La disciplina en la iglesia del Señor
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Introduccion
Introduccion
El diccionario del Estudiante Webster define la palabra “disciplina”como:
“Capacitación que corrige,moldea, fortalece o perfecciona. Castigo; Corrección.”
Sistema de normas que afectan a la conducta o acción, especialmente, las normas o leyes que afectan las practicas religiosas o la conducta de sus miembros.
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La disciplina de la iglesia es usado mayormente para describir el retiro de comunión, pero la disciplina es mucho mas extensa que el solo quitar la comunión.
.
La disciplina empieza con la formación de los niños, desde que son bebés, en relación a Jesús y su iglesia.
Incluye todas las clases bíblicas de adolescentes.
De adultos jóvenes.
Reunión de Ancianos.
Reunión de miembros en sus hogares.
Reuniones congregacionales .
Y la triste y difícil tarea de retirar la comunión a los que no se quieren arrepentir.
Hay cinco formas que el Señor disciplina y castiga a sus hijos actualmente:
En primer lugar, a través de la predicacción del Evangelio, el cual , redarguye, reprende y exhorta. ().
En segundo lugar, a través de permitirnos sufrir las consecuencias de nuestros pecados. ().
Tercero, a través del sufrimiento habitual que es el destino normal de la humanidad.().
Cuarto, a través de nuestras conciencias. ().
Quinto, a través de la retirada de la comunión.().
Debemos definir la disciplina de la iglesia con amor. Sin disciplina Bíblica una iglesia no tiene la clase de amor que necesita―la clase de amor que quiere lo mejor y que confía en el Señor. ¿Qué se diría de los padres que dicen amar a sus hijos pero no los disciplinan―no los enseñan a cómo comportarse, a cómo compartir, a cómo ayudar, a cómo trabajar? ¿Y si nunca los corrigieron cuando se portaban mal? Es porque no aman a sus hijos o porque son ignorantes acerca de cómo mostrar amor. (), y como debemos hacerlo? (). Así es en la familia espiritual. dice que los ancianos de la iglesia están para “apacentar a la grey que está entre vosotros, cuidando de ella.” Esto describe la disciplina. Una iglesia sin disciplina Bíblica es una iglesia sin un verdadero amor.
¿Ha visto a algún hermano o hermana que se niega arrepentirse que le retiren la comunión?
¿O ha escuchado de congregaciones que practiquen esto?
Algunas congregaciones han abandonado ésta práctica porque NO CREEN que ésta enseñanza bíblica se aplica ahora.
Otras, creen que si se aplica actualmente, pero no tienen la VALENTIA de actuar.
Ahora, cual es la voluntad manifiesta de Dios sobre esto, vamos a ver algunos pasajes que expresan y afirman claramente la voluntad de Dios sobre este asunto. Pero antes algunas consideraciones hechas en este estudio:
Quitar la comunión se hace por toda la iglesia, una vez cumplido todo el proceso bíblico.
Un miembro que está en pecado y se niega a arrepentirse.
Se han utilizado múltiples exhortaciones y tiempo sin éxito.
Se han hechos incontables oraciones, personales y congregacionles.
Al hacerlo de acuerdo a las Sagradas Escrituras, se declara que ésta alma está perdida, no por haberle retirado la comunión, sino porque ya esta perdido a causa de su pecado y negación a arrepentirse.
La retirada de la comunión solamente declara lo que es una realidad. Esto es el por qué se niegan a llevar a cabo esta acción cuando el momento es el correcto, debido a que es peligrosa e intrigante. Este hermano o hermana perdidos podrían creer que están en una condición salva, y sus hermanos cristianos pretenden hacer lo correcto conviviendo con ellos. Esto no es amor, sino una muestra de orgullo pecaminoso entre nuestros miembros. Además, el quitar la comunión a los miembros no le agrega algo adicional a lo que tienen que hacer para obtener perdón que lo que debían hacer antes de que se les cortara. El retirar la comunión es simplemente reconocer lo que es verdad. Este hermano o hermana está perdido debido a que él o ella persisten en el pecado.
Cuando los cristianos en Corinto se negaron a practicar el retirar la comunión, Pablo dijo que era debido a su “jactancia.” Se gloriaban ellos mismos y se envanecían (, ). Los ancianos y otros cristianos actualmente se niegan a retirar la comunión como lo enseñan las Escrituras, se glorían ellos mismos y se envanecen demasiado. Vamos a leer :
Ahora, ponga atención al texto. Este pecado estaba siendo cometido por un miembro de la iglesia. Pablo dice que la fornicación estaba “entre vosotros” (v. 1). La iglesia estaba haciendo una cosa y deberían estar haciendo otra. Era un tiempo para lamentarse y se estaban envaneciendo (v. 2). El pecado debió haber sido quitado pero en su lugar le permitían permanecer. El anuncio de quitar la comunión (vv. 4-5) debía hacerse cuando la iglesia estaba reunida pero era solamente el punto de partida del cual la iglesia empezaría a suprimir su interacción social. No debían comer con él (v. 11). Debían quitar de entre ellos a ese perverso (v. 13). Pablo no tiene que decirnos la razón, pero lo hizo: “Primero, para que “sea entregado a Satanás” (v. 5), un término que significa que la iglesia declara lo que es una realidad―que este hombre se ha perdido debido a su pecado y su negativa arrepentirse. Hacen esto porque quieren destruir el pecado en su vida, a fin de que “el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús.” La retirada de la comunión se hace con la esperanza de que se salven. Con seguridad, le deberá afectar tan profundamente la declaración de quitarle la comunión y la profunda seriedad con que sus hermanos cristianos se dirigen hacia él que finalmente aceptará su estado pecaminoso y su condición perdida. Pero ¿Qué si no? Hay un segundo propósito: “…un poco de levadura leuda toda la masa” (v. 6). Esto es, las iglesias que no practican el quitar la comunión abren la puerta a que más almas se pierdan a través de la influencia negativa. El quitar la comunión da una declaración a cada miembro de la iglesia. El pecado es serio. El infierno es terrible y real. La Biblia es verdad. Y una más: En las iglesias cuyos ancianos son fieles y activos pastores, los cristianos pueden sentir la seguridad que están viviendo fielmente por el hecho de que los ancianos no los están confrontando con su pecado. Si usted no cree que el no practicar el quitar la comunión promoverá el pecado en la iglesia, está negando al Cielo mismo, porque es el origen de esta verdad establecida, “un poco de levadura, leuda toda la masa” (). El quitar la comunión aplica a los miembros de la iglesia y no a las personas del mundo (vv. 10-13). Estas enseñanzas aplican solamente a los miembros rebeldes de la iglesia.
Otro pasaje sobre el tema es : “Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros.”
Este es un versículo poderoso en la vida del verdadero cristiano por varias razones.
Primero, es un mandato bíblico. Cristo nos dejó su Testamento (), y actualmente gobierna como cabeza de la iglesia a través de ese Testamento.
Segundo, es un mandamiento Bíblico particularmente explícito. No existe mandamiento más claro hablado en todo el Nuevo Testamento.
Tercero, este mandamiento Bíblico es fortalecido en el nombre de Jesucristo.
Cuarto, este mandamiento viene en la misma epístola y capítulo que concluye con estas palabras aleccionadoras: “Si alguno no obedece a lo que decimos por medio de esta carta, a ese señaladlo, y no os juntéis con él, para que se avergüence. Mas no lo tengáis por enemigo, sino amonestadle como a hermano.” ().
Aunque no se indica,el Nvo. Testamento claramente implica que el proceso de quitar la comunión debe ser llevado a cabo por los ancianos. Ellos son los encargados de velar por las almas de los miembros de la iglesia.().
Otros han tratado de usurpar esa responsabilidad, queriendo evitar que los ancianos tomen la iniciativa en estos asuntos. Pero según la Biblia los ancianos son los únicos que apacientan al rebaño. ().
Después de que los ancianos toman la decisión y anuncian la retirada de la comunión, es deber de la iglesia llevar acabo la misma. Aquellos que no hacen esto quedan en una posición desafortunada al frustrar el patrón de Cristo y la intención de su iglesia.
PORQUE LOS ANCIANOS NO TOMAN LA INICIATIVA DE QUITAR LA COMUNION A MIEMBROS QUE PERSISTEN EN PECAR?
Hay un número de razones que los ancianos dan para optar por no quitar la comunión a alguien que no quiere arrepentirse y sin embargo éstas razones contradicen claramente los mandatos de y . Vea algunas de esas razones para no obedecer este claro mandamiento:
cabo la misma. Aquellos que no hacen esto quedan en una posición desafortunada al frustrar el patrón de Cristo y la intención de su iglesia. Por qué los ancianos no toman la
Hay un número de razones que los ancianos dan para optar por no quitar la comunión a alguien que no quiere arrepentirse y sin embargo las razones palidecen a lado de los claros mandamientos de y . Vea algunas de esas razones para no obedecer este claro mandamiento: “No podemos quitarle la comunión a
“No podemos quitarle la comunión a alguien por su pecado―todos pecamos.”
“No podemos quitarle la comunión a alguien por su pecado―todos pecamos.” Es verdad que todos hemos pecado () y negar que pecamos es engañarnos nosotros mismos (). Sin embargo, sugerir este hecho para argumentar esta postura es no entender el punto. No se quita la comunión de algún miembro de la iglesia porque pequen ¡sino porque se niegan arrepentirse de sus pecados! Han abandonado su compromiso de morir al pecado (). Han sido exhortados y reprendidos, pero persisten en el pecado. Esta es la razón de que son candidatos a quitarles la comunión. Si, algunos no quieren quitar la comunión con el argumento de que “todos pecamos.” Sin embargo realmente no es la razón por la que ellos no la quitan. “¡Tenemos miedo que la iglesia pued
Es verdad que todos hemos pecado () y negar que pecamos es engañarnos nosotros mismos ().
“No podemos quitarle la comunión a alguien por su pecado―todos pecamos.” Es verdad que todos hemos pecado () y negar que pecamos es engañarnos nosotros mismos (). Sin embargo, sugerir este hecho para argumentar esta postura es no entender el punto. No se quita la comunión de algún miembro de la iglesia porque pequen ¡sino porque se niegan arrepentirse de sus pecados! Han abandonado su compromiso de morir al pecado (). Han sido exhortados y reprendidos, pero persisten en el pecado. Esta es la razón de que son candidatos a quitarles la comunión. Si, algunos no quieren quitar la comunión con el argumento de que “todos pecamos.” Sin embargo realmente no es la razón por la que ellos no la quitan. “¡Tenemos miedo que la iglesia pued
Sin embargo, sugerir este hecho para argumentar esta postura es no entender el punto. No se quita la comunión de algún miembro de la iglesia porque pequen ¡sino porque se niegan arrepentirse de sus pecados!
“No podemos quitarle la comunión a alguien por su pecado―todos pecamos.” Es verdad que todos hemos pecado () y negar que pecamos es engañarnos nosotros mismos (). Sin embargo, sugerir este hecho para argumentar esta postura es no entender el punto. No se quita la comunión de algún miembro de la iglesia porque pequen ¡sino porque se niegan arrepentirse de sus pecados! Han abandonado su compromiso de morir al pecado (). Han sido exhortados y reprendidos, pero persisten en el pecado. Esta es la razón de que son candidatos a quitarles la comunión. Si, algunos no quieren quitar la comunión con el argumento de que “todos pecamos.” Sin embargo realmente no es la razón por la que ellos no la quitan. “¡Tenemos miedo que la iglesia pued
Han abandonado su compromiso de morir al pecado (). Han sido exhortados y reprendidos, pero persisten en el pecado. Esta es la razón de que son candidatos a quitarles la comunión. Algunos no quieren quitar la comunión con el argumento de que “todos pecamos.” Sin embargo realmente no es la razón por la que ellos no la quitan.
2“¡Tenemos miedo que la iglesia pueda rebelarse e irse a otra congregación!”
De hecho, en las congregaciones donde el retiro de la comunión no se ha practicado durante años, es muy probable que tal acción ofenda a algunos de los miembros más débiles y podrían alejarse. Los ancianos que no han podido guiar a la iglesia fielmente son en gran medida culpables de tal división si esto ocurre. Si hubieran estado al frente todo el tiempo, enseñando, redarguyendo, reprendiendo, exhortando y retirando la comunión cuando era necesario, tal acción no sería tan impactante para la iglesia. Sin embargo después de que varios años han pasado y muchos miembros infieles se han escabullido pasando inadvertidos, empezar los procedimientos de quitar la comunión parecerá malo y ofensivo para algunos miembros. En este caso, los ancianos son los culpables de esta situación y deberán, arrepentirse pedir perdón y comenzar a corregir lo malo.
3. Hermano, debemos crecer en número, ese nuestro principal objetivo. Practicar el retiro de la comunión es contraproducente.
Leyendo , hace que este argumento parezca sin sentido e insensato.
¿De que sirve el crecimiento de la iglesia, si dejamos a un lado los mandamientos de Cristo para su iglesia? De que sirve cantidad, si no hay calidad (obediencia a la verdad de corazón).