PENTATEUCO
INTRODUCCION AL PENTATEUCO
Antes de iniciar el estudio de los libros individuales del Pentateuco y del texto bíblico, conviene dar una ojeada sobre el Pentateuco en general, puesto que los libros de que se compone tienen entre sí una relación definitiva.
1. Definición de la palabra “Pentateuco”
La palabra Pentateuco viene de dos palabras griegas, pente, cinco, y teujos, libro, y significa cinco libros, referente a los primeros cinco libros de la Biblia. Este nombre es el que se emplea en la Septuaginta, versión griega del AT. El nombre que los judíos aplicaban a estos cinco libros fue torah, voz que significa instrucción, o ley.
Formaban estos cinco libros un conjunto definitivo y aparte del resto de la Biblia, siendo ellos la primera gran división de la Biblia hebrea, como se ha hecho notar ya (Canon del Antiguo Testamento, 1 iii), con una segunda y tercera división que constaba de los Profetas, y los Escritos (o Hagiógrafos), respectivamente.
2. Concepto de un “Hexateuco” de algunos autores
Algunos autores han desarrollado la teoría de un Hexateuco, palabra que significa seis libros, clasificación según la cual se agrega al Pentateuco un sexto libro, el de Josué.
No hay fundamento histórico para tal concepto, ni desde el punto de vista de la paternidad literaria, ni en relación con la costumbre de los judíos, ni en ninguna versión o manuscrito antiguo, aunque en la Versión Etiópica se reconoce un octateuco (ocho libros), desde Génesis a Rut.
Aunque falta base histórica para un Hexateuco, algunos alegan que podría ser ventajoso, desde el punto de vista de la unidad de la historia, agregar el libro de Josué al Pentateuco, V 1, p 134 puesto que aquél completa la historia que se desarrolla en el Pentateuco. Afirman que tiene el libro de Josué las mismas circunstancias históricas, y sigue con la narración de la conquista de la tierra prometida, que se empieza en el Pentateuco y que el libro de Deuteronomio deja sin terminar. En cambio, en el libro de Jueces, dicen que tenemos una situación completamente nueva y distinta. Además, dicen que hay ciertas afinidades literarias entre el Pentateuco y Josué.
A pesar de las razones alegadas, creo que podemos seguir con la clasificación que corrientemente hacemos de estos libros, la de un Pentateuco. El hecho de que en estos primeros cinco libros tenemos los códigos de Israel, les da una unidad y relación entre sí, que no tiene el libro de Josué con ellos.
Desde otro punto de vista, la situación que se afronta en el libro de Josué es enteramente nueva. Para su debida explicación he tenido que emplear unos cuatro capítulos de introducción, los que también preparan al lector para el estudio del libro de los Jueces, de modo que, al llegar al estudio de este último libro, no es necesario hacer más que referencias a la parte introductoria de la época de la conquista. La conexión entre Josué y Jueces, pues, es más estrecha que la conexión entre Josué y Deuteronomio.