LA NECESIDAD DE TENER PAZ CON DIOS
INTRODUCCIÓN
13Porque desde el más chico de ellos hasta el más grande, cada uno sigue la avaricia; y desde el profeta hasta el sacerdote, todos son engañadores. 14Y curan la herida de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.a
33Y el Dios de paz sea con todos vosotros. Amén.
6Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
7Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
I.¿Qué es la paz que pasa todo entendimiento?
3Sea con vosotros gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y del Señor Jesucristo, Hijo del Padre, en verdad y en amor.
6Y yo daré paz en la tierra, y dormiréis, y no habrá quien os espante; y haré quitar de vuestra tierra las malas bestias, y la espada no pasará por vuestro país.
10Entonces le dijo Pilato: ¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para crucificarte, y que tengo autoridad para soltarte? 11Respondió Jesús: Ninguna autoridad tendrías contra mí, si no te fuese dada de arriba
3. La paz real.
Había una vez un rey que ofreció un gran premio a aquel artista que pudiera captar, en una pintura, la paz perfecta.
Muchos artistas lo intentaron. El rey observó y admiró todas las pinturas, pero solo hubo dos que a él realmente le gustaron y tuvo que escoger entre ellas.
La primera era un lago muy tranquilo. Este lago era un espejo perfecto donde se reflejaban unas plácidas montañas que lo rodeaban. Sobre éstas había un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Todos los que miraron esta pintura pensaron que ésta reflejaba la paz perfecta.
La segunda pintura también tenía montañas, pero eran escabrosas y descubiertas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual caía un impetuoso aguacero con rayos y truenos. Montaña abajo parecía retumbar un espumoso torrente de agua. Todo esto no se revelaba para nada pacífico.
Cuando el rey observó cuidadosamente, miró tras la cascada un delicado arbusto creciendo en una grieta de la roca. En este arbusto se encontraba un nido. Allí, en medio del rugir de la violenta caída de agua, estaba sentado plácidamente un pajarito en el medio de su nido…
El rey escogió la segunda. ¿Y sabéis por qué?
–«Porque», explicaba el rey, «Paz no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo duro o sin dolor. Paz significa que a pesar de estar en medio de todas estas cosas permanezcamos calmados dentro de nuestro corazón. Éste es el verdadero significado de la paz. Que la paz del Señor Jesucristo sea con todos».
Y recuerda que la paz que tú tienes no te la dio el mundo, y como no te la dio, no te la puede quitar.
Palabra hebrea que sig. paz en el AT, donde se refiere al estado de plenitud, completamiento, integridad, salud y armonía.
II.¿COMO MANTENGO LA PAZ CON DIOS?
«Y el Dios de paz sea con todos vosotros. Amén». Con esta petición el apóstol pedía que Dios se manifestara entre ellos, para que experimentaran su presencia concretamente como Dios de paz.
11 Apártese del mal, y haga el bien;
Busque la paz, y sígala.
14Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos? 14El respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró
3Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
5Nadie te podrá hacer frentea en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé.b
6Esfuérzate y sé valiente;c porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos.
7Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. 8Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. 9Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
9Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
7Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. 8Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. 9Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos? 14El respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró
33Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
7Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús
5 Jehová es tu guardador;
Jehová es tu sombra a tu mano derecha.
6 El sol no te fatigará de día,
Ni la luna de noche.
7 Jehová te guardará de todo mal;
El guardará tu alma.
8 Jehová guardará tu salida y tu entrada
Desde ahora y para siempre.
19Cuando llegó la noche de aquel mismo día, el primero de la semana, estando las puertas cerradas en el lugar donde los discípulos estaban reunidos por miedo de los judíos, vino Jesús, y puesto en medio, les dijo: Paz a vosotros.
8Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.
no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.
III. NO ESTEMOS AFANOSOS NI TURBADOS
6Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 7
15y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.
4No llevéis bolsa, ni alforja, ni calzado; y a nadie saludéis por el camino. 5En cualquier casa donde entréis, primeramente decid: Paz sea a esta casa. 6Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; y si no, se volverá a vosotros.