La gloria de Cristo en la Eternidad

PARA QUE CREAÍS  •  Sermon  •  Submitted
0 ratings
· 229 views
Notes
Transcript

Introducción

Este es el evangelio que más he leído, fue el primero que me indicaron leer al inicio de mi vida Cristiana, recuerdo que una de las tareas que me pusieron fue subrayar el verbo creer cada vez que aparecía en el libro. Si usted ha hecho este ejercicio quizás pudo darse cuenta que este verbo aparece unas 70 veces en el texto.
Introducción
Y la razón por la que aparece creer tantas veces, es porque este evangelio fue escrito para confirmar la fe de los creyentes del primer siglo, Juan dice:
Hoy iniciaremos nuestra serie expositiva del evangelio de Juan.
Hoy iniciaremos nuestra serie expositiva del evangelio de Juan. Si La carta a los efesios se le llama la quinta esencia del cristianismo, y Romanos es como una encumbrada montaña, a Juan se le considera el lugar santísimo de la escritura donde podemos apreciar la gloria de Dios en Jesucristo. El lugar santísimo no era un espacio al que cualquiera podía entrar, solo un sumo sacerdote cada año, pero en este evangelio el velo que separaba este lugar de los demás lugares del templo, ha sido quitado para que tengamos una comunión completa con Dios al considerar la gloria de su hijo.
Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida(porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.” ()
Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro.Pero éstas se han escrito para que creáis (Continuéis Creyendo) que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis (Continuéis teniendo) vida en su nombre.” (, RVR60)
Este es el evangelio que más he leído, me gusta regresar a él una y otra vez. De echo fue el primer evangelio que me indicaron leer al inicio de mi vida Cristiana, recuerdo que una de las tareas que me pusieron fue subrayar el verbo creer cada vez que aparecía en el libro. Si usted ha hecho este ejercicio quizás pudo darse cuenta que este verbo aparece por lo menos unas 70 veces, la fe es importante para Juan.
A este evangelio se le considera el lugar santísimo de la escritura, en él podemos apreciar la gloria de Dios en Jesucristo. En el A.T. el lugar santísimo no era un espacio al que cualquiera podía entrar, solo un sumo sacerdote cada año podía hacerlo parea ofrecer a Dios expiación por Israel y recibir de Dios perdón y dirección. El Evangelio de Juan ha dejado este lugar santísimo disponible para todo aquel que quiera venir a Dios para conocerle en la persona de Cristo.
Espero que el testimonio de Juan pueda servir a cada uno de nosotros a fortalecer mas nuestra fe en Cristo, como el mesías. Por lo que he llamado a esta serie “Para que creáis” entendiendo que la fe es algo que nos ha sido dado y que en la estamos llamados a permanecer. Espero que si no haz creído, creas, y ya tienes fe, tu fe sea avivada aun mas.
Juan fue testigo del ministerio de Cristo, el fue uno de los uno apóstoles, en su primera carta dice: “Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida(porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.” () y fue además uno de los amigos mas íntimos de Jesus “Y no permitió que le siguiese nadie sino Pedro, Jacobo, y Juan hermano de Jacobo.” (, RVR60), miremos como se describe así mismo en este evangelio: “Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado al lado de Jesús.” (, RVR60).
Pocos conocieron a Jesus como él, anduvo día y noche por mas de dos años junto al maestro, le escucho hablar de si mismo como aquel a quien pertenecen todas las cosas, como el pan de vida, el agua de vida, el buen pastor que daría la vida por sus ovejas, la resurrección y la vida, el mesías esperado, el camino al Dios, el objeto de la fe y la adoración de su pueblo, el eterno hijo de Dios, quien es uno con el padre. Le vio ser adorado por los hombres y vio que él no puso ninguna objeción. Anduvo lo suficiente con Jesus como para descubrir faltas en su carácter, es más le vio morir
Le vio morir en la cruz “Mas cuando llegaron a Jesús, como le vieron ya muerto, no le quebraron las piernas.Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua.Y el que lo vio da testimonio, y su testimonio es verdadero; y él sabe que dice verdad, para que vosotros también creáis.” (, RVR60)
Su evangelio atestigua de las palabras, las señales y la gloriosa obra de salvación que Cristo vino a lograr por su pueblo en este mundo. Juan fue testigo de que aquel hombre nacido en Belen, dijo ser aquel a quien todas las cosas pertenecen, el pan de vida, el agua de vida, el buen pastor que daría la vida por sus ovejas, la resurrección y la vida, el mesías esperado, el camino al Dios, el objeto de la fe y la adoración de su pueblo, el eterno hijo de Dios, quien es uno con el padre. Juan declara que ha aceptados las declaraciones de Jesus como la verdad, el da testimonio de que Cristo es la palabra de Dios, que estaba con Dios desde la eternidad, que Jesus es Dios hecho carne.
Ahora Juan declara que ha aceptado las declaraciones de Jesus como la verdad, el da testimonio de que Cristo es la palabra de Dios, que estaba con Dios desde la eternidad, que Jesus es Dios hecho carne, quien murió y resucito, quien reina por los siglos.
macarthur: Ese es mensaje del Evangelio de Juan, que el Dios eterno, infinito, trascendente, que todo lo conoce, todo poderoso, que está en todo lugar, incambiable, eterno, ese Dios verdadero y vivo -quien es al mismo tiempo un Dios y sin embargo tres personas- se ha vuelto hombre.
Juan declara que ha aceptados las declaraciones de Jesus como la verdad, el da testimonio de que Cristo es la palabra de Dios, que estaba con Dios desde la eternidad, que Jesus es Dios hecho carne.
Juan testifica para que la iglesia de todos los tiempo crea, y sea afirmada en la fe de Jesucristo.
Este es el evangelio que más he leído, me gusta regresar a él una y otra vez. De echo fue el primer evangelio que me indicaron leer al inicio de mi vida Cristiana, recuerdo que una de las tareas que me pusieron fue subrayar el verbo creer cada vez que aparecía en el libro. Si usted ha hecho este ejercicio quizás pudo darse cuenta que este verbo aparece mas de 70 veces.
Esta semana revisando las palabras que mas enfatiza Juan, observe que Padre aparece 144 veces, Seguido de la palabra Mundo que aparece unas 79 veces, luego esta Judios que esta 70 veces, luego esta la frase Hijo de Dios que esta 49 veces, luego la palabra testimonio que esta 42 veces, Luz 25 veces y Señal 18 veces.
Los errores de hombres como Cerinto, que enseñaba que Jesús no era Dios y que Cristo no había venido en carne (no había adoptado la naturaleza humana), estaban minando la fe de los creyentes. El apóstol, viendo este peligro y dirigido por el Espíritu Santo, escribe su Evangelio para que la iglesia permanezca en la fe con respecto a Cristo.
El escribe para confirmar a los creyentes en la doctrina que habían recibido.
-----
Juan, de todos los sucesos que habían ocurrido y de todas las palabras que se habían pronunciado, selecciona precisamente material adicional, es decir, material que no se encuentra en los otros Evangelios, y que era el más apropiado para sacar a la luz del día la gloria del Señor, o sea, su oficio mesiánico y su divinidad en el sentido más exaltado de la palabra.
Los lectores a quienes en primer lugar se dirigió este Evangelio vivían en Efeso y la comarca vecina, aunque, como es natural, en última instancia se compuso para la iglesia de todas las épocas, cf. 17:20, 21. Los primeros eran esencialmente cristianos procedentes del mundo gentil. Esto explica el porqué de las notas aclaratorias que el evangelista añade con relación a las costumbres y situaciones judías: 2:6; 4:9; 7:2; 10:22; 18:28; 19:31, 41, 42. También explica su forma especial de situar los lugares de Palestina: 4:5; 5:2; 6:1; 11:1, 18; 12:1, 21.
Los lectores a quienes en primer lugar se dirigió este Evangelio vivían en Efeso y la comarca vecina, aunque, como es natural, en última instancia se compuso para la iglesia de todas las épocas, cf. 17:20, 21. Los primeros eran esencialmente cristianos procedentes del mundo gentil. Esto explica el porqué de las notas aclaratorias que el evangelista añade con relación a las costumbres y situaciones judías: 2:6; 4:9; 7:2; 10:22; 18:28; 19:31, 41, 42. También explica su forma especial de situar los lugares de Palestina: 4:5; 5:2; 6:1; 11:1, 18; 12:1, 21.
El tema es dado en 20:31: Jesús, el Cristo, el Hijo de Dios. Hay una división clara al final del capítulo 12. Cristo se aparta de las multitudes y se retira al círculo íntimo de sus discípulos.
Se pueden presentar buenos argumentos en favor de distintas subdivisiones dentro de cada una de estas dos partes principales. Preferimos lo siguiente:
Los primeros seis capítulos constituyen una unidad extensa. Proclaman al glorioso Hijo de Dios que vino como hombre, se presenta revelándose a sí mismo a círculos cada vez más amplios, y entonces es rechazado, primero en Judea (capítulo 5) y luego en Galilea (capítulo 6). Estos capítulos (después del Prólogo, 1:1–18) abarcan varios grandes sucesos y discursos que pertenecen a un período de aproximadamente dos años y cuatro meses; o sea, desde diciembre del año 26 a la Pascua del año 29. Sigue un período de medio año (El Ministerio del Retiro, de la Pascua a la Fiesta de los Tabernáculos) acerca del cual Juan calla.

Los errores de hombres como Cerinto, que enseñaba que Jesús no era Dios y que Cristo no había venido en carne (no había adoptado la naturaleza humana), estaban minando la fe de los creyentes. El apóstol, viendo este peligro y dirigido por el Espíritu Santo, escribe su Evangelio para que la iglesia permanezca en la fe con respecto a Cristo

Los capítulos 7–10 constituye otra unidad. Relatan sucesos y discursos que ocurrieron durante el período de octubre a diciembre del año 29 (de la Fiesta de los Tabernáculos a la Fiesta de la Dedicación). La conclusión del capítulo 10 indica que estamos de nuevo frente a una división natural (véase 10:40–42). Esta subdivisión describe al Hijo de Dios haciendo un tierno llamamiento a los pecadores y al mismo tiempo reprendiendo a sus enemigos cuyo odio y siniestro empeño respecto a él van creciendo paulatinamente.
Esta semana releyendo de nuevo todo el evangelio, observe que hay mas palabras que se repiten, como por ejemplo:
Si uno lee todo el evangelio con estas palabras en mente puede notar que efectivamente Juan esta interesado en que la Iglesia crea, que se afirme en la fe y este es el propósito principal evidentemente:
Los capítulos 11 y 12 forman la tercera y última subdivisión dentro de la primera división principal. El Verbo se presenta como revelándose a sí mismo con claridad por medio de dos poderosos hechos: La resurrección de Lázaro y la entrada triunfal en Jerusalén. Esta sección nos lleva al comienzo de la Semana de la Pasión. Como ya se indicó, el párrafo final del capítulo 12 (véase sobre todo el versículo 37) forma una conclusión natural de toda la primera parte del Evangelio.
La segunda parte, capítulos 13–21, puede ser facilmente dividida en cuatro secciones. Estas son:

El tema es dado en 20:31: Jesús, el Cristo, el Hijo de Dios. Hay una división clara al final del capítulo 12. Cristo se aparta de las multitudes y se retira al círculo íntimo de sus discípulos.

El capítulo 13 es independiente, aunque constituye una introducción natural a los discursos en el Aposento Alto. Pero aquí en el capítulo 13, a diferencia de los capítulos 14–17, tenemos material narrativo. Hay acción, intercalada con conversación dramática. Vemos al Maestro y a sus discípulos en la Cena. El promulga e ilustra su nuevo mandamiento de que deben amarse unos a otros como él los amaba. El relato referente a la negación de Pedro, que aparece en los versículos finales de este capítulo (13:36–38, la predicción), continúa más adelante (en 18:15–18 y versículos 25–27, el cumplimiento de la predicación). Entre esta predicción y su cumplimiento está la unidad de los capítulos 14–17.
Los capítulos 14–17 están claramente interrelacionados. Contienen los discursos de la Cena y la Oración Sacerdotal. El Señor instruye tiernamente a sus discípulos y en su oración pone al cuidado de su Padre a sí mismo, a ellos, y a aquellos que llegarán a creer por medio de la palabra de los discípulos.
En los capítulos 18 y 19 se describe a Cristo muriendo como sustituto de su pueblo. Es evidente, por supuesto, que también esta sección constituye una unidad.
La subdivisión final abarca los capítulos 20 y 21: la resurrección y las apariciones.
“Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro.Pero éstas se han escrito para que creáis (Continuéis Creyendo) que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis (Continuéis teniendo) vida en su nombre.” (, RVR60)
Padre aparece 144 veces, en su mayoría en relación con Jesucristo y Dios.
Hemos dividido el cuarto Evangelio en dos grandes divisiones y siete subdivisiones, tres en la primera división principal y cuatro en la segunda. Si bien no pretendemos más mérito para este bosquejo sino el hecho de que es natural, como se ha indicado, y fácil de recordar, sin embargo, resulta interesante observar que el apóstol Juan, escritor del cuarto Evangelio y del Apocalipsis, tiene preferencia por esta clase de distribución. En el Apocalipsis también subdivide a veces los conjuntos de siete en dos grupos, con tres elementos en el primero y cuatro en el segundo o viceversa. (Véase nuestro Más que Vencedores, Grand Rapids, reimpreso 1977, pp. 19 y 68.) De hecho, el libro de Apocalipsis también se divide exactamente en la misma manera.
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (pp. 67–68). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
Mundo aparece unas 79 veces
Judíos esta 70 veces
Hijo de Dios que esta 49 veces
Testimonio 42
Luz 25
Rey, Señal y Fiestas 18 veces.
Creer para el tiempo en que Juan seguramente escribió el evangelio, era un tema difícil, muchos convertidos al cristianismo de entre los Judíos estaban siendo expulsados de la comunidad Judía. Y muchos convertidos de entre los gentiles estaban siendo perseguidos por el mundo. Y efectivamente Juan enfatiza como el mundo y los Judíos también rechazaron a Jesus como el hijo de Dios, así que Juan da testimonio de las señales que Jesus hizo, que apuntaban su verdadera identidad como el Mesías, ademas quiere iluminarlos con la gloria de Cristo de manera que su fe sea afirmada en medio de tan grande oposición.
Si uno lee todo el evangelio con estas palabras en mente puede notar en primer lugar que efectivamente Juan esta interesado en que la Iglesia crea que Jesus es el hijo de Dios, este es de echo propósito principal del evangelio:
El plan del Evangelio de Juan es realmente maravilloso. La distribución es excelente. Vemos al Verbo en su gloria antes de la encarnación, de modo que podemos valorar su amor condescendiente al venir a la tierra para salvar a los pecadores. En su ministerio terrenal se va revelando a círculos cada vez más amplios, pero es rechazado tanto en Judea como en Galilea. Sin embargo, no destruye de inmediato a los que lo han rechazado, sino que más bien hace un tierno llamamiento a los pecadores, a fin de que lo acepten por fe. Entre tanto la oposición se va haciendo más activa y la resistencia más dura. Con dos obras poderosas se manifiesta claramente como el Mesías. Pero mientras los griegos lo buscan, los judíos, que han visto pruebas tan evidentes de su naturaleza, amor y poder, lo repudian. Se vuelve, pues, a su círculo íntimo, los instruye tiernamente en el Aposento Alto, y poco antes de su sufrimiento final y muerte los encomienda al cuidado del Padre. En su misma muerte vence al mundo y por medio de su resurrección revela el significado de la cruz.
Teniendo en mente el propósito del evangelio, podemos ver que Juan se enfoca en dos grandes temas principalmente:
“Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro.Pero éstas se han escrito para que creáis (Continuéis Creyendo) que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis (Continuéis teniendo) vida en su nombre.” (, RVR60)
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (pp. 69–70). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
1 - 12: nos narra la gloria del hijo de Dios y las señales que apuntan a su gloria y del 13 al 20 como es gloria fue revelada a los que le habían recibido y creído en él. Juan termina en el capitulo 21 narrado el llamado de Jesus a los discípulos para que den testimonio de su gloria.
Creer esto. para el tiempo en que Juan escribió el evangelio (año 90 D.C.), era un tema difícil, muchos convertidos al cristianismo de entre los Judíos estaban siendo expulsados de las sinagogas. Y muchos convertidos de entre los gentiles estaban siendo perseguidos por el mundo Romano.
1 En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba cara a cara con Dios, y el Verbo era Dios. 2 El mismo estaba en el principio cara a cara con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas; y sin él ni una sola cosa de lo que existe llegó a ser. 4 En él estaba la vida, y esa vida era la luz de los hombres. 5 Y la luz en las tinieblas resplandece, mas las tinieblas no la acogieron.
Y este es el testimonio de Juan, un hombre galileo ordinario de su tiempo, hijo de Zebedeo, hermano de Jacobo y Andrés, un hombre de carácter difícil, quien era llamado hijo del trueno, que siendo discípulo pedía que defendiera fuego del cielo para consumiera. a los hombres. Ahora se considera un hombre amado por Jesus, que recibió gracia sobre gracia, es el único evangelista que no se nombra en su escrito, se llama así mismo “Al que Jesus amaba. Este es un hombre que vio la gloria de Cristo y fue transformado y ahora quiere dar testimonio de esta gloria para nuestra felicidad y bienaventuranza eterna:
Y efectivamente Juan enfatiza también el echo de que el mundo y los Judíos también rechazaron a Jesus como el hijo de Dios, el vino al mundo y el mundo no le conoció, el vino a lo suyo y los suyo no le recibió. Esto a pesar de las señales que Jesus hizo para mostrar su verdadera identidad como Rey Mesías, como hijo de Dios, como aquel cumplimiento de todas las expectativas mesiánicas de la ley de Moises. A pesar del insistente llamado de Jesus al arrepentimiento.
Si se comprende esta verdad, se apreciará con más intensidad el amor condescendiente de Cristo al hacerse carne.
No fue, como algunos herejes afirmaban, un ser creado
¿Es cierto que Juan escribió este Evangelio para refutar los errores de Cerinto?10
Este hereje enseñaba que Jesús no era más que un hombre, hijo de José y María por generación natural; pero que, sin embargo, era más justo y sabio que ningún otro; y que en el bautismo el Cristo había descendido sobre él en forma de paloma, pero que lo había abandonado en la víspera de su sufrimiento, de forma que no fue Cristo el que sufrió, murió y resucitó, sino Jesús (Ireneo, Contra herejías I, xxvi, 1; Hipólito, Refutación de todas las herejías, VII, xxi).
Ahora bien, Cerinto vivió en los días del apóstol. Ireneo cuenta que habían algunos que habían oído a Policarpo que Juan, el discípulo amado, yendo un día a tomar un baño en Efeso, y viendo que Cerinto estaba dentro, salió de los baños precipitadamente sin bañarse y exclamando: “Huyamos, no sea que hasta los baños se derrumben; porque Cerinto, el enemigo de la verdad, está dentro” (Contra herejías III, iii, 4).
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (p. 73). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
Ireneo también dice concretamente que Juan trata, por medio de la proclamación del Evangelio, arrancar el error que Cerinto había sembrado entre los hombres (Contra herejías III, xi, 1).
10 Véase sobre todo F. Godet, op. cit., pp. 356–368.
A pesar de que el Mundo y los Judíos lo rechazaron, Dios hizo una increíble obra de salvación, entregándole a su hijo un pueblo, un rebaño, para adoptarles y darles el derecho de ser sus hijos. Estos le recibieron y creyeron en su nombre. Estos al igual que él enfrentaron el menosprecio del mundo y Jesus les garantiza que serán aborrecidos por el mundo a causa de su Fe; pero estos tienen la certeza de que reinaran con Cristo para siempre.
“Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida(porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.” ()
Tanto Juan como los herejes hablaron sobre el Verbo (ὁ λόγος); pero aunque el vocablo era el mismo, el significado era diferente. La doctrina de Juan no dependía de las doctrinas de herejes ni de las de filósofos especulativos como Filón, notable pensador de Alejandría que se destacó en el primer siglo de nuestra era. Uno nunca sabe qué hacer del logos de Filón. Aunque emplea este término más de mil trescientas veces, nunca le da un significado definido.
Esto es lo que vemos en todo el evangelio al unir todas las palabras relevantes que encontramos. Teniendo en mente el propósito del evangelio y las palabras mas relevantes que encontramos, podemos ver que Juan se enfoca en dos grandes temas:
En ocasiones lo describe como un atributo divino, pero a veces es como un puente entre Dios y el mundo, que no se identifica con ninguno de los dos pero que participa de la naturaleza de ambos. Filón alegorizaba y ello hace difícil la comprensión de su significado. Así, por ejemplo, al considerar, en su comentario de , a los querubines armados de una espada de fuego a la entrada del Edén para impedir el acceso al árbol de la vida, Filón los interpreta como dos potencias divinas: la misericordia y la soberanía de Dios. La espada es el Logos o la Razón que une a ambas. Balaam, el profeta necio, no tenía espada (Razón), ya que le dijo al asno: “Ojalá tuviera espada en mi mano, que ahora te mataría”
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (p. 73). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
1 - 12:50 da testimonio la gloria del hijo de Dios, enfatizando en las señales que apuntan a su gloria. Esta sección termina con el rechazo de su pueblo, quienes determinan entregarlo a muerte.
13 al 20 Juan se enfoca en aquellos en la que la gracia de Dios había obrado, Jesus revela su gloria a los creyeron en él, intercede por ellos, muere por ellos y resucita por ellos, los anima a perseverar y a dar testimonio de él al mundo.
Sus raíces no están en el pensamiento griego sino en el semita.17 Ya en el Antiguo Testamento se presenta al Verbo de Dios como Persona. Véase especialmente : “Por la palabra de Jehová (LXX: τῷ λόγῳ τοῦ κυρίου) fueron hechos los cielos”. El mejor comentario de se encuentra probablemente en
Estas dos grandes secciones podríamos llamarlas: El testimonio de las señales (ministerio publico) y el testimonio de la gloria de Jesucristo (Ministerio Privado). Estas partes están precedidas por un prologo (1:1-18) y una conclusión (Capitulo 21)
Juan da testimonio de estas cosas siendo un testigo de primera mano y uno de los amigos mas cercanos de Jesus:
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (p. 74). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
El término Verbo aparece en el Nuevo Testamento, para designar a Cristo, sólo en 1:1, 14; ; y . Una misma palabra sirve para dos propósitos distintos: a. da expresión al pensamiento interno, al alma del hombre, haciéndolo aun sin que haya nadie para oír lo que se dice o para leer lo que se piensa; y b. revela este pensamiento (y por lo tanto el alma del que habla) a otros. Cristo es el Verbo de Dios en ambos sentidos: expresa o refleja la mente de Dios; y también revela lo que es Dios al hombre (1:18; cf. ; ).
“Y no permitió que le siguiese nadie sino Pedro, Jacobo, y Juan hermano de Jacobo.” (, RVR60)
“Lo que era desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida(porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);l o que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Estas cosas os escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido.” ()
Y el Verbo estaba cara a cara con Dios (πρὸς τὸν θεόν).18 El significado es que el Verbo existía en la comunión más estrecha posible con el Padre, y que aquél hallaba supremo deleite en esta comunión.
Juan como testigo estaba disfrutando de ese gozo completo que quiere que nosotros disfrutemos. El fue un hombre ordinario, un pecado como nosotros, alguien con problemas de carácter, Lucas nos cuenta del tipo de hombre que era Juan:
“Viendo esto sus discípulos Jacobo y Juan, dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma?Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas. Y se fueron a otra aldea.” (, RVR60)
18 El Nuevo Testamento contiene más de 600 ejemplos de πρός con acusativo. Esto indica movimiento o dirección hacia un lugar, o como aquí, estrecha proximidad; de ahí, amistad, intimidad, en este contexto.
Marcos nos deja ver un poco como era el carácter de Juan:
“a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del trueno;” (, RVR60)
Juan ahora estaba disfrutando del gozo de haber recibido la gracia de Dios, se convirtió en el Apostol de Amor y podemos notar al leer su evangelio que él mismo ni siquiera se nombra, es el único de los evangelios donde su nombre no aparece. Cuando se refiera a él dice:
“Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado al lado de Jesús.” (, RVR60)
Ni siquiera hace notar su amor por Jesus, sino el amor de Jesus por él, recordemos que el mismo dijo:
“Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.” (, RVR60)
De este modo la encarnación empieza a destacarse más claramente como una obra de infinita condescendencia e incomprensible amor.
El evangelio de Juan no es un testimonio frío de la gloria de Cristo. Mas bien es un testimonio real de un hombre que vio, palpo y ha disfrutado de la gracia y del amor del Señor. El quiere hacernos conocer la grandeza de su amor y su infinita misericordia, las que demostró al dejar por nosotros su trono de gloria con el propósito de redimirnos. Juan quiere que compartamos su gozo, para que nuestro gozo sea completo.
Vamos a comenzar nuestra serie considerando el prologo del evangelio. Este prologo es como la obertura que se toca al inicio de una pieza musical clásica y que resume todo el contenido de la obra.
Y el Verbo era Dios. Para hacer recaer todo el énfasis en la absoluta divinidad de Cristo, en el original el predicado precede al sujeto. (και θεός ἦν ὁ λόγος). En oposición a todo hereje debe quedar bien claro que este Verbo era completamente divino.
Este prologo nos deja ver la gloria de Cristo, el menosprecio del mundo y de su pueblo hacia él y la obra de Dios en el corazón aquellos que creen, le reciben y disfrutan de la adopción y de la gracia plena y abundante de Dios en Cristo.
Consideremos en esta mañana la primera parte del prologo, Juan testifica desde el principio de su evangelio de “La gloria de Jesucristo el hijo de Dios”.
Y el testimonio de Juan es maravilloso.
Pocos conocieron a Jesus como Juan, anduvo día y noche por mas de dos años junto al maestro, le escucho hablar de si mismo como:
2. Este mismo estaba en el principio cara a cara con Dios. Este Verbo absolutamente divino, que existía desde la eternidad como una Persona distinta, gozaba de amorosa comunión con el Padre. De esta forma se confiesa una vez más la plena divinidad de Cristo, su eternidad, y su existencia personal y distinta, para refutar a los herejes y para que la iglesia quede afirmada en la fe y el amor de Dios.
aquel a quien pertenecen todas las cosas,
como el pan de vida,
el agua de vida,
el buen pastor que daría la vida por sus ovejas,
la resurrección y la vida,
el mesías esperado,
el camino al Dios,
el objeto de la fe y la adoración de su pueblo,
el eterno hijo de Dios, quien es uno con el padre.
Le vio ser adorado por los hombres y vio que él no puso ninguna objeción.
Juan anduvo lo suficiente con Jesus como para descubrir faltas en su carácter, es más le vio morir en la cruz, vio como una lanza atravesó su costado y que el ya había entregado su vida al Padre:
“Y el que lo vio da testimonio, y su testimonio es verdadero; y él sabe que dice verdad, para que vosotros también creáis.” ()
Ahora Juan desde el principio de su evangelio da testimonio de que ha aceptado las declaraciones de Jesus como la verdad, aquí en el prologo, el da testimonio de que:
Jesucristo es Dios, que ha manifestado su gloria Creando, sosteniendo la creación, iluminando la creación y haciendo parte de la Creación, uniendo de manera inseparable su Deidad con nuestra humanidad en la persona de Jesucristo. Cada una de estas manifestaciones de su gloria son para el beneficio de su Pueblo, son abundantes muestras de su gracia, amor y generosidad.

Veamos en primer Juan testifica de que Jesucristo es Dios.

a. que el mismo Cristo no fue creado; existía eternamente (para expresar este pensamiento se emplea cuatro veces el tiempo imperfecto en los versículos 1 y 2); y b. que todas las cosas (contempladas distributivamente, una a una sin ninguna excepción) fueron creadas por él (aquí se hace uso del aoristo).
“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2Este era en el principio con Dios”.
Juan escribe a creyentes que conocen su biblia (A.T), así que sus primeras palabras son conocidas y deben dirigirlos a hacer ciertas conexiones bíblicas:
a. que el mismo Cristo no fue creado; existía eternamente (para expresar este pensamiento se emplea cuatro veces el tiempo imperfecto en los versículos 1 y 2); y b. que todas las cosas (contempladas distributivamente, una a una sin ninguna excepción) fueron creadas por él (aquí se hace uso del aoristo).
4. En él estaba la vida. No dice a través de sino en,
La primera conexión es “En el principio creó Dios” Esta palabra nos habla de que cuando nada existía, ni tiempo, ni materia ni espació, Dios creo. Antes que existiera creación solo estaba Dios, Dios es, no fue creado y todo existe por causa de él. Así que Juan nos quiere llevar al principio de todo, él nos quiere revelar lo que había antes del principio, cuando aun nada había sido creado, cuando solo estaba Dios, dice él: allí estaba el verbo, estaba con Dios y era Dios.
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (p. 75). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (p. 75). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
¿Qué significa aquí la palabra vida? ¿Se refiere directamente a toda clase de vida, sea física o espiritual, sea la vida de una mariposa o la de un arcángel?
Así que Juan nos quiere llevar al principio de todo, él nos quiere revelar lo que había antes del principio, cuando aun nada había sido creado, cuando solo estaba Dios, dice él: allí estaba el verbo, estaba con Dios y era Dios.
La segunda conexión tiene que ver con El Verbo, es el significado de todo, la razón de ser de todo, la sabiduría que gobierna todo. Ya en Proverbios era conocido que esta razón de todo era una persona: “El Señor me poseyó al principio de su camino, antes de sus obras de tiempos pasados. Desde la eternidad fui establecida, desde el principio, desde los orígenes de la tierra. Cuando no había abismos fui engendrada, cuando no había manantiales abundantes en aguas. Antes que los montes fueran asentados, antes que las colinas, fui engendrada, cuando El no había hecho aún la tierra y los campos, ni el polvo primero del mundo. Cuando estableció los cielos, allí estaba yo; cuando trazó un círculo sobre la faz del abismo, cuando arriba afirmó los cielos, cuando las fuentes del abismo se afianzaron, cuando al mar puso sus límites para que las aguas no transgredieran su mandato, cuando señaló los cimientos de la tierra, yo estaba entonces junto a El, como arquitecto; y era su delicia de día en día, regocijándome en todo tiempo en su presencia, regocijándome en el mundo, en su tierra, y teniendo mis delicias con los hijos de los hombres.” () Para los Griegos el Logos fue definido como una fuerza impersonal que uno podía encontrar con profunda reflexión al contemplar y discernir el orden de la naturaleza. Para los griegos una vida bien vivida se podía conseguir en la búsqueda intelectual y filosófica del logos. Según la escritura, la vida solo puede tener sentido en una correcta relación con un Dios personal, este Dios personal es el logos, la razón de todo lo que existe. El logos es un ser personal que nos creó, un ser personal, a quien podemos conocer, servir y amar.
De todo esto parece evidente que el término se refiere básicamente a la plenitud de la esencia de Dios, a sus gloriosos atributos: santidad, verdad (conocimiento, sabiduría, veracidad), amor, omnipotencia, soberanía. Esta vida completa y bendita de Dios ha estado presente en el Verbo desde la eternidad y a través de toda la antigua dispensación: “En él estaba la vida”.
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (p. 75). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
La segunda conexión tiene que ver con El Verbo, es el significado de todo, la razón de ser de todo, la sabiduría que gobierna todo. Ya en Proverbios era conocido que esta razón de todo era una persona: “El Señor me poseyó al principio de su camino, antes de sus obras de tiempos pasados. Desde la eternidad fui establecida, desde el principio, desde los orígenes de la tierra. Cuando no había abismos fui engendrada, cuando no había manantiales abundantes en aguas. Antes que los montes fueran asentados, antes que las colinas, fui engendrada, cuando El no había hecho aún la tierra y los campos, ni el polvo primero del mundo. Cuando estableció los cielos, allí estaba yo; cuando trazó un círculo sobre la faz del abismo, cuando arriba afirmó los cielos, cuando las fuentes del abismo se afianzaron, cuando al mar puso sus límites para que las aguas no transgredieran su mandato, cuando señaló los cimientos de la tierra, yo estaba entonces junto a El, como arquitecto; y era su delicia de día en día, regocijándome en todo tiempo en su presencia, regocijándome en el mundo, en su tierra, y teniendo mis delicias con los hijos de los hombres.” ()
Para los Griegos el Logos fue definido como una fuerza impersonal que uno podía encontrar con profunda reflexión al contemplar y discernir el orden de la naturaleza. Para los griegos una vida bien vivida se podía conseguir en la búsqueda intelectual y filosófica del logos.
Según la escritura, la vida solo puede tener sentido en una correcta relación con un Dios personal, este Dios personal es el logos, la razón de todo lo que existe. El logos es un ser personal que nos creó, un ser personal, a quien podemos conocer, servir y amar.
Es cierto, desde luego, que esta luz es también la fuente de la revelación general. Este contexto, no obstante, no hace mención específica de esta idea. Está implícito, por supuesto, pero no se expresa.
El logos da expresión y revela la sabiduría de Dios, Juan no dice que Jesus es ese Logos. Jesus es el reflejo de la sabiduría de Dios y revela completamente a Dios.
Ya vimos las conexiones bíblicas que debemos tener en mente con las palabras que Juan usa, veamos ahora las tres declaraciones doctrinales que hace Jan sobre Jesucristo:

A. Jesucristo es Pre- Existente (era el Verbo)

RVR60En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
No dice: En el principio la palabra vino a ser.
Si dice: en el principio estaba o ya existía (el verbo ser esta en tiempo imperfecto - ya era continuamente en el principio).
Jamás hubo un tiempo en el que Jesus vino a existir, el ya era desde la eternidad. El es pre-existente, por lo tanto no hace parte de la creación, esta por encima de todas las cosas creadas, es antes del tiempo, él es eterno, el eterno Dios.
Juan el Bautista, aunque nació primero y fue concebido primero, da testimonio de esto diciendo: “Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.” ()
Isaías dijo sobre aquel a quién Juan el bautista prepararía el camino: “Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.” (, RVR60)
Isaías dijo sobre aquel a quién Juan el bautista prepararía el camino: “Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.” (, RVR60)
Jesus en su humanidad era consciente de su eternidad junto a Dios el Padre: “Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese.” ()
Jesus en su humanidad era consciente de su pre-existencia: “Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese.” ()
Jesus es Yahweh, el eterno hijo de Dios preexistente. Recordemos cuando Moises le pregunto a Dios por su nombre la respuesta que recibió: ‘Mi nombre es Yo soy el que soy. Mi nombre es el verbo ser. Mi nombre es el eterno ser”.
Cuando Moisés quiso saber cuál era el nombre de Dios, Dios le dijo, ‘Mi nombre es yo soy el que soy. Mi nombre es el verbo ser. Mi nombre es ser eterno’. Y de manera repetida, en el Evangelio de Juan, Jesús dice, ‘Yo soy. Yo soy. Yo soy’.  El verbo yo soy.  El verbo ser. Y él, inclusive, va tener la valentía, el atrevimiento, de decirle a los judíos: “Antes de que Abraham fuera, yo soy,” en . “Yo soy.” Él solo habla de si mismo en el tiempo presente continuo porque nunca hubo un momento en que el no existió.
Juan una y otra vez da testimonio de que Jesús dijo: ‘Yo soy. “Antes de que Abraham fuera, yo soy,” en . Nunca hubo un momento en que el no existió.
Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad.” (, RVR60)
Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;” ()
Jesus es preexistente (Es el Eterno), también es:
B. Co-existente (Es el eterno hijo de Dios)
"...Este era en el principio con Dios”.
¿Cómo puede ser Dios y al mismo tiempo con Dios?
Es aquí donde entendemos que hay tres personas distintas en la trinidad y sin embargo existe solo un Dios. Aquí se esta hablando de dos de esas personas (El Padre y El Hijo).
Jesus desde la eternidad disfrutaba de una eterna comunión de amor con el Padre. El texto se podría traducir Así: (Y el Verbo estaba cara a cara con Dios)
El era el eterno deleite del Padre Despierta, espada, contra mi pastor, y contra el hombre compañero mío —declara el Señor de los ejércitos....” (, LBLA)
Dice Juan, en su primera carta: “(porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);” (). Allí donde estuvo el Padre desde toda la eternidad, estuvo también el Verbo, Dios el Hijo, con igual gloria, majestad igualmente eterna y siendo, no obstante, una única Deidad. Recordemos Proverbios.
dice Juan, “(porque la vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó);” (). Allí donde estuvo el Padre desde toda la eternidad, estuvo también el Verbo, Dios el Hijo, con igual gloria, majestad igualmente eterna y siendo, no obstante, una única Deidad.Aquí tenemos la gloriosa historia de Navidad, quien entro al mundo es Dios el hijo, quien estaba antes de que todo existiera en el ceno del Padre: Preexistente y coexistente con Dios, quien disfrutaba de un eterno deleite y de una gloria sin igual. ¿No es asombroso su amor? El eterno hijo, que estaba en el seno del Padre, condescendió por amor para salvar pecadores. Esto es un amor incomprensible, incomparable, extravagante. Pero hay más, Jesus es: C. Auto-Existente
Jesus es Eterno, El eterno hijo de Dios y es...
RVR60Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
C. Auto-Existente “Es Dios”
“Y el verbo era Dios”
Meremos la confesión que mas adelante hace tomas: “Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!” (), Jesus es de la misma sustancia del Padre. “Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,” ()
Esta es la confesión que se espera de todo verdadero Creyente: “Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!” ()
Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!” ()
Jesus es Dios, de la misma sustancia del Padre. “Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,” ()
Jesus demostró ser Dios, el hizo lo que solo Dios puede hacer:
RVR60Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.
Si se comprende esta verdad, se apreciará con más intensidad el amor condescendiente de Cristo al hacerse carne.
Creó todas las cosas,
resucito a los muertos,
conocía el pensamiento de los hombres,
perdonó pecados,
daba ordenes a la naturaleza y ella le obedecía,
recibió adoración de los hombres con agrado y además demanda ser adorado después de su resurrección,
En dijo que Dios solo escucha nuestra oración si la hacemos en su nombre,
Esta es la nota dominante en el evangelio de Juan, Jesus es Dios, este es su testimonio, de esto depende nuestra felicidad y bienaventuranza eterna.
Juan da testimonio de que Jesus es Dios en carne humana, él no es un ser creado, no es como nosotros. El apostol esta guardando con este testimonio, a la iglesia de su tiempo de la herejía de un hombre llamado Cerinto:
Este hereje enseñaba que Jesús no era más que un hombre, hijo de José y María por generación natural; pero que, sin embargo, era más justo y sabio que ningún otro; y que en el bautismo el Cristo había descendido sobre él en forma de paloma, pero que lo había abandonado en la víspera de su sufrimiento, de forma que no fue Cristo el que sufrió, murió y resucitó, sino Jesús
En el contexto presente (Prólogo de Juan) la vida de Dios en Cristo, a la cual todas las cosas y todos los hombres deben su existencia, se representa como la fuente de la iluminación de los hombres en cuanto a asuntos espirituales y de la salvación eterna de los hijos de Dios. Lo que tenemos aquí es un contexto del evangelio. De ahí que leemos:
“enseñaba que Jesús no era más que un hombre, hijo de José y María por generación natural; pero que, sin embargo, era más justo y sabio que ningún otro; y que en el bautismo el Cristo había descendido sobre él en forma de paloma, pero que lo había abandonado en la víspera de su sufrimiento, de forma que no fue Cristo el que sufrió, murió y resucitó, sino Jesús”. Hendriksend
Por tanto, el apostol se anticipa a cualquier objeción humana que niegue la eterna existencia del hijo, como Dios, junto al Padre. Juan recalca de nuevo la ultima frase del versículo 1 “Este era en el principio con Dios.” ()
Este versículo contiene una repetición enfática de la segunda frase del versículo anterior. S. Juan anticipa la posible objeción de alguna mente perversa acerca de que quizá hubo un tiempo cuando Cristo, el Verbo, no era una persona distinta en la Trinidad.
Arrowsmith comenta que “las repeticiones tienen diversos usos en la Escritura. En la oración son muestra de afecto. En la profecía denotan celeridad y seguridad. En las amenazas denotan algo que es inevitable y repentino. En los preceptos denotan una necesidad de cumplirlos. En las verdades, como la que tenemos delante, sirven para mostrar la necesidad de creerlas y conocerlas”.
Juan confiesa una vez más la plena divinidad de Cristo, su eternidad, y su existencia personal y distinta, para refutar a los herejes y para que la iglesia quede afirmada en la fe y el amor de Dios.
Jesus no es mitad Dios y mitad hombre, sino totalmente Dios y totalmente hombre. Ese es el mensaje de Juan a lo largo de este libro. Aquel que ha sido amado por Dios debe estar interesado en confesar esta verdad sobre su salvador, debe tener un entendimiento correcto acerca de la persona que le creó y le rescato. Jesus es totalmente Dios y totalmente hombre. Cualquier ataque en contra de su deidad es una herejía. Cualquier ataque en contra de su humanidad es una herejía.
Y esa vida era la luz de los hombres.
Sin un entendimiento correcto de esto, no hay fe verdadera, es solo fe en un ídolo, es fe en nada, porque aquel que nos salvo lo es todo.
La gente viene con algún tipo de idea acerca de Jesús, diciendo que fue un ser creado, y aquí es a done debes llevarlos. Él no es el Jesús de las sectas; él no es el Jesús de la esfera de la teología de la liberación; él no es el Jesús de liberalismo; él es el Jesús quien es totalmente Dios, totalmente hombre, quien es el medio por quien todo existe.
Todo el versículo, bien entendido, bien leído es un argumento contra tres clases de herejías:
Refuta a los arrianos, que consideran a Cristo como un Ser inferior a Dios;
Refuta a los sabelianos, que niegan cualquier distinción de personas dentro de la Trinidad y dicen que Dios a veces se manifiesta como el Padre, a veces como el Hijo y a veces como el Espíritu, ¡y que el Padre y el Espíritu sufrieron en la Cruz! Y, sobre todo,
Refuta a los socinianos y unitarios, que dicen que Jesús no era Dios sino un hombre, un hombre santísimo y perfecto, pero solo un hombre.
Bernardo acerca del asunto: “Es una temeridad buscar demasiado en ello. Es propio de la piedad creerlo. Es vida eterna conocerlo. Y nunca podremos comprenderlo plenamente hasta llegar a disfrutarlo”
el Dios eterno, infinito, trascendente, que todo lo conoce, todo poderoso, que está en todo lugar, incambiable, eterno, ese Dios verdadero y vivo -quien es al mismo tiempo un Dios y sin embargo tres personas- se ha vuelto hombre.
Así Juan comienza su evangelio revelándonos al Verbo en su gloria eterna antes de la encarnación, de modo que podemos valorar su amor condescendiente al venir a la tierra para salvar a los pecadores.
El Dios eterno, infinito, trascendente, omnisciente, todo poderoso, omnipresente, inmutable, eterno, ese Dios vivo y verdadero, es Padre, Hijo y Espíritu santo, que nos creó y nos ama, tomo forma de hombre en la persona de su hijo. Que incomprensible amor.
Cuando la vida se manifiesta se llama luz, ya que la característica de la luz es resplandecer. Desde la caída, que ya está implícita en la última cláusula del versículo 4, aquella luz fue anunciada a los hombres. La humanidad se caracterizaba por las tinieblas, la maldad y el odio, todo lo cual es lo opuesto de la luz. Durante la antigua dispensación se proclamó a los hombres (especialmente a Israel; véase la explicación de los versículos 10, 11) el amor y la verdad de Dios en Cristo.
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (pp. 76–77). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
El Dios eterno, infinito, trascendente, omnisciente, todo poderoso, omnipresente, inmutable, eterno, ese Dios vivo y verdadero, es Padre, Hijo y Espíritu santo, que nos creó y nos ama, tomo forma de hombre en la persona de su hijo.
la encarnación empieza a destacarse más claramente como una obra de infinita condescendencia e incomprensible amor.
Amor y verdad son sinónimos de luz, (véase 3:19–21 tanto para sinónimos como para antónimos; también .) Por supuesto, no debemos limitar el significado del término luz a estos dos atributos únicamente (amor y verdad); éstos más bien representan todos los atributos de Dios. En la obra de la salvación todos los atributos divinos se mostraron. Fueron proclamados a los hombres pecadores.
Obsérvese el cambio en el tiempo, de imperfecto a presente: no sólo brillaba la luz a través de toda la antigua dispensación, sino que aún continúa brillando, puesto que el resplandecer es la característica propia de la luz. Por otra parte, aunque el Verbo (Cristo) es Aquel en el cual reside la vida y por el cual ésta se presenta alumbrando como luz, él también es llamado la luz. (Cf. 1:9; 8:12; .) Al igual que el sol en el cielo, esta luz resplandece en la promesa madre (), en el libro del Exodo con el cordero pascual y todos los demás símbolos, en Levítico con las ofrendas que anuncian el derramamiento de la sangre de Cristo, en Números con la serpiente levantada en alto (; cf. , ), sí, en todos los libros históricos, proféticos y poéticos de la antigua dispensación.
Debemos insistir, sin embargo, en que la luz no brilla sólo en estas profecías, promesas e invitaciones, sino que lo hace también a través de toda la antigua dispensación y en todo el Antiguo Testamento; igualmente lo hace en la nueva dispensación y en todo el Nuevo Testamento, revelando a Dios en todos sus gloriosos atributos. Aquella luz sigue resplandeciendo hoy en medio de las tinieblas de este mundo.
¿Que si no crees que Jesus no es Dios?
Si Jesús no es Dios, entonces todavía estoy en mis pecados. Si Jesús no es el verdadero Dios, el mismo Dios de la misma sustancia que el Padre, entonces todavía estoy en mis pecados.
Aplicación:
La triste respuesta a esta comunicación de la luz se expresa en la segunda parte del versículo 5:
Que Jesus es el eterno hijo de Dios ¿No es el pensamiento más hermoso que puedas tener? El Padre, y el Hijo son un solo Dios, en comunión uno con otro, y Jesucristo vino al mundo para dar a conocer algo del misterio de esa comunión eterna.
Mas20 las tinieblas no la acogieron. Las tinieblas a las que el evangelista hace referencia tienen un significado concreto. Se refieren a la humanidad caída y entenebrecida por el pecado y la incredulidad. No es éste el único caso en el Nuevo Testamento en que un nombre abstracto adquiere un significado concreto. Tenemos otros ejemplos en (“la elección” significa el remanente elegido), y en (“la circuncisión” significa los individuos circuncidados). Estas tinieblas son un sinónimo del “mundo” del versículo 10. Son el antagonista de Cristo, que es la luz. La oscuridad es activa y personal: no aceptó o hizo suya la luz.
¿No es eso lo más extraordinario? De modo que cuando entras en comunión con Jesucristo, estás experimentando algo de la intimidad y el compañerismo que existe entre el Padre y el Hijo.
20 El hecho de que καί especialmente en el cuarto Evangelio tiene a menudo el significado de pero o y con todo se ve con claridad en pasajes como 7:19; 16:32; 20:29. Cf. también ; , ; ; . B. D. B., al comentar acerca de waw, conjunción hebrea que se traduce por καί, afirma que une ideas contrastantes, en tanto que en nuestra lengua el contraste se expresaría explícitamente con la palabra pero. Véase ; y un uso similar en arameo, ; , ; .
Y esa es una de las cosas más bellas que podemos pensar.
La gloria del Hijo (o Verbo):
a. En el principio. Cuando el universo fue creado, él ya existía; existe desde la eternidad.21 El Verbo disfrutaba una eternidad de comunión infinitamente íntima con el Padre, gozándose siempre en su presencia. El era Dios.
b. En la creación. Todas las cosas, una a una, alcanzaron su existencia por medio de él. De todo lo que existe hoy no hay nada que se originara sin él.
c. En él desde la eternidad y también después de la caída, durante toda la antigua dispensación, la vida rica y plena de Dios residía en él. En la misma dispensación aquella vida se hizo manifiesta: los atributos gloriosos de Dios, exhibidos en la obra de la salvación, fueron proclamados a la humanidad. La vida que se manifiesta se llama luz. Por lo tanto, la vida era la luz de los hombres. Pero la luz continúa resplandeciendo también en la nueva dispensación: el resplandecer está en la misma naturaleza de la luz. El mundo, sin embargo, no se apropió de ella: la rehusó obstinadamente y se opuso activamente al mensaje de la verdad y el amor de Dios. Odió al Cristo en quien residía la vida de Dios y desde el cual resplandecía ésta, como luz, a los que están en tinieblas.
21 Acerca de la doctrina de la preexistencia real del Logos, véase S. BK., p. 353.
La gloria del Hijo (o Verbo):
a. En el principio. Cuando el universo fue creado, él ya existía; existe desde la eternidad.21 El Verbo disfrutaba una eternidad de comunión infinitamente íntima con el Padre, gozándose siempre en su presencia. El era Dios.
b. En la creación. Todas las cosas, una a una, alcanzaron su existencia por medio de él. De todo lo que existe hoy no hay nada que se originara sin él.
c. En él desde la eternidad y también después de la caída, durante toda la antigua dispensación, la vida rica y plena de Dios residía en él. En la misma dispensación aquella vida se hizo manifiesta: los atributos gloriosos de Dios, exhibidos en la obra de la salvación, fueron proclamados a la humanidad. La vida que se manifiesta se llama luz. Por lo tanto, la vida era la luz de los hombres. Pero la luz continúa resplandeciendo también en la nueva dispensación: el resplandecer está en la misma naturaleza de la luz. El mundo, sin embargo, no se apropió de ella: la rehusó obstinadamente y se opuso activamente al mensaje de la verdad y el amor de Dios. Odió al Cristo en quien residía la vida de Dios y desde el cual resplandecía ésta, como luz, a los que están en tinieblas.
21 Acerca de la doctrina de la preexistencia real del Logos, véase S. BK., p. 353.
Hendriksen, W. (1981). Comentario al Nuevo Testamento: El Evangelio según San Juan (pp. 78–79). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
macarthur: Jesús hizo obras que solo Dios puede hacer. Él creó, el resucitó a los muertos. Él venció al reino de las tinieblas. Él perdonó el pecado. Él recibió adoración en muchas ocasiones a lo largo de su vida y ministerio. Él declaró que él tenía el derecho de ser adorado después de su resurrección. En él dice que él es en el nombre en quien toda oración debe ser hecha para que sea aceptada por Dios y respondida por Dios. Si pides algo en su nombre, él la oye y lo hace. Él responde a oración como solo Dios lo puede hacer. Él hace obras que solo Dios puede hacer. Él recibe adoración que solo Dios puede recibir. Él responde a la oración que solo Dios puede responder y vamos a ver eso conforme avanzamos a lo largo del Evangelio de Juan y vemos evidencia sobre evidencia sobre evidencia de su deidad.
Él dice el Verbo porque era un término perfecto para usarse para identificar a Cristo de lado sobrenatural.
Había un entendimiento filosófico del Verbo -ese es el término griego logos. Los filósofos hablaban de logos como la realidad que era visible en la creación. Ellos creían en un espíritu logos, algún tipo de fuente de poder no personal, algún tipo de identidad de energía no personal. Ellos creían en algún tipo abstracto de principio -de razón la llamaban- o principio de orden y estructura. Una especia de fuerza no personal que flotaba en el universo. Algún tipo de entidad no personal de sabiduría, porque ellos entendían que no podías tener la creación en la cual ellos vivían sin tener una fuente para ella. Pero ellos creían que era impersonal, o mejor dicho, no personal. E inclusive, la gente común veía el logos -la identificación filosófica de esta fuerza no personal poderosa en el universo- como la fuerza responsable de la manera en la que eran las cosas. Y Juan viene y dice: “Permíteme presentarte el hecho del que el logos no es una fuerza impersonal. El logos es una persona.” El persona es una persona, no una realidad impersonal, sino un Dios personal que vino al mundo en el hombre Jesús. No solo un concepto, sino una persona.
Y después, más allá de eso, para el pueblo judío, ellos no necesitaban una explicación porque la frase, ‘la palabra del Señor’, apareció tantas veces en el Antiguo Testamento. Y la palabra del Señor simplemente era la revelación de Dios. No podías saber nada acerca de Dios si él no hubiera hablado. Y esa es la razón por la que lo expresa de esta manera. Hebreos capítulo 1: “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo.” Así como el Antiguo Testamento es el Verbo escrito y la revelación de Dios, el Nuevo Testamento es el relato del Verbo encarnado en la persona de Jesucristo. Entonces, él es el Verbo, ya que en él Dios habla, y ese concepto fue bien establecido entre los judíos. La palabra del Señor o el Verbo del Señor con frecuencia vino a los profetas y con frecuencia vino a los padres. Fue la voluntad de Dios expresada y comunicada a través de la revelación.Entonces, el Verbo, o la palabra del Señor, es la expresión de Dios al pueblo. No hay una mayor demostración de eso que Jesucristo. Él es Dios hablándonos. Si quieres oír de Dios puedes leer el Antiguo Testamento y oirás lo que Dios le habló a los padres y a los profetas que lo escribieron, pero si quieres la revelación más completa de Dios, vas al Nuevo Testamento porque Dios habló de la manera más completa en Cristo. En Cristo. Entonces, Juan nos está diciendo que Jesús es la encarnación de Dios y, como vemos en , él es la representación exacta de la naturaleza de Dios. Dios habla en Cristo de la manera más clara, más complete y salvadora. Entonces, aquel Verbo fue hecho carne.
Aunque Dios es inmutable -Dios es un ser puro, eterno- no está cambiando, desarrollándose, creciendo. Él es puro, eterno, constante, inmutable, incambiable, es un ser que no cambia de manera constante, sin embargo, él entra en la creación y se vuelve humano, lo cual es el proceso de volverse. Y él comienza en un vientre y se vuelve un niño y crece en sabiduría y estatura y favor con Dios y los hombres. Él, quien es ese ser puro, se vuelve un hombre, se vuelve carne -eso es lo que eso significa- y habitó entre nosotros. Él no es una visión. Su humanidad no es una aparición. Su humanidad no es un fantasma como lo podemos señalar. Algunas personas lo han dicho -los docetístas, esto es un grupo de herejes- que él no tuvo apariencia humana o alguna aparición de humanidad o alguna ilusión de humanidad. Él, de hecho, fue hecho carne y habitó entre nosotros.
No mitad Dios y mitad hombre, sino totalmente Dios y totalmente hombre. Ese es el mensaje de Juan a lo largo de este libro. Debes estar en lo correcto acerca de Cristo. Tener el entendimiento correcto acerca de Cristo. Totalmente Dios y totalmente hombre. Cualquier ataque en contra de su deidad es una herejía. Cualquier ataque en contra de su humanidad es una herejía.
Ahora, para demostrar que Jesús es totalmente Dios en carne humana, enfatizar el aspecto de deidad, Juan nos lleva a lo largo de tres verdades muy importantes. Hay tres cosas que demuestran la deidad de Cristo: su preexistencia con Dios, su coexistencia con Dios y su auto existencia con Dios.
Pre- existente: Ahora, si no eres parte de la creación -si no eres parte del tiempo y el espacio, entonces eres eterno. Él existió antes de el principio de todo lo que existe. Él ya estaba existiendo. Ese es el tiempo imperfecto del verbo ser, el verbo _____. El tiempo imperfecto quiere decir continuamente. Él estaba existiendo continuamente ya cuando el principio comenzó. Cuando Moisés quiso saber cuál era el nombre de Dios, Dios le dijo, ‘Mi nombre es yo soy el que soy. Mi nombre es el verbo ser. Mi nombre es ser eterno’. Y de manera repetida, en el Evangelio de Juan, Jesús dice, ‘Yo soy. Yo soy. Yo soy’.  El verbo yo soy.  El verbo ser. Y él, inclusive, va tener la valentía, el atrevimiento, de decirle a los judíos: “Antes de que Abraham fuera, yo soy,” en . “Yo soy.” Él solo habla de si mismo en el tiempo presente continuo porque nunca hubo un momento en que el no existió.
versículo 2: “Este era en el principio con Dios.”
Co-existente con Dios: él es distinto del Dios eterno. Y aquí es donde entendemos que hay un Dios, sin embargo, hay tres personas y aquí encontramos a dos de ellas. Él es Dios -el Verbo era Dios- pero el Verbo también era o estaba con Dios. ¿Cómo puede ser Dios y al mismo tiempo con Dios? Solo puede ser explicado de una manera trinitaria. Ser Dios por naturaleza y, sin embargo, ser una persona distinta, estar con Dios, ser con Dios. lo ilustra - La Trinidad entera está involucrada en esta obra creadora. Sí, Dios el padre es el creador, claro. Sí, el Espíritu Santo participa en la creación, por supuesto. El Espíritu Santo es el que se mueve sobre la creación inanimada y le da vida. Pero escucha de nuevo la explicación de cómo trabajaron juntos a partir de . Hebreos capítulo 1 -y simplemente dice esto en el versículo 2: “En estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo.” Dios es el creador, pero el agente de la creación que usa es el Hijo, el Verbo.
Auto existente: Dios era el Verbo, cuatro palabras en griego.  La declaración más clara, más directa de la deidad del Señor Jesucristo en los cuatro Evangelios. Dios era el Verbo.Versículos 3 y 4: “Todas las cosas por él fueron hechas y sin él nada de lo que ha sido hecho fue hecho.” Esta es una reiteración esencialmente de lo que leímos en Hebreos, que Dios hizo todas las cosas a través de él. En él estaba la vida y -nos vamos a detener allí. Esta es la prueba de su auto existencia. Todo lo que existe llegó a ser a través de él. Esa es una declaración positiva. Simple, clara, una evidencia evidente, una evidencia clara. Ni siquiera puedes rebatirla, de que el Señor Jesucristo es de edad eterna. Todo lo que existe él lo hizo. Todo vino de él. Él no vino de nadie o de nada. Todo vino de él.1 de Corintos 8: 6: La confesión positiva es que todas las cosas, por él fueron hecha. La confesión negativa en el mismo versículo es que sin él nada de lo que ha sido hecho fue hecho. Esa es la declaración negativa. Tiene la declaración positiva y la negativa. Nada. Ese es el griego. Literalmente en griego, ‘ni una cosa’. Ni una cosa existe que él no haya hecho. El creador de todo debe, necesariamente entonces, ser alguien que no fue creado. Si él no es parte de la creación, entonces él no fue creado, ¿no es cierto? Esto es necesario. Solo el Dios eterno no fue creado. Los judíos están de acuerdo con esto. Solo el Dios eterno no fue creado. Si Jesús es el creador de todo lo que es creado, entonces él también no fue creado y por lo tanto, él es el Dios eterno. Jesús es Dios. No puede escapar su deidad. Sin embargo, mientras que él es Dios, él es con Dios. Él es Dios, sin embargo, es distinto de Dios. Él es Dios, sin embargo, él es el medio a través de quien Dios crea, lo cual, de nuevo enfatiza su distinción. De nuevo, el argumento es simple , debido a que Dios, el Hijo, es el creador de todo lo que existe, él tienen que estar afuera de la creación y eso implica que él no fue creado. Él tiene que estar afuera del tiempo y eso sería ser eterno.
Él estaba vivo y él la fuente de la vida. Esa es una declaración tan profunda: en él estaba la vida. Y la palabra usada no es viosporque él no solo está hablando de vida biológica -la cual es una forma de vida- sino que la palabra es zoe, la cual tiene que ver con vida espiritual, el principio de vida, la realidad de la vida. Cuando un pequeño bebé llega al mundo, ese bebé tiene vida biológica y ese es el funcionamiento del cuerpo humano, pero hay otro tipo de vida que existe en ese bebe que no puede ser cuantificada, no puede ser encontrada y no puede ser ubicada y no puede ser ligada al ADN. Esa es vida espiritual. Esa es vida esencial que no es observable y esa es la vida que viene de Dios.
Entonces, en él está la vida biológica y la vida espiritual mediante la cual él puede crear el mundo físico, el cual morirá y mediante el cual él crea al ser eterno para que nunca muera. En él está la vida. Cuando está viendo al Señor Jesucristo, está usted viendo al que en si mismo es vida. Él dijo eso, ‘Yo soy el camino, la verdad’. ¿y qué? ‘La vida’. Él no puede ver a Cristo de ninguna otra manera. Esa es una declaración inmensa, una declaración inmensa. En él estaba la vida. Él es la realidad fundamental de todo lo que existe. Es en él que vivimos y somos y nos movemos, tenemos nuestra existencia. Todo lo que existe, existe porque tiene vida de él. En él estaba la vida. La gente viene con algún tipo de idea acerca de Jesús, diciendo que fue un ser creado, y aquí es a done debes llevarlos. Él no es el Jesús de las sectas; él no es el Jesús de la esfera de la teología de la liberación; él no es el Jesús de liberalismo; él es el Jesús quien es totalmente Dios, totalmente hombre, quien es el medio por quien todo existe.
[Este era en el principio con Dios]. Este versículo contiene una repetición enfática de la segunda frase del versículo anterior. S. Juan anticipa la posible objeción de alguna mente perversa acerca de que quizá hubo un tiempo cuando Cristo, el Verbo, no era una persona distinta en la Trinidad. En respuesta a esta objeción, declara que el mismo Verbo que era eterno y Dios fue también desde toda la eternidad una persona en la Deidad distinta de Dios el Padre y, sin embargo, unida a Él de la manera más íntima e inefable. En resumen, nunca hubo un tiempo en que Cristo no estuviera “con Dios”.
Arrowsmith comenta que “las repeticiones tienen diversos usos en la Escritura. En la oración son muestra de afecto. En la profecía denotan celeridad y seguridad. En las amenazas denotan algo que es inevitable y repentino. En los preceptos denotan una necesidad de cumplirlos. En las verdades, como la que tenemos delante, sirven para mostrar la necesidad de creerlas y conocerlas”.
Ryle, J. C. (2004–2005). Meditaciones sobre los Evangelios: Juan. (E. F. Sanz, Ed., D. C. Williams, Trad.) (Vol. 1, p. 33). Moral de Calatrava, España: Editorial Peregrino.
Ryle, J. C. (2004–2005). Meditaciones sobre los Evangelios: Juan. (E. F. Sanz, Ed., D. C. Williams, Trad.) (Vol. 1, pp. 32–33). Moral de Calatrava, España: Editorial Peregrino.

Proverbios (8:22–31). El otro en Zacarías 13:7

Proverbios (8:22–31). El otro en
Dice Arrowsmith: “Pregunta al Sol si alguna vez ha estado sin sus rayos. Pregunta a la fuente si alguna vez ha estado sin su corriente. Igualmente, Dios nunca ha estado sin su Hijo”.
Ryle, J. C. (2004–2005). Meditaciones sobre los Evangelios: Juan. (E. F. Sanz, Ed., D. C. Williams, Trad.) (Vol. 1, p. 33). Moral de Calatrava, España: Editorial Peregrino.
Ryle, J. C. (2004–2005). Meditaciones sobre los Evangelios: Juan. (E. F. Sanz, Ed., D. C. Williams, Trad.) (Vol. 1, p. 33). Moral de Calatrava, España: Editorial Peregrino.

[Este era en el principio con Dios]. Este versículo contiene una repetición enfática de la segunda frase del versículo anterior. S. Juan anticipa la posible objeción de alguna mente perversa acerca de que quizá hubo un tiempo cuando Cristo, el Verbo, no era una persona distinta en la Trinidad. En respuesta a esta objeción, declara que el mismo Verbo que era eterno y Dios fue también desde toda la eternidad una persona en la Deidad distinta de Dios el Padre y, sin embargo, unida a Él de la manera más íntima e inefable. En resumen, nunca hubo un tiempo en que Cristo no estuviera “con Dios”.

--- conclusion

Todo el versículo, si se interpreta de manera honrada e imparcial, es un argumento incontestable contra tres clases de herejes. Refuta a los arrianos, que consideran a Cristo como un Ser inferior a Dios; refuta a los sabelianos, que niegan cualquier distinción de personas dentro de la Trinidad y dicen que Dios a veces se manifiesta como el Padre, a veces como el Hijo y a veces como el Espíritu, ¡y que el Padre y el Espíritu sufrieron en la Cruz! Y, sobre todo, refuta a los socinianos y unitarios, que dicen que Jesús no era Dios sino un hombre, un hombre santísimo y perfecto, pero solo un hombre.

Todo el versículo, si se interpreta de manera honrada e imparcial, es un argumento incontestable contra tres clases de herejes. Refuta a los arrianos, que consideran a Cristo como un Ser inferior a Dios; refuta a los sabelianos, que niegan cualquier distinción de personas dentro de la Trinidad y dicen que Dios a veces se manifiesta como el Padre, a veces como el Hijo y a veces como el Espíritu, ¡y que el Padre y el Espíritu sufrieron en la Cruz! Y, sobre todo, refuta a los socinianos y unitarios, que dicen que Jesús no era Dios sino un hombre, un hombre santísimo y perfecto, pero solo un hombre.
Bernardo acerca del asunto: “Es una temeridad buscar demasiado en ello. Es propio de la piedad creerlo. Es vida eterna conocerlo. Y nunca podremos comprenderlo plenamente hasta llegar a disfrutarlo”

Bernardo acerca del asunto: “Es una temeridad buscar demasiado en ello. Es propio de la piedad creerlo. Es vida eterna conocerlo. Y nunca podremos comprenderlo plenamente hasta llegar a disfrutarlo”

Ryle, J. C. (2004–2005). Meditaciones sobre los Evangelios: Juan. (E. F. Sanz, Ed., D. C. Williams, Trad.) (Vol. 1, p. 32). Moral de Calatrava, España: Editorial Peregrino.
Ryle, J. C. (2004–2005). Meditaciones sobre los Evangelios: Juan. (E. F. Sanz, Ed., D. C. Williams, Trad.) (Vol. 1, p. 32). Moral de Calatrava, España: Editorial Peregrino.
Ahora, para ser sincero, no podría importarme menos. Pero podría importarme todo el valor de mi vida en ese pequeño iota. Por esta razón mis amigos, porque si Jesús no es Dios, entonces todavía estoy en mis pecados. Si Jesús no es el verdadero Dios, el mismo Dios de la misma sustancia que el Padre, entonces todavía estoy en mis pecados. Jesús es Dios John dice eso.
¿No es ese el pensamiento más hermoso que puedas tener? Que aquí está el Padre, y aquí está el Hijo, y ellos son un solo Dios, en comunión unos con otros, en el misterio de la comunión de la Trinidad, y Jesucristo ha venido al mundo para dar a conocer algo de ese misterio. nos. ¿No es eso lo más extraordinario? De modo que cuando entras en comunión con Jesucristo, estás experimentando algo de la intimidad y el compañerismo que existe entre el Padre y el Hijo. Y esa es una de las cosas más bellas que podemos pensar.
Related Media
See more
Related Sermons
See more