de otro y en este sentido todos estamos sujetos, todos estamos rindiendo cuentas a alguien y esto es algo muy bueno, y en ultimas también todos rendiremos cuenta a Dios por todo, estamos bajo su señorío.

Estar bajo su Señorío implica que todos tenemos responsabilidades, roles que cumplir, unos darán cuenta por la autoridad que Dios le ha delegado y oros darán cuenta por la manera que respetaron y se sujetaron a esta autoridad.

Romanos 13.1–2 RVR60

Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas.De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.

Todos estamos sujetos. El sometimiento implica obediencia y cumplimiento de ciertas responsabilidades aun cuando tengamos autoridad.

Ahora, la sujeción mutua no implica que el padre se somete a sus hijos y los esposos a sus esposas... Pablo no esta hablando de igualitarismo - “Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada.” (Apocalipsis 6.4, RVR60) - No es tu te sometes a mi y yo me someto a ti... mas bien cada uno debe servir a aquellos que esta llamado a servir de buena voluntad y cada uno según el Señor le dio responsabilidades, debe debe cumplirlas en el Señor para el beneficio de aquellos que están bajo su cargo.

El sometimiento es una orden para todos:

Los esposos deben sujetarse al Señor, imitando al servir: protegiendo, amando, proveyendo a sus esposas, dando la vida por ellas según les ordena el Señor, en sumisión a él y las mujeres deben servir y respetar a sus maridos.

Los Padres según ordeno el Señor y en sumisión y servicio a él, deben criar a sus hijos en la amonestación del Señor y los hijos deben obedecer, respetar y servir a sus padres.

Los pastores deben sujetarse a un cuerpo de ancianos, y todos ellos al Señor, la iglesia debe someterse a sus pastores. He. 13:17: “Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos”.

Así que cada uno de nosotros tiene diferentes maneras en que debe servir a otros, someterse a otros, pero todos debemos servir, no es una opción en el reino de Cristo. Pablo cita en sus cartas 32 veces este principio de sujeción mutua, estamos considerando algo muy importante para la vida Cristiana.

Es un principio enseñado por Jesus: “En aquel momento se acercaron los discípulos a Jesús, diciendo: ¿Quién es, entonces, el mayor en el reino de los cielos? Y El, llamando a un niño, lo puso en medio de ellos, y dijo: En verdad os digo que si no os convertís y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos. Así pues, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los cielos. Y el que reciba a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe.” (Mateo 18.1–5, LBLA). Jesus no esta enseñando que los Niños sean humildes, sino que a los ojos de los demás, no son personas tan importantes, ellos eran vistos como siervos, en nada se diferencian de un esclavo, debían estar bajo la dirección y supervisión de sus padres, no podían hacer lo que quisieran. El llamado es, a ser como niños en este sentido. Implica servir y estar dispuesto a rendirnos cuentas. Los ciudadanos del reino deben ser humildes ante los ojos de sus hermanos y hermanas en Cristo.

Es un principio modelado por Jesus: “así como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.” (Mateo 20.28, LBLA) “Vosotros me llamáis Maestro y Señor; y tenéis razón, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, os lavé los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros. Porque os he dado ejemplo, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis. En verdad, en verdad os digo: un siervo no es mayor que su señor, ni un enviado es mayor que el que le envió. Si sabéis esto, seréis felices si lo practicáis.” (Juan 13.13–17, LBLA) Jesus tomo para si la posición de un esclavo que tenía el desagradable trabajo de lavar los pies a la visita de una casa. Fué así como Jesus nos amó y es así como nos ordena amarnos. "Amaos los unos a los otros como yo os he amado." “Haya, pues, en vosotros esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres. Y hallándose en forma de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.” (Filipenses 2.5–8, LBLA)

En conclusión, este principio implica:

Auto negación, es decir: preferir a los demás antes que a nosotros mismos. No haciendo nada por ambición egoísta, sino en humildad, poniéndonos a disposición de los demás ¿en que te puedo servir?

No debemos ser egoístas ni egocéntricos: Somos individuos que ahora hacen parte de un ejercito bajo las ordenes de Cristo. En un ejercito debemos someternos a otro, sería imposible dirigir un ejercito donde cada quien busca hacer lo suyo, vivir por impulsos, vivir según sus instintos. Nuestro corazón siempre quiere salirse con la suya. Pero el creyente lleno del E.S. no debe ser obstinado, aunque puede tener su opinión, el no va a imponer su voluntad, va a ser paciente con otros, entendiendo que el Dios soberanos ordena todas las cosas según su voluntad (EJ.. José y Caleb, ¿cuan pacientes debieron ser a la luz de lo que conocían sobre Dios y la respuesta del pueblo, pero ellos no inicioaron una revuelta con algunos, no fastidiaron a Moises, esperaron el tiempo de Dios). Los obstinados siempre causarán conflictos. El obstinado es dominante, quiere señorear sobre otros. Un líder debe modelar un carácter paciente y cada hermano debe aprender a negarse “no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey.Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.” (1 Pedro 5.3–4)

Dice Martin Loid Jones: El orgullosos es Resistente a las criticas e impaciente con otros puntos de vista, es hipersensible. Siempre amenaza con renunciar, siente que están dudando de él, que no le tienen confianza, que no hacen lo que el dice o no aprecian lo que piensa, así que renuncia. Pablo dice ustedes no deben ser así, van a ser estragos si piensan que la iglesia se trata de ustedes.

Este principio implica también:

Que por el E.S. hemos entendido la verdad sobre nosotros. Si estas lleno del E.S. estas saturado de evangelio y el evangelio nos humilla, no hay nada de lo cual nos podamos jactar, todos somos pecadores, pobres, ignorantes, falibles, fracasamos mucho, no sabemos nada como deberíamos saberlo, somos como niños llenos de fallas y fracasos. Si esto es así entonces vamos a ser pacientes con los demás. Vamos a pasar por alto nuestros derechos y a cumplir con nuestros deberes, seremos siervos interesados en el avance de todo el cuerpo y no jueces inclinados a condenar. El que es sumiso, ha entendido que no tiene el monopolio de la verdad, otros también tienen sus propias ideas y quizás estemos equivocados. El humilde escucha, acepta razones, trata de entenderlas, será paciente y comprensivo, no anda rasgando su vestiduras si alguien no piensa como él. Obviamente no estamos hablando de que el sumiso negocia con la verdad de Dios que esta claramente expuesta en la escritura, Cuando una persona sumisa conoce la verdad, esta dispuesta a sufrir injusticias si es necesario por amor a la verdad, por amor a la causa del evangelio y por amor al cuerpo de Cristo - no hacerlo sería no estar sujeto a Cristo.

En resumen esta es la cualidad del sumiso: “El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.” (1 Corintios 13.4–7, RVR60).

Martin Loid Jones comenta este texto diciendo: sometan unos a otros, no se envanezcan, no se jacten, nos han desconfiados, líbrense del ego, llénense de amor, crean, alienten la esperanza, nunca desmayen, sean pacientes y practiquen la paciencia. Es ta es la exhibición del fruto del E.S. ---- Pablo escribe a personas que están desacuerdo con la verdad, deben ponerse de acuerdo, no siendo obstinados, deben escucharse pacientemente, no perder los estribos, deben ser indulgentes en la discusión, permitir que otros hablen, que expongan sus ideas, no censurar a los demás, ni condenarlos por una palabra, deben estar dispuestos a escuchar, deben tener caridad y hacer cuanto este a su alcance, pero cuando se trate de verdades esenciales, mantengase firmes, sin embrago háganlo con humildad, com mansedumbre, con entendimiento y esperanza. No sean ofensivos ni de mal carácter, no sean obstinados, sometan unos a otros en el amor de Cristo.

Y la implicación mas importante:

Este principio no implica - Debilidad. La gente del mundo busca poder, dominio y posiciones para sentirse fuertes, pero nunca logran sentirse fuertes y poderosos, ellos temen perder y su temor los controla y son débiles, todas estas cosas las pueden perder y las van a perder. En cambio el que busca humillarse y servir, nunca perderá esta posición, nadie te puede quitar el servicio y el poder que viene tras él. Siempre puedes tener el poder de servir.

Dice Ligon Duncan: "Jesus habiendo abandonado su trono de gloria, habiéndose despojado de todos sus derechos divinos que podría reclamar con razón, expreso un poder mucho más allá de todo lo que alguien pudiera haber imaginado. Tomando forma de siervo, redimió en su servidumbre a una multitud que nadie podrá contar y ningún hombre podrá quitarle este poder. Así que no estamos hablando de algo débil, el servicio es una cosa muy poderosa, es un tipo de poder que el mundo no entiende.

Aplicación:

Estamos llamados a ser siervos. Busquemos servirnos, preferirnos unos a otros, este es el principio que aliviara nuestra relaciones. Esta es la sujeción a la estamos siendo llamados. No si las personas son amables con nosotros, o si las cosas están bien entre nosotros. o de vez en cuando, sino siempre... es una característica de aquellos que andan llenos del Espíritu, imitaran al Señor que hace salir su sol sobre buenos y malos, que sirvió a sus enemigos.

Imaginen lo que podría pasar si en esta iglesia todos quisieran servir, a su familia, a su comunidad, a la iglesia, sería explosivo, algo que el mundo nunca ha visto. Es lo que el Señor nos esta mandando aquí-

Que otros puedan vernos como esclavos de Cristo, no porque nos toca, sino porque uno se hizo siervo para nosotros, ¿no le daremos gloria, viviendo para su gloria al ser esclavos de otros? Esto cambiara todas nuestra relaciones. ¿Que mujer no se someterá a un hombre que sometido a Cristo y esta cada día muriendo por ella para mostrarle la gloria de Cristo?

Ya vimos de donde obtenemos el poder para sujetarnos y Lo que implica vivir en sometimiento, terminemos con:

3. La manera de vivir en Sometimiento

En primer lugar debes saber que vivimos en un mundo caído, no estamos llamados a servir y sujetarnos a gente santa. "Unos a otros" implica sujeción a gente pecadora, que nos lastima, con la que no estaremos de acuerdo muchas veces, que nos decepcionará.

Aquí el tema se pone difícil, ¿como vamos a sujetarnos a personas así?,

Pablo dice: "En el temor de Cristo". Aquí tenemos una variante textual, por lo que la reina Valera dice "Dios"... Pero en el mismo contexto una y otra vez Pablo repite, como al Señor, como a Cristo. “... tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.” (Efesios 5.5, RVA)

Andar en el temor de Dios y de Cristo es igual, es reconocer que Dios gobierna sobre nosotros, es a él en última instancia a quien servimos. Por tanto podemos someternos a pecadores porque el nos ordena hacerlo y debemos hacerlo porque el es nuestro Señor y estamos llamados a complacerlo a él y a imitarlo a él.

“Entre vosotros no será así. Más bien, cualquiera que anhele ser grande entre vosotros será vuestro servidor; y el que anhele ser el primero entre vosotros, será vuestro siervo. De la misma manera, el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.” (Mateo 20.26–28, RVA)

“Así que, después de haberles lavado los pies, tomó su manto, se volvió a sentar a la mesa y les dijo: —¿Entendéis lo que os he hecho? Vosotros me llamáis Maestro y Señor; y decís bien, porque lo soy. Pues bien, si yo, el Señor y el Maestro, lavé vuestros pies, también vosotros debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que así como yo os hice, vosotros también hagáis. De cierto, de cierto os digo que el siervo no es mayor que su señor, ni tampoco el apóstol es mayor que el que le envió. Si sabéis estas cosas, bienaventurados sois si las hacéis.” (Juan 13.12–17, RVA)

Si nuestro Rey vivió sujeto, se humillo y se hizo un siervo, ¿Seremos mayores que él? estamos llamados a vivir en humillación. Entonces, es difícil someterse a gente pecadora y servirles, pero Jesus es el Señor y lo ordena y él mismo lo hizo (Padres, Iglesia, El gobierno).

Entonces no podrás decir nunca "esta persona me ha ofendido ¿como puedo servirle, como puedo someterme a una persona así?" porque Dios lo manada y por que el nos dio ejemplo. Esta es la mejor manera en la que Dio trata nuestro orgullo, forma nuestra paciencia y nos permite ser como él viviendo una vida motivada por la misericordia y el amor. "Mientras éramos aún pecadores, Él murió por los impíos".

El Señor no esta pidiendo hacer algo que él no haya hecho por ti.

Dirás "pero Señor mi orgullo y mucho y no puedo hacerlo" Si eres un creyente, Dios te ha dotado de su Espíritu y de su gracia, solo así podremos vivir de esta manera.

Así que hermano no justifiques tu pecado si estas viviendo con aversión a la autoridad que Dios ha establecido, la gracia esta disponible para ti, resistir a Dios traerá a tu vida desgracia y Dios será deshornado. Someternos a él, traerá libertad, gozo y paz.

Amigo, este es el llamado del rey para todo hombre, hoy mismo puedes obtener este poder y libertad para ser un siervo y un esclavo. Ven a Cristo, humillante y reconoce tu maldad, reconoce cuan inflamado esta tu corazón de orgullo y vanidad y ríndele tu corazón a aquel que murió en una cruz, para que todo aquel que en el crea no se pierda mas tenga vida eterna.

Si vienes a Cristo, no vendrás a condenación jamas, pasarás de muerte a vida, tendrás el poder del E.S. para vivir como un siervo sumiso, bajo el señorío de Cristo, para el beneficio de otros y para la gloria de Dios.

Dios use su palabra para quebrantarnos y hacernos siervos.

Oremos.

Omnipotente Dios, que cuando nos libraste de la tiranía de Satanás, te agradó poner tu yugo en nuestro cuello, concédenos que bajo el influjo del espíritu de docilidad, de obediencia y de mansedumbre, permanezcamos sometidos a ti a través de toda nuestra vida, para que tú puedas cosechar en nosotros el fruto de tu redención. Y que nosotros podamos renunciar al pecado para dedicarnos a tu servicio, y lleguemos a ser siervos de la justicia, hasta que habiendo terminado de pelear nuestra batalla, entremos en ese bendito reposo que la sangre de tu Hijo unigénito consiguió para nosotros.

Amén.