La Espada del Espíritu

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Introducción

Hemos visto en la Carta de Efesios todas las bendiciones que hemos recibido de Dios: Hemos sido elegidos, redimidos, reunidos para ser un pueblo santo y somos morada de Dios, Dios debe recibir toda la gloria por nuestra salvación.
También hemos considerado como debemos responder en gratitud a Dios, andando como es digno de nuestra nueva identidad, caminando en unidad, en santidad, en amor, en luz, en sabiduría, siendo llenos o guiados por el E.S. cosa que debe notarse en todas nuestras relaciones.
Pablo termina su carta haciéndonos ver que aunque somos la nueva creación de Dios, llamada a caminar por este mundo según esta nueva identidad, nuestro andar no será fácil, no es un tour o un paseo, en esta vida enfrentamos enemigos poderosos, organizados, invisibles y astutos que continuamente se opondrán a todo intento nuestro de avanzar hacia nuestro destino eterno -
Estamos viviendo en el presente siglo malo, tenemos una guerra contra satanas y sus huestes. Pablo nos llama ha resistir, a mantener nuestro andar o a permanecer firmes hasta que todo termine. ¿Como logramos esto?
Fortaleciéndonos en el Señor y en poder de su fuerza y vistiéndonos de toda la armadura de Dios, hemos considerado que la armadura no es una idea novedosa de Pablo, sino que ya Isaías había hablado del Señor que vendría a salvar a su pueblo con una armadura puesta - Esta armadura señala la persona y la obra de Cristo.
Si hemos de pelear debemos ponernos a Cristo quien es la verdad, la justicia, la paz, el escudo y la salvación nuestra. Ponernos a Cristo implica confiar en el, ser dirigidos por él, vivir en justicia para su gloria, dependiendo de él pues esta de nuestro lado y confiar en sus promesas, vivir con la expectativa de que un día estaremos disfrutando por siempre de él, sin el estorbo del pecado y sin la presencia del tentador, un día estaremos en Sión y allí no habrá nada profano; en lugar de una armadura tendremos una túnica.
Viviendo una vida Justa, (Coraza de Justicia) No somos quietistas, reconocemos que por cuanto hemos sido justificados, estamos llamados a vivir en Justicia, buscando la santidad sin la cual nadie verá a Dios. Nuestra vida se debe caracterizar por el arrepentimiento y la fe (debemos volvernos de nuestros pecados a Dios) debemos ofrecer nuestra vida a Dios en sacrificio santo.
Coraza de Justicia (Cristo es el siervo Justo de Jehova - Vivio en Justicia e hizo justicia - El es nuestra Juaticia): Debemos vivir una vida Justa, No somos quietistas, hemos sido justificados por la justicia de Cristo, estamos llamados a vivir en Justicia, buscando la santidad sin la cual nadie verá a Dios. Nuestra vida se debe caracterizar por el arrepentimiento y la fe (debemos volvernos de nuestros pecados a Dios) debemos ofrecer nuestra vida a Dios en sacrificio santo.
Peleamos esta batalla, motivados con el apresto del evangelio de la paz, sabiendo que Dios esta de nuestro lado, Cristo no se avergüenza de llamarnos hermanos, estamos en paz con Dios. Esto debe alentarnos a perseverar hasta el final, a ser valientes para luchar contra la tentación y el pecado.
El Apresto del evangelio de la paz (El Señor hizo la paz en la cruz y la proclamo - El es nuestra Paz): Debemos motivarnos y estar preparados para servir a Dios , sabiendo que Dios esta de nuestro lado, Cristo no se avergüenza de llamarnos hermanos, estamos en paz con Dios. Esto debe alentarnos a perseverar hasta el final, a ser valientes para luchar contra la tentación y el pecado.
Y debemos tener delante de nosotros el escudo de la fe, es decir que debemos descansar completamente en Dios y sus promesas, en medio de cualquier circunstancia, sabiendo que la mano soberana de Dios esta guiándonos provedencialmente para nuestro bien.
El escudo de la fe, (Cristo ha recibido todas las flechas del enemigo para que nosotros confiadamente nos refugiemos en él - El es nuestro escudo). Debemos descansar completamente en Dios y sus promesas, en medio de cualquier circunstancia, sabiendo que la mano soberana de Dios esta guiándonos provedencialmente para nuestro bien.
Se nos llama a permanecer firmes en la fe, quitándonos los viejos harapos del pecado y vistiéndonos de Cristo.
Yelmo de la salvación: Entendiendo que Cristo al vencer el pecado y la muerte nos ha dado esperanza de vida eterna para que estemos disfrutando por siempre de él (Fuimos salvos para estar para siempre con él). Debemos poner nuestros ojos en Cristo, meditar en las promesas de Dios en medio de la batalla. La guerra no durara siempre, esta esperanza nos hará permanecer firmes.
En resumen: Si hemos de pelear debemos ponernos a Cristo quien es la verdad, la justicia, la paz, el escudo y la salvación nuestra. Ponernos a Cristo implica confiar en el, ser dirigidos por él, vivir en justicia para su gloria, dependiendo de él pues esta de nuestro lado y confiar en sus promesas, vivir con la expectativa de que un día estaremos disfrutando por siempre de él, sin el estorbo del pecado y sin la presencia del tentador, un día estaremos en Sión uy allí no habrá nada profano; en lugar de una armadura tendremos una túnica - esto es esperanzador.
Un Creyente que esta unido a Cristo es responsable de vivir de acuerdo a estas virtudes: Honestidad, justicia, humildad, confianza, esperanza, es de esta manera que va a permanecer firme contra el enemigo. Con estas virtudes e enemigo no tendrá de donde agarrase, no tendrá un punto de apoyo para hacernos caer.
Dice Gournall: “El Creyente vence al adversario sin ser vencido. Gana cuando no pierde su virtud, siendo su tarea mantener y defender el tesoro que tiene en lugar de conseguir lo del adversario.
No den lugar al diablo, no usen sus armas, no devuelvan golpe por golpe: “Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.” (, RVR60)
Pero estas virtudes no serán suficientes y todas se verán a afectadas, a menos que tomes la parte de la armadura que nos falta considerar:
Pero esto no será suficiente, a menos que tome la otra parte de la armadura que nos falta considerar:
“y (Tomad) la Espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios”
Esta es un arma ofensiva, la única arma que se nos ha dado y nos mantendrá a salvo y es un arma suficiente y poderosa para enfrentar esta guerra. Esta espada abre camino para que el reino de Dios y debilita el ejercito rebelde de satanas.
Veamos la ilustración, la explicación y la exhortación:

1. La Ilustración

En el ejercito Romano, habían dos clases de espadas: una larga que estamos acostumbrados a ver en las películas de época y una daga corta para los combates cuerpo a cuerpo.
Esta armadura consiste en creer correctamente comportarse como Dios desea recordar que estamos en paz con él a travez d cristo confiar en sus promesas y mirar al cielo con anticipación mientras proclamamos
En el griego hay dos palabras para distinguir una espada de la otra: La espada larga es la rhomphaía y la Espada corta es la mákhaira; Esta ultima es a la que Pablo se refiere.
La habilidad de un soldado con esta espada podía salvar su vida en medio de una batalla, así que ellos pasaban su tiempo libre practicando el uso de esta espada corta, de manera que sus manos tuvieran destreza para usarla en contra del enemigo.
Los soldados romanos sabían que su habilidad con la espada era su salvavidas en la batalla.Cuanto mejor estuvieras con tu espada, mayor era tu oportunidad de sobrevivir. Y por eso los mejores soldados pasaban casi todo su tiempo libre practicando con la Espada.
No den lugar al diablo, no usen sus armas, no devuelvan golpe por golpe: “Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.” (, RVR60)

2. La Explicación

Con la espada podías apartar y desviar algunos de los ataques del enemigo, y con la espada también podrías tratar de herir a tu enemigo.Los soldados romanos sabían que su habilidad con la espada era su salvavidas en la batalla.Cuanto mejor estuvieras con tu espada, mayor era tu oportunidad de sobrevivir. Y por eso los mejores soldados pasaban casi todo su tiempo libre practicando con la Espada.
Pablo no quiere que erremos en cuanto al tipo de espada corta que debemos recibir para atacar a nuestro enemigo, Así que nos explica:
En primer lugar, se trata de la espada del Espíritu, no es una espada física, es un arma espiritual forjada por el Espíritu de Dios.
En segundo lugar, esta arma forjada por el Espíritu es la palabra de Dios.
Uno puede verse tentado a pensar que salir a pelear con una biblia debajo del brazo es suficiente, pero es importante notar que Pablo usa la palabra griega rhēma en lugar de λόγος -
rhēma
Aunque en ciertos lugares estas palabras son sinónimas, Pablo usa comúnmente Logos para referirse al canon de la Escritura, o a la palabra escrita:
λόγος
La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.” ()
Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.” ().
Pero cuando usa la palabra rhēma lo hace para señalar esta palabra siendo proclamada o predicada:
Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:” ()
Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos.Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.” ()
Así que esta arma es una espada espiritual, forjada por el E.S. de Dios y se trata de la palabra de Dios que es proclamada.
Veamos porque estas tres consideraciones son importantes:
En la biblia siempre ha existido una guerra entre Dios y su simiente (Cristo y su iglesia) y satanás y su simiente (Mundo incrédulo).
Dios por medio de su palabra ordeno a la iglesia del A.T. hacer guerra contra esta simiente por medio de la espada física, ellos después de ser liberados de la esclavitud de Egipto, debían conquistar la tierra de Canaan y erradicar de la tierra a todo incrédulo que estaba profanando la tierra en donde Dios moraría con su Pueblo.
Dios ayuda a su pueblo a alcanzar la victoria, aunque Israel falla en erradicar a todos los enemigos de Dios (Así inicia el Libro de Jueces - No arrojaron todos sus enemigos y los convirtieron en tributarios).
A causa del fracaso de Israel, Dios los entrega en manos del sus enemigos y promete por medio de Isaías que traerá un salvador para su pueblo que cumplirá fielmente con esta tarea de erradicar a los impíos de su reino:
sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío. Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad ceñidor de su cintura.” (, RVR60)
Es de este este guerrero que Pablo ha estado hablando, de la armadura de este guerrero es con la que esta llamada la simiente de Dios a vestirse, es en unión con Cristo que vencemos. Cristo no solo viene a salvar, sino a vencer el reino de satanás y su simiente con una espada, pero noten lo singular de esta espada “es el espíritu de sus labios”
Cuando el Señor Jesucristo inicio su obra, el comenzó anunciando la venida de su reino, la gente de Israel esperaba ver un mesías guerrero con una espada literal en su mano con la que los libraría de la tiranía Romana y así vendría una paz mundial duradera liderada por este rey justo y vengador.
El Señor no cumplió con sus expectativas de esta manera, el vino a pelear con su palabra, predicando las buenas nuevas del reino, fue así que el reino de Dios fue inaugurado en la tierra.
Luego de la muerte y resurrección de Cristo, el Señor derramo su Espíritu sobre la Iglesia, para que los apóstoles recordaran todas las cosas que él hablo y nosotros podamos ser iluminados para entender las palabras que el hablo -
Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar. Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber. Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.” (, RVR60)
La palabra del E.S. son las palabras que el toma de Cristo y nos las hace saber por medio de los Apóstoles y Profetas, y nos ilumina para que las entendamos.
Es por medio del evangelio del reino que Jesus cumple con su propósito de erradicar a los impíos de la tierra y pondrá fin a la rebelión cósmica que inició satanás.
Por esto Pablo pedía oración para que Dios le revelara más y para que fuera sostenido a fin de llevar esta proclamación a todo lugar, Pablo en unión con Cristo, proclama la palabra de Cristo y así el reino de las tinieblas esta siendo vencido:
¡Voz de tus atalayas! Alzarán la voz, juntamente darán voces de júbilo; porque ojo a ojo verán que Jehová vuelve a traer a Sion. Cantad alabanzas, alegraos juntamente, soledades de Jerusalén; porque Jehová ha consolado a su pueblo, a Jerusalén ha redimido. Jehová desnudó su santo brazo ante los ojos de todas las naciones, y todos los confines de la tierra verán la salvación del Dios nuestro.” ()
Así que Pablo esta llamando a la iglesia, no solo a vestirse de las virtudes de Cristo, sino a proclamar la palabra de Cristo:
¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas! Mas no todos obedecieron al evangelio; pues Isaías dice: Señor, ¿quién ha creído a nuestro anuncio? Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. Pero digo: ¿No han oído? Antes bien, Por toda la tierra ha salido la voz de ellos, Y hasta los fines de la tierra sus palabras.” (, RVR60)
Después de Cristo, no estamos llamados a usar espada física contra la simiente de satanas: “Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán. ¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles? ¿Pero cómo entonces se cumplirían las Escrituras, de que es necesario que así se haga?” (, RVR60)
Cristo vino en cumplimiento de la palabra de Dios, para vencer por su palabra a sus enemigos, no necesitamos una espada física para defendernos o para pelear por Dios y hacer guerra a satanás y a su simiente, ya Cristo ha vencido, el esta intercediendo para que su palabra se cumpla y un día vendrá cuando esta misma palabra que esta siendo proclamada por su pueblo sea argumento suficiente para su juicio eterno por cuanto no creyeron a la palabra:
Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán. ¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles? ¿Pero cómo entonces se cumplirían las Escrituras, de que es necesario que así se haga?” (, RVR60)
El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.” (, RVR60)
La guerra nuestra se libra en esta etapa actual de la historia redentora a través de la predicación de la Palabra de Dios. Nuestro rey nos ha dotado de su espada, de su palabra para pelear contra las fuerzas del mal y para avanzar en la extención de su reino.
Así como Dios hablo y fueron creados los cielos y la tierra, así hoy habla por su hijo y su hijo habla por su iglesia, para traer nuevos cielos y nueva tierra. Que glorioso es que estemos unidos a Cristo y por medio de la proclamación de su palabra estamos llevando a cavo su eterno propósito de traer paz y juzgar a los que están profanando su nómbre:
Apocalipsis 19.13–16 RVR60
Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos.De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.
Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos.De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.” (, RVR60)
¿Osa alguno de vosotros, cuando tiene algo contra otro, ir a juicio delante de los injustos, y no delante de los santos?¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas?” (, RVR60)
1 Corintios 6.1–2 RVR60
¿Osa alguno de vosotros, cuando tiene algo contra otro, ir a juicio delante de los injustos, y no delante de los santos?¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas?
Ya que hemos visto la ilustración y la explicación, veamos:
3. La exhortación
Yahweh como guerrero da a los hombres dotados para la batalla espiritual, no para la batalla militar (; ; ). La espada del Espíritu es la Palabra de Dios (, véase también ).
Tomad.... Debemos recibir esta espada y no abandonarla nunca.
Si nos ponemos toda la armadura y abandonamos la espada estaremos traicionando a nuestro rey, estaremos presentándonos ante el enemigo como soldados rendidos que quieren hacer admistía con su reino de tinieblas.
Dice Gurnall “A lo largo de la historia, la espada ha sido la pieza más necesaria del equipo del solda­do, y se ha utilizado más que ninguna otra arma. Un piloto sin mapas, un estudiante sin libros, un soldado sin espada; todos hacen el ridículo. Pero más que cualquiera de estos, es absurdo llamarse cristiano sin el conocimiento de la Palabra de Dios o alguna destreza en el uso de esta arma”
Cuando vemos a alguien con una armadura sin un arma, pensamos (su interés no es hacerle daño a nadie) pero si vez a alguien armado, sabes que su propósito es herir.
Debemos tomar esta espada, volvernos diestros en su uso para permanecer firmes ante el enemigo: .
Gurnall “Por muy gloriosas que sean las demás piezas de la armadu­ra del cristiano, pronto se vería desarmado si no llevara la espada en la mano. Al creyente lo despojarían de todas sus virtudes sin esta espada para defenderlas y defenderse con­ tra la furia de Satanás: “Si tu ley no hubiese sido mi delicia, ya en mi aflicción hubiera perecido” ()”
Por muy gloriosas que sean las demás piezas de la armadu­ ra del cristiano, pronto se vería desarmado si no llevara la espada en la mano. Al creyente lo despojarían de todas sus virtudes sin esta espada para defenderlas y defenderse con­ tra la furia de Satanás: “Si tu ley no hubiese sido mi delicia, ya en mi aflicción hubiera perecido” ()
Debemos recibir esta espada y no usar otra arma:
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.” ()
Gurnall: Se nos prohíbe emplear cualquier otra arma que no sea la que nos proporcionan las Escrituras, conside­rando como una renuncia a la lealtad el hecho de acudir a otra fuente de consejo o protección aparte de su Palabra. La Escritura es suficiente para los propósitos de Dios, y puede dar a todo verdadero creyente la sabiduría suficiente para en­contrar la salvación de su alma.
Pablo es un ejemplo para nosotros - Toda su proclamación era según el Logos (La palabra canónica de Dios):
Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría.Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste crucificado.Y estuve entre vosotros con debilidad, y mucho temor y temblor; y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.” (, RVR60)
La palabra de Dios es polémica, satanas y su simiente se ofenden con ella o se burla de ella creyendo que es locura - la palabra de Dios contradice toda su filosofía, toda su falsa ciencia, todo su estilo de vida, creencias religiosas y falsa adoración.
Es por medio de la palabra de Cristo que el reino de los cielos avanza y se establece y el reino de las tinieblas va siendo juzgado, expuesto y debilitado y muy pronto desarraigado.
satanás y su simiente odian esta arma, pues no solo los contradice, sino que los condena, los descubre, esta espada descubre las intenciones del corazón de los profanos y los deja al descubierto:
Todo
Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.” ()
DEBEMOS USAR ESTA ESPADA Y NO OTRA, PERO TAMBIEN DEBEMOS SABER USARLA.
Un famoso guerrero albanés llamado Scanderbeg fue muy famoso por sus victorias contra los turcos.Su espada esta exhibida en Viena. Se cuenta que un hombre la estaba viendo exhibida y dijo: ¿Esta es la espada que ganó tantas victorias, no veo nada especial en ella, sino una espada común? Alguien le dijo: "Deberías haber visto el brazo que la manejaba".
se lee esta referencia a la difusión de las buenas nuevas de salvación
con la alusión a en ( 'el casco de
salvación ') y el tema de la creación de nuevo y más grande en Efesios, se sugiere
que la predicación de la Iglesia del Evangelio conduce a la expansión de la
nueva creación inaugurada por la muerte de Cristo victorioso. A 'poner en el
toda la armadura de Dios en implica, pues, más que una
el compromiso de defensa contra las 'asechanzas del diablo' (v. 11). También
implica el uso agresivo del Evangelio como medio de lucha contra la
mal y ampliando así la influencia de la nueva creación instituyó
por la muerte y resurrección de Cristo
Un famoso guerrero albanés llamado Scanderbeg fue muy famoso por sus victorias contra los turcos. Su espada esta exhibida en Viena. Se cuenta que un hombre la estaba viendo exhibida y dijo: ¿Esta es la espada que ganó tantas victorias, no veo nada especial en ella, sino una espada común? Alguien le dijo: "Deberías haber visto el brazo que la manejaba".
En primer lugar, debemos recordar que, como todas las otras piezas de armadura, esta pieza también pertenece a Dios y viene de Dios.
No venceremos al enemigo adoptando el mismo leguaje de la escritura y proclamado pasajes a la loca fuera de contexto, sería tener la espada de Scanderbeg sin tener el brazo de Scanderbeg.
habla de que Dios destruyó a su enemigo con una espada. Y por cierto, si usted va y mira a , el enemigo mencionó que hay Leviatán, que muchos creen que es un símbolo o imagen de Satanás. Así que Dios ha derrotado a Satanás con su espada, y ahora nos ha dado esta misma espada para nuestras batallas contra las fuerzas de Satanás.
Tomar la espada, no es tener la palabra de Dios escrita en la mano, no es tomar en las manos una biblia. Por esto la importancia de la palabra rhēma, que tiene que ver más bien con proclamar esta palabra a otros. Esta proclamación esta acompañada de un estilo de vida virtuoso.
Tomar la espada es estar dispuestos a proclamar la palabra, esto implica confianza en ella y un entendimiento amplio de ella.
Y luego en el Nuevo Testamento, en el libro de Apocalipsis, leemos que de la boca de Cristo viene una espada afilada de doble filo (, , , , ).
Estamos hablando de una persona unida a Cristo, revestida de Cristo, que habla la palabra de Cristo.
Entonces, ¿qué es esta espada que viene de Dios y sale de la boca de Jesucristo? Bueno, Pablo nos dice lo que es en el versículo 17. Leemos allí que la Espada es la Palabra de Dios. Viene del Espíritu porque el Espíritu es el que inspiró a los escritores de la Escritura a escribir lo que hicieron ya mantener la Biblia libre de todos los errores. Leemos en este y .
Les dije que que este texto era un resumen de la carta de Pablo y recordemos lo que dice en el Capitulo 5:18 “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones;” (, RVR60)
Así que esta última pieza de armadura es la Biblia tal como fue inspirada por el Espíritu Santo.
Para tomar la palabra de Dios en nuestros labios y proclamarla, primero debe estar en nuestros corazones, debemos atesorarla, desearla y obedecerla confiando en el poder de Dios - solo así podremos permanecer firmes.
No fue citando la escritura que Jesus venció a satanás. Jesus conocía la palabra, era obediente a ella, la tenia en su corazón y por esto la declaraba con su boca.
Walter Martin dice: “la tragedia del cristianismo es que una maravilla de 90 días de los testigos de Jehová puede destrozar a cristiano en 30 minutos.”
Es vergonzoso que un Cristiano no pueda defender su fe, quiere decir que no solo desconoce la escritura, sino que también no podrá ser obediente a Dios (La palabra defiende y santifica - mantiene nuestra virtudes bien puestas) no solo vergonzoso, no puedes esperar marchar en medio del reino de satanás sin un entendimiento de la escritura, necesitamos crecer el en el conocimiento de Dios.
Así Debemos ejercitarnos como hacían los soldados con su espada, debemos volvernos diestros en el uso de la palabra, pasando tiempo en ella, escuchando, leyendo, estudiando, memorizando, trazando correctamente sus partes y hablando de ella entre nosotros. De manera que podamos proclamarla con valor. Tener esta espada hará que:
Pero es tener la palabra de verdad introducida en nuestro corazón por el poder de Dios, la fe levantada para creer que Dios mismo lo habla a nuestro corazón, siendo así habilitado para manejarlo en la fuerza del Espíritu y por el poder de la fe En ejercicio vivo, para resistir cada empuje infernal.
La espada de Scanderbeg, un famoso guerrero albanés contra los turcos, solía ser mostrado en Viena. Un hombre que una vez lo miró y lo manejó, dijo: "¿Es esta la espada la que ganó tantas victorias, no veo nada en ella, sino una espada común". La respuesta fue: "Deberías haber visto el brazo que lo manejaba". Así que no se trata simplemente de tomar un texto, de adoptar el lenguaje de las Escrituras, y de citar pasajes, que vence a los ardientes asaltos de Satanás. Esto es tener la espada de Scanderbeg sin tener el brazo de Scanderbeg. Pero es tener la palabra de verdad introducida en nuestro corazón por el poder de Dios, la fe levantada para creer que Dios mismo lo habla a nuestro corazón, siendo así habilitado para manejarlo en la fuerza del Espíritu y por el poder de la fe En ejercicio vivo, para resistir cada empuje infernal.
La espada de Scanderbeg
Pero es tener la palabra de verdad introducida en nuestro corazón por el poder de Dios, la fe levantada para creer que Dios mismo lo habla a nuestro corazón, siendo así habilitado para manejarlo en la fuerza del Espíritu y por el poder de la fe En ejercicio vivo, para resistir cada empuje infernal.
De manera que podamos proclamarla con valor y:
Avance el reino de Dios - Convirtiendo: “Mas también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis, sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;” (, RVR60) Con la proclamación de Pedro 3.000 personas abandonaron el ejercito enemigo para unirse al reino de Dios por la fe.
1 Pedro 3.14–15 RVR60
Mas también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis, sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;
Podremos confrontar toda filosofía, teoría, perspectiva o tácticas del enemigo - Destruye fortalezas: “Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne; porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo, y estando prontos para castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea perfecta.” (
Podremos escapar de las redes del enemigo y triunfar sobre el pecado (Jesus enfrentó con la palabra al engañador): “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.” (, RVR60) Y nos pone a salvo, nos hace libres para servir a Dios: “a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre;” () - Derrota la mentira y vence nuestras concupicencias.
La palabra de Dios, es una espada arrolladora, cuando es usada fielmente los pecadores serán rescatados del dominio de satanás y todo creyentes podrá permanecer firme triunfando sobre el pecado y además cambia las estructuras de la sociedad para que se convierta en la ciudad de Dios (La iglesia) una ciudad que permanecerá para siempre.
La tragedia de tragedias es que alguien sea un cristiano por mucho tiempo y no pueda usar este recurso incomparable que Dios nos ha dado en Su gracia. Usted dice: “¡Oh!, pero te voy a decir, en cierta manera he sido golpeado aquí allá y no lo entiendo.” Escuche. No me diga eso. No me diga que no lo entiende. Él no sólo le dio el libro, Él implantó en su corazón al Maestro de verdad residente. Y Él se la va a enseñar si usted se somete a Sus enseñanzas.
Hermano: ¿Conoces bien la palabra de Dios ? ¿Estás suficientemente controlado por la verdad aun cuando tus emociones estén en confusión, la obedeces? Una vez más, la Biblia no te hará ningún bien si no la aplicas.
Alguien dijo: “La tragedia de tragedias es que alguien sea un cristiano por mucho tiempo y no pueda usar este recurso incomparable que Dios nos ha dado en Su gracia. Usted dice: “¡Oh!, pero te voy a decir, en cierta manera he sido golpeado aquí allá y no lo entiendo.” Escuche. No me diga eso. No me diga que no lo entiende. Él no sólo le dio el libro, Él implantó en su corazón al Maestro de verdad que es el E.S.. Y Él se la va a enseñar si usted se somete a Sus enseñanzas.
Nadie va a poder decir que es ignorante. “No entiendo esas palabras tan sofisticadas.” Usted lo puede entender. Dios lo va a capacitar para entenderlo tanto como usted necesita entenderla para ganar la victoria. No es tan difícil. Yo la entiendo. Y trabajo duro en entenderla. Eso es todo. Eso es todo. Si algo llega a ser bueno, indica que alguien se esforzó mucho en entenderlo. Así es en su vida. Simplemente porque usted es dueño de una Biblia, no quiere decir que usted tiene una espada. Usted puede ser dueño de un almacén de Biblias y no tener una espada. Si usted no sabe cómo usarla defensiva y ofensivamente. Jesús nos dio el modelo. Él dijo: “¿qué dice la Escritura?” Así es como debemos vivir la vida, así es como debemos enfrentar la tentación, así es como debemos enfrentar el ministerio. En dice que los de Berea eran más nobles que los otros porque escudriñaban las Escrituras. Eso es nobleza verdadera.
Dice Macarthur: Nadie va a poder decir que es ignorante. “No entiendo esas palabras tan sofisticadas.” Usted lo puede entender. Dios lo va a capacitar para entenderlo tanto como usted necesita entenderla para ganar la victoria. No es tan difícil. Yo la entiendo. Y trabajo duro en entenderla. Eso es todo. Eso es todo. Si algo llega a ser bueno, indica que alguien se esforzó mucho en entenderlo. Así es en su vida. Simplemente porque usted es dueño de una Biblia, no quiere decir que usted tiene una espada. Usted puede ser dueño de un almacén de Biblias y no tener una espada. Si usted no sabe cómo usarla defensiva y ofensivamente. Jesús nos dio el modelo. Él dijo: “¿qué dice la Escritura?” Así es como debemos vivir la vida, así es como debemos enfrentar la tentación, así es como debemos enfrentar el ministerio. En dice que los de Berea eran más nobles que los otros porque escudriñaban las Escrituras. Eso es nobleza verdadera.
La palabra de Dios, es una espada arrolladora: transforma y juzga a las personas, nos libera del enemigo y además cambia las estructuras de la sociedad para que se convierta en la ciudad de Dios (La iglesia) una ciudad que permanecerá para siempre.
Nunca hubiese habido reforma, no tendríamos una biblia en las manos, si un hombre no se
Un biógrafo de Martín Lutero escribió esto, y cito: “Lutero estuvo en tinieblas por el diablo a pesar que era un monje. Él estaba tratando de salvarse a sí mismo mediante obras. Él estaba ayunando y sudando y orando; y, sin embargo, era miserable e infeliz y estaba en esclavitud constante. La enseñanza católica romana supersticiosa lo mantuvo cautivo. Pero él fue librado por la palabra de las Escrituras, “el justo por la fe vivirá.” A partir de ese momento, él comenzó a entender esa palabra como nunca antes la había entendido y entre mejor la entendió, más vio los errores enseñados por Roma. Él vio el error de su práctica y entonces, tuvo un mayor deseo por reformar la Iglesia. Él procedió a hacer todo en términos de exposición de las Escrituras. Los grandes doctores en la Iglesia romana lo resistieron. Él a veces tuvo que estar solo y se reunió con ellos en combate cercano e invariablemente, él se aferró a las Escrituras. Él mantuvo que la Iglesia no está por encima de las Escrituras. El estándar mediante el cual usted juzga inclusive a la Iglesia,” él dijo, “son las Escrituras.” Y aunque él era un hombre solo al principio, él pudo pelear al sistema de los papas y de doce siglos de tradiciones. Y él lo hizo al tomar la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios.
La palabra de Dios, es una espada arrolladora, cuando es usada fielmente los pecadores serán rescatados del dominio de satanás y todo creyentes podrá permanecer firme triunfando sobre el pecado y además cambia las estructuras de la sociedad para que se convierta en la ciudad de Dios (La iglesia) una ciudad que permanecerá para siempre.
Gurnall: “El Espíritu no hará nada por los creyentes sin la Palabra, y ellos a su vez no pueden hacer nada sin el Espíritu. La Pala­ bra es la espada, y el Espíritu de Cristo el brazo que la esgri­ me en favor de los cristianos. Todas las conquistas de Cristo y sus discípulos en el mundo se hacen con esta espada. Cuan­ do él va contra sus enemigos, lleva esta espada ceñida: “Ciñe tu espada sobre el muslo, oh valiente” (). Su victoria se le adscribe a ella: “En tu gloria sé prosperado; cabalga so­ bre palabra de verdad”; esto es, sobre la Palabra de Dios (v. 4)”.
Gurnall: “El Espíritu no hará nada por los creyentes sin la Palabra, y ellos a su vez no pueden hacer nada sin el Espíritu. La Pala­ bra es la espada, y el Espíritu de Cristo el brazo que la esgri­ me en favor de los cristianos. Todas las conquistas de Cristo y sus discípulos en el mundo se hacen con esta espada. Cuan­ do él va contra sus enemigos, lleva esta espada ceñida: “Ciñe tu espada sobre el muslo, oh valiente” (). Su victoria se le adscribe a ella: “En tu gloria sé prosperado; cabalga so­ bre palabra de verdad”; esto es, sobre la Palabra de Dios (v. 4)”.
4).
Al diablo no le interesa que una iglesia se llene, al diablo le interesa lo que se predica en el púlpito, el quiere apartar a la gente de la espada. No debemos esperar pasivamente el ataque de Satanás. Debemos estar ocupados en el ministerio, que por su naturaleza está en contra del reino de Satanás.
Necesitamos ser expertos en la Biblia. Necesitamos conocer la Palabra de Dios hacia atrás y hacia adelante. Necesitamos ser capaces de recitar los libros de la Biblia en orden.Necesitamos ser capaces de saber aproximadamente lo que está en cada libro y lo que cada libro es acerca. Necesitamos conocer versículos claves y capítulos clave de cada libro.Necesitamos conocer versículos claves y capítulos clave en la Biblia. Necesitamos conocer versículos claves y capítulos clave para ayudarnos a enfrentar falsas enseñanzas e ideas falsas.
Pero el punto que quiero que vea es que Satanás está ocupado. Sea mediante torcer la perspectiva de regreso al mundo o al traer el calor de la persecución, de la aflicción en su vida o al arrebatarla para que no se acuerden de ella, él quiere detener el sembrado de la semilla. ¿Por qué? Porque él sabe que, si encuentra buen suelo, va a producir. Y eso es lo que es emocionante. Si no creyera que la Palabra de Dios produce de algo, dejaría de predicar o haría algo más. Pero tan fantástica que usted puede saber que cuando sale, la Palabra de Dios nunca regresará vacía, sino que siempre “hará lo que Yo quiero.” Esta es una palabra poderosa, amados. Tan poderosa que la Biblia dice que convierte el alma. Ninguna palabra de hombres puede afectar a las huestes espirituales de maldad. Sólo la Palabra de Dios.
No debemos esperar pasivamente el ataque de Satanás. Debemos estar ocupados en el ministerio, que por su naturaleza está en contra del reino de Satanás.
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.” (, RVR60)
Bueno, en primer lugar, puede destruir los argumentos de Satanás. La mejor ilustración de esto es cuando Jesús usa la Palabra de Dios en el desierto contra las tentaciones de Satanás ().
Un biógrafo de Martín Lutero escribió esto, y cito: “Lutero estuvo en tinieblas por el diablo a pesar que era un monje. Él estaba tratando de salvarse a sí mismo mediante obras. Él estaba ayunando y sudando y orando; y, sin embargo, era miserable e infeliz y estaba en esclavitud constante. La enseñanza católica romana supersticiosa lo mantuvo cautivo. Pero él fue librado por la palabra de las Escrituras, “el justo por la fe vivirá.” A partir de ese momento, él comenzó a entender esa palabra como nunca antes la había entendido y entre mejor la entendió, más vio los errores enseñados por Roma. Él vio el error de su práctica y entonces, tuvo un mayor deseo por reformar la Iglesia. Él procedió a hacer todo en términos de exposición de las Escrituras. Los grandes doctores en la Iglesia romana lo resistieron. Él a veces tuvo que estar solo y se reunió con ellos en combate cercano e invariablemente, él se aferró a las Escrituras. Él mantuvo que la Iglesia no está por encima de las Escrituras. El estándar mediante el cual usted juzga inclusive a la Iglesia,” él dijo, “son las Escrituras.” Y aunque él era un hombre solo al principio, él pudo pelear al sistema de los papas y de doce siglos de tradiciones. Y él lo hizo al tomar la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios.
Escuche, nunca habría habido una reforma si un hombre no hubiera podido ponerse de pie y resistir a los eruditos que estaban en el error del sistema de los papas y repeler sus argumentos con la Palabra de Dios.
A principios del protestantismo, los pastores de la iglesia decidieron que todo cristiano debería tener una Biblia. ¿Por qué? Porque si usted no tiene una Biblia, no tiene una espada. Y fue el voto de Tyndale que todo granjero y todo hombre que trabajara en el campo pudiera leer y entender, para poder protegerse en contra de la infiltración de otro período de una época oscura.
Él dijo: “la manera en el que la gente puede fortalecerse es dándoles el conocimiento de la Palabra de Dios.”
Por medio de la obra del Espíritu Santo, el evangelio de Cristo es una fuerza arrolladora que invoca a la gente al arrepentimiento. Luego, con el pasar del tiempo, el evangelio cambia las estructuras de la sociedad para que se convierta en una ciudad de Dios.
Y fue esa gran ansiedad por el conocimiento preciso de la Biblia que llevó a una traducción confiable de las Escrituras a su idioma y al mío. Nosotros podemos agradecerle a Dios por esas personas. Es esencial que la Palabra de Dios sea conocida. Es esencial si vamos a ganar la batalla.
H. P. Barker Un día él se describió a sí mismo mirando por una ventana y viendo un jardín lleno de plantas y flores. Y él dijo: “vi tres cosas en el jardín. En primer lugar, vi una mariposa. La mariposa era hermosa e iba a una flor y de ahí, volaba a otra flor y de ahí, a otra flor. Se quedaba solo por unos segundos ahí y se movía. Y tocaba tantas flores como podía, pero no derivó ningún beneficio en absoluto de esto. Después,” dijo él, “me quedé viendo por un poco más de tiempo por mi ventana y salió un hombre que estudiaba botánica. Y este hombre tenía un cuaderno bajo su brazo y una lupa muy grande. Y este hombre se inclinaba y veía cierta flor y observaba durante mucho tiempo. Y después, tomaba notas en su cuaderno. Y estuvo ahí durante horas, escribiendo notas, cerró el cuaderno, lo metió bajo su brazo, guardó su lupa en su bolsillo y se fue. Y después,” él dijo, “la tercera cosa que vi fue una abeja. Tan sólo una pequeña abeja. Pero la abeja llegaba a una flor y aspiraba las profundidades de la flor y extraía todo el polen que podía llegar. Y llegaba vacía, pero salía llena.”
Kistemaker, S. J. (2004). Comentario al Nuevo Testamento: 2 Corintios (p. 373). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
Y H. P. Barker dijo: “así es como la gente trata a la Biblia. Existen aquellos que simplemente vuelan de un sermón hermoso a otro sermón hermoso, de clase a clase, de estudio a estudio, cayendo aquí, cayendo allá. Sin traer nada, ni obteniendo nada. Qué sentimiento tan agradable. Después, están los que son como estudiantes de botánica espirituales, quienes toman muchas notas, que están tratando de asegurarse que toda su ortografía esté correcta, pero que no tienen la capacidad de extraer nada de las flores. Es un ejercicio meramente académico. Después, están las abejas espirituales, quienes extraen de toda flor preciada todo lo que se encuentra ahí para poder producir la miel que los hace tan bendecidos para aquellos que los rodean.”
La Palabra de Dios también puede perforar los corazones de los hombres y mostrarles la verdad sobre su propio pecado y la única forma de salvación por medio de la fe en Jesucristo.(, , Hb 4:12, ). Cuando compartimos el Evangelio con la gente, necesitamos usar la Escritura. Presenciar sin el uso de la Palabra es como tratar de ganar una batalla sin una espada. El Espíritu usa la Palabra de Dios para convencer a los pecadores y convencerlos de su necesidad de Jesucristo ().
La Palabra de Dios también nos ayuda a entrenarnos y corregir y nos cambia como cristianos (; ; ; ; ) . Es como un bisturí, cortando cuidadosamente toda la carne muerta y el tejido cicatricial que queda atrás de nuestra vieja forma de vida
"No es la Palabra la espada del Espíritu con que el creyente puede vencer a sus adversarios? Entonces tenemos que considerar cruel aquel sistema religioso que le quita al pueblo la úni­ca arma que lo puede defender de los enemigos que buscan su muerte eterna. Es verdad que estos líderes tienen algunas hojas de higuera para ocultar su tradición vergonzosa, haciendo creer al mundo que por misericordia no quieren que sus feligreses se hieran con esta arma. Hasta apelan al testimonio de Pedro en su defensa, porque una vez este habló de “estas cosas, entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen (como también las otras Escrituras) pa­ ra su propia perdición” ().
La única manera de tomar la Espada es sumergirnos en la Palabra de Dios. No hay atajos ni pistas rápidas. La única manera de tomar la Espada del Espíritu es pasar tanto tiempo como sea posible en la Palabra de Dios. Léalo. Estudialo. Memorícelos. Hable al respecto. Medita sobre ello. Oren por ella. Piénsalo. Asista a una iglesia -como la nuestra- donde la Palabra de Dios es fiel y sistemáticamente enseñada-verso por verso, libro por libro para que, con el tiempo, reciba todo el consejo de Dios.
¿Acaso Pedro prohibió la lectura de la Palabra porque al­ gunos inestables la torcieran? Al contrario, ya que en otros versículos manda a los creyentes que no se dejen desviar por el error de los malvados, “antes bien —dice—, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesu­ cristo” (v. 18).
¿Acaso Pedro prohibió la lectura de la Palabra porque al­ gunos inestables la torcieran? Al contrario, ya que en otros versículos manda a los creyentes que no se dejen desviar por el error de los malvados, “antes bien —dice—, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesu­ cristo” (v. 18)....
..... ¿Y cómo esperaba Pedro que el pueblo cre­ ciera en el conocimiento de Cristo sino leyendo la Escritura, el único libro donde se puede encontrar? ¡Grave error, que los maestros quieran que el pueblo obtenga este conocimiento úni­ camente de la predicación, y no de la Biblia! ¿Cómo puede es­ tar segura la congregación de que oye la verdad si no tiene la Palabra, único aval de la pureza de una doctrina? Dios mismo dirige su Palabra a todos, no solo a un grupo selecto (cf. ; ). ¿Para qué hacer leyes que no se pueden pro­ mulgar? ¿Y para qué se escribió la Palabra, sino para ser leída y conocida por todos? Por la misma autoridad con que el após­ tol escribió sus epístolas, las mandó leer en la iglesia. ¿Acaso los primeros ministros de la Iglesia ocultaron la Palabra de Dios al pueblo, en lugar de animarlos a guardarla en su cora­zón?. Es verdad que algunos tuercen la Palabra para su propia destrucción, de la misma forma que alguien se puede atragan­ tar con un trozo de pan si no tiene cuidado. ¿Pero han de mo­ rir todos de hambre por temor a atragantarse? Algunos se cor­ tan con las armas afiladas, ¿pero debe desarmarse todo el ejér­ cito, dejando la espada para unos pocos oficiales? Si este argu­ mento bastara para sellar la Biblia, habría que negársela a los intelectuales igual que al hombre común, porque se sabe que las peores herejías salen de las mentes más agudas. Cuando los soberbios insisten en ser más sabios que Dios, su mente necia se vuelve cada vez más oscura, hasta acostumbrarse tanto a las tinieblas que ya no ven la soberanía divina."
En resumen, si quieres tener tu espada contigo en la batalla espiritual, necesitas conocer la Palabra. Y la única manera de conocer la Palabra es pasar tanto tiempo en la Palabra como sea posible.
Gurnall

La importancia de estudiar la Palabra de Dios
Dios ha legado un solo libro a la Iglesia, ¿y nos negaremos a es­ tudiarlo? Hay un inmenso tesoro en una mina cercana, pero a menudo permanecemos pobres por no ponernos la ropa de tra­ bajo y cavar.
¿Qué fue del hambre de los creyentes por estudiar la Escri­ tura? Antiguamente lo daban todo, aun la sangre de sus venas, por comprar algunas páginas de ella. O eran unos necios por
1. El mandamiento
“Escudriñad las Escrituras” (). Este mandamiento no puede ser más claro. Pero aunque Dios no hubiera expresado tan claramente este deber, el hecho de tener su Palabra por es­ crito nos comunica su propósito. La ratificación de una ley bas­ ta para obligar a los ciudadanos a obedecerla. De nada sirve alegar la ignorancia, ya que la promulgación de dicha ley con­ lleva la obligación de enterarnos de su significado y aplicación.
[818]
Cristo condena la ignorancia de los hombres, puesto que él mismo ha suministrado el conocimiento: “Y esta es la conde­ nación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz” (). Muchos huyen de la luz por­ que no quieren andar en ella. Si la ignorancia de la Palabra se condena allí donde hay luz, ciertamente Dios nos manda que abramos los ojos para recibir la sabiduría que aquella derrama; porque antes de que pueda fallarse sentencia condenatoria ha de transgredirse la ley. Ya que vives donde se predica este evan­ gelio, serás juzgado por él, lo conozcas o no.
La espada del cristiano
A los judíos se les entregó la Palabra: “Les ha sido confiada la palabra de Dios” (). Esta Palabra les fue dada a ellos, y ahora a nosotros, como el padre moribundo le entrega su tes­ tamento a su hijo, no para que lo tire, sino para que lo estudie y haga todo lo que manda.
A la Palabra de Dios se la llama “la fe que ha sido una vez dada a los santos” (). Fue entregada para su estudio y cuidado.
pagar tanto por esta sabiduría, o más lo eres tú por rechazar aquello que tan fácilmente puedes obtener. Pero para que no creas que te quiero persuadir a que consideres hacer un traba­ jo que es opcional, has de comprender la doble necesidad in­ dispensable que tenemos de conocer la Palabra: el mandamien­ to y el medio.
2. Los medios
La Palabra contiene toda la sabiduría de Dios para llevar a los pecadores a la vida eterna. Pero si te niegas a escudriñar la Es­ critura sentado a los pies del Espíritu, que utiliza este único libro para preparar a sus discípulos para el Cielo, ¿dónde en­ contrarás otro Maestro que tenga palabras de vida eterna?
Dios nos lleva a su presencia por medio de la Palabra.
Tienes delante la vida y la muerte, escoge tú. Pero quiero avi­ sarte de que si estás decidido a rechazar al Todopoderoso y lanzarte a la eternidad sin su Palabra para guiarte, has de pre­ pararte para encallar en el Infierno. Disponte a endurecer tu corazón, si es que puedes, contra las llamas eternas encendi­ das para “los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evan­ gelio de nuestro Señor Jesucristo” (). Sabrás para te­ rror tuyo que, a pesar de tu ignorancia elegida y profesa, un buen día comprenderás la Palabra perfectamente, y esta com­ prensión solo avivará el fuego del tormento.
El Infierno sale a tu encuentro cuando te diriges allá. Sus prisioneros te rodearán con reproche burlón: “Somos paga­ nos, pero no tenemos motivo para culpar a Dios por este cas­ tigo, aunque nunca oímos el evangelio. Nos condenamos so­ los, rebelándonos contra todo rayo de luz enviado por Dios. ¡Pero tú rechazaste la Palabra de Dios, y tuviste que que­ brantar todas sus promesas para llegar hasta aquí!”.
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