Una Travesía De Gracia y Poder

Saben, creo que hoy es un buen día para confesarles algo… Tengo un problema con ciertas clases de escuela dominical. Sobre todo la escuela dominical infantil. Lo confieso :)

A veces enseñamos a nuestros niños la historia de Noe con canciones de animales cantando mientras van rumbo al arca… pero en realidad es el asesinato en masa más grande de la historia. ¿Lo habías pensado?

Con la historia de hoy pasa algo parecido. De hecho tengo un ejemplo: (https://www.youtube.com/watch?v=blaUYOXcQkU)

https://www.youtube.com/watch?v=blaUYOXcQkU

La Serie: Una travesía de Gracia y Poder

A veces la manera en que vemos las historias enfatiza un aspecto, lo cual es bueno, pero a veces perdemos de vista otros detalles que también forman parte de la historia.

Por eso me gusta que esta serie basada en Éxodo es “una travesía de gracia y poder”. Estamos viendo la gracia de Dios para con el pueblo y ese es el centro de nuestro mensaje de hoy.

Pero no perdamos de vista que mientras que los judíos van a estar al otro lado del mar rojo celebrando y alabando a Dios, en la tierra de Egipto el poder y el juicio de Dios se manifiestan de una manera majestuosa y devastadora.

No sólo los Egipcios que intentan ir tras los israelitas, sino todos los que, por no pintar con la sangre de un cordero sus puertas, vieron la muerte de sus primogénitos.

Pero no perdamos de vista que mientras que los judíos van a estar al otro lado del mar rojo celebrando y alabando a Dios, en la tierra de Egipto el poder y el juicio de Dios se manifiestan de una manera majestuosa y devastadora. No sólo los Egipcios que intentan ir tras los israelitas, sino todos los que por n poner

La historia de hoy es una historia de gracia y de poder… es el camino a la libertad donde el pueblo se goza al ver a Dios obrar y al mismo tiempo es una historia de juicio ineludible de parte de Dios.

Una Historia Con Muchos Símbolos

Y aunque está en el Antiguo Testamento, vamos a ver implicaciones del evangelio y de Jesús a lo largo de toda la historia.

El Angel De Jehová: Una Cristofanía

Aunque no hay un consenso absoluto entre los teólogos, la mayoría coincide con que “El Ángel De Jehová” no es más ni menos que la segunda persona de la trinidad, Jesucristo antes de manifestarse encarnado en la persona de Jesús de Nazaret.

Vallamos al diccionario para aclarar esto:

Teología Básica E. El Angel de Jehová

el Angel de Jehová es una Cristofanía, una aparición de Cristo antes de Su encarnación. El Angel habla como Dios, se identifica a Sí mismo con Dios, y ejerce las prerrogativas de Dios (Génesis 16:7–12; 21:17–18; 22:11–18; Exodo 3:2; Jueces 2:1–4; 5:23; 6:11–24: 13:3–22; 2 Samuel 24:16; Zacarías 1:12; 3:1; 12:8). Las apariciones del Angel cesan después de la encarnación de Cristo, lo cual corrobora la conclusión de que El era el Cristo preencarnado.

Así que ahí tenemos en escena a Jesucristo desde el inicio de la historia del Éxodo.

Algunos teólogos, incluso, lo extienden a la columna de fuego y a la nube que les guiaba durante su caminar en el desierto rumbo al mar rojo. Esa conexión es posible, pero no tiene tanta evidencia como la que tenemos para inferir que el Angel de Jehová es Cristo.

Moisés: Un Tipo de Cristo

Seguimos con conceptos teológicos por un minuto, porque la teofanía no es lo único que nos presenta a Jesús en esta historia.

El propio Esteban muestra en que esta idea de ver a Moisés cómo un tipo de Cristo (un personaje o figura que anticipa a la persona a quién esta “tipificando”) es bíblica.

El comentario de Hechos de Kistemaker lo expresa de esta manera:

Comentario al Nuevo Testamento: Hechos Consideraciones doctrinales en 7:23–29

El paralelo entre Moisés y Cristo es llamativo. Moisés, el líder de Israel, fue destinado a liberar a su pueblo de la esclavitud en Egipto. Jesús fue enviado por Dios para liberar a su pueblo de la esclavitud del pecado y de la muerte. Moisés, hebreo, vino como tal ante su propio pueblo, pero encontró el rechazo tajante, lo que hizo que huyera a Madián. Jesús nació en Belén, pero cuando se presentó a enseñar a su propio pueblo, no solamente fue rechazado sino que además lo mataron (c.f. Jn. 1:11). Moisés fue exaltado por Dios, quien lo comisionó en el desierto para guiar a los israelitas fuera de Egipto, tierra de cautividad, a la libertad en la Tierra Prometida. Dios también exaltó a Jesús, levantándole de la muerte. Jesús libera a su pueblo de la esclavitud del pecado y la muerte espiritual concediéndoles la libertad y el reino de los cielos. La diferencia en este paralelismo es que Moisés vino a Israel como un siervo en el nombre de Dios, en cambio, en Jesús Dios mismo viene a su pueblo y lo salva.

Como vemos, las similitudes son llamativas entre los dos personajes, pero lo interesante no termina ahí. Toda la historia del Éxodo nos recuerda el plan de salvación que Dios nos ofrece.

La historia del mar rojo es una imagen de lo que la vida cristiana representa. Es un anticipo de lo que Jesús iba a hacer por la humanidad al permitirnos pasar de muerte a vida por medio de Su sacrificio en la cruz.

El Faraón: La Maldad

Esclavitud

Esclavitud

La Biblia nos enseña que el faraón obró con crueldad para con el Pueblo. Estaban indefensos, sin la más mínima esperanza de poder escapar de yugo del poder de Egipto.

Esta es exactamente la misma situación que muchos de nosotros experimentamos sin Dios. Estamos presos, esclavos de nuestros hábitos. No podemos cambiar esas cosas que sabemos que necesitan cambiar y nos damos por vencidos. No hay esperanza. Son gigantes que simplemente nos van a dominar mientras vivamos...

Quizás sea el alcohol, quizás tu temperamento, quizás la forma en la que tratas a tus seres queridos o la pornografía… eres esclavo y no sabes cómo liberarte de esas cadenas.

En la historia de hoy vas a encontrar la manera que Dios usa para liberarnos de esas cosas que nos atan.

Juicio

Pero el faraón no solo representa la maldad por medio de la esclavitud a la que somete al pueblo. Dice la historia que “El faraón endureció su corazón” y también luego que “Dios endureció” el corazón de faraón. Esto es una clara manifestación del Juicio Divino. Los que rechazan a Dios son expuestos al juicio de Dios y nada bueno sucede cuando Dios decide castigar la injusticia. Un ejemplo de eso son las 10 plagas que están en los capítulos 7-14 de Éxodo.

Las Plagas: El Juicio De Dios

El faraón era quien tenía el lugar de Dios en la cultura Egipcia. Se suponía que él controlaba el clima, las aguas, los animales y todo aspecto de la vida. Era un intermediario entre los dioses y la gente. Es por eso que Dios, al decir enviar juicio sobre el faraón muestra que todo lo que supuestamente el faraón y sus dioses controlaban se torna fuera del control de faraón. No solo el faraón no puede conservar el orden, sino que por medio de un esclavo Dios le dice lo que va a acontecer a cada paso del camino. Sin duda, las plagas son una manifestación del poder y el juicio divino sobre el faraón y su pueblo.

La Sangre En Las Puertas: La Fe En Dios

Uno de los elementos más importantes de esta historia es la sangre del cordero. En esta historia, literalmente, la sangre de un cordero sacrificado justamente para ese propósito fue lo que salvó a los israelitas de la muerte.

No se cuan familiarizado estés con el mensaje de la Biblia, pero esto que pasó aquí en Éxodo es un símbolo de lo que Dios iba a hacer por medio de Jesús. Veamos la historia en

Éxodo 12.21–28 NTV

Luego Moisés mandó llamar a todos los ancianos de Israel y les dijo: «Vayan y seleccionen un cordero o un cabrito por cada una de sus familias y maten el animal para la Pascua. Dejen escurrir la sangre en una vasija, después tomen un manojo de ramas de hisopo y mójenlo en la sangre. Con el hisopo unten la sangre en la parte superior y en ambos lados del marco de la puerta de sus casas. Que nadie salga de la casa hasta la mañana, pues el Señor pasará por la región para herir de muerte a los egipcios. Pero cuando él vea la sangre en la parte superior y en ambos lados del marco de la puerta, el Señor pasará esa casa de largo. No permitirá que su ángel de la muerte entre en las casas de ustedes y los hiera de muerte. »Recuerden que estas instrucciones son una ley perpetua que ustedes y sus descendientes deberán obedecer para siempre. Cuando entren en la tierra que el Señor ha prometido darles, seguirán celebrando esta ceremonia. Entonces sus hijos preguntarán: “¿Qué significa esta ceremonia?”. Y ustedes contestarán: “Es el sacrificio de la Pascua del Señor, porque él pasó de largo las casas de los israelitas en Egipto. Y aunque hirió de muerte a los egipcios, salvó a nuestras familias”». Cuando Moisés terminó de hablar, todos los presentes se postraron hasta el suelo y adoraron. Así que el pueblo de Israel hizo tal como el Señor había ordenado por medio de Moisés y Aarón.

No es la sangre en sí lo que hizo que el Angel del Señor no matara a los que habían echo lo que Moisés les dijo. Fue la fe en que Dios les salvaría si hacían Su voluntad. Más adelante, el pueblo va a ser atacado por serpientes venenosas y todos los que fijaron su vista en un madero que Moisés tenía en su mano en forma de serpiente fueron curados.

Otra vez, la fe siendo el elemento crucial para la liberación del pecado. Es lo mismo que vivimos hoy. Dios dice que si ponemos nuestra fe en Jesús, Él nos libra de la maldad que nos tiene presos. Si confiamos en Cristo pasamos de muerte espiritual a gozar de vida abundante.

Pero el simbolismo de esta historia no termina aquí. La Biblia describe nuestra condición espiritual como un camino que recorrer. Jesús dijo que Él es el camino al Padre. Se dice que la puerta que lleva al cielo es una puerta angosta comparada con la que lleva a la perdición que es ancha y espaciosa.

A lo largo de toda la Biblia, nuestro caminar espiritual es descrito de estas maneras. Lo curioso es que todas ellas tienen un punto de inflexión. Cuando pasamos de muerte a vida, cuando pasamos de las tinieblas a la luz, cuando “nacemos de nuevo”, cuando reconocemos que Jesús es nuestro Señor y, de acuerdo a lo que la Biblia enseña, somos hechos hijos de Dios.

El Pueblo En El Desierto: Nosotros

El pueblo de Israel en el desierto nos enseña la condición humana en muchas maneras. Una de ellas es quizás la imagen más poderosa de la dependencia de Dios que podemos imaginar. El pueblo ha peregrinado caminando en el desierto, ven venir al ejercito egipcio y no tienen adonde huir. El castigo es inminente y no hay nada que ellos puedan hacer para salvarse.

Otra vez, esto es una representación clara del juicio que a ti y a mi nos espera si no ponemos nuestra confianza en Dios.

Entender la historia del Éxodo es vital a la hora de entender el plan de Dios para tu vida. Quizás estes como el pueblo en el desierto, viendo que Dios esta haciendo algo o tocando a la puerta de tu corazón, pero no has decidido dar el paso de caminar hacia el mar que Dios va a abrir en frente a tus ojos a su debido tiempo.

Quizás estes viendo las cosas que están pasando en tu vida y pienses que no hay manera de solucionar tu matrimonio, tu trabajo o tus emociones… pero Dios tiene algo mejor para ti.

Quizás tengas la misma actitud que tuvieron los israelitas con Moisés cuando vieron el mar de un lado y a los egipcios del otro:

Éxodo 14.10–12 NTV

Mientras el faraón se acercaba, los israelitas levantaron la vista y se llenaron de pánico al ver que los egipcios los alcanzaban. Entonces clamaron al Señor y le dijeron a Moisés: —¿Por qué nos trajiste aquí a morir en el desierto? ¿Acaso no había suficientes tumbas para nosotros en Egipto? ¿Qué nos has hecho? ¿Por qué nos obligaste a salir de Egipto? ¿No te dijimos que esto pasaría cuando aún estábamos en Egipto? Te dijimos: “¡Déjanos en paz! Déjanos seguir siendo esclavos de los egipcios. ¡Es mejor ser un esclavo en Egipto que un cadáver en el desierto!”.

Éxodo 4.10–12 RVR60

Entonces dijo Moisés a Jehová: ¡Ay, Señor! nunca he sido hombre de fácil palabra, ni antes, ni desde que tú hablas a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de lengua. Y Jehová le respondió: ¿Quién dio la boca al hombre? ¿o quién hizo al mudo y al sordo, al que ve y al ciego? ¿No soy yo Jehová? Ahora pues, ve, y yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que hayas de hablar.

Dios es experto en hacer que las cosas que parecen sin solución se conviertan en experiencias en las que vemos su mano poderosa actuar. Y eso es exactamente lo que hizo:

El Mar Rojo: La Gracia Y El Poder De Dios

Todas

Todos esos ejemplos que más adelante los profetas, Jesús y luego los apóstoles van a darnos, resuenan en esta historia. Cualquier momento de duda para los israelitas, era una oportunidad para volver a recordar cómo Dios los hizo pasar en seco en medio del mar.

Dios es, en última instancia, quien marca la diferencia entre la vida y la muerte. Cuando los egipcios intentan seguir a los israelitas, el mar se cierra y todos son tragados por la furia del agua que unos momentos antes estaba sirviendo de marco para que el pueblo de Dios viviera en carne propia la gloria y el poder de Dios obrando en su favor.

Al final de la historia, los israelitas cruzan al otro lado del mar, donde encuentran liberación y esperanza. La muerte seguramente es parte de esta historia, porque la gracia que Dios muestra para con Su pueblo se contrasta con el camino de destrucción y muerte que enfrenta el faraón y todo Egipto. Pero Moisés y su pueblo cruzan y comienza una nueva etapa de sus vidas en la que verán a Dios llevar a Su pueblo en el cumplimiento de la promesa echa a los patriarcas.

Juan, en el NT, también rescata las palabras de Jesús cuando hace referencia a este pasaje de la muerte a la vida que venimos descubriendo en la historia:

Juan 5.24 NVI

»Ciertamente les aseguro que el que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna y no será juzgado, sino que ha pasado de la muerte a la vida.

Ser un seguidor de Cristo, un “discípulo” de Jesús no es algo sencillo. Dice la Biblia que no dejamos de experimentar sufrimiento cuando decidimos creer en que Jesús pago el precio de nuestra maldad y fue a la cruz en nuestro lugar.

El cristianismo no te asegura una vida fácil, pero si te promete una vida plena, abundante y llena de gozo, aun en medio de las pruebas que la vida nos presenta.

El plan de Diso es que tu y yo pasemos de muerta a Vida por medio de nuestra fe en Cristo. Él abrió el camino al padre cómo lo hizo con el pueblo judío al abrir las aguas del mar rojo y hoy está el mar rojo abierto para ti.

El plan de Diso es que tu y yo pasemos de muerta a Vida por medio de nuestra fe en Cristo.

Él abrió el camino al padre cómo lo hizo con el pueblo judío al abrir las aguas del mar rojo y hoy está el mar rojo abierto para ti.

Vamos a orar en un instante y te voy a pedir que mientas cerramos nuestros ojos, si no has puesto tu fe en Jesús y quieres experimentar esto que la Biblia describe de ser una nueva criatura repitas conmigo esta oración:

(Orar para guiar a los que quieran recibir a Cristo y por la congregación en general).