Arameo
Introducción
La ciudad de Harán como origen de Abraham
La región de Padan-aram y los arameos
El origen de los arameos
Los libros del Antiguo Testamento escritos después del exilio, como Crónicas, fueron escritos en hebreo bíblico posterior, el cual probablemente se basaba en el habla común de los israelitas. Tenía una fuerte influencia aramea pero tendía a imitar el estilo del hebreo bíblico clásico.
El hogar propiamente dicho de los arameos fue la llanura que se extiende desde las montañas del Líbano hasta el Eufrates y desde los montes Tauros hasta Damacso. Amós afirma que vinieron de Kir, lo cual podría ser la designación de la llanura entre el río Tigris y los altiplanos de Elam. Cuando Tiglat-pileser capturó Damasco, deportó su población a Kir (2 R. 16:9).
Los arameos en la historia del origen del pueblo de Israel
Jacob referido como arameo
El arameo como idioma en el Antiguo Testamento
La lengua semita, hablada por los arameos del norte de Siria y del noroeste de Mesopotamia, se denomina el arameo. Se clasifica como una lengua semita y tiene afinidades íntimas con el amorreo y con el hebreo.
Durante el tiempo del sitio de Jerusalén por Senaquerib (701 a. de J.C.), el hebreo era el idioma usado por los judíos y el arameo era el idioma usado en las transacciones oficiales con Asiria. El asirio Rab-saces, representante de Senaquerib, habló al pueblo en hebreo, pero los mensajeros de Ezequías se aseguraron que ellos entendían el arameo (2 R. 18:26).
En algunos manuales antiguos aún se lo denomina caldeo, que es en realidad la designación de uno de sus dialectos históricos, el propio de Babilonia o Caldea. Lengua semítica noroccidental, emparentada con el hebreo y el fenicio, originariamente dialecto de las tribus arameas, que hacia el año 1300 a.C. penetraron en la región de cultura siropalestinense, fundando allí varias ciudades. La lengua aramea se documenta, por tanto, desde el segundo milenio antes de Cristo.
Para el tiempo de Esdras, sin embargo, la situación era a la inversa. La gran congregación reunida para oír la ley ya no usaba el hebreo como su lengua oficial. El pueblo estaba atento y Esdras y sus asociados “leyeron el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura” (Neh. 8:8). La frase traducida “y ponían el sentido” es la equivalente hebrea exacta de la palabra aramea usada para leer un documento oficial en la lengua vernácula, proceso que se entiende como traducción. Durante el exilio, los judíos adoptaron el arameo, así que se hizo necesario que la ley hebrea fuese traducida a la lengua vernácula.
El arameo como el idioma del Nuevo Testamento
El arameo como el idioma del Nuevo Testamento
*En primer lugar, la mayoría de los judíos no entendían el idioma de los extranjeros. El arameo era el idioma de Aram o Siria. Para el siglo nueve a.C., Babilonia y otras naciones lo usaban para el comercio y la política. Así como el swahili es el idioma comercial de África oriental, el arameo una vez fue el idioma comercial del Medio Oriente. El alfabeto y la escritura aramea eran iguales al hebreo. Por eso, probablemente, muchos judíos aprendieron arameo y este llegó a ser el idioma oficial de los medos y persas quienes conquistaron a Babilonia.1 Para el tiempo de Cristo, el arameo era un idioma común. Jesús probablemente expuso en arameo la mayoría de sus enseñanzas.
Las traducciones de la Escritura al arameo, conocidas como tárgumes, eran orales en vez de escritas hasta los primeros siglos de la era cristiana. El hebreo era usado por los líderes religiosos y nunca desapareció como el idioma de la oración y de las Escrituras. Fue usado por la comunidad del Qumrán como el idioma de la devoción e instrucción aun hasta el siglo I d. de J.C. La mayoría de los judíos, sin embargo, usó el arameo como el lenguaje de la vida diaria.
Conclusión
Los libros del Antiguo Testamento escritos después del exilio, como Crónicas, fueron escritos en hebreo bíblico posterior, el cual probablemente se basaba en el habla común de los israelitas. Tenía una fuerte influencia aramea pero tendía a imitar el estilo del hebreo bíblico clásico.
Los israelitas tenían contactos continuos con los pueblos de lengua aramea desde los tiempos de los patriarcas hasta el fin de la historia del Antiguo Testamento. Algunas porciones de la Biblia fueron escritas en arameo y otras muestran la influencia aramea de vocabulario y gramática. Largas porciones de Daniel (2:4–7:28) y Esdras (4:8–6:18; 7:12–26) fueron escritas en arameo así como un versículo en Jeremías (10:11) y el lugar llamado Jegar Sahaduta, mencionado por Labán (Gn. 31:47).
Una cantidad importante de materiales no bíblicos están disponibles para el estudiante de la literatura aramea precristiana. Esta incluye inscripciones de las ciudades-estados arameo s y documentos escritos en el arameo oficial del imperio persa.