Excusas, Excusas

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Respuesta a las 5 excusas que a veces ponemos para no involucrarnos en el plan de Dios

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El título de hoy no deja mucho lugar a la imaginación. Nos vamos a enfrentar a 5 excusas que Moisés puso delante de Dios para no participar en lo que Él tenía preparado para él.

El trasfondo

La semana pasada vimos una de ellas, la primera, y eso nos va a servir de conexión para exponer las otras cuatro. Así que, recapitulemos el inicio de la conversación de Dios con Moisés en .

3:1-6

Todo empieza con Dios, a través del ángel de Jehová (Cristo), apareciendo en una zarza ardiente. Solo Moisés la ve… pero cuando la ve, se da cuenta que no se consume como cualquier otra zarza que está prendida fuego. Es razonable decir que la gloria de Dios atrajo a Moisés a Su presencia.
La interacción del temor de Moisés y el detalle de las sandalias nos recuerda la irresistible e incomparable santidad de Dios y luego viene la interacción que hoy vemos un poquito más en detalle.

3:7-10

Luego, en los vv 7-10 tenemos la comisión de Moisés. Dios le dice, como vimos la semana pasada que Él habría de ser la solución. No quiero volver a predicar lo mismo, pero esto es hermoso.
Dios le dice, como vimos la semana pasada que Él habría de ser la solución. No quiero volver a predicar lo mismo, pero esto es hermoso.
Dios, pudiendo hacer cumplir su voluntad de inmediato y sin la ayuda de nadie decide invitarnos a participar de su plan siendo el agente activo en el accionar divino. ¡Qué privilegio!
Con ese preámbulo, estamos listos para desmenuzar esa conversación en las 5 excusas que Dios tuvo que escuchar de parte de Moisés.

Las 5 Excusas de Moisés

En el cumplimiento del plan divino estaba que Moisés ocupara una posición de gran importancia. Posiblemente estés de acuerdo conmigo que es uno de los 5 personajes más importantes de la toda la Biblia.
Sin embargo, cuando Moisés escucha que Dios tiene planes para él, lo invade la duda y la incertidumbre. Esto se traduce en estas 5 excusas que vamos a analizar.

EXCUSA #1: ¿Quién Soy Yo? (3:10-12)

Esta es la que mencionamos la semana pasada. Muchas veces tu y yo nos preguntamos lo mismo… Señor: ¿Quién soy yo para hacer lo que hace falta? o ¿Por qué debo ser yo el que lleve a cabo Tu voluntad? o te lo pongo en otras palabras: ¿Acaso me viste cara de pastor, Señor? Eso es para los que fueron al seminario o son “misiogüeros”, como decía un amigo muy querido.
Moisés está diciendo básicamente: Soy un don nadie.

RESPUESTA #1: Irrelevante

Esta respuesta define el ambiente para el resto de la conversación. No importa quien eres. De hecho, Dios no le contesta. Hagamos el intento. Busquemos en el texto la respuesta... ¡No está!
Lo que Dios hace es cambiar la pregunta de Moisés. No importa quien eres. Ya sé que eres un don nadie… lo que importa es que yo iré contigo. O sea: No importa quién eres tu, sino quien soy YO, porque yo voy contigo.
No vas a pelear esta batalla en tus méritos o en tus fuerzas, sino en las mías. Muy interesante…
Esto lleva a Moisés en una línea de pensamiento en el que la próxima pregunta es la consecuencia lógica de esta respuesta.

EXCUSA #2: ¿Quién eres? (3:13-14)

Si lo importante no soy yo, sino TU que vas conmigo. ¿Cómo les voy a contestar? ¿Qué les digo acerca de Ti? En otras palabras: ¿Quién Eres? o dada la importancia de nombre en el contexto hebreo: ¿Cuál es TU NOMBRE?
Moisés en este punto está argumentando algo que : No sé lo suficiente.

RESPUESTA #2: Esto Es Lo Que Tienes Que Saber

Aquí es cuando Dios se revela a Si mismo y por primera vez encontramos en la Biblia el nombre de Dios.
No es posible cubrir todas las implicaciones en estos dos versículos. Tomaría toda una serie, y vamos en la excusa 2 de 5, así que solo voy a mencionar cuatro características de Dios implícitas en el NOMBRE de Dios, YHWH que trasliteramos como Jehová o Yahweh.

Es auto-exstente

Es muy interesante que el nombre de Dios es una repetición del enunciado “YO SOY”. Jehová es algo como decir YO SOY-YO SOY. Por eso se traduce como Yo soy el que soy.
Dios comienza la respuesta no con el nombre. Es como cuando tu vas a contestar una pregunta pero necesitas aclarar algo antes. Dios le va a decir SU NOMBRE a Moisés, pero comienza con la premisa más fundamental que existe: Dios Es.
Es a partir de un Dios que ES y que tiene la capacidad de crear que todas las demás cosas fueron llamadas a la existencia por su palabra creativa. Eso nos lleva a la segunda característica de Dios que queremos resaltar esta mañana:

Es Creador y Sustentador

Todo lo que existe es creado y sustentado por Dios por medio de Jesucristo. nos dice que todas las cosas fueron creadas por medio de Él y en Él subsisten.

Nunca Cambia

Dios le dice a Moisés una y otra vez: Soy el Dios de tus padres. Soy el mismo que fui con Abraham, Isaac y Jacob. En pocas palabras, Dios le esta enseñando a Moisés que es “inmutable”. A lo largo de las escrituras esta verdad se repite un sinfín de veces y muchas de esas veces es acompañada de otra característica divina:

Es Eterno

Dios no tiene principio ni final. Es eterno. La manera más gráfica de entender este concepto es mirar tu mano, si eres casado y entender que ese anillo que tienes no “empieza” ni “termina” en ningún lado. Dios está por encima del tiempo. No fue creado y no tiene fin. Es desde la eternidad pasada, donde SOLO él en las tres personas de la trinidad estaban presentes, y hasta la eternidad futura, donde estaremos para siempre disfrutando de su presencia los que hemos creído en Cristo.
Así que de esta manera Dios se revela a si mismo y le contesta a Moisés que responderles:
Éxodo 3.14 RVR60
Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.
La tercera respuesta es la más práctica, pero quiero detenerme un segundo antes de seguir y hacer énfasis en esta realidad.
La revelación de Dios, lo que Dios es, la profundidad del concepto de un creador eterno, bueno e inmutable es todo lo que necesitas para cambiar el mundo. Es un concepto tan poderoso y con implicaciones tan grandes que de por sí ya representa un mensaje impactante. Pero lo voy a llevar todavía un paso más.
En la semana, habla con el Pr Glen cuando preparábamos este mensaje (el en Inglés y yo en Español) de que este Dios autoexistente, creador, inmutable y eterno le dice a Moisés: “Yo voy a ir contigo”. Que hermosa pintura del carácter de Dios.

EXCUSA #3: (4:1-2): No me van a creer

EXCUSA #3: (4:1-2): No me van a creer

Esta me encanta porque es la que todos los pastores aplicamos una y otra vez. Cuando Dios nos muestra que tenemos que retar a la congregación, cuando tenemos que hablar de temas difíciles, cuando tenemos que hacer sacrificios y dejar la comodidad para extender el reino de Dios… viene esta duda. Decimos: “Dios, es que no me van a creer” o “van a pensar que lo estoy predicando para echarles algo en cara o porque les quiero tirar una indirecta...”
Así somos todos, no solo los pastores. Le decimos a Dios: “Es que no van a creer”, “es que se van a burlar de mí” y tantas otras excusas que ponemos para no hacer lo que Dios ha preparado para nosotros.
En castellano básico, lo que Moisés pone en duda es: La gente va a dudar que eres real
RESPUESTA #3: ¿Qué Es Eso Que Tienes En Tu Mano?
Esta es la respuesta más práctica de las 5. Dios le contesta con un par de manifestaciones de Su poder. Una es la vara que se convierte en serpiente y otra es la propia mano de Moisés.
Con estos dos ejemplos, Dios muestra que cuando la gente dude, Él va a ser quien manifieste Su poder. Otra vez… en español básico: “NTP, cuando la gente dude yo les muestro mis maravillas”
La aplicación que te puedes llevar de esta mañana es esta:
Cuando pones las cosas que tienes en tus manos a disposición de Dios, ellas cobran vida para que Dios las use para Su gloria. Cuando las agarras y te aferras a ellas a menudo se vuelven inertes.

EXCUSA #4: Hablar No Se Me Da

Otra vez, Moisés esta viendo en lo cortito. Esta con una perspectiva que no llega a procesar lo poderoso que es el Dios con quien está dialogando. Cuando tu y yo ponemos este tipo de excusa, como cuando decimos: “es que yo no sirvo para esto, Señor” le estamos faltando el respeto a Dios.
Me imagino al pajarito que tiene que aprender a volar antes de que su mamá lo empuje del nido diciendo:
Cuando tu y yo ponemos este tipo de excusa, como cuando decimos: “es que yo no sirvo para esto, Señor” le estamos faltando el respeto a Dios. Me imagino al pajarito que tiene que aprender a volar antes de que su mamá lo empuje del nido diciendo:
“Es que yo prefiero caminar… es más seguro, mami. No tengo mucha fuerza en mis alitas” La mamá sabe que va a suceder. Lo va a aventar del árbol, el pobre pájaro se va a quedar pasmado del susto por un instante y luego va a abrir sus alas y su instinto de supervivencia le enseñará las clases de manejo 1, 2, 3 y 4 en 0.35 segundos.

RESPUESTA #4: Yo Te Dí Esa Boca

Dios le tiene que recordar a Moisés que EL fue quien le hizo su boca. Dice la escritura que Dios nos formó a cada uno de nosotros en el vientre de nuestra madre. Conoce cada uno de nuestros pensamientos, sabe cómo nos sentimos y lo incompetentes que podemos llegar a ser.
No necesita que se lo recuerdes :) Es como querer explicarle a Bill Gates como funciona Windows 10. No tiene caso!! Él lo hizo :)
Aquí es donde se pone serio y viene la excusa más fuerte y que tiene que ver con la voluntad:

EXCUSA #5: No Quiero Ir

Con esto hay que tener mucho cuidado…
Esta, si se quiere es la más real y honesta de todas las excusas. Es la que expresa la realidad del corazón de Moisés. El cree que Dios tiene que mandar a Aarón, no a él y por eso no le gusta la idea que claramente Dios le está queriendo comunicar.
Te lo presento de esta forma: Has visto alguna vez a alguien tratando de hacer todo lo posible para no ir a una fiesta, evento, o reunión. La historia va así:
Has visto alguna vez a alguien tratando de hacer todo lo posible para no ir a una fiesta, evento, o reunión. La historia va así:
- ¿Vamos al Cine?
- Es que no tengo que dinero para ir…
- NTP, yo te invito.
- Gracias, pero es que tengo que estudiar…
- ¿No puedes estudiar mañana? ¡Es viernes!
- Si, pero no tengo quien me lleve.
- Yo paso por ti
y así sigue el dialogo hasta que te cansas o hasta que la otra persona que esta encontrando excusa tras excusa por fin dice: ¿Sabes que? No quiero ir… y ya!

RESPUESTA #5: Dios Se Enoja

La Biblia no relata que pasó, pero su silencio habla por ella.
Moisés hizo lo que Dios le estaba encomendando hacer. Para ayudarte a entender esto te voy a recordar lo que vimos la semana pasada.
Cuando Moisés se acerca a la zarza que no se consume, por la sola presencia de Dios cubre sus ojos y teme que Su presencia lo consuma.
Ahora imagínate a ese mismo Dios… enojado. ¿Se entiende?
No hay lugar más peligroso para estar que fuera de la voluntad de Dios y en tenemos un ejemplo:

Mateo 25.31–46 NTV
»Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria acompañado por todos los ángeles, entonces se sentará sobre su trono glorioso. Todas las naciones se reunirán en su presencia, y él separará a la gente como un pastor separa a las ovejas de las cabras. Pondrá las ovejas a su derecha y las cabras a su izquierda. »Entonces el Rey dirá a los que estén a su derecha: “Vengan, ustedes, que son benditos de mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Pues tuve hambre, y me alimentaron. Tuve sed, y me dieron de beber. Fui extranjero, y me invitaron a su hogar. Estuve desnudo, y me dieron ropa. Estuve enfermo, y me cuidaron. Estuve en prisión, y me visitaron”. »Entonces esas personas justas responderán: “Señor, ¿en qué momento te vimos con hambre y te alimentamos, o con sed y te dimos algo de beber, o te vimos como extranjero y te brindamos hospitalidad, o te vimos desnudo y te dimos ropa, o te vimos enfermo o en prisión, y te visitamos?”. »Y el Rey dirá: “Les digo la verdad, cuando hicieron alguna de estas cosas al más insignificante de éstos, mis hermanos, ¡me lo hicieron a mí!”. »Luego el Rey se dirigirá a los de la izquierda y dirá: “¡Fuera de aquí, ustedes, los malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus demonios! Pues tuve hambre, y no me alimentaron. Tuve sed, y no me dieron de beber. Fui extranjero, y no me invitaron a su hogar. Estuve desnudo, y no me dieron ropa. Estuve enfermo y en prisión, y no me visitaron”. »Entonces ellos responderán: “Señor, ¿en qué momento te vimos con hambre o con sed o como extranjero o desnudo o enfermo o en prisión y no te ayudamos?”. »Y él responderá: “Les digo la verdad, cuando se negaron a ayudar al más insignificante de éstos, mis hermanos, se negaron a ayudarme a mí”. »Y ellos irán al castigo eterno, pero los justos entrarán en la vida eterna.
Mateo 25.31–44 NTV
»Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria acompañado por todos los ángeles, entonces se sentará sobre su trono glorioso. Todas las naciones se reunirán en su presencia, y él separará a la gente como un pastor separa a las ovejas de las cabras. Pondrá las ovejas a su derecha y las cabras a su izquierda. »Entonces el Rey dirá a los que estén a su derecha: “Vengan, ustedes, que son benditos de mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Pues tuve hambre, y me alimentaron. Tuve sed, y me dieron de beber. Fui extranjero, y me invitaron a su hogar. Estuve desnudo, y me dieron ropa. Estuve enfermo, y me cuidaron. Estuve en prisión, y me visitaron”. »Entonces esas personas justas responderán: “Señor, ¿en qué momento te vimos con hambre y te alimentamos, o con sed y te dimos algo de beber, o te vimos como extranjero y te brindamos hospitalidad, o te vimos desnudo y te dimos ropa, o te vimos enfermo o en prisión, y te visitamos?”. »Y el Rey dirá: “Les digo la verdad, cuando hicieron alguna de estas cosas al más insignificante de éstos, mis hermanos, ¡me lo hicieron a mí!”. »Luego el Rey se dirigirá a los de la izquierda y dirá: “¡Fuera de aquí, ustedes, los malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus demonios! Pues tuve hambre, y no me alimentaron. Tuve sed, y no me dieron de beber. Fui extranjero, y no me invitaron a su hogar. Estuve desnudo, y no me dieron ropa. Estuve enfermo y en prisión, y no me visitaron”. »Entonces ellos responderán: “Señor, ¿en qué momento te vimos con hambre o con sed o como extranjero o desnudo o enfermo o en prisión y no te ayudamos?”.
Mateo 25
Un ejemplo de esto lo vemos en .
No es una parábola o una historia. Es una profecía acerca de nuestro destino eterno y de la gente que puso excusas o no para servir a Jesús a través de servir a los necesitados.
Quiera Dios que tu y yo dejemos de poner excusas o mirar las cosas que no podemos hacer y nos enfoquemos en lo que si podemos. En aquellas cosas que Dios preparó de antemano para que tu y yo las pongamos por obra y que quizás llevan años esperando que nos levantemos y hagamos nuestra parte.
Oremos...
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