Vivir en la presencia de Dios

Texto:

Salmo 16.11 RVR60

Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre.

INTRODUCCIÓN:

Éxodo 33.14–15 RVR60

Y él dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso. Y Moisés respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquí.

No hay mejor lugar donde estar que en la presencia de Cristo.

DESARROLLO:

1. Desear su presencia.

Salmo 37.4 RVR60

Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.

Salmo 73.25–28 NTV

¿A quién tengo en el cielo sino a ti? Te deseo más que cualquier cosa en la tierra. Puede fallarme la salud y debilitarse mi espíritu, pero Dios sigue siendo la fuerza de mi corazón; él es mío para siempre. Los que lo abandonen, perecerán, porque tú destruyes a los que se alejan de ti. En cuanto a mí, ¡qué bueno es estar cerca de Dios! Hice al Soberano Señor mi refugio, y a todos les contaré las maravillas que haces.

Salmo 3

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2. Agradecer en su presencia.

Salmo 100.4 NTV

Entren por sus puertas con acción de gracias; vayan a sus atrios con alabanza. Denle gracias y alaben su nombre.

Salmo 100.4–5 NTV

Entren por sus puertas con acción de gracias; vayan a sus atrios con alabanza. Denle gracias y alaben su nombre. Pues el Señor es bueno. Su amor inagotable permanece para siempre, y su fidelidad continúa de generación en generación.

Salmo 100.4 RVR60

Entrad por sus puertas con acción de gracias, Por sus atrios con alabanza; Alabadle, bendecid su nombre.

Salmo 103.1–5 RVR60

Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios. El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias; El que sacia de bien tu boca De modo que te rejuvenezcas como el águila.

3. Confiar en su presencia.

Josué 1.5 NTV

Nadie podrá hacerte frente mientras vivas. Pues yo estaré contigo como estuve con Moisés. No te fallaré ni te abandonaré.

Romanos 8.31 NTV

¿Qué podemos decir acerca de cosas tan maravillosas como éstas? Si Dios está a favor de nosotros, ¿quién podrá ponerse en nuestra contra?

Salmo 73.25–28 RVR60

¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. Mi carne y mi corazón desfallecen; Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre. Porque he aquí, los que se alejan de ti perecerán; Tú destruirás a todo aquel que de ti se aparta. Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien; He puesto en Jehová el Señor mi esperanza, Para contar todas tus obras.

sadasdf

CONCLUSIÓN:

Hechos de los Apóstoles 17.28 RVR60

Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.

Juan 15.4–5 RVR60

Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.