Desobediencia

La desobediencia entra en el corazón de las personas por varias razones

Desobediencia viene por la avaricia y la lujuria

Génesis 3.6 NVI

La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que tenía buen aspecto y era deseable para adquirir sabiduría, así que tomó de su fruto y comió. Luego le dio a su esposo, y también él comió.

Ver también ; ; ;

Desobediencia surge por la impaciencia

Éxodo 32.23 NVI

Ellos me dijeron: “Tienes que hacernos dioses que marchen al frente de nosotros, porque a ese Moisés que nos sacó de Egipto, ¡no sabemos qué pudo haberle pasado!”

Ver también ;

Desobediencia viene por el temor

; ; ;

Desobediencia es el resultado del orgullo y la arrogancia

Levítico 10.1 NVI

Pero Nadab y Abiú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario y, poniendo en ellos fuego e incienso, ofrecieron ante el Señor un fuego que no tenían por qué ofrecer, pues él no se lo había mandado.

ién ;

Incredulidad es desobediencia

Hebreos 3.12 NVI

Cuídense, hermanos, de que ninguno de ustedes tenga un corazón pecaminoso e incrédulo que los haga apartarse del Dios vivo.

Ver también ; Ro 11:20 hace claro que la desobediencia de la que habla aquí es la incredulidad; ; ;

Falta de amor es desobediencia

Juan 14.24 NVI

El que no me ama, no obedece mis palabras. Pero estas palabras que ustedes oyen no son mías sino del Padre, que me envió.

Ver también ;

Desobediencia a Dios lleva al castigo

Castigo se aplica a individuos

Génesis 3.17–19 NVI

Al hombre le dijo: «Por cuanto le hiciste caso a tu mujer, y comiste del árbol del que te prohibí comer, ¡maldita será la tierra por tu culpa! Con penosos trabajos comerás de ella todos los días de tu vida. La tierra te producirá cardos y espinas, y comerás hierbas silvestres. Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres, y al polvo volverás.»

Ver también ; ; ; ; ; ;

Castigo por la desobediencia de la incredulidad

2 Tesalonicenses 1.8–9 NVI

para castigar a los que no reconocen a Dios ni obedecen el evangelio de nuestro Señor Jesús. Ellos sufrirán el castigo de la destrucción eterna, lejos de la presencia del Señor y de la majestad de su poder,

Ver también

Naciones que son castigadas

Génesis 15.14 NVI

Pero yo castigaré a la nación que los esclavizará, y luego tus descendientes saldrán en libertad y con grandes riquezas.

Ver también

Deuteronomio 11.26–28 NVI

»Hoy les doy a elegir entre la bendición y la maldición: bendición, si obedecen los mandamientos que yo, el Señor su Dios, hoy les mando obedecer; maldición, si desobedecen los mandamientos del Señor su Dios y se apartan del camino que hoy les mando seguir, y se van tras dioses extraños que jamás han conocido.

Ver también ; ;

Desobediencia, como todos los pecados, puede ser perdonada

Romanos 5.19 NVI

Porque así como por la desobediencia de uno solo muchos fueron constituidos pecadores, también por la obediencia de uno solo muchos serán constituidos justos.

Ver también