UNION EFICAZ (1 Corintios 6.17-20)

Esta serie de tres mensajes nos recordara o enseñara la manera como Dios, aunque es Todopoderoso, no obra en nosotros y a través de nosotros, sin que nos unamos a El entregándole nuestra voluntad. El hombre debe asociarse con Dios.

-El verso 17, en el que quiero poder énfasis, esta en el contexto del tema de la santificación del cuerpo; es decir, que el cuerpo debe ser dedicado para Dios, debido a que nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo.

-Tomo el texto para referenciar esta serie, en el sentido de extraer un principio muy importante para que nuestra vida sea eficaz y agradable a Dios: la unión a Dios.

-Esto quiere decir lo que afirmo Jesús: “… separados de mi nada pueden hacer” ().

-La palabra “une” (kollao), significa “vincularse”, es establecer una relación con alguien.

-El evangelio es una relación con Dios. Dicha relación tiene que ver con el hecho de que mantenga un nexo de obediencia y confianza. El E.S. no trabaja solo, El actúa con nosotros.

-La biblia dice que hemos sido creados para buenas obras, Estas buenas obras son producidas por la obra del E.S. en nosotros, pero como resultado de nuestra obediencia ().

-En esta serie hablaremos nuestra unión o asociación con Dios en tres maneras: la oración, la palabra y la alabanza.

EL ESPÍRITU SANTO Y MI ORACIÓN

-En el mundo hay mucha gente que ora, pero no por el hecho que oren, serán respondidos. Santiago nos dice que es ‘la oración del justo la que es eficaz y pude mucho”.

-La oración es la herramienta que el E.S. usa para asociarse con nosotros y hacer cosas maravillosas en nuestra vida. Esto es porque la oración demuestra nuestra fe y nuestra dependencia de Dios. Dios podría obrar en nosotros sin que oremos (El conoce nuestras necesidades), pero nos unimos al poder de Dios orando a El.

-Esto no quiere decir que nosotros participamos en lo que Dios hace, por lo tanto tenemos algún merito. La oración es una obra que resulta de nuestra dependencia y de nuestra fe. La oración es una respuesta o una reacción de que le creemos a Dios; y Dios honra a quien le cree.

Hebreos 11.6 NVI

6 En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan.

hebreos

Enséñanos a orar

-Fue la pregunta que le hicieron los discípulos a Jesús. El apóstol Pablo nos dice que debemos orar “en el Espíritu”.

Efesios 6.18 TLA

18 No se olviden de orar. Y siempre que oren a Dios, dejen que los dirija el Espíritu Santo. Manténganse en estado de alerta, y no se den por vencidos. En sus oraciones, pidan siempre por todos los que forman parte del pueblo de Dios.

-Quiere decir que debemos aprender a orar y cuando oremos, debemos hacerlo dirigidos por el E.S.

-El Señor Jesús hablo acerca de la oración utilizando el modelo que se conoce como la oración de Padre nuestro, en dos ocasiones:

En el Sermón del Monte mientras Cristo estaba haciendo advertencias a sus discípulos contra la formalidad ostentosa en la oración (6.5-13).

Mateo 6.5–6 RVR60

5 Y cuando ores, no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. 6 Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

La segunda ocasión es en respuesta al pedido de sus discípulos, “enséñanos a orar” ()

-Es importante saber orar, saber pedir a Dios, porque de eso depende la respuesta. En la oración es muy importante nuestra condición y nuestra petición:

Santiago 4.1–4 RVR60

1 ¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? 2 Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. 3 Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. 4 ¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.

santiago 4.1

-La oración eficaz es la que se somete a la voluntad de Dios, “...hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra” ().

Dos momentos en la oración

-Para el creyente hay dos momentos en la oración: el privado y el colectivo.

La oración privada

-Es la oración personal, de la cual habla el Señor en . Esto nos habla del poder de Dios. El no necesita que estemos acompañados para que El nos responda. Dios responde la oración del justo, aunque este este solo orando. El poder es de Dios, no de la oración, ni del grupo. Esta oración es para nuestro crecimiento y edificación espiritual.

Ejemplo: La oración de Cornelio y Pedro (Hechos 10).

-Aquí podemos ver como Dios trabaja en nosotros. Dios nos usa para realizar sus planes.

Por un lado hay un hombre piadoso, temeroso de Dios y oraba a Dios siempre; aunque no tenia la revelación del Señor Jesús (10.1-8).

Por otro lado, vemos a un siervo de Dios orando y tiene una visión que le prepararía lo que debía hacer. En el verso 19 leemos:

Hechos de los Apóstoles 10.19–20 RVR60

19 Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí, tres hombres te buscan. 20 Levántate, pues, y desciende y no dudes de ir con ellos, porque yo los he enviado.

hechos 10.

-El resultado es que el E.S. vino sobre Cornelio y sus amigos.

La oración colectiva

-Es la que hacemos cuando estamos reunidos como iglesia. Esta oración es para nuestra motivación espiritual, para nuestra fuerza.

Ejemplo: La oración de la iglesia en Jerusalen cuando se levanto la primera persecución después de la sanidad de un hombre cojo ().

-La congregación se unió para orar. En esta oración vemos unidad de espíritu y de acción:

Hechos de los Apóstoles 4.24 RVR60

24 Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay;

-El resultado es la respuesta del E.S.

Hechos de los Apóstoles 4.31 RVR60

31 Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.