Recordando los Objetivos

Objetivos de Dios

Vivir con su pueblo

Levítico 26.11–12 NVI

Estableceré mi morada en medio de ustedes, y no los aborreceré. Caminaré entre ustedes. Yo seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo.

Salmo 23.6 NVI

La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del Señor habitaré para siempre.

Zacarías 2.10 NVI

10 »¡Grita de alegría, hija de Sión! ¡Yo vengo a habitar en medio de ti! —afirma el Señor—.

Juan 14.24 NVI

24 El que no me ama, no obedece mis palabras. Pero estas palabras que ustedes oyen no son mías sino del Padre, que me envió.

Juan 14:24

Salmo 23:6

Zacarias 2:10

Apocalipsis 21.3 NVI

3 Oí una potente voz que provenía del trono y decía: «¡Aquí, entre los seres humanos, está la morada de Dios! Él acampará en medio de ellos, y ellos serán su pueblo; Dios mismo estará con ellos y será su Dios.

Apocalipsis 21;

Juan 14.23 NVI

23 Le contestó Jesús: —El que me ama, obedecerá mi palabra, y mi Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en él.

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Construir su iglesia en Cristo

Mateo 16.18 NVI

18 Yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y las puertas del reino de la muerte no prevalecerán contra ella.

Efesios 2.19 NVI

19 Por lo tanto, ustedes ya no son extraños ni extranjeros, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios,

Apocalipsis 21.2 NVI

2 Vi además la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que bajaba del cielo, procedente de Dios, preparada como una novia hermosamente vestida para su prometido.

Zacarias

Apocalipsis 21:2

Efesios

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Perfeccionar su iglesia en Cristo

Efesios 5.26–27 NVI

para hacerla santa. Él la purificó, lavándola con agua mediante la palabra, para presentársela a sí mismo como una iglesia radiante, sin mancha ni arruga ni ninguna otra imperfección, sino santa e intachable.

Filipenses 1.6 NVI

6 Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús.

Colosenses 2.10 NVI

10 y en él, que es la cabeza de todo poder y autoridad, ustedes han recibido esa plenitud.

Colosen

Salmo 138.8 NVI

8 El Señor cumplirá en mí su propósito. Tu gran amor, Señor, perdura para siempre; ¡no abandones la obra de tus manos!

Salmo 138:

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Objetivos de Jesucristo

Hacer la voluntad de su padre

Juan 6.38 NVI

38 Porque he bajado del cielo no para hacer mi voluntad sino la del que me envió.

Mateo 26.39 NVI

39 Yendo un poco más allá, se postró sobre su rostro y oró: «Padre mío, si es posible, no me hagas beber este trago amargo. Pero no sea lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.»

Juan 5.30 NVI

30 Yo no puedo hacer nada por mi propia cuenta; juzgo sólo según lo que oigo, y mi juicio es justo, pues no busco hacer mi propia voluntad sino cumplir la voluntad del que me envió.

Hechos de los Apóstoles 10.7–9 NVI

7 Después de que se fue el ángel que le había hablado, Cornelio llamó a dos de sus siervos y a un soldado devoto de los que le servían regularmente. 8 Les explicó todo lo que había sucedido y los envió a Jope. 9 Al día siguiente, mientras ellos iban de camino y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea a orar. Era casi el mediodía.

Juam 5:30

Hebreos 10.9 NVI

9 Luego añadió: «Aquí me tienes: He venido a hacer tu voluntad.» Así quitó lo primero para establecer lo segundo.

Hechos de los Apóstoles 10.9 NVI

9 Al día siguiente, mientras ellos iban de camino y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea a orar. Era casi el mediodía.

Hechos

Hechos

hebreos

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Predicar el evangelio

Lucas 4.43 NVI

Pero él les dijo: «Es preciso que anuncie también a los demás pueblos las buenas nuevas del reino de Dios, porque para esto fui enviado.»

Lucas 4.18–19 NVI

18 «El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, 19 a pregonar el año del favor del Señor.»

Isaías 61.1–2 NVI

1 El Espíritu del Señor omnipotente está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a sanar los corazones heridos, a proclamar liberación a los cautivos y libertad a los prisioneros, 2 a pregonar el año del favor del Señor y el día de la venganza de nuestro Dios, a consolar a todos los que están de duelo,

Lucas

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Salvar al perdido

Lucas 19.10 NVI

Porque el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.

Lucas 15.7 NVI

7 Les digo que así es también en el cielo: habrá más alegría por un solo pecador que se arrepienta, que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentirse.

Lucas 15.10 NVI

10 Les digo que así mismo se alegra Dios con sus ángeles por un pecador que se arrepiente.

Lucas 15:10

Lucas 15:7

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Jesucristo logró sus objetivos

Juan 17.4 NVI

Yo te he glorificado en la tierra, y he llevado a cabo la obra que me encomendaste.

Lucas 13.32 NVI

32 Él les contestó: —Vayan y díganle a ese zorro: “Mira, hoy y mañana seguiré expulsando demonios y sanando a la gente, y al tercer día terminaré lo que debo hacer.”

Juan 12.31 NVI

31 El juicio de este mundo ha llegado ya, y el príncipe de este mundo va a ser expulsado.

Lucas

Juan 19.28–30 NVI

28 Después de esto, como Jesús sabía que ya todo había terminado, y para que se cumpliera la Escritura, dijo: —Tengo sed. 29 Había allí una vasija llena de vinagre; así que empaparon una esponja en el vinagre, la pusieron en una caña y se la acercaron a la boca. 30 Al probar Jesús el vinagre, dijo: —Todo se ha cumplido. Luego inclinó la cabeza y entregó el espíritu.

Juan 19:28

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Objetivos de los creyentes

Agradar a Dios

2 Corintios 5.9 NVI

Por eso nos empeñamos en agradarle, ya sea que vivamos en nuestro cuerpo o que lo hayamos dejado.

Romanos 14.18 NVI

18 El que de esta manera sirve a Cristo, agrada a Dios y es aprobado por sus semejantes.

Efesios 5.10 NVI

10 y comprueben lo que agrada al Señor.

Romanos

Efesios 5.17 NVI

17 Por tanto, no sean insensatos, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor.

Efesio

Colosenses 1.9–10 NVI

9 Por eso, desde el día en que lo supimos no hemos dejado de orar por ustedes. Pedimos que Dios les haga conocer plenamente su voluntad con toda sabiduría y comprensión espiritual, 10 para que vivan de manera digna del Señor, agradándole en todo. Esto implica dar fruto en toda buena obra, crecer en el conocimiento de Dios

Colosenses 1:9-10

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Conocer a Dios

Filipenses 3.8 NVI

Es más, todo lo considero pérdida por razón del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por él lo he perdido todo, y lo tengo por estiércol, a fin de ganar a Cristo

Juan 17.3 NVI

3 Y ésta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú has enviado.

2 Pedro 3.18 NVI

18 Más bien, crezcan en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. ¡A él sea la gloria ahora y para siempre! Amén.

2 Pedro

Juan 17;3

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Ser fiel a Jesucristo

Juan 15.4 NVI

Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí.

Mateo 10.22 NVI

22 Por causa de mi nombre todo el mundo los odiará, pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.

Mateo 24.13 NVI

13 pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.

Mateo 10

Filipenses 3.14 NVI

14 sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús.

2 Timoteo 4.7 NVI

7 He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, me he mantenido en la fe.

2 Timoteo

Hebreos 12.2 NVI

2 Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios.

3:14

Hebreos

Apocalipsis 2.26 NVI

26 Al que salga vencedor y cumpla mi voluntad hasta el fin, le daré autoridad sobre las naciones

Apocalipsis

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Amarse los unos a los otros

Juan 13.34 NVI

»Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros.

Juan 15.12 NVI

12 Y éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado.

1 Corintios 13.13 NVI

13 Ahora, pues, permanecen estas tres virtudes: la fe, la esperanza y el amor. Pero la más excelente de ellas es el amor.

Juan 15:

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Vivir en paz

Romanos 12.18 NVI

Si es posible, y en cuanto dependa de ustedes, vivan en paz con todos.

Marcos 9.50 NVI

50 »La sal es buena, pero si deja de ser salada, ¿cómo le pueden volver a dar sabor? Que no falte la sal entre ustedes, para que puedan vivir en paz unos con otros.

2 Corintios 13.11 NVI

11 En fin, hermanos, alégrense, busquen su restauración, hagan caso de mi exhortación, sean de un mismo sentir, vivan en paz. Y el Dios de amor y de paz estará con ustedes.

2 Corintios

Marcos 9:50

1 Tesalonicenses 4.11 NVI

11 a procurar vivir en paz con todos, a ocuparse de sus propias responsabilidades y a trabajar con sus propias manos. Así les he mandado,

1Tesalonicenses 4:11

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Propagar el evangelio

Mateo 28.19–20 NVI

Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.

Hechos de los Apóstoles 20.24 NVI

24 Sin embargo, considero que mi vida carece de valor para mí mismo, con tal de que termine mi carrera y lleve a cabo el servicio que me ha encomendado el Señor Jesús, que es el de dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios.

1 Corintios 9.16 NVI

16 Sin embargo, cuando predico el evangelio, no tengo de qué enorgullecerme, ya que estoy bajo la obligación de hacerlo. ¡Ay de mí si no predico el evangelio!

Hechos 20:24

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Crecer en madurez

Efesios 4.13 NVI

De este modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de Cristo.

2 Corintios 7.1 NVI

1 Como tenemos estas promesas, queridos hermanos, purifiquémonos de todo lo que contamina el cuerpo y el espíritu, para completar en el temor de Dios la obra de nuestra santificación.

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El objetivo final de los creyentes es el cielo

Apocalipsis 7.9–10 NVI

Después de esto miré, y apareció una multitud tomada de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas; era tan grande que nadie podía contarla. Estaban de pie delante del trono y del Cordero, vestidos de túnicas blancas y con ramas de palma en la mano. Gritaban a gran voz: «¡La salvación viene de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero!»

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Dios garantiza que los creyentes alcanzarán su objetivo

Juan 14.2–3 NVI

En el hogar de mi Padre hay muchas viviendas; si no fuera así, ya se lo habría dicho a ustedes. Voy a prepararles un lugar. Y si me voy y se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté.

Juan 6.39 NVI

Y ésta es la voluntad del que me envió: que yo no pierda nada de lo que él me ha dado, sino que lo resucite en el día final.

Juan 6:

Romanos 8.38 NVI

Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes,

Romanos 8.38–39 NVI

Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación, podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor.

2 Timoteo 1.12 NVI

Por ese motivo padezco estos sufrimientos. Pero no me avergüenzo, porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que tiene poder para guardar hasta aquel día lo que le he confiado.

Romanos8:38-39

2 Timoteo

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