Formas de tratar con la culpa

Repaso:

Vimos que la culpa es una posición que tenemos delante de Dios cuando rompemos alguna de sus leyes.

Entendimos que la culpa es una realidad objetiva que no depende si nos sentimos culpables o no, pero que los sentimientos juegan un papel importante en la culpa pues si nuestra conciencia esta bien moldeada, podremos saber mas rápidamente cuando hemos sido culpables y arrepentirnos.

El miércoles pasado vimos que en ocasiones podemos llegar a lidiar de manera incorrecta con la culpa las personas a las que les predicamos claramente lo hacen.

Vimos una de las maneras en que lidiamos con la culpa y es que “negamos nuestra culpa”. Con pensamientos como “yo no creo que Dios sea tan malo como para castigarme”, malentendiendo la santidad y la justicia de Dios. Pensar también que las cosas que hacemos no son tan malas y asi calmar nuestra conciencia.

Ahora vamos a ver otras maneras en que tratamos con la culpa.

Justificación de nuestra conducta

Claramente que negar nuestra culpa ante Dios es algo que no podemos hacer, por lo que la mayoría de las personas acuden a esta táctica y nosotros constantemente somos tentados a usar estos mismos medios.

¿En que consiste justificar nuestro comportamiento pecaminoso? (que los hermanos den ejemplos sobre como justificar:

Gritarle a la esposa o esposo, enojarse y guardar rencor, no cumplir con una promesa, etc)

justificarse implica “un intento espurio de proporcionar una solida razón lógica para una conducta que sabemos que es mala”. Esta es la típica excusa para nuestro comportamiento inmoral.

Ahora sin duda que estas justificaciones en ocasiones funcionan muy bien y unos se vuelven expertos en encontrar excusas hasta el punto que ellos mismos se las creen.

Ahora como de la misma manera en que negar la culpa no sirve con Dios tampoco funciona justificar nuestro pecado, esto porque la Biblia declara que delante de la ley de Dios nadie puede excusarse según . Esto es porque no tenemos excusa cuando rompemos la ley de Dios ()

La tentación de justificarnos es constante porque como cristianos el E.S. y la conciencia nos acusan cuando pecamos y estos sentimientos son dolorosos y muy incómodos, por lo que encontrar algun pretexto para que nos engañe que ya no tenemos culpa es algo que buscaremos.

Pero veamoslo asi: En el cuerpo el dolor juega un aspecto muy importante, ya que este indica que algo esta mal en nuestro cuerpo, de la misma manera con el dolor del alma. Esta es una alarma enviada por Dios para indicarnos que algo esta mal y debemos tratarlo.

Cuando sintamos culpa no huyamos de ella, quedémonos a reflexionar a luz e la Biblia si somos culpables, soportemos el dolor y seamos humildes en pedir perdón y dispuestos en cambiar.