Evangelizando en el trabajo

El ejemplo de Pablo

Sin duda uno de los retos mas difíciles para un cristiano es dar a conocer su fe, acatar ese mandato y privilegio de mencionar a Cristo entre las gentes para que sea cumplida la palabra de

Romanos 10.8 RVR60

Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:

y luego aplicar está Palabra

Romanos 10.14 RVR60

¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?

Por ello vamos a centrar nuestro tiempo en está escuela dominical para hablar de la transmisión de nuestra fe en nuestros oficios y lugares de trabajo. Porque Dios no nos ha dicho que para poder evangelizar tenemos que volvernos errabundos o dejar nuestros oficios. Miremos por favor el caso de Pablo

Hechos de los Apóstoles 18.1–3 RVR60

Después de estas cosas, Pablo salió de Atenas y fue a Corinto.Y halló a un judío llamado Aquila, natural del Ponto, recién venido de Italia con Priscila su mujer, por cuanto Claudio había mandado que todos los judíos saliesen de Roma. Fue a ellos,y como era del mismo oficio, se quedó con ellos, y trabajaban juntos, pues el oficio de ellos era hacer tiendas.

Notemos algunas características de nuestro texto:

Pablo continua desempeñado su oficio.

Su oficio es particular “skenopoioi” un constructor calificado de tiendas

Esta aprovechando su oficio como plataforma de evangelismo

Su evangelismo produce fruto permanente, mira como Él mismo se refiere a Priscila y Aquila en otros lugares:

Romanos

Romanos 16.3–5 RVR60

Saludad a Priscila y a Aquila, mis colaboradores en Cristo Jesús, que expusieron su vida por mí; a los cuales no sólo yo doy gracias, sino también todas las iglesias de los gentiles. Saludad también a la iglesia de su casa. Saludad a Epeneto, amado mío, que es el primer fruto de Acaya para Cristo.

1 Corintios 16.19 RVR60

Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en el Señor.

2 Corintios 11.9 RVR60

Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui carga, pues lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia, y en todo me guardé y me guardaré de seros gravoso.

2 Timoteo 4.19 RVR60

Saluda a Prisca y a Aquila, y a la casa de Onesíforo.

2 Tim 4.

Estos que eran sus compañeros de trabajo se convirtieron en realidad en sus amigos y compañeros de milicia en el evangelio, su trabajo en el evangelismo fue ejercido a través del trabajo que desempeñaba.

Haber analizado esto nos permitirá cuestionarnos un poco con respecto a nuestro evangelismo en el trabajo, sabiendo que nuestro oficio y vocación deben ser hechos

Colosenses 3.23 RVR60

Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;

Colosenses 3.11 RVR60

donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos.

Nuestro trabajo es entonces de hecho ya una forma de evangelismo, porque nos demuestra que el trabajador Cristiano, no trabaja como el no creyente, sino que se esfuerza en agradar a sus jefes, haciendo las cosas diligentemente, sin tanto quejido, inconformidad y hostilidad. como dice Martín Luter King JR:

“si eres llamado a ser barrendero, barre las calles como Miguel Angel pintaba sus cuadros, como Shakespiare escribía poesía, como Beethoven componía música, barre las calles de tal modo que las huestes celestiales y terrenales tengan que hacer un alto y decir: Aquí vivió un gran barrendero que hizo bien su trabajo”

También Pedro nos recuerda:

Pedro lo dice:

1 Pedro 2.18 RVR60

Criados, estad sujetos con todo respeto a vuestros amos; no solamente a los buenos y afables, sino también a los difíciles de soportar.

Esto debido a que el Cristiano no es cristiano el domingo y el lunes es una persona común, sino que por sus venas corre la sangre que lo limpio y eso le obliga a actuar, no solo mientras está en la iglesia, sino también el lunes, cuando está enfrentando sus quehaceres laborales, él no es cristiano de domingo y trabajador de lunes, sino que todo el tiempo es cristiano y todo el tiempo es trabajador. De esta manera da testimonio a sus compañeros, pero también a sus jefes y Dios pone gracia ante los ojos de sus jefes porque su comportamiento no se mezcla con las quejas cotidianas del inconforme hombre incrédulo.

Nosotros somos cristianos de tiempo completo, y debemos resaltar porque hacemos las cosas bien hechas y dentro de los límites de nuestra profesión de fe, somos los mas útiles para aquello que es bueno, pero inútiles para aquello que es desagradable a Dios o dañe a otra persona, por eso no necesitamos arrastrar a los demás para poder sobresalir, porque si nosotros hacemos las cosas como para Dios, entonces todo se dará sin tener que menospreciar o lastimar a alguien, así es como Dios actúa, colocando gracia en nosotros, eso es un verdadero reflejo de nuestro evangelismo.

Pero como dice Pablo,

Romanos 10.14 RVR60

¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?

Romanos 10.13 RVR60

porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.

Así que nuestro trabajo no se queda allí, sino que debemos darnos por alcanzar a quienes laboran con nosotros (es lo que hizo Pablo), y para ello sabemos que cada mañana antes de llegar a nuestro trabajo debemos estar rogando a nuestro Dios en oración que nos de los espacios y las oportunidades para poder llevar a nuestros compañeros el mensaje, orando por ellos, utilizando nuestro quehacer cotidiano para conectarlo con el evangelio, por ejemplo, Pablo uso su conocimiento en construcción para predicar a los efesios, mira

Efesios 2.20 RVR60

edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,

Efesios 2.20–21 RVR60

edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo,en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor;

Efesios 4.16 RVR60

de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor.

1 Corintios 3.9 RVR60

Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.

Así Pablo podía conectar las cosas que hacia con el mensaje que quería dar a sus compañeros. Hermanos Dios nos ha colocado en el lugar indicado, se lo que esta pasando por tu mente, !seguro y el no sabe como es mi trabajo, no me queda tiempo! !seguro y él no entiende como es este campo de grosero! !seguro y si hago eso me hechan de mi empleo! Querido amigo, tu estas donde debes estar, es allí, es en este lugar, donde Dios te ha puesto, donde tu tienes la posibilidad de hacerlo. Yo no te he dado el empleo ni te he puesto allí, Dios lo ha hecho, solo es él, y nadie mas quien te ha dado el empleo y es allí donde el quiere que ti seas inteligente en la proclamación de su nombre.

Ahora, ¿Como puedes hacerlo? Ya lo he mencionado hasta ahora, permíteme te lo recuerdo

Aprovechar el escenario donde Dios nos ha puesto

1. Trabajando como para el Señor

2. Haciendo tu trabajo con corazón sincero, como para el Señor, sin quejarte y con excelencia, que mientras lo demás están amargados, tristes, quejumbrosos, en sindicatos y formando polémica, tu puedas estar sonriente, tanto que tengan que preguntarte ¿y tu porque estas tan feliz?

Por último déjame darte algunas recomendaciones para tu evangelismo laboral:

No intentas crear debates que indispongan tu ambiente laboral, en espacios laborales. Los debates puedes dejarlos para después de la hora, en alguna salida con compañeros, en el almuerzo, pero no en tu espacio de trabajo. En tu espacio aprovecha y usa palabras y cortas y expresiones que no generen polémica, como por ejemplo “Dios te bendiga, aprecio tu gesto, Dios te lo pague, te invito al servicio, después hablamos de esto”

3.

Contén tu tentación por corregir a alguien equivocado, durante un momento no propicio, “será mejor dejarlo para luego” o “podemos almorzar y hablamos de ello”

Aprovecha y haz invitaciones en momentos propicios, cuando te enteres de una relación rota, un desamor, una muerte, una enfermedad, son oportunidades que Dios te abre para que puedas guiar e invitar las personas a tener una relación personal con el Señor y a conocerlo a través de tu iglesia local.

Regala Libros, cuando te enteras de alguien que se agrada de la lectura, cuando sabes que hay un libro cristiano que habla sobre la afición de tu compañero, si tienes un negoció propio entonces regala tarjetas de tu iglesia, o palabritas, o un mensajito en el recibo de pago, comparte los sermones que sabes habrían sido muy útiles a un compañero en especifico.

Aprovecha las horas de café, para responder preguntas sencillos, que no generan polémica y que pueden ser resueltas con solo una frase.

Pregunta de vez en cuando a un compañero como puedes orar por él, comparte tus experiencias y tu testimonio con ellos (procura que no sea en horario laboral)

Presta ayuda cuando puedas, tal vez el dinero para un transporte, una medicina, cargar un paquete, llevarle a una cita. Estas pequeñas oportunidad te abrirán el espacio y quitarán las barreras para compartir a Cristo.

Otras formas...

Otras formas.

Ahora, ¿Como puedes hacerlo?